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Ꜥꜥֶָ֢⛓️ֶָ֢۫݊˒𐙚 capítulo 46

— ¿Dónde está mi pequeño príncipe? ¿Dónde está? — Preguntó TaeHyung, cubriéndose la cara con las palmas mientras miraba a su bebé, que yacía en la cama frente a él. Los ojos del pequeño brillaban mientras movía sus manos y pies enérgicamente — ¡Aquí está! ¡Mi pequeño príncipe! — Exclamó, apartando las manos y sonriendo ampliamente.

JeonGguk se rió ruidosamente al verlo.

— ¡Eres tan lindo! Te pareces a una versión en miniatura de tu papá, justo como yo quería — Arrulló al bebé por su ternura, pellizcándole ligeramente las mejillas y dándole un beso.

JeonGguk, encantado, posó sus pequeñas manos regordetas en el rostro de TaeHyung.

— Pero tienes mi sonrisa y mis ojos. Nuestra combinación es tan hermosa — Lo tomó en sus brazos y besó su frente.

Ya estaban listos para ir al centro comercial, donde TaeHyung tenía que comprar un regalo para Ara, cuyo cumpleaños era en unos días.

— Dime, bebé, ¿qué deberíamos comprar para tu hermana? — Preguntó, consciente de que no podría responder más que balbuceos, pero aún así le gustaba hablar con él.

El pequeño babeaba mientras jugaba con la cadena en forma de conejito que tanto le fascinaba.

— ¿A ti también te gusta esta cadena? Tu papá me la dio; es hermosa, ¿verdad? — Rió tontamente, haciendo que JeonGguk saltara en sus brazos.

TaeHyung se estremeció ligeramente cuando sintió un par de manos envolviéndose alrededor de su cintura.

— Relájate, nene, soy yo — La voz de JungKook lo hizo relajarse y sonreír, apoyándose más en el mayor.

— Kookie, no hagas eso cuando sostengo a Gguk, ¡Podría dejarlo caer! — Le reprochó.

— Lo siento... Por cierto, haces que la cadena de conejito sea aún más hermosa y valiosa — Respondió JungKook, sonrojándose mientras acurrucaba su rostro en el cuello de TaeHyung y suspiraba felizmente.

JeonGguk miró a su papá unos segundos, como si no lo reconociera. Sus ojos se agrandaron mientras babeaba.

— Gguk, papá está aquí — Dijo JungKook, sonriendo mientras apoyaba su barbilla en el hombro de TaeHyung.

JeonGguk miró los labios de JungKook y los tocó. JungKook rió y mordió juguetonamente los pequeños dedos de su hijo, quien rápidamente retiró su manita, haciendo pucheros.

— Es tan lindo haciendo pucheros, se parece a ti. Dale un beso a papá, Ggukie — Animó TaeHyung con entusiasmo.

— Por supuesto que es como yo, después de todo, es mi hijo — Dijo JungKook con orgullo.

— También es mío, y besito a papá, Ggukie — Insistió.

— Espera, está to- — JungKook no pudo terminar la frase antes de que JeonGguk le diera un beso baboso en la mejilla — Gguk, estás babeando — Dijo, haciendo una mueca de disgusto mientras TaeHyung se reía.

La risa pronto se detuvo cuando los labios de JeonGguk comenzaron a temblar y estaba a punto de llorar.

— ¡No, bebé! Estaba bromeando, es solo una broma. Ven aquí — Dijo JungKook, entrando en pánico y tomando al bebé en sus brazos — Papá te ama, Ggukie — Decía, besando las mejillas del bebé con cada palabra.

Pronto, JeonGguk comenzó a reír a carcajadas, lo que hizo que JungKook suspirara de alivio y le mostrara a su hijo su característica sonrisa de conejito.

— Tan lindo como su papá — Dijo JungKook con orgullo — Por cierto, ¿a dónde vamos? — Preguntó, mirando la ropa de TaeHyung mientras su hijo mordía su mejilla.

— Vamos al centro comercial, así que organízate rápido, Kookie — Respondió TaeHyung con una sonrisa que pronto desapareció.

— Estoy cansado, bebé. Ve con Jin Hyung o JiMin — Dijo, mostrando signos de agotamiento.

