Porque a el?

Siempre que pudo actuó de acuerdo a las normas sociales, ayudaba a las ancianitas a cruzar la calle, nunca desobedeció a sus padres cuando era mas joven, entonces si siempre actuó de la forma correcta, porque el destino lo castigaba de tal forma?

Enamorado de un niño?

Y si, no era una exageración, tampoco una obsesión... era amor, amor del mas puro y excitante causado por el hijo de uno de sus mejores amigos. Richard Grayson era su bello nombre.

Un hermoso y sexy niño de entre ocho y nueve años, siempre intentando provocarlo con esos ajustados calzoncillos, no estaba loco, estaba seguro de que cada sensual movimiento que Dick realizaba era solamente con un fin... Seducirlo, y lo logro, ahora era justo que el niño se hiciera cargo de las consecuencias. 

Estuvo reprimiendo sus incomprendidos sentimientos por mucho tiempo, intentando ignorar las claras muestras coqueteo que Dick le lanzaba, pero justo ahora tenia una oportunidad y la tomaría. 

Resulta que Bruce salio de la ciudad, Alfred no podía cuidar del niño por un motivo que no le interesaba, y el como buen pensante se ofreció amablemente de cuidar de su últimamente agobiado amigo. Salio de sus propios pensamientos cuando escucho como tocaban su puerta.

Le sudaban las manos, su ritmo cardíaco aumento rápidamente, estaba tan emocionado y excitado que no podía encontrar las llaves para recibir a sus visitas. 

Suspiro cuando por fin las encontró, intento lucir mas calmado y prosiguió a abrir la puerta, escucho al magnate hablar pero no le presto mucha atención, en cambio vio a Richard mas hermoso que nunca, se veía tan feliz al saber que Superman seria su cuidador esta noche.

No supo en que momento se fue Bruce, pero ahora tenia una casa sola y un sexy niño frente de el, el mocoso estaba comiendo una paleta, pero no la comía de manera normal, no, Clark estaba seguro que Dick nuevamente lo seducía apropósito pasando su rojita lengua alrededor del caramelo.

Bien, si Robin insistía en coquetearle, hoy sera el día en que responda a sus insinuaciones.

Se sentó cerca de el, cualquiera diría que estaba invadiendo el espacio personal de Dick, pero eso no le importaba, y menos cuando se dio cuenta que esas hermosas gemas azules lo veían con deseo.... Estaba seguro que era deseo sexual.

_Pasa algo Sup?_ Robin uso un tono dulce que Clark interpreto como sensual.

_Tu sabes lo que sucede Richard_ Haciendo uso de su casi inexistente paciencia, toco con la yema de sus dedos los labios del menor. Dios!! eran tan suaves, aterciopelados, tan deseables. _Eh notado como me miras pequeño_ El menor ladeo la cebeza, pero Bruce no detuvo su caricia. _Ven, vamos a mi cama_ Se levanto del lugar y le tendió la mano a Robin.

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Ahora tenia al menor sobre su cama, ya sin la paleta. El por su parte se concentraba en buscar un muy costoso aceite que compro justo para una ocasión así. No lo malinterpreten, no tendría sexo con el menor, al menos no aun, quería disfrutar de Robin lo mas que pudiera, seria paciente... Por mas que le costara. 

_Supongo que estas cansado verdad Dick_ El mencionado afirmo con la cabeza y una hermosisima sonrisa adorno su rostro. _Bien, quitaté la ropa, te untare aceite y haré un masaje_