---Shinoda---

No pensé que Nowaki accediera a que ambos nos quedemos con Hiroki, pensé que diría que estaba loco y se pondría de malas.

Pero me equivoque...'

Él ha aceptado mi propuesta, y es algo bueno ya que ninguno se quedaría sin Hiroki, ambos lo amamos y queremos hacerlo feliz.

Aunque ahora me siento un poco preocupado.

Hiroki no contesta su celular.

Después de despedirnos acordamos llamarle a nuestro castaño para pedirle que regresara, que ya no tenía que pensar más y que regresarás.

Pero no me contestaba...

Al marcar me mencionaban que estaba fuera de servicio.

Es muy extraño.

Hiroki nunca apaga su celular, siempre lo tiene prendido.

¿Qué debería hacer?

Mi celular comenzó a sonar y respondí.

-¿Sí?
-Shinoda.
-¿Qué ocurre Nowaki?
-¿Hiro-san te ha contestado?
-No.
-Tampoco a mí, -suspiro- esto me huele muy mal.
-Debemos contactarnos con él. –comente.
-Sí, busquemos el número del hotel donde se está quedando.
-Bueno, entonces nos contactamos si tenemos información.
-Me parece bien.
-Me comunicaré con Shinobu y tú puedes revisar los hoteles cerca del lugar que dijo Hiro-san.
-Vale.

Colgué y me dirigí al departamento donde viven mis abuelos.

Al llegar mi hermanita me abrió y estaba usando su uniforme.

-Onii-chan, -me abrazo- ¿Cómo me veo?
-Muy linda.
-Me alegro que te guste, -sonrió- es el uniforme que me compraste.
-Te queda muy bien.
-Gracias.
-Hijo, -sonrió mi abuela y me beso la frente- pensé que hoy no vendrías.
-Digamos que termine temprano el trabajo.
-¿Pasa algo? –cuestiono mi abuelo.
-Estoy preocupado.
-¿Por tu prometido? –me miro mi hermanita.
-Sí, -suspire- no puedo comunicarme con él y para variar no sé en qué hotel se está hospedando.
-Tranquilo hijo, tal vez dejo su celular o se le apago.
-No lo sé abuelo, a Hiroki nunca le ha gustado dejar su celular, siempre me decía que era esencial cargar con él por si había una emergencia.
-Es extraño.

Saque mi laptop y empecé a buscar hoteles en Inglaterra.

-Te ayudaré hermanito.
-¿Ya acabaste tu tarea?
-Eh...
-Anda termina, yo seguiré buscando.
-Hai.

Mi amado Hiroki, espero que estés bien...

Me muero si te pasa algo.

***Flash-back***

-Shinoda, debes levantarte, llegaremos tarde al trabajo.
-No quiero ir. –lo sujete de la cintura.
-No seas flojo.
-Hay que quedarnos acostados o tal vez haciendo lo que más nos guste.
-B-Baka, -me miro- lo hicimos en la noche.
-Pero aún no estoy satisfecho.
-Pervertido.
-Te amo.

Me coloque encima de él y comencé a besarlo.

-Es enserio, debemos ir a trabajar.
-No quiero.
-Hay Shinoda, últimamente te estas volviendo flojo.
-Solo quiero estar a cada instante contigo.
-Sí todo el día estamos juntos.
-Pero no a toda hora hacemos el amor, o ¿sí?
-¿Solo piensas en eso?
-Un poco. –reí.
-Shinoda.
-¿Sí?
-Quiero estar siempre contigo.
-Deseo concedido.

***Fin del flash-back***

A pesar de haber estado juntos como pareja, estoy dispuesto a compartirte, a que seas de los dos siempre y cuando lo aceptes.

Sé qué haremos nuevos recuerdos, así que espera un poco amor.

Debo seguir buscando...

---Ijuuin---

Tan esplendido y solamente mío...

-No te dejaré ir.

Comencé a lamer sus pezones mientras acariciaba su miembro, los suspiros que salen por sus labios solo me hacen excitar más de lo que estoy.

Tome una soga y amarre sus manos en la cabecera de la cama.

-Son precauciones, -comente- no quiero que te lastimes.

Empecé a besar todo su torso desnudo, lamiendo cada parte de él y dejando mis marcas en su cuello para que todos sepan que tiene dueño.

-Hiroki no sabes cuánto te amo.

