—En resumen.—Dijo Richie —¿calentaste a tu jefe, le prometiste una mamada y luego huiste?

—No hui. Me desmayé —se defendió Martin.

Llevaba un buen rato escondiéndose en el cuarto de su mejor amigo.

Richie vivía dentro del campus con un compañero un poco trastornado, razón por la que en esos momentos estaban sentados sobre un sillón cubierto de plástico de burbujas como si no hubiera nada extraño en eso. Vamos, no entendía por qué Richie se quedaba al lado de un tipo tan raro, pero luego de años Martin se había acostumbrado a las "peculiaridades" como Richie las llamaba, que hacían "especial e interesante" a su compañero.

Al menos el tipo era amable, Martin había ido a refugiarse allí luego de su última clase. Cielos, faltaba cerca de media hora para que tuviera que ir a ver a Jude Rose y aun se preguntaba cómo demonios haría para verlo a la cara después de la incómoda mañana que habían compartido. Ni hablar de los siguientes 3 meses que tenía por delante.

—Eres un desastre Martin—Dijo Richie soltando una de esas roncas y bajas carcajadas tan características de él antes de tomar el control remoto para cambiar el canal de las noticias a un documental de animales.

—no estás ayudando.—Se quejó Martin. Tomó uno de los almohadones cuadrados en color verde que decoraban el sofá y hundió su rostro en él para cubrir su mortificación.

—No pretendía hacerlo.—Richie se volteó a ver a su mejor amigo. Martin lucían

ridículamente nervioso. Se encogió de hombros y palmeó el sitio a su lado para que su amigo se acercara.— entonces la planta carnívora decidió dejarte en libertad por fin, eso es bueno viejo.

—yo no quería que me dejara en libertad ¡mira lo que hago con la libertad!

—¿Que tiene de malo intentar acostarse con alguien ?

—ese alguien podría ser mi padre

—pero dijiste que era sexy como y repito "un dios del infierno"

—lo es y también el tipo para el que tengo que trabajar los próximos meses

—¿y el problema es?

—me desmayé después de ofrecerle una mamada. Ya te lo dije. Y Patick, el pobre y buen Patrik, tu no lo conociste pero me daba la impresión de que es un buen tipo ¿que va a pensar de que me acueste con mi jefe el primer dia?

—no hiperventiles martin ¿que importa ese patrick? ¿Tambien te gusta?

—¿que? No. Tampoco me gusta jude Rose solo fue... Fue una mala noche.

—Tranquilo. A todos nos pasa.—Richie le dio una palmadita en la cabeza como si fuera un pequeño cachorro.Y sí, cualquiera podía tener una mala noche, martin lo aceptaba, pero joder, no todos tenían que trabajar durante los siguientes tres meses con la persona con la que habías compartido esa mala noche.

Eso definitivamente prometía ser malo.

Martin siguió lamentándose y revolcándose en su propia conmiseración hasta que la alarma en su móvil le advirtió que era hora de ponerse en marcha. Jesus, viendo a la pantalla de su teléfono, aún tenía de fondo una foto de David y él juntos, David rodeaba el cuello de Martin con sus brazos y tenía sus labios en la mejilla de su novio. Lucían tan enamorados como Martín había creído que estaban hasta hacía cosa de 24 hs atrás. Martín borró la foto y la cambió por uno de los fondos predeterminados antes de despedirse de Richie y su compañero de cuarto. De acuerdo, definitivamente nada podía salir peor de lo que ya lo había hecho por lo que sin pensarlo dos veces tomó a Madona y condujo hasta el edificio de departamentos donde estaba el piso de alquiler de Jude Rose.

Bien, Martin, Eres un adulto. Actúa como uno. Se dio animos antes de pasar las puertas acristaladas, saludó al hombre de seguridad y luego tomó el ascensor hasta el decimoquinto piso donde se alojaba su Jefe.

Cuando llegó, Patrick estaba al teléfono en medio de la sala, Jude Rose seguía sentado exactamente en la misma silla que lo había dejado esa mañana, lucía más cansado y huraño incluso, pudo notar que el hombre ni siquiera se había cambiado los pantalones de pijama.

Patrick cortó la llamada con un "seguro, tendremos una cena dentro de poco, lo veo pronto sr. Riker y organizaremos los detalles de la gala" Patrick guardó el movil en su bolsillo y se volteó a ver al recién llegado.

—Has vuelto.—Dijo y Martin podía jurar que vio sorpresa en sus ojos en ese momento. Estuvo a punto de decirle que claro que debía volver, su contrato así lo estipulaba pero el hombre pelirrojo volvió a interrumpirlo dirigiéndose esta vez Jude como si estuviera hablando con un cachorro difícil—De acuerdo, quedas con Martin a partir de ahora, volveré por la mañana. —Y cuando estuvo en la puerta añadió un.—Se bueno.

Jude respondió con un gruñido sin despegar los ojos del ordenador y como el día anterior Martín se encargó de rellenar su vaso con el "café especial" que Patrick le había indicado cómo preparar. 

***

Hola mis amores, retomé un poco esta historia que tenía abandonada, los amo.