Jimin estaba en el departamento de Jungkook, sentado en el sofá mientras que la cabeza de Jimin aún llevaba el eco de la conversación anterior.

Somi ya se había ido, y la tensión en el aire era palpable. Sabía que la conversación que estaba a punto de tener con Jungkook no sería fácil.

Cuando Jungkook finalmente llegó, cerró la puerta detrás de él y notó la expresión seria en el rostro de Jimin.

—¿Todo bien?

Preguntó Jungkook, notando la gravedad de la situación.

Jimin se levantó lentamente, respirando hondo para reunir el valor necesario.

—Necesito hablar contigo sobre lo que pasó hoy...

Dijo, tratando de mantener la calma.

Jungkook asintió, dirigiéndose hacia el sofá y sentándose a su lado. Su mirada estaba fija en Jimin, esperando a que comenzara.

—¿Qué pasó?

Preguntó Jungkook, su voz tensa.

Jimin empezó a explicar, sabiendo que cada palabra contaría.

Habló sobre la reunión con su padre y cómo, en medio de las negociaciones de la fusión, su padre había sacado el tema del matrimonio como una condición para avanzar.

—Lo que quiero es aclarar los rumores, proteger nuestra relación y también cerrar este negocio, pero mi padre lo complicó.

Dijo Jimin.

—No sé cómo reaccionarás a esto, pero necesito saber tu opinión.

Jungkook lo miró, procesando la información.

—¿Entonces el matrimonio es una condición para que la fusión ocurra?

Preguntó, su voz mezclada con sorpresa y preocupación.

Jimin asintió.

—Sí. Y aunque no quiero que esto afecte nuestra relación, la situación está tan enredada que necesito tu ayuda para resolverlo.

Jungkook suspiró, pasando una mano por su cabello.

—Esto es… complicado. No esperaba que las cosas se pusieran así. Pero entiendo que necesitas resolverlo.

Miró a Jimin con seriedad.

—Hablemos de esto. ¿Qué es lo que realmente quieres?

Jimin sintió un alivio al ver él interés de Jungkook.

Jimin se tomó un momento para reunir sus pensamientos antes de hablar, con la esperanza de que sus palabras fueran claras y honestas.

—Solo quiero que los rumores sobre Somi dejen de afectar su vida.

Suspiró, buscando el mejor enfoque.

—Quiero aclarar que estamos saliendo. Esto debería ayudar a calmar las especulaciones...

Jungkook lo miró, procesando la propuesta.

—Entonces, ¿quieres hacer pública nuestra relación para que los rumores se detengan?

Preguntó, su tono mezclado con sorpresa.

No sabía que se preocupaba tanto por Somi, pero lo comprendía, era una situación incomoda y que estaba hiriendo a la rubia.

Jimin asintió.

—Sí. Creo que si la gente sabe que estamos juntos, los rumores sobre Somi se desvanecerán. Además, esto nos daría una posición más clara frente a la fusión...pero no lo suficiente, ya sabes...

Jungkook se quedó en silencio un momento, su mente trabajando a toda prisa para procesar lo que Jimin había dicho. Finalmente, levantó la vista y miró a Jimin a los ojos.

—Entiendo que los rumores sobre Somi tienen que parar, y estoy dispuesto a hacer pública nuestra relación para que esto se aclare...

Suspiró, pasando una mano por su nuca.

—Pero mencionaste el matrimonio. ¿Eso es lo que tu padre realmente quiere?

Jimin asintió, sabiendo que había llegado el momento de abordar el tema delicado.

No quería casarse, mucho menos obligado, estaba bien por el momento.

—Sí, mi padre ha puesto el matrimonio como una condición para que la fusión se lleve a cabo. No quiero que esto nos presione a hacer algo que no queremos, así que olvidaremos lo de la fusión.

Jungkook lo miró con una mezcla de nervios.

Nunca había pensado seriamente en el matrimonio, pero ahora que él lo mencionaba, no podía evitar pensar en eso.

—Entonces, ¿esto significa que tendríamos que considerar el matrimonio si queremos que la fusión se concrete?

Preguntó Jungkook, su voz cargada de seriedad.

Jimin asintió, su expresión reflejando la preocupación que sentía.

—Sí, pero no quiero que esto sea solo una cuestión de negocios.

Jungkook tomó una respiración profunda, asimilando el peso de la decisión. Finalmente, dijo:

—Vamos a manejar esto paso a paso. Primero, hagamos pública nuestra relación y veamos cómo reaccionan las personas y cómo se resuelven los rumores. Después, si realmente llegamos a un punto donde el matrimonio se vuelve inevitable, lo discutiremos juntos y tomaremos una decisión, cariño.

Jimin sonrió, sintiendo un alivio al ver que Jungkook lo comprendía.

—Gracias, Jungkook.

El pelinegro sonrió.

—No hay qué agradecer, mi amor.

Jimin soltó un suspiro, relajando los hombros mientras se inclinaba hacia él.

—Es solo que... no sabía cómo ibas a reaccionar. Todo esto es tan complicado...

Confesó Jimin, buscando la mirada de Jungkook.

—Lo sé...

Respondió Jungkook, tomando sus manos con suavidad.

—Pero estamos en esto juntos. No importa lo que tu padre quiera o lo que digan los rumores, lo importante es lo que nosotros decidimos hacer.

Jimin asintió, sintiendo cómo dejaba un beso sobre su cabeza.

—No te sientas presionado, todo a su tiempo, cariño.

—Todo a su tiempo...

Susurró Jimin.

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Ya ni yo quiero hablar del depa del Jimeo