La comida transcurrió en calma, notando que los hijos de Sinclair, trataban a la pequeña como una hermana menor y que esta los obedecía sin muchos problemas. Eso sí, no dejaba de mirar en mi dirección y de vez en cuando preguntarme por su padre. Lo hizo un par de veces y era como si de alguna manera escuchar de mi parte que "Haría lo posible para traerlo de vuelta" le ayudara.

Jade Dewand o Benally pues según los registros el último año el hombre se dedicó a quitar el apellido paterno y adquirir él de su madre. Se veía terriblemente, con rastros de delgadez y agotamiento, daba la impresión que se desplomaría en cualquier momento. Solo deseaba que su esposo apareciera y que la búsqueda que Carlos y Marcus habían iniciado esa noche tuviera sus frutos.

Una vez acabamos y tras hablar un rato, decido ir a lo que fui realmente, averiguar quien fue la persona que la niña vio o confirmarlo.

—Por aquí —me indica Sinclair y me lleva al jardín.

—Gracias, si desean pueden quedarse —le digo a la madre, quien no parece conforme con dejar a la niña sola.

—No me lo tome a mal...

—Tengo hijas señora, le aseguro que se cómo se siente —sonríe con tristeza y se ubica al lado de su hija. —April ¿Podrías decirme que viste esta mañana?

—Mami me dijo que íbamos a buscar a Sham y me mandó a cambiar —Inicia diciendo mirándome fijamente —quería ir rápido, porque Sham está en problemas, Sasha me lo dijo...

—Su muñeca —aclara su madre al ver mi rostro confundido y a la niña abrazar a su juguete.

—Vamos al momento en que viste a esa persona en la ventana ¿Podrías decirme quién es? —Mira a su muñeca y luego a mí, por último, a su madre y luego asiente.

—Sí, fue el señor que le quitamos la billetera ¿Recuerdas mami? Le entregamos a Sham y se enojó —la inocencia de la niñez, pienso al ver el rostro de su madre tornarse pálido y mirarme asustada.

—No necesito detalles, a no ser que eso tenga que ver con el caso —niega asustada y sonrió —en ese caso, dígame usted ¿Quién es?

—¿Podrías ir con tus primos cariño? —la niña asiente y me extiende la mano para despedirse.

—Nos vemos April, cuídate — sale rumbo al interior de la casa.

La observo irse y mirar antes de entrar del todo en dirección a su madre. El rostro de la niña es el vivo retrato de su madre, de su padre no hay absolutamente nada. En toda la cena y no dejaba de ver a su madre, quien no probó mucho la comida y se dedicó a jugar con ella.

—La escucho —le digo —antes que nada, sepa que mi investigación es solo para descubrir quién mató a David e hizo explotar ese edificio, lo demás carece de importancia.

—Bien...

Me cuenta una historia que me cuesta mucho entender, aunque no es del todo descabellada, no en este caso que cada vez tiene menos sentido. Conoció primero a Roy, salió con el varias veces y éste se hizo pasar por Shark. Llegó al país de vacaciones y lo conoció en una feria.

Ante mi rostro de desconcierto, entró a la casa y regresó con unas fotos que me mostró, pude tonar la cicatriz debajo de sus parpados y en uno de sus brazos, ello indicaba que hasta ahora la mujer decia la verdad. Una vez sus vacaciones acabaron cada quien regresó a su lugar, no compartieron fotos o algo para verse, sin embargo, le gustó el país y regresó.

Se encontró por casualidad al verdadero Shark en una estación de policía. Se acercó a él e intentó que la recordara, pero le fue imposible, el hombre alegaba que no la conocía.

—Le cree la duda al saber tanto de él, así que me invitó a un café —sonríe con nostalgia y pasa una mano por su vientre —tras demostrarle que en efecto yo lo conocía, estaba la duda que él a mí no.

—¿Le mostró la foto? —asiente y miro las fotografías —¿Cuando pasó esto?

—La foto son de hace siete años —responde —regresé meses después, y un año más tarde un descuido de ambos nos hizo unir. Nuestra relación no era del todo sería, April nos unió.

—¿Por qué volvió a ver a Roy?

—Descubrió que yo vivía en el país, me buscó y supo que andaba con Shark. Se vengó de mi rechazo al decirle que él bebe que esperaba era suyo.

Cómo era de esperarse el hombre le creyó, se alejó de ella, por su parte ella buscó empleo y cada quien se fue por su lado, supo que la niña tenía que nacer para que le creyera, por lo que quiso esperar.

