–Bien, gracias por comprender que Luke es libre. –habló Lu de forma autoritaria. Está sentada en la espalda de Ivy sosteniendo con su pies las alas, las pisa para evitar que las mueva.

–¡Bestia! –gritó iracunda de la humillación.

Hace poco Lu sacó sus garras, iluminó sus ojos coloridos con las pupilas en vertical, mostró sus colmillos y las orejas se hicieron puntiagudas. Cuando Ivy le contó nuestra historia refiriéndose a mi como un error y aberración, su ira se notó en un santiamén. Los tipos que funcionan como guardaespaldas de Ivy trataron de someter a Lu, pero ella los abatió sin problemas y quien terminó sometida contra la arena fue mi hermana. Kai y los demás están sentados viendo todo como si fuera algo sin importancia.

–Luke es tu hermanito, se supone que debes cuidarlo.

–¡Mi madre se fue! ¡Me abandonó por él y un maldito demonio!

–Tú ya eras toda una adulta ¿no? Alguien con cientos de años… –la interrumpió, Ivy trataba de pararse, no funcionaba.

–¡Manchó nuestro linaje al concebir a esa cosa!

–¿Mancha? –Ivy gritó, Lu se levantó poniendo un pie en su espalda para mantenerla abajo y tomó una de sus alas con ambas manos, se la está jalando– Los ángeles son seres buenos, se supone que son bondadosos, comprensivos, pero tú haces honor a lo que un verdadero demonio debe ser, no, incluso los demonios son mejores que tú, lo único que eres, es una estúpida desgraciada.

No la reconozco, ella no es así, está enojada y quiere hacerle daño, puede, no debe, pero parece que Kai no va a hacer nada para intervenir. Me acerqué a posar mis manos sobre las suyas para que me mirara, parece más enfadada, pero al menos la soltó.

–Luke no es de nadie. –tomó uno de mis grilletes con ambas manos tratando de romperla.

–Lu, no es posible que las puedas… –algo se agrietó, mi atadura, ella la rompió e hizo lo mismo con mi otro grillete.

No pesan, mis manos las siento ligeras, lo único que ahora aprieta una de mis muñecas es la mano de Lu al jalarme para llevarme a la casa mientras Ivy gritaba algo sobre que nos arrepentiremos.

Íbamos con prisa, más bien era llevado de forma rápida por los pasillos de la casa hasta que entramos a mi habitación. Lu me arrinconó contra la pared, su mirada furiosa hace que su entrecejo esté muy arrugado y su apariencia no cambia, no sé si es ella o su bestia.

–Lu… –puso una mano en mi nuca, la otra en mi hombro y acercó su rostro a mi cuello… –¡Hey! –¡¿me mordió?!

Estoy sonrojado, siento el calor en mi rostro, cuando se separó tenía un poco de mi sangre en su boca, se limpió con el dorso y se fue azotando la puerta dejándome en shock…

¿Qué acaba de pasar?

Kai
Y se llevó a Luke, va a marcarlo seguramente. El tema de la familia es muy sensible para Lu, odia el hecho de que compartir lazos sanguíneos no sea un buen motivo para que haya aceptación, pero le fastidia más que culpen a los demás de algo que no tienen culpa.

La hermana de Luke está que echa humos por las orejas, refunfuña y amenaza con que lo pagaremos caro, así que me acerqué mostrándome malicioso.

–Luke ahora es parte de nuestra familia, intenta algo perra asquerosa y te juro que quien lo va a lamentar serás tú. –no fui el único que iluminaba sus iris, Zafiro, Trevor y Try también se acercaron mostrando su apoyo.

–¡Malditos demonios!

Fue todo lo que dijo antes de emprender vuelo junto a sus secuaces. Indiqué a los demás que iría a buscar a Lu y Luke, así que ellos siguieron divirtiéndose en la playa. Vi como Lu entró a su habitación enojada, por lo que fui al dormitorio de Luke, quien estaba consternado y rojo.

–¿Qué? ¿Te manoseó o qué? –reí obteniendo una mirada mal de él, fue entonces que noté su mordida– Wow, fue más profundo contigo, y justo en el cuello.

–¿Qué? –le señalé a mi hombro– ¿Te mordió también?

–No sólo a mí, también Trevor, Zafiro y Try tienen la suya. Cuando Lu se enfada por algo como esto, tiende a dejar que su bestia salga y muerda para marcar, como una forma de decir que ahora eres parte de su manada.

–¿Manada?

–Ella te ha hecho oficialmente parte de su familia, lo que significa que ha decidido protegerte. Eso se le queda gravado en ser, pero los recuerdos se le olvidan, es decir que no se va a acordar de que te mordió, así que evítale la vergüenza. –reí fuerte al verle la cara de incrédulo y creo que tenía decepción.

Pero empezó a llorar, supongo que entiendo esa reacción luego de haber pasado por tanto, y que ahora le digan que tiene libertad junto a una familia, pues es lo mejor que uno puede sentir, yo lo comprendo, me sentí así cuando comencé a vivir con Lu; Trevor y Zafiro también cambiaron, muchos lo hacen cuando interactúan con ella, es simple, ella es nuestra luz.

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–¡Te voy a filetear! –Lu gritó cuando entró a mi habitación viendo que compré una caja de arañas, a escondidas.

–Pero las tengo en mi habitación. –estoy abrazando el cristal mientras Lu está atrás de Luke.

–¡¿Crees que voy a dormir bien sabiendo que tengo esa cosa dentro de la casa?! ¡Deshazte de eso!

–¡No! –Lu y yo sonreímos dejando de lado la cuestión de las arañas. ¿La razón? Luke está riendo.

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Wenas noches ( ╹▽╹ )