TaeHyung le quitó a JeonGguk, quien gimió porque le habían quitado su mejilla favorita para morder.

— JiMin no puede, Jin Hyung está ocupado en el restaurante, y no te estoy pidiendo, te estoy diciendo que vengas con nosotros — Dijo con seriedad, provocando una sonrisa en el rostro de JungKook.

— ¿Desde cuándo me mandas? — Preguntó juguetonamente, quitándose la camisa.

— ¿Qué estás haciendo? — Preguntó, cubriendo los ojos de JeonGguk.

— Voy a ducharme. Pero no me respondiste — TaeHyung tragó saliva al escuchar la voz baja y profunda de JungKook, quien sonrió más, disfrutando de la reacción que estaba obteniendo.

— ¿No puedo mandarte? — Preguntó TaeHyung con confianza, colocando al pequeño en su cuna, luego cruzando los brazos y mirándolo.

— Nunca te di el derecho a mandarme — Respondió TaeHyung con seriedad.

— Oh, lo siento — TaeHyung fingio sentirse herido, se lamió los labios y fue a buscar su teléfono, mientras JungKook observaba cada uno de sus movimientos.

Marcó un número desconocido para JungKook, quien frunció el ceño al verlo.

— Hola, BoGumie, ¿puedes- — TaeHyung no termino de hablar cuando el celular se estrelló contra el suelo.

— ¿Qué fue eso? — Gruñó JungKook, mientras TaeHyung abría los ojos y miraba profundamente a los ojos oscuros y amenazantes de JungKook.

— D-dijiste que no, así que le preguntaba a BoGumie...

— No lo llames así — Susurró, para no asustar a JeonGguk. Su amor por el bebé era tan grande que ni siquiera podía imaginarlo herido o llorando. Sostuvo las muñecas de TaeHyung por encima de su cabeza.

— Está bien — Dijo, mordiéndose el labio.

— Eres solo mío, TaeHyung. Cada cosa de ti es mía. Mírame solo a mí, habla solo de mí, bésame solo a mí, siéntete solo mío. ¡Amor! ¡Solo yo! Ningún otro hombre. No quiero escuchar el nombre de otro hombre salir de tu linda boquita — Dijo con una autoridad que hizo temblar a TaeHyung.

JungKook era dominante; sus ojos penetraban profundamente en el corazón de TaeHyung. La forma en que se expresaba con tanta autoridad y confianza hizo que el menor se excitara al ver cuán posesivo y obsesionado estaba con él.

— ¿Qué pasa con JeonGguk y los Hyungs? Si solo te miro y te beso a ti — Dijo TaeHyung.

— Te lo digo como tu hombre, tu prometido, futuro esposo. No como familia o hijo — Respondió JungKook, con un tono desafiante.

— No me controles como yo no te controlo a ti, JungKook — Demando serio TaeHyung.

Afortunadamente, JeonGguk estaba distraído con su osito de peluche, ajeno a la conversación.

— Solo estaba bromeando. Eres dueño de cada parte de mí; puedes golpearme y no haré nada, puedes hacer lo que quieras conmigo y aun así te amaré. No me importa si te vuelves posesivo conmigo, porque me encanta. Eso significa que solo pensarás en mí — Dijo JungKook con ternura, acercando sus labios a los de TaeHyung.

El rubio, con sus ojos fijos en los labios de JungKook, luego volvió a mirarlo a los ojos.

— Seré posesivo contigo, Jeon JungKook — Prometió TaeHyung.

La intensidad de sus palabras hizo que JungKook se sintiera abrumado. Sin perder un segundo, estrelló sus labios contra los del menor, en un beso desesperado.

Una mano de JungKook bajó para apretar el trasero de TaeHyung, disfrutando de la sensación, mientras que la otra mano lo atraía por la nuca. El beso se volvió más apasionado y hambriento. JungKook lo levantó como solía hacer, y las piernas de TaeHyung se rodearon alrededor de la cintura del otro.

Sin interrumpir el beso, lo colocó en la cama, situándose entre sus piernas. Su mano se deslizó por debajo de la camisa de TaeHyung, provocando un gemido fuerte cuando pellizcó uno de sus pezones.