Por mucho tiempo Roy se dedicó a acosarla, pidiéndole información sobre su ex pareja. Eso me recuerda a lo dicho por la doctora, ella estaba casada con Roy, pero los registros de matrimonio con Dewand son originales, yo los había constatado.

—La niña nació y el siguió acosando, cuando April empezó a caminar y a hablar busqué a su padre. Le dije que podía hacerse una prueba de paternidad, la niña se conectó con él instantáneamente. —en todo el relato no me miraba y solo veía a su niña que jugaba en la sala. —me instaló en el apartamento de al lado y no quiso estar conmigo. Supo que yo veía a Shark o que él me acosaba, pero no me creyó... Otra vez.

—¿Le enseñó a la niña a robar? —le pregunto y ella baja el rostro.

—Tenía problemas económicos muchos y no tenía con que comer. La niña llama la atención de todos...cuándo su padre se enteró se enojó muchísimo. Ya en ese instante vivíamos con él, porque se enteró que el casero pedía favores para no echarme...

—Klain me contó, pero ¿Robar? Es una niña, eso es explotación y de ser pillada pudo perder a su hija. —asiente y baja el rostro —¿Era su padre porque no le ayudaba?

—El jamás supo realmente mi situación económica —confiesa—no quería que creyera que me acerqué a él por dinero.

Se enteraron que era por culpa Roy las llegadas a la estación, no sólo se hacía pasar por él, delinquía con su nombre y su aspecto. La muerte de su familia fue el inicio, pero no contaron con que Sinclair lograría ayudarle a salir moviendo sus influencias.

—Solo había una manera de él descubrir que se traía entre manos —dice —aprovechar el físico que Roy insistía en usar de Shark, para saber que planeaba.

Quería que él pudiera usar sus documentos, pero sólo logró que se enojara con ella, al descubrir que ella usó a la niña para robar, no le habló en días. Y la obligó a tirar la billetera minutos después y le exigió no volver a usar a la niña de esa manera o exponerla.

—¿Cómo logró hacerse pasar por él, sin esos documentos?

—Alguien dentro de la iglesia le ayudó —confiesa —ya hablaba con Paola o con algunos miembros de esa iglesia, porque Mont le había presentado a la hija de ese hombre. Solía verse con algunos de ellos y se hizo muy amigo de personas dentro de la iglesia y ex miembros. Lo único que sé agente, es que eso no me lo dijo, no lo tiene escrito o documentado. La persona que ayudó a mi esposo con los documentos, para acercarse al mexicano y colombiano, solo Shark lo sabe.

Un hombre inteligente, pienso al levantarme y ayudar a la mujer a hacerlo, si no escribió o documento algo sobre las o la persona que lo ayudó con eso, era porque corrían peligro. Llevo a la señora dentro de la casa, me despido de la familia Sinclair y de April.

—¡Miente! —digo una vez dentro del auto —aun no sé porque lo hace, pero ¡Miente! —sigo diciendo mirando la casa y encendiendo el vehículo.

En minutos estoy en el tráfico de ocho de la noche, intenso y estresante como suele ocurrir. Muchas personas saliendo del trabajo, otras entrenando a esa hora. Con todo el problema en este caso, he olvidado los míos, es decir los de mi familia. Los papeles de divorcio que aún no he entregado, la custodia de mis hijos... definitivamente deseo que estén a mi lado. El vehículo de Kya a las afueras de la casa de mis padres, me recuerda todo lo que tengo pendiente.

Mis tres hijos y yo vivimos con mis padres, es un lugar con excelente seguridad y Kya a estado de acuerdo. Lo único que ha pedido es que pueda verlos siempre que pueda, y no pude negarme. Aunque yo si he evitado verla o estar cerca de ella, desde la vez que recibió el mensaje y la hicieron salir de casa.

—¡Papá! —Anderson mi hijo menor y único barón corre había mi al escuchar las llaves de la cerradura.

—Hola campeón —le sigo abrazándolo —¿Te portaste bien?

Sonríe divertido y sé que hace su mayor esfuerzo, pero con diez años tiene una energía que es difícil que sus abuelos le sigan el ritmo. Evito mirar a mi ex esposa, pese a sentir su mirada fija en mí, Julissa y Shainia bajan en ese instante.

—¿Por qué tan temprano papi? —Shania de 16 años me mira con su ceja rubia alzada, es ironía, pero ya estoy acostumbrado.

