—Porque la pregunta Tae?- pregunto el rubio con una sonrisa y una ceja alzada-¿te gusta?

—¿Que? noo, es que vi a uno de sus amigos, y ese amigo si me gusto, no me acuerdo su nombre pero me gusto-

—Te creeré, pero no mucho-

—Joder, cuando eres terco eres un caso perdido, en fin, yo procederé a irme mi estimado amigo, nos vemos en la hora de salida-Dijo el castaño para salir al patio.

Después de eso el rubio vio como su amigo desapareció y decidió irse el también.

perdido en sus pensamientos mientras caminaba ni cuenta se dió de que venia alguien más y se tropezó haciendo que cayera encima de... ¿Jeon Jungkook?...

—Ay, perdón, perdón, perdón, te juro que no te vi, perdón en serio-Se apartó rápidamente con un color carmesí en sus mejillas.

—Si si, no te preocupes yo tampoco te vi, perdón-Dijo el pelinegro levantándose sin mirar al rubio-Te ayudo..-dijo para luego tenderle la mano.

—Gracias, tú eres Jungkook ¿no?-

—Si ¿y... tú?

—Yo soy Park Jimin, un gusto Jungkook-Dijo alegremente.

—Jimin...-susurró casi inaudible.

—¿que dijiste?-pregunto el rubio cuando le pareció haber escuchado algo.

—Nada, nada-respondió él azabache.

—¿Ok?.. yyyy... ¿Para dónde ibas?-pregunto con curiosidad.

—Hacia los baños pero no conozco nada y creo que me eh perdido-

—Pues si, te has perdido, los baños están arriba-Dijo el rubio con diversión.

—¿En serio? Justo vengo del piso de arriba ¿cómo no los vi?-

—Están un poco escondidos los baños, ven, te llevo-Dijo el rubio para agarrarlo de la mano y jalarlo para las escaleras yendo hacia arriba.

Pasando por un pasillo un poco oscuro para poder ir a los baños los cuales, si, estaban bastante escondidos, realmente el azabache empezó a creer que los baños no existían en ese instituto .

—Pero... ni si quiera se miraba este pasillo...-Dijo Jungkook con confusión.

—Pues si, no se mira, pero son mejores que los del patio, estos casi nadie los usa por el echo de que casi nadie sabe de este pasillo, pero si los limpian, los del patio pareciera que no, en fin, entra, te espero aquí-Dijo el rubio con una gran sonrisa en su rostro haciendo que sus ojos se convirtieran en finas y perfectas líneas.

—Si, muchas gracias...Jimin-

—Tranquilo, ahora entra joder-

Después de haber esperado al rededor de unos 2 o 3 minutos Jungkook apareció.

—Listo, en serio gracias, me estaba meando, sino era por ti juro que hubiera estado a punto de ir a un jodido árbol y hacer ahí-Dijo el azabache con diversión.

—Hay algunos que si lo hacen-Dijo el rubio riéndose.

—¿En serio? Wow-dijo riéndose también.

—Si, increíble ¿no?-

—Si, oye, ¿aquí hay biblioteca?-pregunto curioso.

—Sip, no es tan grande pero tampoco chiquita ¿te llevo?-pregunto con emoción el rubio.

—Si por favor-respondió con una sonrisa.

Cuando iban bajando las escaleras para ir a la biblioteca Jimin se hizo una pregunta en su mente "¿cual sería el poder de Jungkook?" Ni si quiera sabía porque le había surgido la pregunta pero no se iba a quedar con la duda así que pregunto.

—Jungkook, ¿Cual es tu poder?-

—Oh, am, te lo diré, pero en la biblioteca ¿Si?-

—Oh, está bien-respondió con más curiosidad.

Siguieron con su camino hacia la biblioteca hasta que llegaron y se fueron a lo más profundo de la biblioteca para que nadie los viera o los escuchara, a veces era peligroso que escucharan cual era tu poder, podrían hacer lo que sea con tal de que uses tu poder para su conveniencia.

—Bien.. mi poder...-hizo una pausa para respirar hondo y poder hablar- yo..., yo no tengo poder...-mintió finalmente.

—¿Que?... tu... no tienes... ¿poder?-dijo perplejo.

—No...yo, no tengo...-

—Wow... yo siempre eh querido saber que se siente no tener poder...pero no me gustaría no tener...yo...-

—Tranquilo, no me gusta la lástima, ahórratelo todo por favor-dijo desviando la mirada.

El rubio lo abrazó escondiendo su cara en el cuello del azabache.

—A mi tampoco me gusta-

—¿Y el tuyo Jimin? ¿Cuál es tu poder?

—Oh, no se lo suelo contar a gente recién conocida, pero por alguna razón, Jungkook, siento que ya te eh visto, y que puedo confiar en ti...-

—Si, puedes confiar en mi, pero si no quieres decírmelo tampoco te obligaré, no te puedo hacer que me digas algo que no quieres-Dijo el azabache con una expresión neutra en su cara.