Pero el llanto de JeonGguk interrumpió el momento. Ambos se separaron, jadeando mientras se levantaban de la cama.

JungKook rápidamente tomó a JeonGguk en sus brazos, meciéndolo para consolarlo.

— Shh, bebé, está bien. Papá está aquí — Dijo TaeHyung, ajustándose la ropa rápidamente. Sonrió al pequeño y le dio un beso en la frente mientras lo mecía lentamente — Es como tú — Añadió con ternura.

— ¿Qué quieres decir? — Preguntó JungKook.

— Appa está aquí, Ggukie. Shhh, bebé, te amo — TaeHyung susurró con una voz suave y cariñosa, haciendo que JungKook sonriera.

Poco a poco, JeonGguk dejó de llorar y comenzó a succionar el chupete que TaeHyung le ofreció.

— Ambos quieren mi atención — Dijo, sacando la lengua con un gesto juguetón.

— No lo niego — Respondió JungKook, encogiéndose de hombros.

— ¡Ahora toma una ducha! Y me vas a comprar un celular nuevo — Lo fulminó con la mirada.

— ¡Yahh, lo siento! Me enojaste hablando con ese GumBo idiota — Frunció el ceño.

— Su nombre es BoGum... Y tú eres el idiota aquí porque estaba fingiendo. Ni siquiera encendí mi celular y ahora estoy enojado — Hizo un puchero, mientras JungKook, sorprendido, esbozaba una pequeña sonrisa culpable.

— Lo siento, bebé.

— ¡Al baño ahora! — TaeHyung señaló la puerta con una mano mientras JeonGguk se reía de su expresión de enojo.

— Sí, nene, sí — Respondió JungKook, dando una vuelta y dirigiéndose al baño.

Una vez que la puerta se cerró, TaeHyung sonrió al mirar a su hijo.

— Tu papá está tan dominado.

— Shh, mi amor — Susurró JungKook mientras cerraba la puerta de su auto y mecía a JeonGguk, que seguía lloriqueando.

— Lindo — Murmuró TaeHyung con una sonrisa amorosa al verlo cargando a su pequeño — ¡Te ves más sexy así! — Le guiñó un ojo a JungKook, quien levantó una ceja y sonrió.

— ¿Oh, en serio? ¿Tanto te afectó? — Preguntó JungKook.

TaeHyung se sonrojó y continuó caminando.

— ¿Q-qué? Solo estaba, argh, vamos — Suspiró avergonzado, a pesar de que se estaba acostumbrando más a JungKook, a veces aún se ponía nervioso.

— ¡Cariño, espera! No puedo correr con Gguk, podría lastimarse — Dijo, haciendo que TaeHyung se detuviera y lo esperara. JungKook pronto tiró de la mano de TaeHyung y la entrelazó con la suya.

JeonGguk estaba jugando con la línea de la mandíbula de JungKook con sus pequeños dedos. Sus grandes ojos brillaban fascinados por la mandíbula tan definida, pellizcándola e intentando agarrarla. Frunció el ceño y gimió cuando su boca no pudo alcanzar lo que quería morder.

— Ggukie, deja a papá... Mira a appa, ve su cadena — Para distraerlo, TaeHyung mostró su cadena de conejito, que rápidamente captó la atención de JeonGguk.

A JungKook realmente no le importaba si JeonGguk lo babeara o lo que fuera, todo lo que deseaba era que su pequeño obtuviera lo que quería.

— Tae, déjalo hacer lo que quiera — Dijo, masajeando la cabeza de JeonGguk con ternura.

— Hay mucha gente hoy — Comentó TaeHyung, mirando a su alrededor.

— Sí — Gimió JungKook, odiando a todos menos a su familia. Además, JeonGguk podría enfermarse con tanta gente. ¿Y si contrae una infección?

— ¡Ggukie, mira el centro comercial! — TaeHyung despeinó el cabello de su hijo, sonriendo ampliamente y señalando a su alrededor.

A JungKook no le molestaba que TaeHyung hablara siempre con su hijo, a pesar de que aún era demasiado pequeño para entender.