Bese sus piernas y baje hasta su ingle y deje una pequeña marca, luego tome el miembro de mi castaño y lo lamí.

-Ahhh. –un gemido salió de sus labios.
-Suena tan bien, -sonreí- más, quiero escucharte más.

Me levante y camine hacía mi mueble tomando la botella de lubricante y lo vacié en mis dedos. Me coloque con mi amado y metí dos de golpe.

-Ahhhhh. –jadeo.
-Ya debes estar acostumbrado a esto.

Me siento tan irritado de saber que mi hermano probo lo que me ha pertenecido por años.

Lamí su miembro y luego metí otro dedo.

-Creo que ya estás listo.

Chupe su miembro hasta que se corrió en mi boca.

-Y aun no despiertas, -sonreí- pero si lo sientes.

Me quite mi ropa y bese los labios de mi amado.

-Mierda sí que estoy muy duro, nee Hiroki, -lo mire- ¿Me dejas meterlo?

Coloque sus piernas alrededor de mi cintura y entre en él de una embestida.

-Agggg. –se quejó mi amado.
-No me aprietes tanto Hiroki, puedo lastimarte.
-D-Duele. –gimió.
-Pronto te acostumbraras.

Poco a poco empezó a abrir los ojos.

-Ya te habías tardado en despertar.

Él abrió sus ojos y su cara reflejaba pánico.

-¿Q-Qué está pasando? –intento moverse- Ahhgg d-duele.
-Tranquilo Hiroki, quiero hacerlo bien.
-DÉJAME IR, SUELTAME.

Intento moverse pero se dio cuenta que sus manos estaban amarradas.

-S-Sácalo.
-No lo haré. –me comencé a mover.
-Agghhh b-basta. –sollozo.
-No mi amor, no llores, -me acerque a sus labios- solo quiero que sientas placer y seas feliz conmigo.
-P-Por favor, d-déjame.

Que cuerpo tan seductor.

Que hermoso...

Mío solo mío...

Como pude lo voltee y separe un poco sus piernas y volví a embestirlo.

-B-Basta. –jadeo.
-Tan bueno y perfecto, quiero más...
-D-Duele.
-Hiroki quiero correrme dentro de ti una y otra vez.
-N-No.

Separe sus nalgas para poder profundizar mis embestidas.

-Agggg p-para.
-Mierda, me voy a correr.
-S-Shinoda, N-Nowaki. –sollozo.
-NO LOS MENCIONES. –grite y le di una embestida con fuerza.
-YA. –grito.

Lo comencé a masturbar y morder su cuello.

Mi amado se corrió en mis manos y yo al sentir la contracción de su interior me corrí dentro de él.

-Ah, tan placentero.

Mi castaño seguía llorando y tome su mentón para lamer sus mejillas.

-¿Por qué?
-Porque te amo.
-Eso no es amor.
-Te demostraré que podemos ser feliz.
-D-Déjame ir. –solloce.
-Mi lindo Hiroki estas hermoso, te ve sexy cuando estás agotado por tener una sesión de sexo.

Empezó a llorar fuertemente mientras besaba su espalda.

-Te irás acostumbrando.

---Shinobu---

Cuando Tsumori se fue recordé que debía ir a la biblioteca a sacar un libro para realizar mi trabajo final.

Salí de mi casa y tome un taxi para llegar más rápido. Mi celular comenzó a sonar y conteste.

-¿Sí?
-Hola Shinobu.
-¿Qué ocurre Nowaki?
-Este, ¿sabes en donde se está hospedando Hiroki?
-Hummm, algo del gran prix, algo así decía.
-¿Enserio?
-Sí, ¿ocurre algo?
-Es que Shinoda y yo queremos que regrese.
-¿Eh?
-Llegamos a una solución y queremos hablar con él.
-¿Ya le marcaron a su celular?
-Sí, pero está fuera de servicio.
-De seguro está apagado o se le descargo.
-Eso espero.
-Mi hermanito debe de estar bien.

Seguimos charlando un poco más y colgué para que siguiera buscando.

Baje del taxi y sentí unos brazos rodearme.

-Kaoru no hagas...
-¿Quién es Kaoru?

Sentí mi piel de gallina y lentamente me aleje de él y lo mire.

-T-Tú...
-¿Me extrañaste?
-...
-NO sabes cuánto te extrañe, -acaricio mi mejilla- me alegro estar de nuevo a tu lado.