CAPITULO 27 Modelos.
---Shinobu---
Me sorprendí tanto que Tsumori me abrazara de la cintura tan posesivamente, el chico que miraba a mi amigo fijamente era atractivo, incluso pude notar los celos de mi cuñado que no dejaba de retarlo con la mirada.
-Mi nombre es Luka Crosszeria soy un pintor americano. –se presentó ese hombre.
-Mucho gusto, -sonreí- mi nombre es Shinobu y...
-Yo soy su pareja Tsumori. –comento celoso mi novio.
-Yo soy Nowaki y él es MI NOVIO Hiroki. –dijo mi cuñado abrazando fuertemente de la cintura a mi hermanito.
-Encantado de conocerlos. –hizo una reverencia Luka.
En ningún momento Luka le quito la mirada de encima a mi hermanito, tenía un brillo en los ojos lo cual parecía como si estuviera impregnado de mi hermano.
-Hace un rato, -lo mire- ¿hablaste en inglés?
-¿Te diste cuenta? –sonrió.
-Sí.
-Solo dije que había encontrado a la musa de mi inspiración.
-Oh.
-Bueno nosotros nos vamos a comer, -comento Nowaki- con permiso.
-Espero verlos de nuevo. –hizo una reverencia el pintor.
Los cuatro caminamos hasta el comedor, nos sentamos en una mesa disponible.
-Ese hombre no dejaba de ver a mi amado. –comento Nowaki.
-No es verdad Nowaki. –se sonrojo mi hermanito.
-No me gusta cómo te comen con la mirada. –se quejó.
-Exageras un poco cuñado. –reí.
-Ey que tú también estabas sociabilizando mucho con él. –me miro mi novio.
-Tsumori, solo quería ser cortes.
-Mmm.
-Par de celosos. –reí junto con mi hermano.
Terminamos de comer y nos fuimos a la cubierta. Sonreí y mire a todos porque se me había ocurrido una idea.
-Juguemos. –comente.
-¿A qué? –pregunto Nowaki.
-A las escondidas.
-Interesante. –sonrió Tsumori.
-Así es, -comente- Hiroki y yo nos escondemos y ustedes nos buscaran.
-¿Qué ganamos nosotros?
-Mmmm. –pensó mi hermanito.
-Ya sé, -los mire- si nos encuentran antes de las 7 de la tarde haremos lo que ustedes quieran.
-¡Shinobu! –se sonrojo mi hermanito.
-Y si no nos encuentran, ustedes harán lo que nosotros queramos.
-Esa oferta es muy tentadora. –sonrió Tsumori.
-A mí me agrada, -comento Nowaki- ¿Qué opinas Hiro-san?
Mi hermanito inflo sus mejillas y asintió.
-Acepto.
-Bueno, nosotros nos iremos a esconder, en cuanto el reloj marque las 4:30 empezaran a buscarnos.
-Está bien.
Tome la mano de mi hermanito y nos echamos a correr para buscar un escondite en el cual nadie pudiera encontrarnos.
-Shinobu ¿Por qué les prometiste eso?
-Ni que fueran pervertidos. –me quede pensando- oh oh...
-Ahora tendremos que ganar. –comento.
-Sí.
Seguimos buscando un escondite hasta que nos encontramos con el pintor.
-Hola de nuevo.
-Crosszeria-san. –murmuro Hiroki.
-Por favor solo díganme Luka.
-Así será. –sonrió mi amigo.
-¿Pasa algo? Se ven ansiosos.
-Jugamos a las escondidas.
-¿Enserio?
-Sí, -suspire- lamento mucho pero debemos encontrar...
-Vengan conmigo, los ayudaré a esconderse.
-¿Eh?
-Así es, -sonrió- además me gustaría pintarlos.
-¿Cómo?
-¿Pueden ser mis modelos?
Mire a mi hermano y luego al reloj.
-Aceptamos. –suspire- No tenemos tiempo hermanito.
-Está bien.
-Por favor, síganme. –hizo una reverencia.
Caminamos tras él y nos llevó a su habitación donde había varios cuadros y lienzos por toda la habitación.
-Increíble...
---Shinoda---
Después de hablar con mis abuelos decidí llevármelos al departamento que tengo, uno el cual utilizo para almacenar las cosas que voy metiendo poco a poco a la casa que tengo con mi amado Hiroki.
-Waaaa, -se sorprendió mi hermanita- es muy grande.
-Gracias por lo que haces por nosotros.
-No tienes que agradecer abuela. –bese su frente.
-Nosotros tres nos quedaremos en una habitación y tú...
-Una es para ustedes y otra para Samanta.
-¿Dónde dormirás tú? –pregunto mi hermanita.
-Yo dormiré en mi casa.
-¿Tienes una casa? –pregunto asombrada- Vaya que eres millonario.
-Jejeje, no tanto, -reí- pero yo vivo en una casa la cual quiero compartir con mi pareja.
-¿Tienes novia? –pregunto mi hermanita.
-Tengo un prometido, -sonreí recordando cuando le di el anillo a Hiroki- es él.
Le mostré mi cartera donde tenía una foto con mi amado Hiroki.
