#26
— Hiciste un buen trabajo, en el mínimo tiempo posible. — Le felicito Atem mientras veía a su hombres cargar con el cuerpo del capturado.
—No es gran cosa, a mi me gusta hacer mi trabajo lo más rápido posible y ejecutarlo bien. No tengo tiempo para jugar al gato y al ratón. —
Atem sonríe.
— Vaya, parece que tenemos algo en común. — Comenta el jefe.
— No lo veo así. — Responde inmediatamente Yugi, luego suspira. — Escucha, si no tienes otro trabajo para este día, me iré a casa, tengo cosas que hacer. —
— Adelante. No te entretengo ya. Ve con cuidado a casa, ¿o acaso quieres que te lleve?. —
— No. Así estoy bien, caminaré. — Yugi dio media vuelta dispuesto a irse, no dejaría que su actual jefe supiera donde vivía, si lo hacía, era obvio que le mostrarían todo el tiempo y era verdad que él no quería lidiar con eso.
Cuando salió de la oficina de Atem inmediatamente se encontro con Yami. El otro chico lo miraba seriamente con aquellos ojos rojos como la sangre.
— ¿Te hirió?. —Preguntó ocultando su preocupación.
— Para nada. — respondió Yugi e intento pasar de su lado, pero el tricolor mayor lo tomó por el brazo, Yugi se detuvo y espero a que Yami hablara.
— Debes tener cuidado en este... —
— Se a lo que te refieres. — Interrumpió Yugi tomando la mano de Yami, el mayor bajo la mirada a la mano del menor al sentir el tacto frío y noto que los nudillos de Yugi estaban rojos y un poco heridos.
Yami levantó la mirada con enojo, estaba listo para reprender a Yugi por ser un mentiroso, ¿no que no se había lastimado?.
— Herida superficial, no importa. — Dijo Yugi alejando su mano de la de Yami. — Golpee mal al objetivo, es mi culpa. — Agregó.
— ¡Debes tener más cuidado!. — Le dijo Yami volviendo a tomar con ambas manos la mano de Yugi. — Pudiste fracturar te algún hueso de la mano. ¿Acaso no sabes golpear niño?. —
Yugi soltó un ligera carcajada.
— A decir verdad. —Dijo. — Estoy rezagado, hace varios años que no peleó, ni mucho menos e entrenado, es normal que me haga daño a mi mismo. —
— Serás tan idiota. — Se quejo Yami. —¿Por qué no lo mencionaste antes?. —
—¿Por qué debería importarles?. — Ataco Yugi en un leve susurro que estremeció los huesos de Yami. Eso, hizo que las palabras de Atem de momentos atrás, las recordará.
“Sí, él quisiera, nos volvería sus mascotas.”
Miró fijamente al menor y se sorprendió con la mirada que poseía Yugi, parecía que aquel chico que conoció tiempo atrás, el que parecía tímido e indefenso, había desaparecido y había sido sustituido por aquel ser oscuro que él realmente era y estaba destinado ser.
— Podíamos haberte entrenado. — Hablo Yami en una leve vocecita que apenas fue perceptible para Yugi, el menor se había dado cuenta que el de ojos rojos le miraba directamente a sus ojos, parecía que se había quedado hipnotizado por él.
“Típico". Pensó Yugi.
—¿Cómo aún perro?. — Corto el silencio Yugi entre ellos, haciendo a Yami recapacitar.
—N-no... Solo... —
— ¿Buscan entrenarme para que "me cuide a mi mismo"?, ¿o solo me capacitarán para sacrificar mi vida por la de ustedes?.
Yami se quedó callado.
No podía creer que un chico tan dulce como Yugi, tuviera ese lado tan amargado y cruel, creía que sí se mantenía del lado del menor, intentaría hacer que sobre llevará la carga y el trabajo que se le solicitaría con el tiempo.
Pero al parecer eso no iba hacer posible, por lo que podía ver, Yugi estaba muy a la defensa con ellos o al menos con él y eso de alguna manera le dolía.
Por qué cuando una persona se hace la fuerte por fuera, internamente es sensible y muy linda por dentro.
— Por favor, di las cosas como son conmigo. — Dijo Yugi fríamente. —No ocultes la verdad, no de mi. Y no trates de mentirme, porque a final de cuentas, me doy cuenta del engaño... —Yugi toma las mejillas de Yami con sutileza. —Y alguien que me engaña y me traiciona, lo único que merece de mi, es mi desprecio total. —Lo suelta, se da media vuelta y comienza andar dejando a Yami solo y un tanto herido.
— Eso no es lo que quería decir. — Susurro Yami para sí mismo, pues él más que nadie deseaba que la muerte viniera por él, no sacrificaría vidas por él.
*Continuará...
¿Yami sumiso?, ¿dónde?, ¿versatilidad? 🤔 Hmmm, tengo mucho en que pensar.
¡Disculpen las faltas ortográficas!
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