JeonGguk miró hacia el lugar donde señalaba su appa, con la boca abierta y babeando mientras sus ojos se fijaban en un objeto que captó su atención. JungKook sacó un pañuelo de su bolsillo y le limpió la boca.

— ¿Por qué eres tan guapo y adorable? — Dijo JungKook entre risas, limpiandole boca, mientras que el pequeño lo miraba. JungKook sonrió, mirando hacia donde su hijo estaba interesado.

— Como si tú no babearas por mí — TaeHyung se burló, lanzando una sonrisa juguetona hacia JungKook mientras movía las cejas de manera sugestiva.

— Lo hago, y tú también lo haces sobre mi cuerpo y p-

— ¡Está bien! ¡Está bien, lo tengo! — TaeHyung interrumpió con un sonrojo que se extendió por sus mejillas. JungKook no pudo evitar reírse ante la reacción de su pareja.

El azabache, con su mirada fija en su hijo, lo ajustó en sus brazos. El bebé, con sus ojos aún sin comprender del todo, miró a su padre mientras parpadeaba con curiosidad.

— ¿Quieres esto, Gguk? — JungKook preguntó con un tono de voz dulce.

— ¿Quiere qué? — TaeHyung se volvió hacia JungKook con una expresión de preocupación en su rostro, su tono revelando que no estaba seguro de lo que se estaba discutiendo.

— Leche de plátano — Respondió, señalando el anuncio brillante en la vitrina de la tienda — Deberías probarla también; es nueva y más cremosa — Asintió con entusiasmo mientras mecía suavemente a JeonGguk, quien emitió un pequeño suspiro de satisfacción.

— Tienes que estar bromeando — TaeHyung dijo con un tono de incredulidad. Su mirada se deslizó de JungKook a su hijo, con una expresión de ligera frustración.

— ¿Por qué? — Preguntó, claramente confundido por la reacción.

— Primero, es idéntico a ti; segundo, no tiene ninguno de mis gustos. ¿Qué magia negra hiciste en mi Ggukie? — TaeHyung hizo un puchero, su tono de voz reflejaba una mezcla de sorpresa y exasperación. JungKook, por su parte, sonreía suavemente, con una mirada llena de amor y ternura que solo un padre podría tener.

— Primero, tiene tus ojos cuando sonríes. Segundo, tal vez cuando crezca, cambiará de gustos y finalmente aceptará que es un niño de papi — Comentó JungKook, con una sonrisa cálida. TaeHyung, aunque puso los ojos en blanco, no podía evitar sentirse conmovido por el parecido de JeonGguk con su padre.

— Estoy feliz de que sea como tú — Dijo TaeHyung, su tono revelando un sincero aprecio por el vínculo entre su hijo y JungKook.

— Yo también — Respondió JungKook, con una mirada llena de amor hacia su familia.

— ¡Kookie! — TaeHyung le golpeó suavemente el brazo, mientras JeonGguk estallaba en una risita contagiosa, disfrutando de la interacción entre sus padres.

— Oh, ama que sus papás peleen — JungKook se rió con cariño y le dio un beso en la frente.

— Estos conejitos — TaeHyung sonrió con calidez, y se alejó para coger un carrito de compras con un ligero suspiro de satisfacción.

JungKook observó a su alrededor, notando que algunas personas estaban echando miradas a TaeHyung. Varias mujeres coqueteaban con él, atraídas por el atractivo innegable de TaeHyung como padre. La escena era divertida y un poco desalentadora para JungKook.

— ¿Oh, en serio? ¿Entonces? — JungKook se burló, su voz llena de diversión mientras JeonGguk balbuceaba y hacía gestos con sus pequeñas manos. TaeHyung, al escuchar las risitas de su hijo, negó con la cabeza y continuó buscando su pasta favorita en el pasillo.

JeonGguk miró a su padre con una expresión de total admiración y golpeó su pecho con sus pequeñas manos regordetas, balbuceando con más entusiasmo. La atención de otras personas se desviaron hacia ellos, algunas sonriendo por la ternura que irradiaba la escena familiar.

— Oh, eso es realmente interesante. ¿Entonces qué hiciste? — Preguntó JungKook, adoptando una expresión de sorpresa exagerada para animarlo.

