.𓄼 🐰 O16 : Sexo Mañanero
CONTENIDO SEXUAL +18
La pareja llegó a su hogar con éxito, Jimin suspiró aliviado de no toparse con nadie en el camino, su mirada se posó en Jungkook y notó que tenía heridas leves, se sintió triste, todavía no había sanado por completo la herida que se hizo aquella noche y ahora había más, pensó con alivio que al menos la herida en su pierna se había curado hace un par de días, ahora en ese lugar solo se encontraba una alargada cicatriz.
Jungkook notó la mirada preocupada del castañito, le sonrió levemente.
— Estoy bien. —afirmó con voz suave, ambos caminaron hacia el interior de la casa y decidieron en silencio tomar un merecido baño. Ambos estuvieron allí en silencio.
Jimin no pudo resistirse y se acercó al rubio, abrazó su cuerpo con suavidad y dejo un beso en su mejilla rosada a causa del agua tibia. El tigre no pudo evitar dejar igualmente un beso en la mejilla de la gordita mejilla de su bebé.
Jungkook comenzó a acariciar las alargadas orejas castañas del conejito mientras Minnie se restregaba contra su palma con alegría, le gustaba recibir caricias en sus orejitas de parte de Kook.
Al pasar un largo rato ambos salieron del baño, Jimin se vistió con una túnica interior mientras que Koo solo se quedó completamente desnudo, ambos se miraron y vieron el cansancio en los ojos del contrario, se acostaron a dormir mientras se abrazaban.
Poco a poco la pareja se quedó dormida sintiendo la calidez de su ser amado.
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En medio de la madrugada Jimin sintió una mano grande y caliente recorrer su muslo, las largas uñas raspaban ligeramente su piel, pero no era incómodo, en cambio, le causaba una sensación de cosquillas. El conejito abrió los ojos con lentitud y parecía muy desorientado, sus ojos brillaron con confusión.
— ¿Kookie? —cuestionó con voz baja, no vio al tigre a su lado, por lo que lo llamó nuevamente, esta vez sintió dos manos recorriendo su cuerpo por encima de la ropa y algo moviéndose por debajo de la sabana blanca.
Jimin frunció el ceño extrañado al sentir el peso en sus piernas y apartó la sabana de su cuerpo, se sorprendió al ver que debajo de la misma se encontraba un desnudo Jungkook acariciando su cuerpo.
El tigre rubio sonrió con lujuria al notar los ojos brillantes del conejito sobre él, acercó sus labios al cuello descubierto del pequeño y dejo besos húmedos por toda la extensión de piel, Jimin gimió bajito al sentir un escalofrío recorriendo su cuerpo.
Jungkook recorrió toda la piel blanca al descubierto del pequeño, dejaba besos, lamidas y rojizos chupones que pronto se intensificarían hasta convertirse en un color más oscuro, Minnie sintió escalofríos recorriendo su columna vertebral hasta llegar a su cerebro y derretirlo de placer.
El castañito disfrutó de los besos y caricias que le proporcionaba, el tigre rubio que le miraba con fervor y sus labios manteniendo una sonrisa llena de lujuria, Kook se lamió los labios y fue bajando, recorrió con sus húmedos labios todo el cuerpo del castañito hasta llegar a su pecho.
Jungkook le sonrió coqueto y abrió la túnica, quedaron al descubierto un par de pezones rosados completamente erectos, rogando ser maltratados hasta el cansancio. El tigre chupó y lamió los botoncitos del conejito mientras admiraba como la expresión del pequeño se transformaba en una deseosa de más caricias.
Los ojos marrones del conejito miraron con anhelo al tigre, Jungkook le sonrió con lujuria y siguió disfrutando con su lengua del pezón del pequeño. Mientras Jimin se derretía en caricias, el rubio bajo su mano libre hacia la parte inferior del cuerpo del castañito.
La túnica del chico fue abierta y su miembro erecto quedó al descubierto, el pene del castañito se hallaba erecto y de la punta del mismo brotaban gotas cristalinas de presemen, Jungkook bajó dejando un rastro de saliva brillante y besos por su camino, dejo un besito en la punta del miembro de Jimin, este gesto hizo que el cuerpo del conejito temblará y su boca emitiera un gemido.
— Conejito, voy a comerte. —murmuró con voz ronca del tigre rubio, Jimin no tuvo oportunidad de hablar antes de sentir la cálida boca de su pareja envolver su deseoso sexo.
Un agudo gemido brotó de los rosados labios del conejito mientras sus manos formaban puñitos con la sabana, en un intento de controlar los escalofríos que recorrían su caliente cuerpo.
De la esquina de sus marrones ojos estrellados se hallaban colgando unas lamentables lágrimas fisiológicas, sus labios se hallaban de un rosado oscuro al ser constantemente mordidos y sus mejillas eran tan rojas como dos grandes manzanas maduras.
