Will

14 de febrero (San Valentín).

—...me perteneces —dijo y sentí mi corazón palpitar con fuerza.

—Pertenecer es una palabra muy fuerte —dije bromeando, él sólo viró los ojos y se acercó lentamente a mí.

—Lo es... —susurró tomando mi barbilla y alzándola cerca de su boca, sus labios a escasos centímetros de los míos... prácticamente rozándolos...—, por eso espero que quedé completamente claro lo que implica... eres mío.

—Sí... —contesté algo embobado por su cercanía y la manera en la que me estaba hablando, soltó una ligera risa y se apartó.

—Así me gusta William —contestó pícaramente y el rubor subió a mis mejillas... maldito, realmente sabía cómo controlar mis reacciones.

—Eres malvado Mason Gleeful —él simplemente viró los ojos y rió.

—Supongo que es mi turno de preguntarte algo —dijo mirándome con una sonrisa maliciosa... eso no sería del todo bueno.

—Pregunta —contesté algo inseguro.

—¿Con cuántos has estado antes que yo? —soltó sin más.

—Algo me dice que tenías esa pregunta preparada desde hace tiempo —dije alzando una ceja.

—Es evidentemente que deben haber más personas antes de mí, es decir, eres muy lindo—¿me había dicho lindo?—, no es difícil imaginarse que has estado con más personas, tengo curiosidad.

—Bueno... yo... em... —me sentí nervioso a más no poder, no estaba seguro de querer responder a eso.

—Por dios William, no es tan difícil —rió un poco, tratando de hacerme sentir menos nervioso—, si te da más confianza te diré con quienes yo he estado —asentí, debía admitir que sí me daba curiosidad eso—, nunca he estado con nadie formalmente, sin embargo, he besado a dos personas y sólo con uno llegué a algo más —¿qué tan más allá? Pensé, pero no pregunté.

—Bueno, yo... —contesté sonrojado—, en realidad nunca he estado con nadie más.

—¿Nadie? ¿No has besado ni estado con nadie más? —negué bajando la cabeza.

—En mi vida sólo me han gustado 2 personas, mi vecino y tú; y sólo hable unas pocas veces con él.

—¿Entonces soy tu primer beso? —preguntó intentando provocarme.

—S-sí —dije mientras el calor subía a mis mejillas, le estaba funcionando.

—Eso quiere decir que eres virgen —habló, pero parecía que era más para sí mismo.

—¿Ah? —pregunté algo avergonzado—. ¿E-eso es relevante?

—Claro que sí, tendré que ser extra cuidadoso cuando lo hagamos —contestó pícaramente, me sonrojé furiosamente.

—Espera... ¿qué? ¿Te refieres a hacer... eso? —dije la última palabra muriéndome de vergüenza.

—William —rió sutilmente—, no te alteres, no es nada del otro mundo, simplemente digo que procuraré tener eso en cuenta cuando llegue el momento, cuando estés listo.

—¿Ya lo tienes hecho antes? —pregunté con el corazón latiendo a mil por hora.

—Sí —contestó y sentí un nudo en el estómago, entonces así de lejos... pero era estúpido pensar que no lo hubiera hecho antes, aunque sea una vez, por favor... ¡era Dipper Gleeful!

—¿Muchas veces? —volví a preguntar, realmente yo era masoquista...

—Las suficientes como para saber que debo ser cuidadoso —era otra manera de decir que sí, pero extrañamente no estaba molesto, sólo nervioso.

—¿Dipper? —en realidad, había algo que me rondaba en la mente más que con quién o cuántas veces lo había hecho.

—¿Sí, Will? —respondió tranquilo.

—¿Cómo sabrás que es el momento? —pregunté sonrojándome aún más, él sólo soltó una pequeña risa.

—Lo sabremos, no te preocupes por eso —me sonrío ¿dulcemente?

—Oh, bien entonces —comenté aún nervioso, mientras me acomodaba en el sofá.