—No moleste a mi padre, él está ocupado atrapando a los que mataron al señor —Julissa avanza hacia mí y me abraza junto con su hermano que ríe divertido —es broma papá —murmura en mi oído y solo entonces sonrió.

—¿Ya cenaste?

—Si mamá, iré a dormir mañana tengo un día difícil —respondo alejándome de mi hijo.

—Chuck, tenemos que hablar...

—Si es por el divorcio, está firmado Kya... Solo no he tenido tiempo de entregarlo —me excuso.

—No tiene que ver con eso. —responde y solo entonces la miro, nuestras hijas están abrazadas a ella. Detallándola un poco descubro que no está pasando su mejor momento. —me sancionaron, congelaron mis cuentas, mis propiedades. Todo absolutamente todo está siendo revisado....

—¿Qué hiciste? —es lo único que se me viene a la mente.

Elimino distancia la tomo por un brazo y la obligo a seguirme, entro al estudio de mi padre y cierro la puerta tras nosotros. Camina de un lado a otro e intento no desesperarme por cada ir y venir suyo. Por último y dado que ya estoy por perder la paciencia, porque he tenido un día de mierda y ella ha logrado lo impensable... Que mis niveles de estrés lleguen a un nivel peligroso.

—¡Basta! —ordenó tomándola por los hombros y obligándola a verme —¿Qué sucedió? ¿Qué hiciste Kya...?

—Jamás creí en las estupideces de esa religión, tú fuiste retirado... Yo no —empieza a decir.

De pronto su piel despide mucho calor y su contacto quema mi mano. Retrocedo tambaleante, y mis ojos parecen que saldrán de sus órbitas. Escucharla narrar como rogó que yo fuera retirado me afecta, ambos dentro eran poco creíble y si algo sucedía nuestros hijos quedarían sin padres. Sus superiores exigieron que todo tenía que verse real y yo jamás tenía que sospechar. Conocían que el contacto entre los narcotraficantes era O'Higgins, solo que no encontraban la forma de ir tras los dos grandes.

Apoyo todo mi trasero en el escritorio y la realidad me golpea, ella fue la que ayudó a Dewand. Implicó a un civil, que en estos momentos estaba desaparecido, no sigue hablando y no estoy seguro de querer escuchar el resto de su confesión.

—¿Por qué me lo ocultaste? —reprocho.

—Fuiste traslado hasta acá y estas en buen lugar...

—No fue lo que pregunté Kya...

—No me dieron muchas opciones Chuck y confiesa que estas bien —dice y recuerdo el Cd.

—Ese papel que recibiste y el CD ¿Fue parte del plan? — empieza a llorar y eso me desespera aún más.

Tras una pausa lo niega, por eso se asustó, creía que había sido descubierta y ello significaría que nuestros hijos corrían peligro.

—Me dijeron que era bueno y que no lo dejara ir —dice — Shark, fue fantástico, no notaron el cambio... para nada, el cartel jamás sospechó. Nos ayudó a con audios, fotos, videos, dirección de embarque, etc. —dice —después de eso se quiso retirar, llamé a mis superiores y conté lo ocurrido. Me dijeron que le diera lo que quisiera, la muerte de David no fue una sorpresa, estaba dentro de lo acordado. Lo que no estaba en el plan fue esa explosión.

—¿Estás diciendo que el mató a David? —preguntó incrédulo y su silencio es la mejor repuesta —¿Por eso te están investigando? —vuelve a negar y suelto el aire.

—Shark Dewand no lo mató, pero si ayudó a que otro lo hiciera. Dejo todo para que Roy parezca culpable. —habla al fin —las investigaciones llevaran a ese punto, él quiso suicidarse al acabar todo. Lo impedí de la manera que creí buena, alguien me llamó y me contó lo que el planeaba hacer y que su mujer estaba en embarazo.

Siguiendo a Shark, se dio cuenta que un vehículo lo seguía y supo que era Roy, quien dejó de seguirlo tiempo después, por lo que se relajó. Llegó hasta un callejón sin salida y entró a un edificio. Llegó justo en el instante en que él le quitaba el seguro a su revólver y llevaba el objeto a su sien. Ella sabía que su esposa esperaba bebé y le había tomado cariño.

—No podía abandonarlo, mi matrimonio estaba perdido, pero el suyo no —sigue diciendo y se sorbe la nariz —dijo que haría lo que le dijeron su esposa y su amigo Klain, le habían planeado...se fue y prometió no hacer algo estúpido, aseguró tener algo por lo que vivir.

—¿Quien más sabe de esto? —pregunto —¡Habla! — levanto la vos y ella salta espantada ante mi grito —¡Era tu maldito esposo! Tenía todo el puto derecho de saber lo que mi mujer iba a hacer. Yo no daba un paso sin decírtelo, Kya ¿Qué mierda hiciste? —he perdido el control, destruyeron mi hogar.

Mi vida no ví a mis hijos en años, salvo en las navidades o en temporadas. David Gales lo alejó de mí, al no querer pertenecer a su iglesia. Ellos no pueden jugar con la vida de los demás, no son menos crueles que David, en el afán de obtener lo que quieren pisotean a quien sea.

—Mis superiores lo saben Chuck, en este momento un grupo de fuerzas especiales están en Colombia y otro en México. En la mañana te despertaras con la noticia que un infiltrado de antinarcóticos, ayudó a capturar a los dos capos más buscados... Pero tú y yo sabemos quién lo hizo. —se quita la chaqueta y la tira con violencia en el suelo, la placa cae a sus pies y le da un puntapié alejándola de su vista.

En este momento mi vida era una mierda, no sabía si amaba a mi esposa. Era poco probable que ella y yo pudiéramos arreglar este matrimonio, no después de tanto tiempo separados. Recuerdo el CD que retiró Lawrence, que ocultaran el hallazgo de esos cadáveres. Querían saber si era Dewand, antes que nada...

—¿Por qué me dices esto? Sabes que no puedo hacer nada...

Me alejo de ella al ver que se acerca a mí, necesito tiempo para procesar todo esto. Ella me ocultó algo que nos afectaba a todos como pareja y como familia, le importó más tu trabajo que nuestros hijos.

—¿Qué quieres de mí? —insisto —¡que mienta!

—No es justo que te estés siendo usado, pongas tu esfuerzo en una investigación, que está truqueada. Ya hay un culpable Chuck, en este punto ya lo sabes, no sé si Shark lo mató o no ...solo que él no será culpable —giro a verla y se pasa una mano por su cuello, sonríe con rostro desfigurado por la rabia —fuimos usados nos destruyeron, nuestro hogar, la de Shark, me alejaron de ti, a mis hijos le impidieron ver a su padre.

—Por qué asi lo quisiste —le recuerdo —no era obligatorio, Kya.

—No me entiendes, esos hombres merecen ser capturados. Yo me expuse como nadie en ese sitio ¿Para qué? —pregunta mirándome —ahora que están a tres pasos de agarrar a esos dos, me hacen a un lado. Según ellos yo participe en la muerte de Shark Dewand, alguien compró a mi nombre cinco barriles de gasolina que fueron encontrados en ese edificio. Por una factura que no se tomaron el trabajo de verificar, estoy fuera.

—¿Por eso te investigan? —pregunto girando del todo a ella. Camino hacia ella y me siento a su lado —Lawrence retiró los videos de la cámara de vigilancia, que muestran a Roy minutos antes de la explosión.

—Lo jodí todo Shark, aún si logro demostrar mi inocencia, jamás limpiaré mi nombre —paso una mano por sus hombros y la atraigo hacia mí.

Si bien, no tengo hacia ella el mismo amor de antes, siempre será la mujer que amé, la madre de mis hijos. Se quita los zapatos y se acurruca en mi regazo, mientras yo le abrazo fuerte hacia mí. Si ya todo daban un culpable sobre ese asesinato, bien podía yo dirigir mis energías y esfuerzos hacia otro lado. Contaba con la mejor detective que había conocido para ello.

—Agente Taylor ¿Cree poder soportar a su superior para un último caso? —alza sus ojos negros hacia mí y frunce sus cejas confundida —necesitamos encontrar a un padre, se lo prometí a una rubia de casi 60 cm, de preferencia vivo... También capturar a quien quiso o logró asesinarlo.

—¿No importa que esté preso por otro delito?

—No, porque lo que quiero es limpiar el nombre de mi ex mujer —concluyo y la escucho reír, tres cabezas se asoman por la rendija de la puerta y les indico entrar.

—¿Ya se reconciliaron? —preguntan al tiempo y negamos.

—No, y lo mejor es que no insistan... solo estaremos trabajando en este caso y después cada quien por su lado. —mi respuesta no les gusta, pero debo ser sincero.

Esto que acabo de saber, es todo lo que necesitaba para divorciarme de Kya, ella prefirió a su trabajo a su familia hace años. Fue ella la que tomó la decisión y no yo.