Numero 2.
Como con cada año que pasa, con cada mes que pasa, con cada semana que transcurre, con cada dia que se da, vienen los cambios, cosas nuevas llegan, y otras viejas se van, por lo que de ninguna forma se podria esperar que todo sea siempre sea igual, nuevas cosas llegaran como ya se dijo, y eso no deberia tener nada de malo, sino que todo lo contrario, en su lugar, se deberia de pensar, que estos nuevos cambios, llegan para bien.
En el momento menos pensado, y menos esperado, una nueva familia, se habia acabado de mudar recien, al acaudalado barrio de Lady, solo que ella y sus amigos, aun no se habian dado cuenta en ese momento, pero lo que ellos no se esperaban, era que estos nuevos vecinos, en definitiva, no serian como ningunos otros resilientes que hubiesen conocido jamas, sino que ellos resultarian ser, unos muy peculiares, y completamente alejados de todo aquello, que la gente de alla consideraba distinguido.
Era cierto, ellos resultaron ser unas personas, que junto a su mascota, se harian bien conocidos, por no querer ser como los demas, sino que ellos gustaban de vivir sus vidas a su manera, y no como luego se estaria esperando de ellos, pero esto al final, no habria de tener nada de malo, puesto que con su estilo de vida, ellos no le estaban haciendo daño a todas.
Sus nombres eran, Thomas y Evelyn, junto a su pequeña niña de seis años conocida por el nombre de Rosie, el padre de familia, un hombre trabajador de 36 años, y la madre, una mujer de caracter delicado de 34 años, en el caso de cada uno, los dos eran una pareja que se amaba mucho, y que se tambien eran conocidos por ser muy apegados tanto a su hija Rosie como a su mascota familiar, la cual resulto ser una muy peculiar para el tipo de mascotas que se suelen ver en un barrio de gente "respetable" como en el que Lady vivia.
Ya que la mascota de esta familia, resulto ser algun tipo de husky, cuya raza pura, resultaria ser todo menos eso, pues este husky, cuyo nombre era Balto, tenia tambien ascendencia lobuna en sus genes, asi es, Balto era mitad lobo, aun por mucho que a los que le oyeran, les costara poder creerlo, pero bueno, no era para menos, despues de todo, algo asi no se veia todos los dias. Pero al final, ¿Quienes eran los demas para poder juzgar?
No se habian dado cuenta al inicio de cuando habian llegado, pero para ellos, eso carecia por completo de relevancia, sin ningun tipo de incoveniente, de modo que a la forma de ver de ellos, veran, cuando llegaron, ni Lady, ni ninguno de sus amigos se habian percatado de eso en un principio, de echo, Lady al final, no se daria cuenta de esto, hasta el dia en que acabo por ser la primera que se toparia con ello, de ninguna forma lo habria pensado de la forma en la que lo estaba haciendo, pero asi paso.
En aquella tarde, Lady iba regresando de casa de sus amigos, ella sola, aunque si tenia bastante prisa, pues el sol ya se estaba poniendo, y no deseaba preocupar mucho a sus dueños, por lo que se movia lo mas rapido que podia, aunque sin perder su "toque de dama", que es como habia aprendido a decirle por parte la hermana de Jock, de igual manera, no es como que a ella, se sintiera en desacuerdo con esa idea, pero por desgracia, eso tambien significaba, restarle a Lady una velocidad significativa, que a ella en ese momento, si que le venia en falta, pues de aparecer demasiado tarde en la casa, le podria costar acabar enormemente regañada, y eso era lo ultimo que ella necesitaba en esa tarde.
Por lo que en este momento, teniamos a una Reina que yacia caminando lo mas rapido que podia pero tratando de mantener su compostura en todo momento, la prisa que tenia en ese momento, era mucha, antes de que se metiera el sol, y era crucial, no llegar tarde, pero fue gracias a que recien iba llegando, que pudo encontrarlo, a el.
Al pasar por una de las calles que luego tendria que doblar para llegar donde ella vivia, se termino por enterar de esta forma, que unos nuevos vecinos, se habian mudado recientemente, y lo pudo ver, en el momento que llego, frente a ella, se dio cuenta como aquel letrero, que durante tanto tiempo siempre habia estado ahi, y que decia, se vende, ahora estaba siendo quitado de su lugar, e inclusive, estaba siendo roto por la mitad, en las manos de un hombre muy alto y quien ella asumio, debia de ser el padre de familia, y que ciertamente a ella le infundia demasiado miedo, con lo alto que se veia, despues aquella mujer, que debia de ser esposa, y tenia razon. Luego de haberla visto darle un beso al hombre ya antes mencionado.
Y para terminar, ella tambien pudo ver al que debia de ser, su pequeña hija, una niña a la que escucho que llamaban Rosie, y por si eso no fuera suficiente, Lady en ese momento, tambien pudo terminar por fijarse, en quien debia de ser, la mascota de la familia.
Lo habia visto todo, y fue ese simple echo, el que causo, que la preocupacion de Reina por no querer llegar tarde a su casa, no solo pasara a segundo plano, sino que tambien se le olvidara por completo, y en la que al final, si, se interesaria tanto, que decidiria escuchar hasta el final, y tanto como pudiera. Y esto se debia, a que Reina, no seria la unica que se sentiria tan intrigada, por la llegada de estos nuevos vecinos, pues en el momento justo que ella se detuvo a verlos, uno de los vecinos con los que ella y sus dueños no habian tenido tanta interaccion pero que si conocian lo suficiente, fue el segundo en no solo quedarse observando, sino que tambien no dudo ni un solo segundo, en acercarse para interactuar con los que primero averiguaria que se llamarian Thomas, el padre de familia, Evelyn, la madre de familia, Rosie, la pequeña niña, y su mascota familiar....Balto.
Tanto Lady como aquel vecino, no se podian contener con aquellas personas, y en un momento, ella simplemente decidio, solo quedarse desde la distancia, al menos por ese momento, y mirar con la mayor atencion posible, para poder entrar en aquel contexto, que a ella le ocasionaba mucha intriga.
El vecino, que en ese momento, rapido y facil, solo se presento como John, hizo todo lo posible por hablarles a ellos, con el mayor respeto y la mayor educacion posibles.
John: ¡Hola!, Un gusto, un placer, no sabia que ya habian vendido al fin esa casa.
Thomas: Ah hola, si bueno, recien llegamos esta mañana.
Dicho esto, Thomas se acerco a John para poder estrechar su mano con la de el.
John: Ok, le ruego que me disculpen, pero no me habia dado cuenta en ningun momento, que ustedes habian llegado-
Evelyn: No se preocupe, de echo paraece que todo apunta a que no solo se usted no se percato de nuestra llegada, sino que por lo visto, nadie se dio cuenta de nosotros, pasamos casi desapercibidos para todos.
John: Bueno, pues si ese es el caso, les doy mis mas sinceras disculpas por eso, y tambien, desde luego, les doy mis mas cordiales bienvenidas, es cierto, no nos dimos cuenta, pero eso no significa, que nosotros vamos a hacer como si nunca hubieran llegado, como si no existieran.
Thomas: Pues muchas gracias por ello, esperamos tener una buena convivencia con todos en este vecindario, se nota que es un lugar muy lindo y acogedor, asi que solo espero que todos podamos ser aqui, bueno vecinos. Pero siendo mucho mas formal, yo soy Thomas, y ella es mi esposa Evelyn, ella es nuestra unica hija Rosie, y he aqui nuestra querida mascota familiar, Balto.
