---Shizuo---

Seguí preparando a mi amado mientras él se aferraba a las cobijas e intentaba suprimir sus gemidos con una expresión tan erótica.

-Ahh e-espera.

Lamí su miembro mientras metía mi tercer dedo en su entrada.

-S-Se siente extraño. –gimió.
-Prometo que te sentirás mejor.
-S-Shizuo.
-¿Sí?
-T-Te amo. –se sonrojo.

Sentí como mi corazón se aceleraba y mi miembro me pedía a gritos ser atendido.

-Parece que te gusta excitarme.
-¿Q-Qué?

Metí su miembro a mi boca y lo engullí por completo.

-Ahhh e-espera y-yo.

De un momento a otro se corrió en mi boca.

-Muy rápido.
-C-Cállate.

Me aparte un poco y me quité lo que faltaba de mi ropa.

Verlo ahí recostado con la respiración entrecortada hace que me excite por completo.

Coloque sus piernas alrededor de mi cintura y entré en él de una embestida.

-Ahhggg, -jadeo- e-espera.
-Tranquilo mi amor, -susurre- no me moveré hasta que te acostumbres.

Tome su mano y la besé mientras él me miraba con amor.

-No quiero lastimarte, quiero demostrarte mi amor.
-L-Lo sé. –susurro.

Después de unos minutos él asintió y lentamente comencé a moverme.

Lo sujete delicadamente, mis movimientos era lentos pero profundos, Izaya se aferraba a las cobijas mientras sonidos hermosos y excitantes salían de sus labios.

-S-Shizao t-tan profundo. –jadeo.
-¿Te gusta?
-Ahhh, s-sí.
-Te amo. –lo bese.

Recargue mis manos en el colchón y me pegue más a su cuerpo.

-Ahhh e-es extraño.
-¿Qué sientes?
-N-No lo diré.
-Me encanta tu sonrojo.
-B-Baka.

Me incline para besarlo apasionadamente.

Sus uñas se enterraban en mi espalda.

Ardí pero no me importaba.

El placer, el sentirlo, el estar unidos...

Todo es tan perfecto.

-Izaya, Izaya te amo.
-Y-Yo también.
-Eres mío, te amo.

Lo volví a besar y de un movimiento me senté en mi cama y él en mi regazo.

Lo volví a embestir y él se aferró a mi cuello.

-S-Shizuo.
-...
-M-Más.
-Te daré todo lo que quieras amor.

Lo tome de la cadera y comencé a moverlo de arriba hacia abajo mientras devoraba sus labios con mucha pasión.

-Ahhh, ahhhh S-Shizuo.

Él abrazo mi cabeza y yo lamí sus pezones.

Mordió su labio y volví a besarlo.

No puedo detenerme.

Cuando se trata de él, no quiero apartarme.

Quiero estar siempre así, conectado a él.

Es mío y no permitiré que lo lastimen.

-S-Shizuo ahí.
-¿Aquí? –le di una embestida.
-Ahhh sí.
-Creo que le di a tu punto bueno.
-C-Cállate.
-A la orden mi amor.

Seguí embistiéndolo con fuerza, acelerando el ritmo de cada embestida.

-M-Me vengo. –gimió.

Se corrí en nuestros vientres y yo al sentir la contracción de su interior me corrí en su interior.

Tome su mentón y lo bese. Se acurrucó en mi pecho y cayó dormido.

-Te amo Izaya, prometo cuidarte y protegerte con mi vida si es necesario.

---Nowaki---

Termine mi trabajo y me dirigí a la casa con algunos bocadillos que había comprado para mi hermoso Hiro-san.

Cuando estaba a punto de subirme a mi auto alguien toco mi hombro.

-Nowaki.
-¿Azusa?
-¿Cómo has estado?

No imaginaba volverlo a ver, después de ese encuentro que tuvimos cuando fui con Hiro-san a dar un paseo.

Mi exnovio, la persona que me engaño con mi mejor amigo.

De nuevo frente a mí, esto es tan molesto.

-Bien gracias. –respondí más por cortesía que por gusto.
-Me alegro. –sonrió.
-¿Qué haces aquí?
-Yo investigue donde trabajabas, quería verte.
-¿Para qué?
-Nowaki, estoy arrepentido.
-...
-Lamento lo que ocurrió.
-...
-Yo en verdad te amo.
-Por favor Azusa, deja eso quieres.
-Siempre te he amado, lo que ocurrió solo fue un desliz.
-Azusa...
-Nowaki te amo, prometo ser el mejor novio, te haré feliz, -se acercó a mí- yo quiero estar siempre contigo.
-Deja de molestarme.
-No puedo, -me abrazo- te amo.
-Azusa, me lastimaste mucho, realmente rompiste mi corazón, yo te amaba, eras mi todo pero, tu no sentías lo mismo.
-Nowaki...
-Pero... encontré a otra persona, -lo mire- quien me dio esperanzas, me dio un nuevo camino, ganas de seguir adelante, me enamore completamente de él y soy feliz a su lado.
-Yo...
-Él es mi vida entera, y quiero estar siempre con él, no importa si debo compartirlo, solo no quiero estar sin él.
-¿C-compartirlo?
-Eso es algo que no te importa, y sí ya terminaste mi amado me espera en casa.
-Nowaki espera. –tomo mi mano.

Él me abrazó y se acurruco en mis brazos.

Yo lo aparte con delicadeza y suspire.

-No lo hagas, -camine a mi auto- espero encuentres a la persona indicada y seas feliz con él.
-Yo solo quiero estar contigo.
-Lo siento pero no, yo solo lo amo a él.
-Nowaki, solo te pido una oportunidad yo...
-Por favor, no te humilles.
-Es que te amo, ¿Cómo no hacerlo?
-Ya no pienses en eso, busca a otra persona.

Me subí a mi auto y maneje hasta la casa.

Al llegar vi a Hiroki siendo mimado por Shinoda que no paraba de sonreír.

-¿De qué me perdí? –pregunte.
-Tenemos una buena noticia.
-¿De qué trata?

Mi Hiro-san se acercó a mí y me dio un beso.

-E-Estoy esperando un bebé.

---Shinobu---

Tsumori decidió tomarse unos días de descanso para cuidarnos mejor.

Más a parte contrato varios guardaespaldas para vigilar la casa.

Tiene miedo de que algo me pase o a nuestros bebés.

Quisiera poder decirle que estaré bien, que no se preocupe demasiado pero...

Solo sería engañarlo.

Y no quiero eso.

Además yo también me siento preocupado, no tanto por mí, sino por nuestros gemelos y Tsumori, no quiero que algo les pase.

Me muero si no están conmigo.

Salimos a dar un paseo con nuestros gemelos.

Los colocamos en una carriola doble que me regalo Misaki, y yo tome el brazo de mi esposo mientras caminábamos por el parque.

El clima era agradable.

Así que nuestros hijos están riendo, aunque Yurei se veía con más sueño y Chiaki no dejaba su chupón.

Los diferenciamos ya que Chiaki tiene el color de ojos más oscuro que los de Yurei.

Son tan lindos.

Aun no puedo creer que haya tenido dos niños.

Y ni recordar el parto.

Fue algo doloroso.

-Son tan hermosos.

Tsumori gruñó y me sujeto de la cintura.

-Kaoru-san, buenas tardes.
-Me alegro de verlo.
-¿Quién es su acompañante? –pregunto Tsumori.
-Él es Isaka Ryuuichirou mi pareja. –comento.
-Es un placer. Solo díganme Ryu. –hizo una reverencia.

Tsumori se relajó y suspiro.

-Yo soy Higurashi Tsumori y él es Higurashi Shinobu mi esposo.
-Es un gusto conocerlos.

Tanto Kaoru como Ryu miraron a nuestros hijos y los acariciaron, Tsumori me beso y junto nuestras frentes.

-Te amo. –susurro.
-Yo también. –sonreí.
-Bueno los dejamos, -comento Kaoru- me alegra que ya no haya rencores.
-Simplemente todo está mejor ahora, -comento Tsumori- hay que hacer las paces.
-Así es.

Se despidieron de nosotros y seguimos nuestro camino.

-¿Qué se siente ser el señor de Higurashi?
-Mmmm, no es la gran cosa. –bromee.
-¿Es así?
-Baka, -reí- soy tan feliz.
-Shinobu, te amo.
-No más que yo.

Me tomo del mentón con la intención de besarme pero escuchamos dos disparos.

Me separe de Tsumori y vi como los guardaespaldas que nos protegían caían al piso.

Tenían un disparo en la cabeza.

Tsumori me abrazo con fuerza.

-Que mal, no saben proteger. –se carcajeo.

Volteamos a ver a esa persona.

-Muy bien ahora me harán caso.

Ese hombre nos apuntó con su pistola

---Tsuna---

Estoy afuera de la casa de ese trio.

Tomo mi francotirador y miro adentro.

Los tres están e se lugar.

Soy tan perfecto al tiro al blanco.

¿A quién mataré primero?

Al doctor o al empresario.

O tal vez...

Si mato al castaño.

Nunca me ha gustado seguir órdenes...

Aunque...

Apunte hacía arriba, donde vi una cuna a lado de la ventana.

-Jojo esto sería interesante.