Narradora: 

Era un día común, La Organización de las Naciones Unidas mejor conocida como la ONU había citado a todos los countrys  a una junta, como lo hacía cada mes pero esta junta no era como las otras. Esta seria particularmente para la socialización de los countrys actuales y los que apenas ingresarían, para evitar conflictos en el futuro...

Canadá entraba al edificio donde se ubicaba la sede de la ONU, junto a su padre Uk quien lo guiaba a donde se encontraba la sala de juntas. 

Por otro lado Canadá estaba emocionado, era su primera vez que iba a una junta aunque  la junta solo fuera para socializar, además de que por fin iba a ser parte de las decisiones tomadas tanto en las juntas como en su territorio. El  solo había estado en el edificio algunas veces cuando sus padres lo llevaban. 

Había demasiados countrys yendo y viniendo por el gran edificio, Canadá observaba todo a su alrededor, con tantos countrys era fácil perderse en ese lugar y  de un momento a otro Canadá no se dio cuenta de que su padre ya se  había ido a alguna parte del edificio... 

Canadá caminaba por los pasillos del imponente edificio de la ONU, buscando desesperadamente a su padre. A medida que avanzaba, se daba cuenta de lo vasto y laberíntico que era aquel lugar. Los pasillos estaban llenos de  diversos countrys, todos inmersos en sus propias conversaciones. 

El corazón de Canadá latía con fuerza mientras continuaba su búsqueda en el imponente edificio de la ONU. La preocupación comenzaba a crecer en su mente, y la sensación de estar perdido en medio de aquel mar de countrys lo hacía sentir vulnerable. Miró a su alrededor, buscando algún indicio de dónde podría estar la sala de juntas, pero todo parecía confuso y abrumador.

Después de unos minutos de caminar sin rumbo fijo, Canadá se encontró frente a una gran sala con una puerta abierta. Miró dentro y vio que había un grupo de countrys conversando animadamente. Pensó que tal vez alguien allí podría ayudarle a encontrar a su padre. Con cierta timidez, se acercó al grupo y esperó un momento para que la conversación diera un respiro.

"Disculpen", comenzó Canadá tímidamente, "¿saben dónde podría encontrar la sala de juntas? Estoy buscando a mi padre y me he perdido un poco".

Los countrys se volvieron hacia él y sonrieron comprensivamente. Uno de ellos, un bicolor  azul y amarillo con ojos color miel y de apariencia amigable, señaló hacia el final del pasillo. " Hola, mi nombre es Ucrania, la sala de juntas está al final de este pasillo, a la derecha. No te preocupes, es fácil perderse aquí la primera vez. ¿Necesitas que te acompañemos? "

Agradeciendo la amabilidad, Canadá asintió y se presento para posteriormente seguir las indicaciones hacia la sala de juntas. Mientras caminaba junto al grupo, comenzaron a charlar con él, haciéndolo sentir más cómodo y relajado además de que abecés tropezaba o chocaba con algo, pues se había quedado hipnotizado con aquel country de ojos color miel.

 Descubrió que algunos de los countrys que estaban en la sala también eran nuevos y compartieron sus propias experiencias de adaptación en el imponente edificio de la ONU.

Finalmente  después de caminar un poco, llegaron a la sala de juntas y Canadá pudo ver a su padre, Uk, entre la multitud. Se sintió aliviado al reunirse con él y expresó su gratitud hacia los countrys que lo habían guiado para posteriormente despedirse adecuadamente.

La junta transcurrió con presentaciones, intercambios culturales, platicas y actividades de convivencia entre los countrys presentes. Canadá se sintió emocionado de ser parte de aquel ambiente tan único y diverso...

Durante el último tramo de la junta, Canadá siguió participando en las discusiones con entusiasmo, compartiendo sus propias perspectivas y aprendiendo de las experiencias de los otros countrys. Aunque aquel country de ojos color miel no estaba a la vista, su presencia seguía flotando en la mente de Canadá.. Durante un receso, Uk se acercó a Canadá y le sonrió con cariño.

"¿Estás bien, hijo?" preguntó Uk, notando la preocupación en el rostro de Canadá.

