Park SoHee

Una familia más acaba de salir de la pizzería, me dirijo a la mesa en la que estuvieron limpiándola y recogiendo los utensilios sucios dejándolos en mi bandeja. Afuera el sol brillaba en el cielo, no se sentía un excesivo calor, pero si podía percibirse un poco. Me dirijo a la cocina dejando los platos sucios en el fregador junto a otros más, hay una chica encargada de limpiarlos. Estoy un poco preocupada por JungKook, no sé nada de él desde la mañana antes de salir del departamento y una vez llegué aquí me entero que no ha llegado. Me inquieta, ¿Estará bien o salió algo mal? Quiero escribirle o llamarle, pero inconscientemente pienso que quizás lo estoy sofocando.

Lo cual es irónico cuando por la mañana le dije que no lo dejaría solo ni aunque eso quisiera.

— ¿Podemos hablar, So?

— No te disculpes.

— ¿Qué?

— Vas a disculparte por haberme hablado así, ¿Cierto? —volteo a verlo—No tienes que disculparte ni decirme nada, pero espero que sepas que no te dejaré solo incluso si lo quieres, no te dejaré solo porque me preocupa que caigas de nuevo en lo que ambos conocemos.

— No voy a caer...

— No te puedo creer, siempre corremos ese riesgo.

Respiro profundo parpadeando varias veces, me dirijo al baño de empleados encerrándome en uno de los cubículos, presiono la opción de llamar en mi teléfono, pero ni siquiera hace el intento de sonar, la operadora cae de inmediato. No quiero preocuparme de más, pero lo estoy haciendo, no me fío de SonWoo ni de su esposa, ¿Por qué JungKook no me escribe si prometió hacerlo?

— Respira, So—me obligo a hacerlo—Respira, él está bien, él estará bien.

...

Afuera se encuentra lloviznando, me preocupa que JungKook sigue sin llegar y sin llamarme o escribirme. Camino de un lado a otro en la sala, tengo deberes de la universidad que hacer, pero no logro enfocarme. Escucho la puerta, volteo hacia ella encontrando un JungKook algo mojado por la llovizna de afuera, deja el casco de la moto en una esquina, voy hacia él preguntando lo primero que pasa por mi cabeza.

— ¿Por qué no me escribiste? Te he llamado toda la tarde.

— ¿Enserio? —saca el móvil de su pantalón—Creo que no tenía mucha señal, ¿Ocurrió algo?

Evalúo su rostro, no parece que haya llorado, pero tampoco lo noto tranquilo. En resumen, no debe tener buenas noticias.

— Dímelo tú, ¿Cómo te sientes?

— Creo que...—se encoge de hombros—Esperaba escuchar algo así pero al mismo tiempo no.

— ¿Es muy malo?

— Es decepcionante, honestamente.

Acabo la distancia entre ambos abrazándolo, me rodea con sus brazos besando mi cabeza. No sé qué haya descubierto, pero voy a escucharlo sin quejas. Nos dirigimos a la cocina donde le sirvo un vaso con agua ya que él mismo lo pide, apoyo mis manos en el mesón escuchando atentamente lo que dirá.

— ¿Qué...?

— Tengo dos primos, se llaman Dami y Vernon—bebe un poco de agua—Esos tíos que creí que conocería están muertos.

— ¿Qué? —abro los ojos como platos—Espera, SonWoo dijo que eran siete...

— Mi padre era el menor, sus hermanos murieron por drogas o por deudas con drogadictos—vuelve a beber agua hasta dejar el vaso vacío—En resumen, mi familia paterna viene de una gran cadena de drogadictos y ladrones además de estafadores—me mira—Lamento que tengas un novio así.

Analizo unos minutos esa información sin entender del todo. Rodeo el mesón tomando sus manos al estar cerca.

— ¿De qué hablaste exactamente con tus primos? ¿Sólo ellos viven allí?

— De esos hermanos y hermanas que murieron quedan sus hijos, eso significa que Dami, SonWoo, Vernon y yo somos la generación que queda de la familia Jeon—sonríe tristemente acariciando mis manos.

— No significa que seas como tus tíos.

— Es triste que los cuatro hayamos tenido una deprimente infancia.

— Oye...

— Dami tuvo el mismo problema que yo con las drogas, su madre la invitó a probar desde niña y por muchos años creció con eso—respira profundo—Vernon está asistiendo a la universidad, sus padres lo maltrataron cuando niño creando algunos traumas—caminamos a la sala sentándonos en el sofá—Le costó socializar con las personas, pero ahora parece hacerlo bien—recuesta su cabeza hacia atrás.

— ¿Qué te dijo sobre SonWoo y su esposa?

Se calla unos segundos, parece analizar algo.

— Dijo que no me fiara mucho de él, ella y SonWoo no se llevan mucho, Vernon en cambio dijo que puede ser muy calculador—me mira—¿Quieres seguir conmigo después de eso?

— Dime que no acabas de preguntarme eso—bufo—¿Es broma? Hemos pasado muchas cosas para terminar por algo que ni siquiera es tu culpa. Escúchame, no voy a dejarte, no me importa el historial de tu familia, tú no eres así, JungKook.

— No voy a mentirte, me asusta que puedas salir afectada de nuevo.

— Saldría afectada si decidieras probar drogas de nuevo—indico. Tomo su rostro entre mis manos mirando sus ojos—No me importa si tu familia tuvo problemas con cosas ilegales, has podido superarte y nunca has sido malo conmigo—acaricio sus mejillas—Te amo por eso, ¿Entiendes?

— También te amo por darme una oportunidad.

Sonrío un poco depositando un corto beso en sus labios.

— Estuviste todo el día allí, ¿Qué más te dijo?

— Según Dami, los problemas con las adicciones comenzaron debido a nuestros abuelos y quizás más atrás—sonríe tristemente—Algo de nunca acabar, ya sabes.

— Al parecer tus primos y tú son los que quieren acabar esa cadena, ¿No es así?

— Anoche tuve un sueño, mi madre y yo estábamos en el parque, tenía siete años—dice con aire ausente—Recordé que le había dicho que quería un hermano para no sentirme solo cuando ella no esté, ¿Crees que ella sabía entonces sobre SonWoo?

— Tal vez.

— Cada vez que descubro algo sigo teniendo más preguntas—suspira restregando sus ojos—Voy a darme un baño, ha sido mucha información innecesaria sobre mis tíos locos por hoy.

— Tómalo con calma, no puedes saberlo todo en un segundo, ¿Volverás donde tus primos?

— Intercambié números con Dami nada más, si por alguna razón ves a SonWoo mantén distancia con él, desde que lo conocí tampoco me inspira confianza, en sus ojos se nota que me detesta.

— Está bien, ve a ducharte, te ayudará a dormir mejor, ¿Quieres que te prepare algo de cenar?

— No, no tengo hambre—se levanta—¿Estabas haciendo tarea? —señala mis libros en el comedor.

— Sí, debo adelantar algunos proyectos.

— ¿Necesitas ayuda?

— Estoy bien.

— De acuerdo.

JungKook camina hacia la habitación, cuando estoy sola borro lentamente mi sonrisa. Ese SonWoo y su esposa tampoco me inspiraron confianza, es evidente lo mucho que ese chico detesta a JungKook con la absurda idea de ser el favorito, él no sabe nada incluso cuando se le ha dicho la realidad.

El señor Jeon se obsesionó con la madre de JungKook, decía que era el amor de su vida, pero era un loco nada más. El deterioro tanto físico como mental de la señora Jeon era por ese hombre quien la consumió con toda su basura, el más afectado fue JungKook sin duda alguna, ¿Pero en qué momento ese matrimonio se vino abajo? ¿En qué momento esa pareja se volvió tóxica?

No quiero que JungKook se frustre tanto o se encierre en sí mismo, pero, aunque no quiera admitirlo, siente curiosidad por su padre tanto como por su madre.

"Como si quisiera saber quién es realmente"