XLV
Tsuna sonrió felizmente a sí mismo a pesar de que Reborn se sentía tan enfermo en la otra habitación. Al principio estaba molesto por eso, pero lentamente se alejó, sabiendo que el cuervo simplemente lo regañaría por preocuparse tanto.
No solo eso, la otra razón de su felicidad era tener dos ocupantes más en su dormitorio, personas con las que podía interactuar libremente sin ninguna duda y no lo juzgarían en absoluto. Cocinar más comida para los nuevos ocupantes en su habitación simplemente mejoró las cosas y él fue capaz de cocinar más de una variedad para su creciente hambre.
Sin embargo, para Reborn, él específicamente haría caldo de pollo con fideos suaves y planos para que él comiera y tragara fácilmente, esperando que el cuervo no lo vomitara más tarde en el día. Hasta ahora, había tenido suerte.
Sin embargo, la temperatura no había bajado tanto, permaneciendo tan alta como antes. Quería llamar a un médico, pero Fong simplemente agitó la mano, diciendo que el virus pasaría pronto. Reborn solo necesitaba tiempo para recuperarse. Con eso, Tsuna se sintió un poco mejor, le aseguró que su primer amigo estaría bien y ayudó a mantener el cuerpo del cuervo fresco con trapos húmedos.
A veces lo ayudaba a levantarse para un baño frío y, mientras Reborn estaba allí, podía recoger ropa y sábanas limpias para dormir.
Fong suspiró por detrás mientras observaba a Tsuna cocinar el desayuno, mirándolo cuidadosamente con un ligero temblor de preocupación brillando en sus ojos color onyx.
La noche anterior había sido un tanto agitada, no había esperado que ocurriera algo así, tan pronto también. Observando si aún había signos de lo que sucedió; no pudo evitar preocuparse por la mentalidad de Tsuna y notó que tendría que preguntarle a Reborn sobre eso cada vez que el chico saliera a clase junto con otras cosas que estaban empezando a acumularse.
En el pequeño dormitorio, había otras dos habitaciones en este lugar, él había cuestionado, bueno, lo había hecho Colonello, en voz alta sobre por qué Reborn residía en la cama de Tsuna cuando había otras.
La respuesta había sido un disparo del cuervo, silenciando a ambos, y Tsuna simplemente se encogió de hombros como si no estuviera seguro tampoco. Era aún más sorprendente que Reborn hubiera dormido en el sofá en lugar de las habitaciones libres, que ambos sabían que tampoco recibirían una respuesta.
Aun así, mientras él y Colonello estaban durmiendo en las habitaciones libres, Tsuna había dormido voluntariamente en el sofá para poder ayudar o llegar a Reborn fácilmente. Sin embargo, durante la mitad de la noche ...
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Regresan los capítulos pequeños con uno muy pequeño jaja. Que tengan buen fin de semana. La vendetta vendrá en cuanto Reborn se mejore (ノ・ェ・)ノ
Bye bye!
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