JeonGguk, feliz de recibir toda la atención, continuó balbuceando con entusiasmo. TaeHyung, no pudiendo resistir la ternura, tomó la barbilla de JungKook y lo besó suavemente en los labios, su gesto reflejaba una profunda ternura.

— Eres el mejor padre de todos los tiempos, Jeon JungKook — Se rió, dando un beso rápido a JungKook mientras acariciaba la nariz de JeonGguk con una sonrisa de felicidad.

A JungKook le encantaba escuchar elogios sobre su habilidad como padre. Sentía un profundo orgullo y prometía nunca permitir que su hijo experimentara el dolor que él había sentido en su infancia. Esa promesa era sagrada para él.

— Gracias — Respondió con orgullo, su mirada revelaba lo mucho que valoraba el reconocimiento.

TaeHyung sonrió con afecto, entendiendo completamente por qué JungKook amaba tanto a su hijo y deseaba brindarle todo su amor y apoyo.

TaeHyung se dio cuenta de que había olvidado comprar algo, así que regresó al supermercado. JungKook se acomodó en un banco cercano con varias bolsas de compras y JeonGguk dormía plácidamente contra el pecho de su padre.

— Harto de toda esta gente, harto de todo este ruido— Dijo JungKook, con una expresión de cansancio — ¡Oh, Gguk! Mira esa tienda, vayamos allí y preguntemos si tienen tu talla y la mía.

De repente, JungKook se mostró emocionado y colocó una mano en la espalda de JeonGguk, quien gimió ligeramente al estar ocupado mordisqueando el cuello de su padre.

— Y él dice que eres completamente como yo. Tienes el hábito de TaeHyung de mordisquear mi cuello. ¿Ves esto? Tu appa lo hizo. Es hermoso, ¿verdad? — JungKook se rió entre dientes, señalando una de las marcas que adornaban su cuello.

Recogió las bolsas con ambas manos, esforzándose por mantener un equilibrio mientras caminaba hacia la tienda. Su físico musculoso era notoriamente atractivo para muchas mujeres que no podían evitar mirarlo con admiración.

JungKook se alegró al encontrar su talla y la de JeonGguk. Se sentó de nuevo en el banco y ayudó a su pequeño a usar el nuevo accesorio, dándole un tierno beso en la mejilla antes de sacar su teléfono para enviar un mensaje.

JungKook se rió, aliviado al ver que el pequeño estaba por fin calmado. Se apresuró a tomar el biberón de la bolsa y lo sostuvo con cuidado. Sus ojos brillaron con ternura mientras lo acercaba al bebé.

— Shhh, aquí, bebé — Murmuró con suavidad.

Sostuvo al recién nacido en una posición cómoda sobre su muslo izquierdo, mecíéndolo suavemente mientras le ofrecía el biberón. JeonGguk, con sus ojitos curiosos, reconoció el biberón al instante y lo agarró con ansia, haciendo que JungKook soltará una risa ligera y satisfecha.

Estaba tan concentrado en su hijo que no notó cómo un grupo de mujeres se acercaba, sus miradas cargadas de admiración y corazones imaginarios. JeonGguk gimió ligeramente al empujar el biberón, y JungKook entendió el mensaje. Colocó una toalla en su hombro y comenzó a darle suaves palmaditas en la espalda para que eructara. Tenía todo lo necesario para el cuidado de JeonGguk en su bolso, y estaba perfectamente preparado.

— Buen bebé — Dijo con una sonrisa cuando el bebé finalmente eructó.

Una mujer que estaba entre el grupo de admiradoras se acercó hacia él con una sonrisa coqueta.

— Oye, ¿quieres que te ayude?

JungKook la miró con seriedad, su rostro impasible revelando de inmediato que estaba interpretando su oferta como un intento de coqueteo.

— ¿Te pedí ayuda? — Preguntó con frialdad. La mujer lo miró desconcertada, claramente sorprendida por la respuesta.

Mientras tanto, JeonGguk se retorcía en los brazos de su padre, agarrando su rostro y mordiendo su barbilla con diversión. JungKook lo levantó un poco sobre sus muslos, manteniéndolo seguro y cómodo.