"Sí, papá. Gracias por traerme aquí, conocí a demasiados countrys", respondió Canadá con gratitud. "Aunque me perdí por un momento, conocí a algunas personas amables que me ayudaron". Dijo Canadá mientras recordaba con una sonrisa a aquel country de ojos color miel, dicha sonrisa no pasaría desapercibida por Uk quien posteriormente dijo.

"Una disculpa por dejarte un momento, tenia unos pendientes y no me di cuenta cuando me dejaste de seguir" Dijo Uk para posteriormente ponerle su mano en el hombro de Canadá y continuar hablando. "Me vas a decir en quien estas pensando, te ves distraído" dijo  con una sonrisa algo picarona, cosa que inmediatamente notó Canadá. 

"E-eh, yo... En nadie Simplemente estaba pensando... Algunas cosas y... dijo Canadá mientras miraba hacia otro lado para que su padre no se diera cuenta de que se había sonrojado un poco pues aquel country lo había hipnotizado y no paraba de pensar en el.

"Ya veo. Trabajar aquí en las instalaciones de la ONU puede ser un lugar abrumador al principio, pero recuerda que estamos aquí para aprender y trabajar juntos con otros countrys. ¡Y siempre puedes contar conmigo y con tus hermanos o tu madre, para ayudarte en lo que necesites!"

Canadá sonrió y asintió, sintiéndose reconfortado por las palabras de su padre...

 A lo largo del día, Busco aquel country de ojos color miel, pero al no hallarlo se concentró en las actividades.   Se hizo amigo de algunos countrys, compartió risas y experiencias con countrys de diferentes continentes. A medida que la junta llegaba a su fin, Canadá se dio cuenta de que  seria difícil ver a ese country de ojos color miel, ya que parecía que había desaparecido en los largos y confusos pasillos de el edificio, además le costaría un poco el acostumbrarse a los largos días de trabajo en la ONU. 

ºº  Rato mas tarde ºº

Al finalizar la jornada, cuando los countrys comenzaron a dispersarse y los pasillos se volvieron menos concurridos, Canadá se encontró nuevamente con su padre, Uk. Ambos compartieron sus impresiones sobre la junta y cómo cada uno había pasado su día.

"¿Lograste encontrar lo que buscabas?" preguntó Uk, observando a su hijo con complicidad.

Canadá suspiró con una pequeña sonrisa. "No, papá, pero eso está bien. Conocí a mucha gente interesante y aprendí mucho hoy."

Uk asintió, satisfecho con la actitud de su hijo. "Eso es lo importante, Canadá. La ONU es un lugar lleno de oportunidades para crecer y aprender de los demás. Y no te preocupes, estoy seguro de que tendrás muchas más ocasiones para encontrarte con aquellas personas que te dejaron una buena impresión."

Canadá asintió, dejando escapar un suspiro mientras recordaba al country de ojos color miel. "Tienes razón, papá. Supongo que estas cosas toman tiempo."

"Exactamente", respondió Uk con una sonrisa comprensiva. "Ahora, ¿estás listo para regresar a casa y descansar?"

Canadá asintió y se dirigió hacia la salida del edificio de la ONU junto a su padre. A pesar de no haber encontrado al country de ojos color miel esa día, sabía que tenía un emocionante camino por delante en su nueva posición en la ONU. Con el apoyo de su familia y su determinación para aprender y crecer, Canadá estaba listo para enfrentar los desafíos y las maravillas que le aguardaban en su futuro.

Mientras caminaban hacia casa, Canadá no pudo evitar preguntarse si volvería a ver al country de ojos color miel y cómo sería el próximo capítulo de esta inesperada historia que estaba comenzando a tejerse en el corazón del edificio de la ONU...

____________________________________________________

Hola de nuevo, una disculpa por a ver tardado tanto para subir este cap. lo que pasa es que no me gustaba el como quedaban en las otras versiones, pero al final me decidí por este....

Espero que les guste, sin mas que decir, que tengan un bonito día, tarde o noche....

ヽ(^o^)丿Hasta la próxima....