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La radio reloj se encendió a las 6 de la mañana y la habitación se llenó de la voz de aquel locutor que amenizaba su día a día.
Jimin abrió los ojos cuando escuchó a ShupD saludando.
-Buenos días, amigos. Es hora de despertar y empezar las actividades. Es lunes ya! Soy ShupD y estaré acompañándote durante dos horas como cada día.
Jimin se sentó en la cama y se refregó los ojos aún adormilado.
-Para comenzar tu día y tu semana te tengo una canción especial. Empieza tu día con mucho ritmo. Acá ya empieza este clásico que se llama September del grupo Earth, Wind and Fire. Buenos días!
La canción movida en ritmo de disco sonaba ya en los oídos de Jimin mientras se apresuraba hacia el baño a tomar su ducha diaria.
-Éso fue September, un clásico que llegó a tus oídos gracias al delicioso sabor chocolatoso de Chocolina, cacao en polvo. Y tú? Sí, tú! El que está saliendo de la ducha... Tomaste ya tu desayuno? Apresúrate, porque ya se te hace tarde. Regresamos luego de estos anuncios.
Jimin salía del baño secándose el pelo con la toalla cuando escuchó esa pregunta.
"Vaya, qué casualidad" sonrió yendo hacia la cocina a hacer su desayuno. Casualmente, no le quedaba café, té, ni siquiera leche. Buscando en su alacena, encontró escondida una lata de Chocolina.
Sonrío nuevamente y se sirvió una cuchara colmada de ese cacao con agua caliente, mientras la radio seguía sonando con anuncios comerciales.
-Regresamos a Cool FM, soy ShupD. Ya estás listo para salir? No vayas a olvidar tu paraguas porque el pronóstico avisa que habrá chubascos aislados en algunas partes de la ciudad, así que mejor prevenir que lamentar.
Jimin recordó la anterior semana que no había seguido el consejo de su conductor favorito y llegó a casa empapado.
Mientras masticaba una galleta y se arreglaba la corbata, alistó el gran paraguas que tenía y lo puso junto al saco de su traje sobre el sofá.
-Demos paso al tema del día de hoy que tengo preparado. La soledad... amiga o enemiga -dijo el conductor al micrófono llamando la atención de Jimin, quien ya terminaba de tomar su cacao y se apresuraba a lavarse los dientes.
-¿Alguna vez te has puesto a pensar en la soledad y lo que significa en tu vida? La ves como tu amiga o tu enemiga?
Jimin se puso los audífonos y salió de su departamento rumbo al trabajo.
-Puede que vivas acompañado, rodeado de gente y familia y aún así sentirte solo, o por el contrario, vivir solo, independiente, pero sentir que no necesitas a nadie a tu lado. ¿Hay algún punto intermedio en esto?
Jimin entró en su auto y puso la radio en cuanto arrancó el motor para seguir el tema con atención.
-Voy a habilitar las líneas de la emisora para que me cuentes un poco qué opinas sobre nuestro tema de hoy y... Oh! Ya tenemos una llamada... Buenos días. Bienvenido a nuestro programa. ¿Cuál es tu nombre?
-Hola... Me llamo Taehyung -le contestó una voz gruesa y melódica al otro lado de la línea.
-Mucho gusto Taehyung, gracias por llamarnos. Cuéntanos. ¿Para ti, la soledad es amiga o enemiga?
-Bueno... Vivo ya hace 3 años con mi novio, pero desde hace un tiempo siento como si viviera solo. La rutina es muy asfixiante y a pesar de que nos queremos mucho y estamos juntos más tiempo los fines de semana, igual me siento solo.
-Vaya... Entiendo. Entonces me dices que la soledad en tu caso es tu enemiga?
-En este momento sí. No sé cómo puede haber gente que dice que estar solo es bueno. Se siente un hoyo en el pecho y... sólo quiero que Jungkook me abrace y todo sea como antes...- la voz de Taehyung se apagó con tristeza.
-Vamos, Taehyung! No te desanimes! Habla con tu novio y dile lo que sientes! -aconsejó el DJ.
Ya en la carretera, camino al café del que era dueño y mánager, Jimin sonreía con esa conversación de la radio. Siendo el hijo menor de un gran empresario de la ciudad, nunca se había preocupado por nada, y tampoco pensaba que estaba solo, ni aunque casi toda su adolescencia y juventud la hubiera pasado solo e independiente.
-Lo intentaré... pero él nunca está acá –decía la voz acongojada del radio-escucha Taehyung.
-Amigo –contestaba el DJ con esa voz tan pacífica –no puedes quedarte con esa preocupación dentro. Tienes que sacarla. Ánimo, seguro que se arreglará.
-Eso espero –dijo en un hilo de voz Taehyung.
-Qué te parece si de acá a una semana me llamas nuevamente al programa para contarme y a todos los amigos que nos escuchan cómo te fue –propuso ShupD.
-Está bien... lo prometo. Gracias por escucharme – se escuchó la sonrisa del muchacho.
-No es nada! Hasta la siguiente semana, Taehyung –despidió la comunicación el DJ.
El auto de Jimin entraba ya en el acostumbrado lío de autos que avanzaban a paso de tortuga por la vía. Pero no importaba, estaba a tiempo y se sentía a gusto con la compañía de la radio.
-Estaré atendiendo una llamada más luego de la siguiente canción, ¿estás de acuerdo? Mientras lo piensas y marcas al número que ya sabes, te dejo con esta canción para animarte en este primer día de semana laboral. Acá está Say So, de Doja Cat.
El ritmo pegajoso de la canción sonaba en los parlantes del auto de Jimin mientras avanzaba poco a poco acercándose a un cruce.