— Um, ¿es tu hijo? ¡Es tan lindo! — Comentó la mujer, inclinándose aún más y haciendo que su escote resaltara de manera evidente.

JungKook gruñó y la miró con desdén, alejando a JeonGguk de ella con firmeza.

— No te atrevas a tocar a mi hijo — Advirtió en un tono frío. La mujer tragó saliva, visiblemente afectada por la amenaza implícita.

Algunas otras mujeres se acercaron, tratando de arrullar a JeonGguk o alabando a JungKook por ser un padre tan cariñoso. La paciencia de JungKook estaba al límite. El acoso constante le hacía pensar en maneras extremas de proteger a su hijo, y aunque prometió a TaeHyung que evitaría la violencia innecesaria, las mujeres estaban poniendo a prueba su autocontrol. Sentía una furia interna que lo hacía desear soluciones drásticas, pero recordaba su promesa y contenía su ira.

— ¿No lo entienden? ¡No soy soltero! ¡Y dejen de ser unas malditas perras molestando a mi alrededor y a mi hijo! ¡Váyanse o no les gustará lo que haré! — Su mirada fulminante hizo que las mujeres se estremecieran y retrocedieran.

TaeHyung, al notar la aglomeración y la incomodidad de JeonGguk, se acercó rápidamente. Frunció el ceño al ver a su amado y a su hijo rodeados de personas no deseadas.

— ¿Kookie? ¿Qué...

Se detuvo al ver a JeonGguk comenzando a llorar, claramente ansioso por la presencia de extraños.

— ¡Ggukie, bebé, ven con appa! — Dijo, extendiendo los brazos para tomar al bebé de JungKook, quien sonrió, aliviado, mientras tomaba la bolsa.

— ¿Eres gay? Por eso estabas siendo grosero — Dijo una de las mujeres que quedaba.

— ¿Y qué? No tenemos ninguna explicación que darles. Vinieron, hicieron llorar a mi hijo con sus caras feas y sus voces molestas — Respondió TaeHyung con frialdad, mientras acariciaba suavemente la espalda de JeonGguk para calmarlo.

Otra mujer, con evidente curiosidad, preguntó: — ¿Estás seguro de que no necesitas otra pareja o madre para tu hijo?

TaeHyung, visiblemente irritado, se volvió hacia la mujer y dijo con desdén: — ¡Oye tú! ¡Aléjate de mi esposo! ¡Y ve a buscar tus extensiones, porque parece que estás usando ratas muertas en tu cabeza! ¡No toques lo que es mío!

Arrastró a JungKook hacia él, quien parecía perdido en sus pensamientos.

— Una palabra o un toque y estarás a diez metros de profundidad bajo el maldito suelo — Advirtió, su mirada feroz haciendo que las mujeres se alejaran rápidamente.

JeonGguk, ahora en brazos de TaeHyung, se había calmado. JungKook envolvió su brazo alrededor de la cintura de TaeHyung sin preocuparse por las miradas a su alrededor.

— Bebé, maldijiste — Comentó con un toque de sorpresa en su voz.

TaeHyung hizo un puchero, aún visiblemente enojado pero con una sonrisa en los labios.

— Me enojé, lo siento — Dijo, mientras seguía acunando a JeonGguk, quien ahora estaba tranquilo y relajado entre los brazos de su padre.

— Me encanta decir que soy tuyo. Por cierto, me llamaste esposo — Dijo JungKook con una sonrisa traviesa, mientras TaeHyung se reía, disfrutando del momento.

— ¿Y? Tú también me llamas así — respondió TaeHyung, con un tono juguetón mientras miraba hacia arriba y veía cómo JungKook se reía encantado.

— Sí, pero fue la primera vez que te oí llamarme asi. ¿Por qué no lo hacemos realidad? — Preguntó, sonriendo dulcemente mientras le daba un beso en la frente.

— Quién sabe si será un sí o... no — Respondió TaeHyung, encogiéndose de hombros y conteniendo un chillido de emoción.

— Eso veremos — Dijo JungKook, con una sonrisa prometedora mientras los dos se quedaban abrazados, disfrutando del momento con su hijo tranquilo entre ellos.


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