—¿Vas a querer ver la película? ¿O prefieres que hagamos algo más? —me preguntó seriamente—, podríamos no sé, creo que tengo un juego de mesa por ahí, y también me dijeron que hay una serie nueva que podríamos ver —le sonreí, me parecía tan lindo que en serio quisiera hacer algo para pasar tiempo conmigo, pero honestamente quería hacer... algo distinto.

—No estoy de humor de eso —sonreí, tomé su rostro entre mis manos y le di un beso corto beso en los labios—, en realidad... tenía otra cosa en mente —sonrió al entender la intención de mis palabras y pasó sus manos a mi cintura, acercándome...

No pude evitar acercar todo mi cuerpo lentamente hacia él, lo suficientemente como para sentir su respiración contra la mía y comenzar a besarlo, tirando algunas cosas de la mesa por accidente al colocarme sobre él, no le di mucha importancia a los objetos que cayeron, ya que cada instante nos besábamos con más fuerza... sólo concentrándonos el uno al otro.

Era poco usual que yo iniciara un beso, y aún más que le subiera el tono, así que se notó algo sorprendido. Sin embargo, me siguió de igual manera, aumentando la intensidad, sus manos estaban en mi cintura y luego se deslizaron a mi espalda, acercándome más a él... demonios debía admitir que me gustaba demasiado besarlo...

Nos separamos ligeramente cuando después de unos minutos, el aire había empezado a hacerle falta a mis pulmones, me sonrojé furiosamente al percatarme de las cosas que había golpeado con mi pie cuando lo comencé a besar, me sentí un poco culpable al dejarlos caer e instintivamente quise recogerlos.

—Perdón, debería levantar... eso, uh —balbuceé sonrojado intentando levantarme del sofá, él rió.

—Sólo tú te disculpas por estas cosas —comentó y sujeto mi mano impidiéndome moverme—, déjalo ahí.

—Dipper... —murmuré estremeciéndome por el contacto de su mano.

Sentía cosquillas justo donde sus dedos rozaban con los míos.

Me senté otra vez, el silencio lentamente se instaló entre nosotros, sólo se podía escuchar el sonido de nuestras respiraciones, entrelazó sus dedos con los míos y mi corazón latió con más fuerza.

Acercó su rostro al mío como al principio de la noche, sólo que esta vez nuestros labios sí lograron unirse en un roce, suave... dulce.

¿Cómo es que sus labios me provocaban tantas emociones?

No lo sabía, pero tampoco me importaba mucho.

Se separó de mí y me abrazó con delicadeza, mi cabeza quedo en el hueco de su cuello, y pude sentir su perfume entrar en mis fosas nasales...

Era él.

Sólo podía pensar en él, y cómo tenía algo que me provocaba de todo. Con simples acciones como tomar mi mano, o fuertes como besarme hasta quitarme el aliento.

Diciendo simplemente William, o sonriendo sarcásticamente.

Hablando suave y elegantemente, todo propio... o como un adolescente malhablado... simplemente siendo él.

Me volvía loco.

Maldito Dipper Gleeful y el maldito efecto que tenía en mí.

15 de febrero.

En algún punto terminamos dormidos en el sofá, con Dipper rodeándome con su brazo, ¿cómo habíamos acabado en esa posición? No tenía ni idea, pero era agradable.

Podía apreciar su silueta en la oscuridad, sólo la luz de la luna permitía ver un poco; se veía tan tranquilo, su respiración era profunda y pausada, mi cabeza descansaba sobre su brazo y mi corazón martillaba en mi pecho por la idea de estar así con él.

Dipper seguía durmiendo plácidamente junto a mí.

Por dios, habíamos hablado acerca de hacer... eso, me sonrojé, y eran esos momentos en los que me daba cuenta lo mucho que me afectaba el mayor de los Gleeful... haciéndome sonrojar hasta por una simple idea.

