Yuri se sentó en la cama y volvió a leer los papeles...nunca se había sentado a leer eso porque jamás lo creyó necesario, es decir, naces, conoces a los que son tus padres y no necesitas un acta de nacimiento para saber que si son ellos, ¿no?

Hizo una mueca y suspiró leyendo de nuevo, ahí no estaban los nombres de las personas que se dijeron sus padres los últimos doce años...tensó la mandíbula y sintió extraño en el pecho, no podía estar seguro si era tristeza, enfado o decepción. Suspiró y salió de la habitación buscando a su abuelo con el acta en la mano, quería una explicación en ese momento.

Bajo las escaleras y se mordió la lengua al verlo.

—Yuri, ¿cuándo llegaste? —preguntó bajando la mirada al periódico entre sus manos.

El adolescente lanzo la hoja a la mesa para que pudiera leerla, quería explicaciones. El anciano suspiró al darse cuenta y volteó a ver a su nieto, estaba encorvado, con el ceño fruncido y los puños apretados...era una reacción normal para la situación que estaba ocurriendo en ese momento.

—Yuri—comenzó el hombre mientras tomaba la hoja entre sus manos.

—Si no vas a explicarme lo que quiero, no digas nada—murmuró rabioso, temblando.

—No te enfades, te contaré la verdad, pero necesito que estés calmado para que puedas entenderlo.

— ¡No me digas que me calme! Quiero saber quiénes son ellos y porque no están mis padres en esa acta—gritó golpeando la mesa con ambas palmas.

—Y dije que te lo diré, pero no si sigues gritando.

Yuri tensó la mandíbula e hizo una mueca conteniendo las lágrimas de coraje, se cruzó de brazos y se sentó a la mesa frente al anciano, esperando.

Nikolai tomo asiento también y torció la boca, era complicado tocar ese tema, sobre todo si su hija y su yerno no estaban...y no volverían en unos días.

—Abuelo—apremió el muchacho impaciente.

—Si, si—suspiró y se recargó del respaldo de la silla. —Yuri, las personas que están en esa acta son tus padres biológicos...cuando naciste mi hija no podía tener hijos y...sabes que adoptar legalmente no hubiera sido posible por la posición social que teníamos en ese momento, así que...tu...madre biológica accedió...

— ¿Me vendió? —le interrumpió el joven, escuchaba su corazón latir con fuerza en sus oídos y sus mejillas estaban rojas del coraje. — ¿Qué te pidió a cambio?

—No...no pidió nada, al menos no para su persona, pero si pidió todo para ti.

Soltó un suspiró y fue inevitable que las lágrimas se desbordaran de sus ojos, Nikolai no supo si eran por tristeza o enojo.

— ¿No...no me quería? ¿Por qué...me regalo?

—Eso no lo se, Yuri, nunca se lo pregunte.

— ¡Debiste hacerlo! ¿Acaso nunca pensaron que yo me enteraría?

—En realidad queríamos que estuvieras más grande para explicártelo, Yuri, sabes que te amamos, aunque no compartamos sangre—dijo lo más dulce que pudo, acariciando su cabeza.

El joven le dio un manotazo a su abuelo y se alejó.

—Quiero verlos—gritó limpiándose el rostro con furia. — ¡Quiero saber porque me regalo!

Suspiró e hizo una mueca, ¿qué más daba? Eso tenía que pasar algún día...y mejor que fuera mientras su hija no estaba.

—Está bien, pero tendrás que esperar...y no le digas nada a tu madre.

—Ella no es mi madre—dijo dando media vuelta para volver a su habitación.

Nikolai suspiró con tristeza y tomo el acta para leerla de nuevo, no iba a ser tan difícil encontrarlos...pero temía la reacción de su nieto cuando estuviera frente a ellos.

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Viktor llegó a casa contento, tenía el regalo de su esposo ya apartado y solo tenía que esperar al día de su cumpleaños para ir por él. Saludó a Makkachin acariciando su cabeza mientras se quitaba los zapatos y volteó buscando a Yuri.

— ¿Dónde esta mamá? —le preguntó al perro que ladró y movió la cola.

Sonrió caminando tranquilo por el corredor de entrada, se asomó a la sala y encontró a su pareja hablando por teléfono, se veía preocupado. Le saludó agitando la mano y se acercó para abrazarlo por la espalda, intentando escuchar la conversación pegando la oreja a la bocina.

—Sí, está bien...no, aún no se lo digo, pero hablaré con él hoy.

Viktor arqueó una ceja, no lograba entender nada de lo que decían...pero era obvio que él estaba involucrado de alguna manera.

—No se preocupe, los esperamos en dos semanas...hasta luego—dijo lo último en voz muy baja para colgar.

— ¿Qué pasa amor? —preguntó preocupado, la expresión de Yuri le decía todo. — ¿Quién era? ¿Pasó algo malo? —hizo una mueca al no recibir respuesta, eso lo ponía más nervioso. —Yuri, ¿acaso viene tu madre de nuevo? —intento bromear para hacerlo reaccionar, pero su esposo parecía en trance. —Yuri.

—E-era...Nikolai—contestó apenas, temblando levemente.

— ¿Paso algo con el niño? —preguntó de inmediato comprendiendo por donde iba a el asunto.

—Él sabe—murmuró con la voz entrecortada. —Y quiere vernos—sollozó y lo abrazó con fuerza.

Suspiró y acarició la espalda de Yuri, dejando que llorara todo lo que necesitaba.

—Me odia...me odia...—dijo entre sollozos.

—Cariño, sabíamos que esto iba a pasar...

—No, no quiero que venga...que me vea...

—Tienes que contarle todo, es lo mejor que puedes hacer.

Yuri negó de nuevo refugiado en su pecho, Viktor le retiró los lentes y besó su frente. El día más temido por su esposo había llegado.

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bueno, primero que nada, Hola! Soy nueva en el fandom y este es mi granito de arena xD sentí que al fandom le hacía falta un poco de drama~ así que vengo a aportar <3

Esta idea consta de dos partes, comienzo publicando esta que esta centrada en Yurio y después publicare la segunda parte que será más de Yuri y Viktor nwn espero que les guste xD

Les loveo <3

Rave~