Capítulo O6.

· ─𖥸─ ·

Cuatro días habían pasado, cuatro días en lo que Namjoon seguía aprendiendo lo más esencial para atender al pequeño Jungkook ahora que su madre volvería al trabajo. Y en esos cuatro días, el pequeño niño berrinchudo seguía sin aceptar del todo la transformación llamada Hoseok.

ㅡ Ya lo sé, niño, tampoco me agrada verme así ㅡ bufó mientras tomaba en brazos al menor recostado sobre la cama ㅡ, sólo mírame, me veo ridículo.

La ropa elegida por Jisoo le era muy incómoda, sus largas piernas estaban a la vista de cualquiera gracias al short que le llegaba a los muslos, la prenda tenía un color azul celeste, estaba algo roto pero según la joven, esa era la tendencia. La blanca y ancha camiseta resaltaba el color de su piel de caramelo; las zapatillas naranjas le asfixiaban los pies y eran feas para su gusto, además de blancos calcetines.

El demonio suspiró viendo su reflejo y el del pequeño distraído.

ㅡ Solo espero que los visitantes no tarden en irse o me volveré loco de tanto sonreír y hablar como un idiota alegre.

Namjoon sonrió enternecido cuando notó que el menor miraba con curiosidad el reflejo del espejo. Estiró su manita hacia el cristal mientras balbuceaba, así que el demonio se acercó permitiéndole tocar y curiosear.

ㅡ Tu corazón se siente débil hoy, ¿no es así? Cada día se vuelve más y más débil, con lentos latidos ㅡ suspiró ㅡ, eres tan vulnerable. Pero tranquilo, mientras yo esté contigo tu corazón seguirá latiendo con normalidad, por eso debo estar aquí el mayor tiempo posible. No puedo permitir que deje de latir.

Le besó con ternura la cabecita a Jungkook y decidió salir de la habitación, cerró la puerta con cuidado y bajó las escaleras con el niño en brazos. Vió a Jisoo acomodar las almohadas de manera correcta en los sofás, en verdad quería sorprender a su familia, no quería que se preocuparan tanto por ella.

ㅡ ¿Están listos? ㅡ pregunta sin voltear, mirando con detenimiento que las decoraciones estuvieran en el orden correcto y sin polvo.

ㅡ Cambié a Jungkook y bueno, creo que la ropa que elegiste es muy pequeña para mi, sólo mírame ㅡ responde.

La chica dejó de lado lo que hacía y se giró para prestar su completa atención hacia el adolescente Hoseok luciendo radiante y muy lindo.

ㅡ Namjoon, se supone que sea así ㅡ rió ㅡ, ¿recuerdas que te dije algo sobre verte juvenil? Pues a esto me refiero, tienes lindas piernas.

Las mejillas del demonio tomaron un color rosado muy suave y su ceño se frunció.

ㅡ Exijo un cambio, mis pies están siendo cruelmente apresados por estas cosas de color ridículo.

ㅡ ¿Nunca dejas de quejarte? ㅡ bromeó con una sonrisa mientras se acercaba ㅡ. Y tú cariño, luces realmente adorable el día de hoy para ver a tus abuelos, al parecer Namjoon no tiene tan mal gusto, ¿verdad?

ㅡ ¿Disculpa? ㅡ el de cabellos morados apretó la mandíbula.

ㅡ Es una broma Hoseok, y debes acostumbrarte a ellas porque mi padre suele hacerlas con mucha frecuencia. Trata de reírte con él, y no luzcas muy tenso, ¿si?

ㅡ No me gusta el nombre de Hoseok, me agrada ser Namjoon.

ㅡ Hoseok es un bonito nombre, con el paso de los días ya no será molesto para ti, ¿de acuerdo? ㅡ le sonrió.

El timbre de la casa fue presionado con insistencia, el sonido que emitía hizo eco por todo el interior de la casa, haciendo reaccionar al pequeño Jungkook.

ㅡ Si quieres un descanso puedes ir a la cocina, si necesitas decirme algo solo dime que te acompañe a la cocina, ¿bien? Todo estará perfecto si sigues las sugerencias que te dí.

Por primera vez en su eterna vida se sintió nervioso e inconscientemente apretó el cuerpo blandito del menor contra él, en un intento de calmarse. "Mientras no lo separen de mi lado, no habrá necesidad de sacar las alas" se dijo a si mismo.

Jisoo abrió la puerta y aquel alegre matrimonio entró al hogar, haciendo demasiado ruido para su gusto. No pudo evitar hacer una mueca de disgusto.

Y supo que sería una tarde realmente agobiante cuando Jungkook, su Jungkook le ofreció sus brazos a la mujer mayor, la cuál dedujo que era la madre de Jisoo.