—Te lo diré, mi poder es el de las constelaciones...-dijo muy bajo, cómo un susurro pero audible solo para Jeon.

—Tu... tienes un poder único?-pregunto con el mismo tono de voz que el rubio a pesar de que estaba sorprendido.

—Si, por favor no se lo digas a nadie...-pidió el rubio.

—No no, tranquilo no se lo diré a nadie-Dijo sintiéndose un poco mal por la mentira que le dijo.

Era obvio que sin un poder no se podía entrar a un instituto en el cual solo hay chicos y chicas con poderes aparte de que solo existe un instituto para personas sin poderes era prácticamente imposible entrar a un instituto dónde solo hay personas con poderes y que alguien que no tenga entre, pero al parecer a este rubio se le había olvidado, Jungkook se sintió realmente estúpido por lo qué dijo.

El poder de Jungkook era también único "Las lágrimas azules" pero su familia le había enseñado a que la gente muchas veces solo se aprovecha de lo que tienes, y que mientras no tengas nada, nadie te hablara ni te ayudara, esas personas ya no existían, y si lo hacían, Jungkook no los conocía, el sabía que en los peores casos, hasta tu propia sangre te puede traicionar sin importar que sea tu hermano, hermana, papá o mamá, en esos casos, se olvidaba hasta que eran familia.

—Bueno, yo me tengo que ir, adiós...-Fue lo único que dijo el azabache para salir corriendo dejando a un confuso rubio atrás, no sabía lo que estaba pensando, pero tampoco quería.

El rubio quedó solo y aprovechó para sacar un libro el cuál había leído cientos de veces, y era su favorito, "The Fault in Our Stars" (abajo La Misma Estrella) simplemente lo amaba, era lo mejor, cada que lo releía era más emocionante que la última vez, se emocionaba y a la vez lloraba como nunca antes, amaba las historias de amor y el como Hazel y Gus sé conocen debido a una enfermedad y a un lugar al cuál van para hablar sobre distintas enfermedades aunque Hazel es obligada, y aunque se sabía cada parte exactamente a cómo lo dice en el libro, simplemente nunca podría dejar de leerlo, era su favorito y nunca cambiaría eso.

Sacó también el muy famoso libro "El principito" era otro de sus favoritos y aunque este no lo había leído tanto como "The Fault in Our Stars" también le gustaba, este llegó a ser su favorito cuando era pequeño, fue su primer  libro, su mamá se lo leía cada noche, lo recuerda a bien, dos a tres páginas por noche, pro eso llego a amar tanto la noche, y aunque su mamá ya no estuviera con el, siempre recordaría eso, tenía como objetivo que cuando tuviera hijos les contaría también de dos a tres páginas por noche, sin dudas este libro le traía muchos recuerdos y pro eso él llegó a dejar este libro a un lado, no sacaba el que tenía en casa debido a que era muy Preciado para el, lo sacaba solo para limpiarlo y a veces leer todas esas frases que su mamá marcó, fueron sus favoritas y cada que había una, ella le decía a Jimin cuanto lo eran aún recordaba las que más le gustaban a su hermosa madre, "Es una locura odiar a todas las rosas solo porque una te pincho. Renunciar a todos tus sueños solo porque uno no se cumplió " el amaba esa frase al igual que su madre, le hacía recordar lo tanto que llegó a odiar una hoja de papel solo porque se cortó el dedo haciéndolo sangrar, y el como renunció a muchas cosas solo porque no llegó a pasar el examen en su antigua academia de baile.

"Fue el tiempo que pasaste con tu rosa lo que la hizo tan importante" esa frase también fue de las que más le gustaban a su mamá, y también a él, esta le recordaba a su mamá, porque para él su rosa siempre fue su mamá, tan hermosa y delicada como una de estás, el tiempo fue el que hizo que ella llegara a ser tan importante en su vida, el tiempo es el que hace que algo u alguien llegue a ser tan importante en tú vida, aveces con solo verlo te puedes sentir feliz si estás triste o te puede hacer quitar el enojo que una vez tuviste, en este caso Jimin cuando estaba triste y su mamá lo abrazaba y le daba una de sus hermosas sonrisas hacía que se sintiera mucho mejor y se sentía feliz, cuando estaba enojado iba a ella, le decía el porqué y su mamá lo abrazaba y le cantaba una canción, eso lo hacía dejar de estar enojado.

Habían muchas cosas las cuales extrañaba. Y aunque estaba su papá, no era lo mismo, y nunca lo sería, aunque su mamá le contaba maravillas de él, nunca llegó a tener ese mismo aprecio y tampoco le daba el título de su héroe para él su héroe era su mamá, para él ella era más fuerte que la mujer maravilla y su lazo de la verdad, con su mamá nunca habían mentiras, había algo que no lo dejaba mentir, nunca llegó a saber el porqué pero esto no lo siente con su papá, lo que hace que aunque él sepa que no es lo mejor, lo hace, le miente en la cara a su papá.