Jimin se puso a pensar en el caso de Taehyung, el radio-escucha que había llamado hace poco al programa. Estaba acompañado y se sentía solo. Vaya... era una situación que Jimin no podía imaginarse jamás.
Sí, había tenido antes varios acompañantes, tanto femeninos como masculinos, pero ninguno había durado más de algunas semanas. Jimin no lo veía como necesario ni imprescindible en su vida. No entendía cómo las personas podían hasta morir por alguien más.
Jimin estaba mejor solo porque tenía otras prioridades. El café que manejaba estaba entre los más respetados y famosos de la ciudad y a él le encantaba llevar cada vez más novedades, e incluso a veces él servía a los clientes en persona. El café era su vida y no imaginaba tener otra cosa en su cabeza o su vida.
La canción de Doja Cat estaba terminando y se escuchó al DJ hablando sobre la pista musical.
-Qué buen ritmo es éste! Ya han pasado 40 minutos de las 6 de la mañana. Ya vas camino al trabajo, verdad? No te pierdas los especiales del día que tiene para ti la pastelería Mery's. Unos croissants super crujientes y sándwiches de pollo muy calientitos y con la cantidad de mayonesa perfecta.
Jimin sonrió ante el comentario de la voz tan melodiosa del DJ y los sonidos crujientes que se escuchaban a través del micrófono. Seguro que estaba comiéndose uno de los croissants. Qué convincente sonaba eso.
-¿Ya te animaste a llamarme? Estaré recepcionando una llamada más para el tema de hoy. Te lo repito. ¿Piensas que la soledad es tu amiga o tu enemiga?
Jimin no entendió qué bichito invisible le picó, pero tomó su móvil mientras esperaba que los automóviles se movieran y marcó al número que el DJ repetía en ese momento.
Lastimosamente, la línea estaba ocupada. Pero no se dio por vencido e intentó una vez más.
-Ahora sí, estoy habilitando la línea y... vamos... -anunció ShupD
Justo terminó de remarcar y la llamada entró. Jimin se sintió nervioso porque era la primera vez que hacía algo así en su vida. Era divertido!
-Hola, bienvenido al programa. Gracias por llamarnos. Cuál es tu nombre? – Jimin escuchó la voz clara y suave de ShupD a través de su celular.
-H... hola, soy Jimin –saludó algo nervioso.
-Mucho gusto, Jimin. Dime, de dónde llamas? –preguntó curioso el DJ.
-Bueno, estoy ahora en el coche rumbo al trabajo –sonrió nervioso el rubio.
Una risa agradable se escuchó tanto en la radio como en el celular.
-Muy bien! Gracias por escuchar la emisora. Vámonos a la pregunta de hoy, ¿te parece? Para ti, ¿la soledad es amiga o enemiga? –consultó
-Para mí no existe la soledad – dijo Jimin con suficiencia.
-¿Disculpa? –ShupD se quedó descolocado.
-Lo que digo. Si estás con alguien, como la anterior persona que llamó, pues estás acompañado, no estás solo. Pero si no vives con nadie... estás contigo mismo... tampoco estás solo.
Hubo un silencio en el cual ShupD quiso entender esa lógica. Sólo la canción de fondo, que seguía siendo de Doja Cat, sonaba de fondo.
Jimin pensó que no lo había escuchado o la llamada se había cortado. Hasta revisó su móvil, pero la llamada seguía en curso.
-Déjame preguntarte algo, Jimin... ¿Vives solo? –preguntó de repente el DJ.
-Así es – sonrió al auricular.
-Ahora entiendo. Nos estás diciendo que piensas que no necesitas a nadie y que tampoco te sientes solo. ¿Estoy en lo correcto?
-Sí, podría explicarse de esa manera, sí –concluyó Jimin.
-OK. Bueno, seguramente debes tener muchas cosas en la vida como para no necesitar a nadie a tu lado. Puedo incluso pensar que la soledad todavía no te ha tocado tan fuerte –opinó ShupD.
-Nunca me he sentido solo, Shup –dijo Jimin sin sentirse ofendido por sus palabras... no debería después de todo.
-Es bueno saberlo, Jimin. Es un buen ejemplo de que la soledad es tu amiga –
Jimin sintió un toque de melancolía en lo que acababa de decir el locutor.
-¿Y para ti? La soledad es amiga o enemiga? –preguntó Jimin aventurándose. Llevaba más de un año siguiendo este programa en la radio así que no lo vio como un atrevimiento el preguntarle eso al DJ que escuchaba diariamente.
-Oh, vaya! Primera vez que alguien de mis radio-escuchas me devuelve la pregunta del día –se escuchó la voz sonriente de ShupD- bueno... para ser sincero... vivo solo, no me siento mal estando solo... pero a veces me pongo a pensar qué sería de mi vida si en vez de amanecer y ver el lado contrario de mi cama vacío, me encontrara a alguien especial ahí. Si en vez de preparar un café para mí, lo hiciera para dos.
La canción siguió sonando de fondo mientras ShupD y Jimin se quedaron en silencio.
-Como vez... la soledad puede ser buena amiga para pensar cosas así de locas! –el DJ volvió a su tono amable y alegre de siempre –Gracias por llamarnos, Jimin! En serio, te lo digo de veras, espero que la soledad siga siendo tu amiga! Llámanos cuando quieras y gracias por escucharnos.
-Adiós, ShupD –Jimin se despidió también.
-Entramos a la hora de las recomendaciones del día! –continuó con el programa mientras Jimin ya entraba a la zona donde estaba su café.
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