Jungkook se deleitó con esa hermosa y excitante vista antes de continuar con su trabajo, mantuvo el pene de su bebé en su boca mientras subía y bajaba y su lengua realizaba movimientos circulares en la punta del miembro.
Jimin podía sentir un nudo en el estómago y su corazón latiendo con rapidez ante las sensaciones que le daba el ser amado de tal manera. Jungkook sabía lo que hacía y no le dio al castañito una oportunidad de descansar, en la habitación solo podía escucharse el sucio sonido de succión y unos suaves y lujuriosos gemidos.
El tigre usaba sus colmillos para raspar con suavidad el miembro del chico, no le lastimaba, pero enviaba intensos escalofríos y hormigueo a través de su tembloroso cuerpo. Jimin soltó la sabana y llevó una de sus manos ahora libres hacia el largo cabello rubio del hombre chupando su pene de tal manera que comenzaba a ver las mismas estrellas.
— ¡Jungkook! —exclamó en un gemido el conejito antes de correrse con fuerza, su cuerpo tembló y los deditos de sus pies se enroscaron por la ola de placer que le golpeó de repente, sus ojos se cerraron con fuerza y apretó el rubio cabello en sus manos.
El rubio le miró ligeramente antes de mantener la esencia de su bebé en su boca, se alejó del miembro y le sonrió con lujuria al castaño. El rubio tragó el semen del conejo y se lamió los labios antes de acercarse nuevamente al sudoroso cuerpo del chico.
— ¿P-porqué tragas eso? —Las mejillas rojas de Jimin le sacaron una ligera sonrisa al tigre, su cola se enrolló alrededor del muslo del pequeño y levantó su pierna en alto, Jimin le miró apenado pero no detuvo sus acciones, él también quería hacerlo.
Jungkook ingresó de golpe un dedo en la deseosa entrada del castaño, Minnie gimió gustoso y disfrutó de las sensaciones que le entregaba aquello, Kook ingresó muy pronto un segundo dedo con el cual realizó movimientos de tijeras, al rato ingresó un tercero.
Después de unos minutos de preparación, el rubio abrió las piernas del conejito y se colocó entre ellas, Jimin miró hacia la parte inferior del cuerpo del hombre y se lamió los labios con deseo.
El miembro el rubio se hallaba imponenteme erecto, con gotas de pre semen brotando de la punta. Jungkook notó su ardiente mirada y le dio una sonrisa ladina.
— Todo es tuyo, bebé. —Jimin nunca admitiría que esas palabras le gustaron mucho.
— Dios... —murmuró el conejito al sentir el miembro del tigre ingresar en su culo, sentía como sus paredes aceptaban con satisfacción el pene de Jungkook. El rubio emitió un gruñido al sentir las húmedas paredes el castañito apretarle tan deliciosamente.
Las embestidas comenzaron suaves pero se fueron tornando profundas y certeras, daban justo al punto dulce del conejo castaño, cada vez el movimiento era más rudo y esto hacía que los gemidos y suspiros del castañito se escucharan cada vez más alto, los escalofríos que recorrían su cuerpo viajaban a través de la punta de sus pies hasta llegar a su cerebro nebuloso del intenso placer que sentía.
— ¡Más rápido! —gritó el castaño entre gemidos, las gotas de sudor recorrían su frente, sus ojos miraban el techo de la habitación mientras su cuerpo era amado con fuerza. Jungkook le complació y embistió al conejo de manera aún más ruda, sonrió mientras dejaba besos en su cuello y pecho.
— Tan lindo. —murmuró el tigre en la oreja del conejito. —. Y tan mío. —Jimin no pudo resistirse a asentir una y otra vez, sus orejitas temblaron al igual que su colita por las apasionantes sensaciones que le nublaban la mente.
Jungkook intensificó las embestidas dadas al culo del conejito al sentir su vientre apretarse ante el inminente clímax, mordió el cuello del conejito con suavidad mientras dejaba su miembro en lo más profundo y se corría en el interior del castañito.
— Te amo. —dijo el tigre al oído del cansado conejito, el cual murmuró un yo también, cerró los ojos y pronto se durmió con la ropa hecha un desastre al igual que su cuerpo lleno de marcas de amor rojizas.
Jungkook rió bajito, acomodó las prendas de su bebé, le arropó y le dejo un casto beso en la mejilla aún roja por su reciente ejercicio. El tigre tomó una túnica simple del armario y se la colocó, salió hacia la cocina a preparar un nutritivo desayuno mientras su amor dormía.
Al mirar hacia la ventana notó que en realidad ya estaba amaneciendo.
— Tengo que apurarme. —susurró para sí mismo mientras tomaba algunas cosas para cocinar.
Presentía que iba a ser un día excelente.
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