-Es muy lindo. –sonrió.
-Lo es.
-¿Dónde está?
-Samanta, deja descansar un poco a tu hermano, -comento mi abuelo- además ya nos lo conto, ¿no recuerdas?
-Es cierto. –rio- Pero quiero escucharlo de nuevo.
-Él ahora no me recuerda, -sonreí a medias- perdió la memoria igual que yo.
-Lo siento tanto hermanito.
-No tienes la culpa, -revolví su cabello- solo espero que me recuerde pronto.
-Estoy segura que así será.
-Hijo, gracias por prestarnos este departamento.
-No es prestado, -los mire- es de ustedes, y no se preocupen por los gastos, van por mi cuenta, incluso le pedí a un amigo que inscribiera a Samanta en un colegio cercano, para que siga estudiando.
-Gracias hijo. –sollozo mi abuela- A pesar de que te ocultamos la verdad, tú...
-Son mis abuelos y los adoro tanto, siempre los voy a amar, al igual a ti hermanita.
Ellos me abrazaron.
-¿No has visto a Mayte? –pregunto mi hermanita.
-No quiero saber nada de esa mujer. –comente.
-¿Qué ocurrió Hijo? –pregunto mi abuelo.
-Ella sabía quién era yo realmente y me lo oculto todo.
-Nunca imagine eso de Mayte. –comento mi abuela.
-Ni yo, pero, -suspire- lo que importa ahora es que todo vuelva a la normalidad.
-Gracias por todo Onii-chan.
-Bueno los dejo descansar, iré a mi casa.
Mis abuelos me abrazaron y también mi hermana.
Salí del departamento y me dirigí a mi auto encontrándome con aquella mujer.
-Hola.
-¿Qué quieres? –pregunte fríamente.
-Necesito hablar contigo.
-Yo no, quítate de mi camino.
-Por favor Shinoda, te amo.
-Vete y desaparece de mi vida.
-Por favor lo siento mucho, yo lo hice porque te amo, eres lo más importante para mí, no podía dejar que Hiroki se quedara contigo.
-No me interesa nada de lo que dices.
-Shinoda, por favor.
-Con permiso.
La aparte de mi auto y me subí.
-No me dejes. –se quejó- Por favor.
-Yo no te conozco, no puedo permitir que alguien dañe a lo que más amo, jamás lo permitiré y tú no eres nada ni nadie para mí...
-Shinoda. –sollozo.
Ella se apartó de mi auto y yo maneje hasta mi casa.
Al llegar a mi casa me dirigí a la sala y saque mi celular. No pude aguantar más y le llame a la razón de mí existir.
-¿Sí?
-Hiroki. –susurre.
-M-Mark. –murmuro.
-Me alegra escuchar tu voz, -sonreí- no sabes cuánto te he echado de manos.
-Yo también susurro.
-¿Qué tal tus vacaciones?
-Muy bien, me encantan.
-Me alegro mucho, -suspire- ¿Cuándo vuelven?
-Tal vez dentro de dos semanas.
-Estaré esperándote, -volví a sonreír- tengo muchas cosas que decirte.
-Eso...
-Por favor, -susurre- no dejes de pensar en mí.
Estoy seguro que mi niño se sonrojo, seguimos charlando de su viaje y nos despedimos.
"No puedo esperar a tenerlo de nuevo en mis brazos y decirle cuanto lo amo, contarle la verdad y recuperar su memoria..."
---Hiroki---
La imaginación de mi hermano no tiene límites, no puedo creer aunque estemos jugando a las escondidas con nuestras parejas, y más aún que el premio es que hagan lo que nosotros queramos, o al contrario, hacer lo que ellos quieran.
Afortunadamente nos encontramos con el pintor el cual nos ayudó a escondernos, es muy bueno, nos pidió ser sus modelos y aceptamos.
-Gracias, -sonrió- me hacía falta inspiración.
-No hay de qué. –comente.
-Primero los dibujare con a lápiz y luego empezaré a colorear.
Afortunadamente aun nuestros amados no nos han encontrado, Luka dibujo primero a mi hermanito.
Es un gran pintor, nunca había visto una técnica como esa al pintar.
Aunque no me dejo ver como daba los últimos detalles...
Después me dibujo a mí, me dijo que no me moviera mucho.
-Esa expresión es muy linda. –comento.
-Q-Que dices. –me sonroje.
-Lindo.
-Así se empieza. –susurro Shinobu.
Sentí mis mejillas arder y me voltee.
Cuando termino de dibujar nos pidió que esperáramos a que terminara de dibujar.
-Solo falta una hora para que termine el juego. –comento Shinobu.
-Y vamos ganando. –sonreí.
-Son muy lindos, -sonrió Luka- he terminado.
Ambos caminamos a su lado y miramos la primera pintura donde estaba mi hermanito.
-¿Soy yo? –se sorprendió mi hermanito.
-Te quedo grandiosa. –me sorprendí.
-Gracias. –sonrió- Aunque la que más me gusta es...
En la otra pintura estaba yo, me sorprendí del trabajo que había hecho.
-Sin duda alguna cayó bajo tus encantos. –murmuro mi hermanito
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro