Narra Barbie.

Mayra abrió la puerta de la casa,se hizo a un lado para que yo pudiera pasar y finalmente cerró la puerta.

—¿Cómo estás?,tenía tiempo sin verte.

—Estoy...—me sentiría mal si la mentía pero tampoco quería decir nada porque de seguro le iba con el cuento a su hijo.—Algo cansada,la universidad me tiene realmente agotada en todos los sentidos.

—Deberías cuidarte más,por el bien de todos.—fruncí el ceño,¿cuál todos señora?,estoy chiquita pa sumar una persona completa imagine pa contar cómo dos o más.—¿Se te antoja algo?.

—¿Antojar?.—giré mi cabeza,Bryan apareció con tan solo unos shorts y todo sudado,al parecer estaba entrenando.—Hola baby.—besó mis labios.

—Bryan,está tu mamá.—dije avergonzada.

—¿Y?,ella hizo cosas peores.

—Sí,porque de seguro ustedes no,bien tranquilos hasta el matrimonio.—el chico soltó una carcajada y yo me limité a seguir muriéndome de la vergüenza.—Voy a preparar algo para cenar.

—¿Qué te apetece?.

—No tengo hambre,Bryan.—inmediatamente miró a Mayra,¿qué,de pronto era un delito no tener apetito?.

—Debes comer.—insistió él.

—No voy a hacerlo si no tengo hambre.

—Ven conmigo.—seguí sus pasos,subimos las escaleras para llegar a su habitación,una vez allí me indicó que me sentase en la cama.—Estás embarazada y...—se quedó mirándome cuando vió mi confusión ante tal afirmación.

—¿Lo estoy?.—se cruzó de brazos.

—No entiendo nada.—confesó.—Por lo que me dijiste en la tarde creía que podrías estar...—no sabía si estaba aliviado o apenado con el hecho de que sus suposiciones fueran erróneas pero de ninguna de las maneras íbamos a tener un bebé.

—Cuando tengo presión dejo de comer,mi cuerpo simplemente expulsa todo y como es una sensación desagradable prefiero evitarla.

—Pero no puedes no comer,baby,te va a hacer mal.

—Yo sé.

—Bueno,voy a bañarme.

—Dale.

—¿Ni un "te acompaño papito hermoso" o un "te ves cansado,me bañare contigo pa hacerte sentir bien"?.—solté una carcajada al escucharlo.—Báñate conmigo.

—Okay.—respondí deshaciéndome de mis prendas.

—Rayos,¿y tú crees que deberíamos limpiarnos?,porque teniéndote así me dan ganas de ensuciarte..mucho...—se mordió el labio.—Vamos.

Caminamos hacia el baño,se desnudó por completo y tomó mi mano para meternos en la ducha,tenía una hermosa mampara bien transparente,se veía el espejo que colgaba de la pared aún estando tras ella,sonreí de lado cuando algunas ideas vinieron a mi cabeza.

Abrí el grifo provocando que las gotas cayeran sobre mi espalda,grité cuando salió ardiendo.Como Bry se creía bien chistoso me moví rápido para cambiarle el lugar,él grito y cerró la llave con rabia.

—¿A que diablos juegas?.—me tomó por la cintura y me dió la vuelta,jadeé al sentir su miembro pegado a mi zona íntima.—Diablos,yo quería bañarme tranquilo.

—No me hubieras invitado.

—Mucho te resististe.—volvió a girarme,Régulo la temperatura del agua antes de abrir la llave nuevamente,sentí como las gotas comenzaban a mojar mi cabello e iban deslizándose por mi cuerpo hasta perderse en el frío mármol del suelo.—¿Qué te está pasando que no me quieres contar,Barbie?.

—No hay nada que contar.—mentí con descaro,lo tomé por la nuca para besarlo,tuve que ponerme de puntillas para llegar porque el tipo no un chiquito esfuerzo quiso hacer,agarró mis nalgas con fuerza y me pegó más a él.

—Si lo hay,tu amigo dijo que en las malas él estaba ahí.

—Bueno,tenemos mucho conociéndonos,es normal que le cuentes mis dramas.—me miró confundido.—No pares de besarme.—dije quejándome.

—Soy tu jevo,¿no tengo derecho a saber si algo está pasándote?.

—Tienes como dos dias de ser mi jevo.

Se quedó en silencio e inmediatamente me sentí bien idiota por decirle eso y de esa forma,sabía que estaba preocupado pero no estaba dispuesta a decirle nada a nadie,si Tony supo fue porque tenía miedo de ir a la clínica sola,pero ni siquiera Lenny sabe de eso.

—Bry...—me miró.—Mala mia...—no dijo nada.—Hablemos después,¿si?.

—Ta' bien.

Volvió a besarme,sus manos viajaron a mi cintura,tiró un poco hacia arriba provocando que yo rodease su cintura con mis piernas y sin más dilación me pegó a la pared,se sentía demasiado intenso cada movimiento,quizá por la calidez del agua,quizá por el hecho de que mordio' se pone un poco bruto y eso me prende más o tal vez solo fuera porque lo extrañaba.

Gemí cuando lo entró de una,me tapó la boca para que no gimiera tan alto porque su mai estaba en el piso de abajo,su mirada se clavó en la mia,podía entrever la preocupación por lo que ocurría mezclada con la decepción de que no confíe lo suficiente en él para contarle lo que ocurría.

Aparté su mano de mi boca y me incliné para besarlo,era otra manera inteligente de acallar los gemidos.Sus movimientos eran bruscos e intensos,si que andaba con rabia...

Después de un rato pidió cambiar la posición,me colocó contra la mampara.—Mírate.—señaló el espejo.—Cada expresión que haces cuando te estoy partiendo es hermosa.

—Tan tierno...—él rió.

Cerré los ojos al sentir como comenzaba a embestirme,parecía estar más relajado o tal vez solo temía que me doliera,la postura hacia que se sintiera todo más duro y si le sumas rabia quien sabe que pueda pasar,estudio audiovisuales,mi intención nunca fue ser científica.

Llegó un punto en el cual ni el sonido del agua corriendo podía camuflar los gemidos de placer de ninguno de los dos,Bryan salió de mi interior cuando supo que estaba por venirse.

Me giré despacio y todavía con la respiración agitada me arrodillé frente a él,en cuanto me lo llevé a la boca se mordió el labio.

(...)

Me puse la camiseta que Bryan dejó para mi mientras él trasteaba con su cel,cuando terminé de vestirme me tiré sobre él,su mano libre se coló por debajo de la prenda para acariciar mi espalda.

—Te extrañé,Barbie,no te me desaparezcas así de nuevo.

—Lo intentaré.—escondí mi cabeza en su cuello.

—Que rico hueles.—dijo mirándome.—Te voy a dejar mi fragancia pegada a esta camiseta.

—La tengo en mi cabeza clavá.—susurró con orgullo.—No voy a quejarme si lo dejas por el cuarto.

—Nadie diría que me acusaste de robarte a Luna.

—Parecías culpable.

—Y tu un idiota.

—Lo fui.—admitió finalmente.—¿Vas a irte de nuevo?.—negué con mi cabeza.—¿Lo prometes?.

—Sí,Bry.—lo tomé por las mejillas a para besar sus labios.

—Me asusté al pensar que quizá estabas embarazada.—comentó mientras dejaba su cel en la mesilla.—Estabas agobiada full por Luian,siempre hablaba de distracciones y un chamaquita iba a ser la mayor de todas.

—¿Pensaste que arruinaría mi corta y lamentable carrera?.

—Sí,creí que supondría un problema para tu creciente y prometedora carrera.

—No estoy embarazada pero...—un teléfono comenzó a sonar,al ver que estiraba su brazo supuse que era el suyo.

Salvada por la campana,Bárbara.Tú secreto está a salvo.
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