El brillante sol calentaba sus mejillas, Jeongin y Félix se situaban en su lugar favorito; el jardín de su colegio.

—¿Vas a participar otra vez en lo mismo del año pasado? —preguntó Félix, viendo la lista de actividades que su tutora les dio a cada uno hacía minutos atrás.

Pronto sería el día deportivo en el colegio, por lo que se suspendían las clases y en su lugar se realizaban competencias entre los cursos en varias actividades recreativas y deportivas.

—Sí, voy a participar en natación, carrera con vallas, carrera de relevo y arco y flecha —respondió Jeongin—. La profesora no me dio opción, ya me había anotado como representante, según porque soy el mejor de todos y siempre los hago ganar.

—Es que en serio eres el mejor. Eres rápido tanto en el agua como en la tierra, si pudieras volar sin duda serías el más veloz.

—No es para tanto —soltó con una risa—, sólo hago lo mejor que puedo y bueno... como esta vez la profesora me anotó en todo eso sin consultarme, me va a exonerar en el examen como disculpa.

—¡¿Qué?! —soltó Félix—. ¡¿Hablas en serio?! Sus exámenes son muy difíciles, qué suerte la tuya. A nosotros sólo nos dará un punto en participación.

—Pero tengo que competir en varias —hizo un puchero.

—¡Te voy a hacer porras!

—Okis —sonrió—. ¿Y tú en qué te anotarás?

—Estoy analizando cuál es lo más fácil y menos agotador.

—¿La cuchara y el huevo? —sugirió Jeongin.

—Podría ser, pero no quiero correr el riesgo de ensuciarme y luego apestar a huevo, pasaré con Changbin ese día.

—Ya veo —musitó, pensativo—. ¿Qué tal el arco? Tienes buena puntería y lo sabes manejar muy bien, así competirías conmigo.

—Mmm... No lo había pensado —contestó, analizándolo—. Sí, sí, mejor ese, así no tengo que correr ni saltar ni nada que me deje demasiado cansado.

—Eres un flojo.

—Ya sé, no lo puedo evitar —dijo Félix, riendo al final y causando que Jeongin lo acompañara en el acto.

Qué bonito se sentía compartir risas con tu amistad más preciosa. Sin duda era una sensación inigualable.

—¿Qué miras tanto? —preguntó Changbin, intentando descubrir lo que había captado la atención de su amigo.

—Uhm, nada... —musitó Chan, desviando su mirada.

No le iba a decir que el rostro sonriente de una castañito había llamado su atención, tanto que incluso le pareció escuchar su risa desde esa distancia, porque ni siquiera él mismo sabía por qué lo estaba observando.

—¿Sigues recibiendo los almuerzos?

—Sí, I.N está haciendo mis comidas favoritas y les queda igual de delicioso que a mi mamá.

—Eso es muy bueno, tu mamá cocinaba para chuparse los dedos.

—Sí... —susurró con aire melancólico.

—¿Cómo se sentiría tener un admirador? —se cuestionó Changbin a sí mismo, intentando desviar el tema.

—Agobiante —respondió Chan, resoplando—. Al principio te da curiosidad, pero luego cuando se van sumando uno tras otro que llega a ser tedioso, ni siquiera puedo comer en paz porque me están observando y es a cada instante.

—Diablos, ya no quiero tener admiradores.

—Por cierto, ¿ya sabes quién es I.N?

—Todavía no, he estado hablando con algunos estudiantes de distintos cursos y tengo un listado de los posibles sospechosos —contó, sacando la pequeña libreta que guardaba en uno de sus bolsillos.

—¿Y quiénes son?

—Shin Yuna de primero B. Huening Bahiyyih de primero F. Huh Yunjin de primero D. Kwak Ji Seok de primero C. Kim Yerim de segundo E. Na Goeun de segundo F. Yoo Jimin de segundo C. Kim Hongjoong de tercero A. Lee Joowon de tercero C. Seo Soojin de tercero F.

—¿Tantos? —soltó Chan, completamente desconcertado.

—Serían muchos más, pero esto son solamente los que suelen preparar sus almuerzos y son parte de tus admiradores, incluso algunos ya se te confesaron, pero es obvio que tú ni los recuerdas.

—Pues la verdad... no recuerdo ninguno de esos nombres.

—Era obvio —dijo, revirando los ojos—. Volviendo al tema, son 11 en total.

—¿11? Pero me pareció que sólo mencionaste 10 —dijo Chan, empezando a evocar los nombres mencionados.

—Porque el otro ya lo sabes; Yang Jeongin de segundo A, ese es mi principal sospechoso.

Yang Jeongin.

—¿Por eso te estás acercando a Félix?

—Por supuesto que no, jamás haría algo así —negó de inmediato—. Además, yo ya estaba armando esto antes de que Félix me hablara y fue él quien se acercó primero... Me gusta estar cerca de Félix y tuve mucha suerte para relacionarme con él, no pienso arruinar eso.

—Okey.

—Tengo una manera de encontrar a I.N —mencionó en voz baja.

—¿Y cuál es esa manera?

—Lo más lógico; empezar por la letra —murmuró—, tendrás que prestarme una de sus notas para ir comparándolas.

—¿Tú piensas ponerte a ver la letra de esas 11 personas?

—Pues sí —respondió con obviedad.

—¿Y cómo piensas hacer eso sin que parezca extraño o invasivo?

—Se te olvida que soy el presidente estudiantil y tengo acceso a ciertos documentos. Me pondré a revisar las inscripciones de cada uno de ellos en las actividades para el día deportivo, así sabré quién es I.N.

Chan abrió ligeramente su boca, debido al asombro, no lo había pensado de esa forma y de hecho, se había olvidado por un instante del poder que tenía Changbin como presidente.

Ahora sí podría saber quién era su admirador secreto, al fin sabría quién era I.N, una chispa de emoción y ansías se situó su interior.

Sin embargo, a veces los planes que armamos no obtienen los resultados deseados.