ㅡ Mamá, papá, él es Hoseok, es hijo de uno de mis vecinos. Él cuidará de Kookie mientras estoy en mi trabajo, simpatiza mucho con mi niño, son como grandes amigos ㅡ les explica con una gran sonrisa.

La sonrisa que le dedicó la joven al demonio le hizo sentir extrañamente tranquilo y en confianza. Luego de dejar que Jungkook fuera a los brazos de su abuela, una parte de él le decía que debía inclinarse tal y como vió a Jisoo hacerlo. Pero no, jamás se inclinaría ante seres tan inferiores a él.

ㅡ Mi nombre es Hoseok, es un placer conocer a los padres de Jisoo ㅡ dijo, y se sorprendió de si mismo ante sus palabras y su tono de voz tan amable.

Todo un asco.

ㅡ Que jovencito tan adecuado y apuesto, gracias por cuidar de nuestro Kookie, cariño ㅡ le dice la mujer con una sonrisa.

"Todos aquí tienen la misma sonrisa", piensa.

El hombre adulto le dió un apretón de manos como saludo, cuando eso sucedió, la fuerza del adolescente le dió mala espina, ¿un jovencito tan delgado podía tener tanta fuerza? Y aunque Namjoon no tenía el don de leer la mente, pudo descifrar en su rostro la inseguridad.

༄

Algo rasgaba su interior al ver a Jungkook jugar con aquella mujer, mientras él parecía ser ignorado por completo por los presentes, incluido su humano. La mujer estaba sentada en el suelo con el niño entre sus piernas, habían algunos cubos de colores esparcidos por el limpio suelo.

Era una completa tortura, y lo fue aún más cuando el hombre pidió café. Detestaba a más no poder recibir órdenes, la sonrisa tan forzada no pasó desapercibida por Jisoo, quien le dijo a sus padres que le ayudaría al chico.

Namjoon pasó sus manos por su cabello, desesperado, harto de la situación. La joven no le dijo nada, en silencio y con las risas de sus padres de fondo, puso el agua a calentar. El silencio era asfixiante y pareció eterno.

ㅡ ¿Te sientes bien, Namjoon? ㅡ pregunta en tono bajo y con cierto temor, mientras le entrega una bandeja al hombre.

ㅡ ¿Tienen que besarlo tanto? ¿tienes que ser tan cariñosos con él? ㅡ la voz del demonio era aterradora.

La mirada tan penetrante y oscura sobre su cuerpo por poco le hizo caer de rodillas. No sabía que hacer. Sirvió el agua caliente en dos tazas con mucho cuidado.

ㅡ S-son mis padres, Namjoon, y son los abuelos de Jungkook, tienen todo el derecho de ser cariñosos con su nieto, ¿eso te molesta? ㅡ responde mientras coloca las tazas en aquella bandeja metálica.

ㅡ Si, a ti te permito que lo toques por que eres su madre, no soporto tanta dulzura y tanta cercanía ㅡ apretó los puños, deformando la bandeja que tenía en sus manos.

Deseaba arrancarles los brazos por haber abrazado a su humano. Jisoo se asustó cuando el color de sus ojos se volvió de un rojo oscuro muy similar a la sangre. Tomó las tazas de la bandeja para evitar que en un arrebato de ira las lanzara o tirara al suelo, no deseaba ningún escándalo.

ㅡ V-voy a arreglarlo, ¿si? Espera ㅡ dijo la chica saliendo apresurada de la cocina.

Namjoon, siendo cuidadoso de no ser visto por los humanos extraños y desagradables, se asomó por la puerta. Vió como Jisoo tomaba a su niño en brazos con una sonrisa. ¿Así de fácil era? En ese caso pudo hacerlo él mismo.

ㅡ Hoseok, ¿puedes hacerme el favor de ir a cambiar a Kookie? ㅡ le dijo lo suficientemente alto para que los adultos la escucharan.

Jisoo le guiñó, dándole el permiso de subir con Jungkook y calmarse con el menor entre sus brazos. Internamente agradeció ese gesto. Con Jungkook en brazos, subió por las escaleras y tan pronto como estuvo en la segunda planta, se encerró en la habitación de Jisoo.

Entró allí siendo Hoseok, pero después de cerrar la puerta, era Namjoon, aquel demonio cubrió sus grandes alas el cuerpecito que estaba muy cómodo contra su pecho.

ㅡ ¿Qué me está pasando? Yo no... yo no soy de este modo...

"Te dije que te arrepentirías".

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~Nota~~
Bueno, no quedó como yo esperaba :( pero espero les haya gustado la actualización de hoy unu.