Lady se mantenia observando desde lejos, con mucha atencion, con todas las posibles, para ella, de pronto, por alguna razon, esto se habia puesto muy interesante, demasiado interesante para su gusto, esta familia parecia que si eran buenas personas, su niña lucia bastante adorable, pero lo que mas le llamo la atencion, fue aquel perro, que ella escucho llamar su mascota familiar, y no comprendia porque se le quedo mirando de esa forma, simple y sencillamente no podia entender por que.
Y luego se daria cuenta de que no era la unica, pues al igual que Lady, el vecino John, tambien mostraria su mas que evidente desconcierto, confusion, e intriga al ver quien era su mascota familiar.
John: Disculpen mi atrevimiento, pero si me lo permiten preguntar, ¿es esa su mascota?
Dijo a la vez que miraba a Balto, sin poder creer la clase de perro que tenian, y las condiciones en que parecian tenerlo.
Evelyn por su parte, tomo la pregunta como algo que ella ya se veia venir, y no vio nada de malo, en explicar y aclarar las cosas, tal y como ella estaba solicitando en ese momento.
Y asi lo hizo, Evelyn le hizo señas con la mano a Balto para que se acercara, de modo que pudiera mostrar con eso, que pese a sus inquietantes apariencias, el no era peligroso, Balto obedecio de inmediato y se acerco, colocandose luego al lado de Evelyn, quien por su parte, procedio a acariciar una y otra vez, la cabeza de Balto.
Evelyn: Vera, se que por su aspecto, usted puede pensar que nosotros no lo habremos estado cuidando de la mejor manera, y en verdad sentimos, que conozcan a nuestra mascota familiar en estas fachas, pero lo cierto, es que no hemos tenido mucho tiempo, desde que nos mudamos, ya que ha de saber, que nosotros venimos de bastante lejos, y de un lugar, donde ver a Balto, asi, solia ser lo normal, pero no se preocupe, ya someteremos a Balto a un riguroso cambio de imagen para encajar con su nuevo entorno.
Estas palabras desde luego que pusieron un poco nervioso a Balto, a partir del momento en que las escucho.
Thomas: No te preocupes Balto, no te vamos a hacer tampoco la gran cosa.
John: Por cierto, ¿de que raza es su perro?
Thomas: Bueno, contrario a lo que usted pueda pensar, el es en realidad, un husky, sin embargo, no es un husky de raza pura, sino que el tiene en su sangre genes de lobo.
John se quedo completamente boquiabierta al oir tales palabras, se sentia completamente incredulo, y no podia creer en lo absoluto, que esta pareja, llevara consigo, a una criatura, que el ciertamente, catalogaria como una bestia desalmada y de sangre fria, tenia toda la razon, esto era inaudito, pero eligio pensar aun asi, que quiza solo estaban bromeando ellos con lo de los genes de lobo.
John: Ya, por favor, no pueden estar hablando en serio.
Evelyn estaba confundida, al igual que Thomas.
Thomas: ¿A que se refiere?
John: Pues a que digan que su mascota, es mitad lobo, disculpenme, pero eso si no se los puedo creer.
Thomas: No le estamos mintiendo señor, lo conocimos desde que era un cachorro, y es mas que cierto, el es mitad lobo y mitad husky, ni mi esposa ni yo, tenemos razon alguna para querer mentirle.
John ahora si no supo que decir, de verdad seguia siendo incapaz de poder concebir lo que estas personas le estaban diciendo, y sorprendentemente, hubo alguien que pudo entender, comprender y asimilar mucho mejor que el lo que Thomas y Evelyn estaban diciendo, y esa persona, no era una persona, sino un perro, pues al final de cuentas, Lady no dudo ni un segundo en creer lo que estas personas decian, pues ella ni siquiera comprendia a que rayos se referian con eso, no entendia ni siquiera, o mas bien, no sabia, que rayos era un lobo, porque ella jamas en su vida, oyo hablar de ese tipo de criaturas, pero bueno, pronto se daria cuenta de que ya habia visto suficiente...
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