Me levanté con cuidado del sofá, tratando de no despertar a Dipper, vi las cosas que aún seguían regadas por ahí, estaban los chocolates que me había dado y los levanté del piso, tomé uno y lo metí a mi boca, sabían deliciosos, ¿dónde los habría comprado? También había un par de otras cosas tiradas por el piso.

Tomé mi teléfono que había dejado sobre la mesita frente a nosotros para revisar la hora. Probablemente Bill me mataría si era muy tarde.

Revisé mi celular, 3 de la mañana, demonios, definitivamente era carne muerta.

Pero eso no cambiaba el hecho de que seguía algo molesto con Bill, tendría que darle después el libro que había conseguido, y eso que me había costado seleccionar un título que no se me hiciera infantil y que creyera que podría gustarle, todo para que lo arruinará a último momento.

Solté un suspiro de frustración y tomé el estúpido oso que también se había caído en mi pequeño momento de valor... cuando me había lanzado prácticamente sobre Dipper, ¿tanto así me alteraba Dipper como para hacer cosas que no haría usualmente?

Dejé todo en su lugar y regresé al sofá, despertando levemente a Dipper.

—Dipper —murmuré—, tengo que volver a casa.

—Vuelve a dormir Will —respondió medio dormido, intentado jalarme del brazo, para que me acueste.

—Dipper —lo moví un poco más—, ya es tarde y mañana tenemos que ir a la escuela, Bill tiene que verme en la casa en la mañana o ambos tendremos problemas.

—¿Qué hora es? —dijo aun algo adormilado.

—Las 3 de la mañana —se incorporó de golpe.

—¡Demonios! —dijo casi gritando—, nos van a matar si alguien sabe que estás aquí a esta hora.

—Lo sé —solté una risa con su reacción—. Por eso te estoy diciendo que me lleves a casa

—Ya te llevo —se estiró un poco antes de levantarse—, sólo déjame ir por mis llaves —contestó levantándose y dirigiéndose a su mesita de noche, donde seguramente las tendría.

—Seguro —respondí y recogí mis cosas, que eran básicamente una caja de chocolates y ya.

Nos dirigimos a la puerta de su habitación, finalmente saliendo de nuestra pequeña burbuja, ya que después de esto tendríamos que regresar a vernos a escondidas y fingir que éramos simples conocidos que habían hecho un buen proyecto juntos en una clase una vez... unos conocidos que hacían un buen equipo.

—Ah, y Will —lo miré directamente y mi corazón no pudo evitar alterarse al notar la sonrisa que me lanzaba, no era cómo las que tenía que usar todo el tiempo para su imagen, no era una llena de aires de superioridad, ni una arrogante, era una sincera sonrisa que pocas veces había visto en él—, feliz San Valentín atrasado por unas horas —murmuró.

—Feliz San Valentín atrasado por unas horas a ti también, Mason —respondí bromeando y sonriéndole de la misma manera, el sólo viró los ojos y deposito un rápido beso en mis labios antes de salir de su habitación.

Definitivamente había sido un gran San Valentín.

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Actualización porque quiero, porque puedo, y porque cierta persona le prometió a mi hermana que actualizaría su fic con 2000 palabras mañana... no sé cuál de todas sus historias, pero como las sigo todas con cual sea soy feliz alv.

Y bueno creo que las actualizaciones ya no serán sólo los sábados, pueden ser cualquier día de la semana pero uno por semana hasta que termine todas las correcciones que le tengo que hacer porque la cague y soy pendeja (#AsíSeNace), porque una vez que las tenga serán, de dos o maybe more, dependiendo que tan rápido los termine, rueguenle a quien sea en quien crean que pase todas mis materias porque así tendré más tiempo de vacaciones y más tiempo para terminarla.

Y si les sale que lo subí dos veces fue porque el condenado Wattpad me cambio los guiones y tenía una versión anterior que no estaba tan bien y tuve que volver a subirlo porque se trabo y blablabla, a veces odio Wattpad, seriously.

-Karla.