Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 28: Confesión II

No había sentido la vergüenza como nunca antes luego de lo que viví con Jared, me contó que llegué cayéndome de borracha, no lo dijo literal, él siempre es muy delicado a la hora de dar explicaciones, pero traducido a mi lenguaje de bestia es que me ahogaba en alcohol casi tirando su puerta. Dijo que luego de entrar sólo trató de llevarme al sillón para descansar, pero que lo vomité, siento que no me ha dicho todo… ¡¿Y si hice algo más ridículo que vomitarle?! Pero como es un caballero no me lo dirá. Ahora entiendo porque las penas y el alcohol jamás se deben mezclar.

–Sí, sí, iré después del trabajo. Lo siento. –colgué frustrada y más apenada.

Voy en el auto de Jared, quería dejarme en casa, pero la verdad no me sentía bien con llegar para encontrar a Luke en la puerta matándome con la mirada. Precisamente era con él con quien hablaba, me escupió tremendo regañó por haberme perdido toda la noche sin saber dónde estaba. Creo que Kai tampoco se salvó porque escuché como era regañado también por habernos emborrachado juntos. Dios, lo gritos de Luke se escuchaban sin siquiera tener el altavoz activado. Al menos me alegra saber que Kai está bien.

–Tienes buenos amigos. –Jared rió bajo.

–Sí, los mejores, jeje –¿qué clase de risa acabo de hacer? Pero no es momento de pensar en eso–. Jared… ¿en verdad no hice o dije algo más vergonzoso aparte de haberte… regresado lo de mi estómago?

–No, nada.

–Siento que me hayas visto así. –¿por qué quiero llorar?

–Algo te afectó ¿no? ¿Quisieras contarme? –está siendo amable.

–Es complicado, problemas familiares.

–Entiendo –llegamos al estacionamiento del trabajo, me disponía a salir agradeciendo por su amabilidad, pero me detuvo ¡tomando mi mano!–. Si un día quieres hablar o necesitas algo, aquí estoy. –mencionó mirándome serio, luego dibujó una sonrisa que me sonrojó.

–Gracias. –sonreí nerviosa y feliz para salir juntos del auto y caminar al restaurante.

La tensión me aplasta, mi corazón late rápido y mi sonrisa risueña hace compañía a lo rojo de mis mejillas que no quiere irse. Jared realmente me gusta, y mucho, pero me da miedo que descubra que no soy normal, que eso le asuste como para llamarme monstruo, y se pensamiento es lo que logra opacar mi pequeña alegría.

Una melancolía fue la que me acompañó todo el día hasta el final de mi turno, aunque trabajé con buen desempeño, algo dentro me afligía imaginando a Jared mirándome como ese asesino o mi hermano, dándome especial terror que me devuelva la mirada de desprecio de mi madre.

Cerré mi casillero soltando un suspiro pesado y cansado, Margot se despidió de mí con una sonrisa, dibujé la mía para responderle sin que me note mi desgana. Pegué mi frente a la puerta del closet pensando que no puedo seguir así, no siendo una cobarde o esperando por algo que no va a llegar si nunca hago algo para que ocurra.

Estoy decidida, fui a la puerta de la oficina de Jared, toqué…

Bien, vámonos, creo que no está…

–Adelante. –puta madre.

–Ho-Hola… –¿me habrá escuchado?

–Luar –está deslumbrándome con su hermosa sonrisa–, pasa, ¿qué necesitas? –se levantó rodeando la mesa, yo cerré la puerta quedándome cerca de la entrada– ¿Sucede algo?

–Eh, no es nada grave… Es que yo… Bueno, lo que pasa es que tengo que decirte algo.

–¿Sí? –se sentó a la orilla del escritorio con la brazos recostados.

–¿Recuerdas a mis amigos Kai y Luke? –asintió sin dejar de darme su sonrisa amable– Ellos no son pareja, ni siquiera son gays. –alzó ambas cejas con impresión.

–¿Por qué dijiste eso?

–No quería que te hicieras una idea errónea de mí con ellos, es verdad que vivimos juntos, pero no tenemos ninguna relación aparte de amistad o incluso familiar. –ok… ahora estoy confundida al verlo curvear sus labios con diversión, levantándose a quedar cerca de mí.

–¿Y por qué querías que no pensara qué tenías una relación con alguien?

–Eh… –¿qué está pasando? Colocó una mano al costado de mi cara recargándose de la puerta cruzando sus ojos intensos con los míos. Está demasiado cerca– Ah… Yo…

–Dilo –¿que lo diga? Y entonces recordé, sentí mi cara encenderse como árbol de navidad, mis memorias volvieron con la manera en que llegué a su casa, de forma casi agresiva allanando su hogar, caer en sus brazos, el besarlo de la manera en que lo hice–. ¿Y bien?

–Yo… –bajé la mirada, él la volvió a subir tomándome con delicadeza del mentón. Tragué nerviosa encogiéndome de hombros– Me… Me gustas…

–¿Uhm? Creo que no te escuché, ¿podrías repetirlo? Y esta vez –habló a mi oído–, más alto. –creó que voy a morir.

–M-Me gu-¡gustas! –él… estalló de risa.

–Lo siento, es que eres muy fácil de avergonzar. ¿Ya recordaste lo de anoche? –asentí cubriendo mi rostro con ambas manos. Jared hizo que las quitara tomándome de las muñecas y pegándolas a la puerta– Bien, así es más fácil.

–¿Fácil para qué?

Me besó… ¡Me está besando! Es lento, pero intenso, soltó mis muñecas y puso sus manos en mi cintura, puse las mías sobre sus hombros, al principio lo veía sorprendida, luego poco a poco fui cerrando mis ojos hasta que me dispuse a disfrutar del momento, ahora abrazando su cuello.

De esa manera, sin permitir que me separara de él con apenas dándome segundos para llevar aire a mis adentros, por tener una mano arremolinada en mi cabello, me guió a sentarnos juntos en su silla reclinable con rueditas detrás del escritorio, haciendo que me sentara a horcadas en él. Y amigos, sé que no puedo morir, pero estar con falta de aire es algo imposible de soportar por mucho tiempo por más que me moleste tener que cortar esto.

–¿Tan poco aguantas? –ladeó sus labios siendo atrevido a la vez que se los relamía– Respóndeme mi duda, ayer que me besaste fuiste un poco, ehm, linda. ¿Habías besado antes?

¡Mierda! –pensé aún más avergonzada, es seguro que lo que hice fue patético.

–¿Tu primer beso? –fruncí el ceño con pena– Oh, que tierna.

–Lo siento.

–Nada de eso, me alegra saber que podré enseñarte cosas nuevas.

Bien… sólo puedo reír nerviosa, no sé cómo tomar eso, pero aún así, no evitó que volviéramos a fundir nuestras bocas haciéndome sentir tan afortunada y feliz.





































×~×~×~×~×
**Tos** wenas tardes. **Se va**

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro