CAPITULO 47 Libertad.
---Hiroki---
Tan cerca y tan lejos de mi libertad, yo no quiero seguir con está tortura, me duele tanto, siento que pronto perderé la cabeza.
Si sigo con este encierro yo...
Me siento tan ansioso y desesperado, no puedo más.
-Hiroki.
-...
-Hemos llegado, -me abrió la puerta- ¿te sientes mal?
-N-No.
-¿Seguro?
-Solo quiero ir con el doctor.
-Entiendo.
Entramos al hospital y caminamos a la recepción.
-Vengo a una revisión para mi pareja.
-¿De? –pregunto la recepcionista.
-Mi esposo tiene un mes de embarazo y quiero que lo revisen.
-En este momento el doctor Ichigo está disponible, -comento- en el primer piso consultorio 3, como se trata de un embarazo solo el castaño puede pasar.
-¿Eh?
-Se le harán varias pruebas y solo debe estar el embarazado, no se preocupe que el doctor es especialista en embarazos masculinos.
-Gracias. –gruñó Kyo.
Caminamos hasta el elevador mientras me sujetaba del brazo y comenzaba a apretarme.
-A-Auch, m-me lastimas. –murmure.
-Más te vale que no hagas nada estúpido ¿entiendes?
-Y-Yo...
-EN cuanto acabe saldrás, no quiero que te tardes.
-K-Kyo duele mucho. –solloce.
-¿ENTENDISTE?
-S-Sí.
-Eso espero. –me empujo.
Abrace mi vientre tratando de encontrar consuelo, su mirada se suavizo un poco y suspiro.
-Lo siento Hiroki, es que entiéndeme, yo te amo mucho.
-Y-Yo también.
-Por favor, no me dejes.
Me abrazó tiernamente y beso mi frente.
-Te amo Hiroki, eres solo mío.
-...
-¿Y tú me amas?
-Sí. –susurre.
-NO TE ESCUCHE.
-Te amo Kyo.
-Hermoso.
Llegamos al piso y caminamos hasta la oficina.
-Estaré aquí afuera, así que no hagas nada estúpido.
-S-Sí.
Toque la puerta.
-Adelante.
Mire al doctor y él me sonrió.
Entré y cerré la puerta.
-Buenas tardes yo soy el doctor que te atenderá, mi nombre es Herbert.
-B-Buenas tardes. –susurre.
-Por favor tome asiento.
Camine hasta la silla y me senté con calma.
-¿Usted es?
-M-Mi nombre es Kamijou Hiroki. –murmure.
-¿Pasa algo?
-¿Eh? –lo mire.
-Se ve muy pálido, -se acercó a mí y me coloco su estetoscopio- por favor Hiroki-kun tómelo con calma, su corazón está latiendo desenfrenadamente.
-Y-Yo...
-Debo hacerle unos análisis para verificar que su bebé...
-Él está bien, -susurre- ya me hicieron análisis.
-Por favor confié en mí, seré su doctor en todo el proceso de su embarazo ¿Qué sucede?
Lo tome del brazo y me aferré a él.
-Ayúdeme por favor.
-¿Hiroki-kun?
-E-El hombre que me trajo él... h-ha abusado de mí, me tiene secuestrado por favor, le ruego que me ayude.
Él se sorprendió y sin poder evitarlo comencé a llorar tapando mi rostro para que no me viera.
Sentí como unos brazos me rodearon y abrí los ojos.
-D-Doctor.
-Tranquilo, no llores.
-P-Por favor.
-El bebé que esperas, ¿es producto de ese abuso sexual?
-S-Sí.
-Debo enviar un reporte. –se levantó.
-No se vaya, -me aferre a su brazo- no me deje por favor yo...
Él me miro a los ojos y me sonrió.
-No te voy a dejar, -me acurruco en su pecho- te voy a proteger, tengo que llamar a seguridad para que se lleven a ese hombre.
-Gracias, -solloce- gracias.
-Tranquilo Hiroki, -me limpió las lágrimas- serás libre lo prometo, ese hombre no te pondrá ni un dedo encima.
-Doctor.
-Solo dime Herbert.
Él alzo su teléfono y le dijo a la que le contesto que enviará un par de guardias y se llevarán al sujeto que estaba fuera de su oficina.
Sentí como mi corazón volvía a latir normalmente.
¿Soy libre? ¿En verdad estoy a salvo?
-Hiroki debo hacerte una pregunta.
-¿Sí?
-Tú... ¿Tú quieres tener al bebé?
-...
-Mira, a pesar de ser un doctor tú estás en tu derecho de acabar con el proceso de embarazo, nadie te va a criticar ni a...
-Quiero tenerlo. –lo mire.
-¿Huh?
-El bebé no tiene la culpa, -acaricie mi vientre- yo de verdad lo quiero.
-Tienes un gran corazón. –sonrió.
La puerta se abrió y por instinto abrace al doctor.
-Doctor Herbert. –comento un hombre uniformado.
-¿Sí?
-No encontramos al hombre que nos dijo.
-¡Qué! –exclame.
-La recepcionista nos lo describió pero... parece que se fue.
Me aferré al doctor y él acaricio mi espalda.
-¡BUSQUENLO POR TODO EL HOSPITAL SI ES NECESARIO!
-Si doctor.
Ambos guardias se fueron y Herbert me abrazó.
-Tranquilo aquí estoy yo, no voy a permitir que ese hombre que se te acerque.
-Doctor.
-Llámame Herbert. –sonrió.
-Hai.
---Shinobu---
El padre de Cecil nos llevó a la plaza para que compráramos algunos postres pero no sabía que de solo voltear a un auto me encontraría con un rostro que no podía olvidar.
Esa forma de mirar y esas expresiones solamente son de una persona.
-H-Hiroki...
El auto se puso en marcha y mire las placas.
El que estaba a su lado ¿era Ijuuin?
No sabía qué hacer, hasta que me encontré con Shinoda y le dije todo lo que paso.
Pero él simplemente me dijo que tenía que irse.
¿Qué está pasando?
¿Por qué nadie me dice nada?
¿Tsumori sabrá algo?
Sin poder evitarlo le marque a mi amado.
-Mi amor, ¿Cómo estás?
-Tsumori, -susurre- te voy a preguntar algo y quiero que me respondas con la verdad.
-¿Qué ocurre?
-¿Por qué Shinoda y Nowaki están aquí en Inglaterra? ¿Qué está pasando?
-Shinobu.
-Te lo ruego, dímelo.
-Hiroki había desaparecido, y fueron a buscarlo.
-¿Qué?
"Por eso vi a Hiroki en ese auto..."
¿Ijuuin lo rapto?
-I-Imposible.
-¿Shinobu?
-Lo siento, no es nada.
-Mi amor ¿puedo ayudarte en algo?
-Eso...
-¡Shinobu! Mira lo que compre.
-¿Esa voz es del idiota?
-No lo digas así, -comente- Cecil solo es un amigo.
-Pero...
-Tsumori.
-¿Sí?
-Te amo. –me sonroje.
-Y yo a ti mi vida.
-Y...
Cecil me arrebato mi celular.
-Por favor no llames a Shinobu, él ahora me pertenece y yo soy el único que puede hacerlo feliz, lo amo y está es mi declaración, no quiero que lo busques más, ¿entendiste?
-Cecil. –trate de quitarle mi celular.
-Ni se te ocurra Tsumori yo ya le confesé mi amor a Shinobu y soy quien más le conviene ¿entiendes? Así que me quedaré con él.
Colgó y aventó mi teléfono a la avenida
-Pero QUE RAYOS HACES. –grite.
-Lo hago por tu bien. –me miro.
-ERES UN IDIOTA. –le pegue en su pecho- TÚ NO ERES NADIE PARA HACER ESO.
Camine hacia la avenida pero alguien me jalo del brazo.
-Debes de tener cuidado, -comento el papá de Cecil- debes de fijarte del semáforo.
Los autos pasaban a gran velocidad, pero por mi enojo no me di cuenta, ya cuando el semáforo cambio de color mi celular estaba todo destruido.
Mire a Cecil y le voltee una bofetada.
-Pensé que eras mi amigo, que me apoyabas pero realmente me equivoque, -susurre- eres un egoísta.
Me tomo de mi cintura y me acerco más a él.
-¿Egoísmo dices? –me miro- Sí soy muy egoísta y posesivo, porque te amo, te amo Shinobu acaso ¡es difícil de entender?
-Fue un error venir, -lo mire- me voy.
-No. –me sujeto del brazo- Tú te quedas.
-Suéltame.
-No lo hare.
-No me hagas odiarte más.
Él lentamente me soltó.
-Lamento no corresponderte, pero no te amo, busca a alguien que lo haga, yo me iré de tu departamento.
-Shinobu...
-No es sano seguir así, por favor.
Camine hacía el departamento esperando encontrar un poco de paz.
¿Y ahora como me voy a comunicar con los demás?
No entiendo la actitud de Cecil, pero me causo un poco de miedo.
¿Fue un error venir aquí?
Debí enfrentarme como era debido.
Tsumori...
Espero me disculpes, a pesar de ser yo él que dijo que nos diéramos un tiempo... TE EXTRAÑO TANTO.
---Nowaki---
Shinoda se comunicó conmigo para decirme Shinobu había visto a Hiro-san en un auto gris, me dijo las placas y que seguía buscando el auto con unas placas en específico.
Él dijo que les comento a los investigadores para que los buscaran, así que nos pusimos de acuerdo para encontrarnos.
Espero que lo encontremos.
-Aquí Nowaki.
-Shinoda, ¿has sabido algo?
-No, aun no.
-Espero que...
Su celular comenzó a sonar y contesto.
-¿Sí?
Yo simplemente lo miraba tratando de escuchar lo que decía.
-¿Encontraron el auto? ¿Dónde?
-En un hospital, -alcancé a escuchar- no hay nadie en el auto, seguramente ambos bajaron.
-¿Qué hospital es?
-El que queda cerca de la carretera.
-Vamos para allá.
Ambos tomamos un taxi y nos subimos, le dije que nos llevara al hospital.
-Ruego porque Hiro-san se encuentre en ese lugar.
-Debe de estar, -comento- sí Shinobu dijo que estaba en el auto con ese disfraz tal vez lo llevo.
-Sí.
Al llegar al hospital entramos y ahí estaba Luka y sus detectives.
-¿Qué pasa? –pregunte.
-Hiroki está en el piso de arriba.
-¿Cómo? –nos sorprendimos.
-Andando.
Los tres subimos corriendo las escaleras porque el elevador tardaba en aparecer.
Al llegar nos dimos cuenta que dos guardias estaba frente a una puerta.
-¿Quiénes son ustedes?
-Déjenos pasar. –exclame- Debemos ver a Hiro-san.
-Pero...
La puerta lentamente se abrió lentamente y pude ver a mi hermoso castaño.
-Hiro-san / Hiroki.
-S-Shinoda, N-Nowaki. –murmuro y se desmayó.
Nos acercamos hacía él y lo sujetamos.
-¿Ustedes son? –pregunto un doctor.
-Conocidos. –murmuramos.
-No se preocupen, fue una gran impresión y en su estado...
-¿Qué estado?
-Hiroki-kun está embarazado.
---Ijuuin---
Me quede afuera esperando a que mi amado saliera de esa maldita habitación pero nada, me asome a los ventanales y pude darme cuenta que dos hombres revisaban mi auto.
"Mierda"
Estaba a punto de entrar hasta que escuche algo...
-¡Quiero que dos guardias vengan por el sujeto que está fuera de mi consultorio ahora!
"Maldición"
No tengo tiempo para llevarme a Hiroki, no me lo va a permitir, así que salí del hospital y tome el primer taxi que vi.
Debo planear algo para recuperar, y esta vez lo pagará caro...
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro