Capítulo 4
Capítulo 4
Los dias fueron pasando sin que nada ocurrente pasara, pronto Lucia se dio cuenta con la clase de esposo que se habia casado, puesto que era frio y calculador, o almenos es lo que intentaba delante de ella..., puesto que el pensaba que su mujer no podia conocer sus puntos debiles, ya que si lo hacia quizas podria unirse a su hermano y destruir su familia por completo...
Dos meses mas tarde Lucia se hallaba en el lago, dandose su acogedor y refrescante baño de por las mañanas. Se habia acostumbrado ha hacerlo, dado que los sirvientes y su esposo siempre estaban demasiados ocupados como para prepararle el baño en la casa, ya que no habia agua corriente, y tenian que preparalo en un gran cubilete. Ademas ella no soportaba que los demas estuvieran pendiente de ella todo el tiempo, por esa razon, le gustaba hacerlo todo por si misma, esa era una gran virtud que Rosario admiraba en ella, puesto que al fin y al cabo, eso demostraba que no tenia para nada, ningún parecido con su hermano Tonny, que por el contrario hacia lo posible por hacerse notar y molestar a todo el que se le antojase...
Volviendo al lago... ese dia no era como el resto, puesto que se habia levantado un viento tremendo que arrasaba con todo los arbustos y hierbajos poco resistibles. Ademas ese viento era señal de que se acercaba una tormenta, pero Lucia estaba tan absorta en su baño que no se dio cuenta de aquello...
De pronto un remolino comenzo a surtir desde el interior del lago, y la chica asustada salio corriendo del lago, pero cual fue su sorpresa que justo cuando se disponia a vestirse y a correr hacia la casa, se dio cuenta de que con la ventisca su ropa habia volado, puesto que no le quedo otra cogio algunas ramas y hojas y se tapo como pudo caminando despacio y con cuidado de no ser vista hacia la casita
Mientras tanto Esteban se encontraba en la sala tomando un café hablando por el mobil tranquilamente con uno de sus compañeros policias...
- No te preocupes.- le decia a su amigo.- estaré ahí dentro de poco, asi no tendras que cargar con todo
Y justo al colgar el telefono aparecio Rosario escandalizada...
- Rosario, pero...¿Qué es lo que ocurre?.- Pregunto Esteban mientras le dava un sorbo a su taza
- Ahí señor, es terrible!!!.- Grito la chica escandalizada
- Haber, tranquilizate que es lo que pasa?.- le intento tranquilizar el hombre
- Vera señor, se avecina una tormenta!.- Aclaro la chica con voz alta y clara
- ¿Y?, ¿Cuál es el problema?.- Pregunto de nuevo Esteban con total cabeza fria.- Ya sabes lo que tienes que hacer en estos casos.
- Si, pero señor, el problema es que su esposa salio hoy en la mañana ha darse como ya sabe su baño frio y refrescante...- comenzo explicandose la chica muy alterada.- ... y aun no regresó
- ¿Cómo?.- dijo Esteban levantandose de un salto y tirando la taza del café al suelo, haciendo asi que esta se partiera en mil pedazos.- Ensilla mi caballo.- Dijo con una voz firme y clara
- Si señor, enseguida...
En cuanto a Lucia, después de haber caminado durante un cuarto de hora por todo el bosque, sin encontrar ningun sendero, se habia dado por vencida y buscaba algo con lo que taparse, puesto que habia comenzado a levantarse un tremendo frio, y las nubes amenazaban con lluvia...
Esteban habia montando a caballo y habia llegado al lugar donde su esposa se daba sus baños, pero el lugar estaba completamente desierto, y al mirar hacia arriba vio la ropa de su esposa enganchada en uno de los arboles mas altos, por un momento se imagino a su esposa caminando alegremente por el bosque completamente desnuda, ello le dio una gran satisfacción, pero después tras evaluar la situación, creyó que el café se le habia subido a la cabeza, y seguramente su esposa estaria por ai, desnuda y pasando frio cuando estaba apunto de caer una llovizna muy fuerte.
Asi que galopó con su caballo gritando el nombre de su esposa de vez en cuando en su busqueda...
La chica después de andar y andar muerta de frio, de hambre y de miedo durante otros quince minutos mas, opto por volver al rio, alli estaria mas calentita que fuera del agua, y cuando habia tomado la decisión y el rumbo hacia el rio oyo unos cascos de caballo y se dispuso a gritar fuertemente para que alguien la oyera...
- Ehhhhhh!!!!!.- Grito lucia fuertemente, pero se callo al instante, puesto que recordo que estaba desnuda, y se imagino la cara de cualquier campesino cuando la viera desnuda, que vergüenza. Asi pues volvio a coger las ojas con las que antes se habia tapado y volvio a gritar.
- Te sienta muy bien el verde!.- Dijo una voz conocida justo detrás de ella, y al girarse y ver que era su esposo, quiso que la tierra le tragase, quizas hubiera soportado mejor que fuera un campesino o incluso la reina de Inglaterra, pero no podia soportar que fuera su esposo, ya que en las ultimas semanas se habia portado fatal con ella.
- Vete a la mierda!.- le contesto con cara de pocos amigos
- Vamos Luci, no seas asi!, si no llego a venir a salvarte quizas estarias ahora muerta...
- Tu ves que tenga cara de cadáver?- le pregunto la chica con ironia
- Un poquito palida si que estas!- bromeó el chico
- IMBECIL!!!
- Venga vamos te llevare a casa
- No quiero ir con tigo a ninguna parte.- y en ese momento comenzo a llover, una llovizna fuerte pero tranquila, el viento se habia ido, para dejar lugar a un aguacil de verano...- perfecto, y ahora se pone a llover dijo mientras las gotas de lluvia penetraban en su cabello y resbalaban por su cara suavemente.
- Pues sera mejor que nos demos prisa y busquemos rapido una cabaña o algo!- se quejo el chico que se estaba mojando de lo lindo, la verad era que nunca se habia jugado tanto por alguien que ni siquiera le importara... y hasta donde el sabia Lucia no le importaba...¿o si?
Mientras tanto Rosario andaba de un lado para el otro preocupada...
En el centro de todo lo corrupto de Madrid, se econtraba un chico bastante esbelto hablando con otro un poco mas canijo que el primero...
- ¿Qué?, ¿Cómo que Esteban ha salido de la ciudad?.- pregunto Tonny el cual no queria dar creditos a lo que oia
- Como lo oyes!.- le decia Raul.- y mi fuente de información me dijo k no iva solo, me dijo que iva con una chica
- ¿Qué?.- sin lugar a dudas aquello lo habia dejado perplejo del todo, esa mujer era sin duda su hermana. ¿Pero que demonios hacia su hermana con ese tipo?. Y lo que aun le tenia mas a la deriva todavía era ¿Dónde demonios habia ido su hermana y Esteban?, fuf que mal le sonaba eso: su hermana y Esteban.- Espero por su bien que todo esto solo se trate de un malentendido, porque si me entero de que le ha hecho algo a mi hermana...
Después de mucho caminar por el bosque, con Esteban montado a caballo justo a su lado, se paro frente a el y le dijo...
- Ya que estas aquí y as venido a salvarme, podrias hacer caso de tu instinto de esposo y prestarme algo para taparme no crees?.- le sugirió la chica temblando de arriba abajo, puesto k no llevaba nada de ropa
- Perdona, pero para tu información yo no he venido a salvarte, lo unico es que me perdi y ahora tengo que aguantar tu compañía.- le respondio el chico mientras le arrojaba su chaqueta.- pero toma puedes taparte con esto. Pero no se para que tampoco tienes tanto que cubrir
- ¿A no?, Pues tu bien que mirabas mi cuerpo cuando nos hemos encontrado!.
- ¿Yo?, no se de que me hablas.- intento disimular el chico. Pero era evidente que ella se habia dado cuenta, ¿Por qué le tendria que pasar eso ahora?
Esteban se bajo del caballo y lo amarro cerca de un arbol, se acerco a Lucia y la tapo con su chaqueta mirandola suavemente a los ojos...
– Gracias, pero es demasiado tarde para portarte como un caballero, ya que te has estado comportando desde que te conoci como un hijo de puta.- le contesto lucia muerta de rabia, ya que no soportaba a su marido, cada vez lo soportaba menos
–
- Quizas lo sea!
- ¿Qué?
- Quizas sea un hijo de puta
- Ahora comprendo que no te hallas hechado novia en tu vida, es que no sabes tratarlas!.- le reprocho la chica mientras subian montaña arriba en busca de algun refugio donde refugiarse de la lluvia
- ¿Qué?, ¿Y a ti quien demonios te ha dicho que yo nunca he tenido novia?.- le pregunto el chico malhumorado
- Mira, alli ai una cueva!.- dijo ignorando el comentario del chico y intentando bajar con cuidado de aquella montaña, ya que el suelo estaba resbaladizo por la lluvia
- Ehhh?, oye perdona te he hecho una pregunta
- Ai!.- Lucia se resbalo con uno de las pidras que habia en el camino y se callo en cima de quien menos le hubiese gustado. La verdad que aquella situación era un tanto embarazosa, puesto que ella solo llevaba la chaqueta del chico, y en aquel instante no le tapaba nada, si no que estaba sobre el, lo estaba tocando con su cuerpo, y lo mas alarmante era que su cara estaba tan cerca que casi podia sentir su respiración.
- ¿Puedes levantarte, o es que te gusta el contacto con mi cuerpo?
- No seas imbecil.- dijo haciendo un intento nulo para levantarse- oh mierda, creo que me he torcido el tobillo
- Anda trae, pero que torpe que eres. No seria que querias caer justo en cima mia?.- le pregunto el chico con ironia
- ¿A si, no me digas?,¿y para que si puede saberse?
- Quizas para aprovecharte de mi
- No seria al reves!
- No, por que yo no cai en cima tuyo
- Pero podrias haber provocado mi caida!
- A no me digas!¿y como?, ¿escupiendo en las piedras?
- VETE A LA MIERDA!
- Haber trae yo te llevo.- dijo agachandose y cogiewndola en brazos
- No gracias no necesito tu ahhh!!!, ten cuidado que me duele
Los chicos entraron en la cueva, Esteban preparo un fuego y le presto a la chica una mantita que siempre llevaba en su bosla, luego ella se recosto sobre ella y se quedo profundamente dormida...
- Es increíble lo frágil y delicada que parece asi dormida!,.- penso Esteban mientras le acariciaba su mejilla y la miraba con ternura.
A la mañana siguiente, habia parado de llover, y Esteban cabalgaba por el campo, con Lucia aun dormida sobre el caballo, le habia puesto sus pantalones y ahora el caminaba por el bosque en calzoncillos. Media hora mas tarde llego a su cabañita, y tras barios achuchones y abrazos de Rosario subio a su mujer a su habitación y ordeno que nadie la molestara...
- Pero señor, no es mejor que se bañe primero y...- sugirió la chica
- No, lo mejor es que descanse!. Yo tengo que ir a la ciudad
- Pero señor, ¿Cómo es que se va a Madrid?
- Tengo que seguir con la segunda parte del plan antes de que sea demasiado tarde.- y dicho esto salio de la casa rapidamente
Unas horas después Lucia se habia levantado y le preguntaba a Rosario como era posible que estuviera alli si hace apenas unos minutos habia estado perdida en el bosque junto a su esposo...
- Vera señora llegaron apenas hace unas horas, pero el señor no queria despertarla...
- ¿Dónde esta el?
- Salio!
- ¿Cómo que salio?
- Salio, fue a la ciudad a comprar provisiones.- mintió Rosario, ya que le habia prometido a su amo que no le contaria nada a su señora.
Esteban acababa de llegar a casa de un hombre bastante afeminado...
- Me dijiste que podia contar con tigo para este plan, ademas de que me deves muchos favores!.- comenzó Esteban
- Con mucho gusto te los pagaba en carne, pero como tu no quieres...
- Deja de bromear, lo que quiero que hagas es simple, estas preparado?
- Por supuesto, mandamela cuando quieras que yo la convertire en una princesa
- De eso queria hablarte, no quiero que mi madre sospeche nada, y por tanto deberas ser tu el que valla alla.
- ¿Qué?, ¿te has vuelto loco?, ¿quieres que yo valla al campo?, tu estas totalmente ido de la cabeza, con la cantidad de bichos que hay alli!.- se quejo el hombre asqueado
- Bien, si no quieres me buscare a otro y...
- ¿Cuándo tengo que mudarme?
- Pues ya, he venido a recogerte.
- Oh!, que extraordinario honor se recogido por el mejor y mas guapo policia de Madrid, mmm... me excito con solo pensarlo
Tonny habia tomado la decisión de buscar a su hermana, y la unica manera era llendo a casa de su peor enemigo, claro k tendria que ir disfrazado, pero no importaba, puesto que el era el amo de los disfraces...
- Buenos dias!.- dijo Tonny disfrazado de anciano nada mas le abrieron la puerta.
- Buenos dias señor, ¿que desea?.- pregunto Mónica mirando al señor con desconfianza, ya que su cara no dava muxa confianza.
- Vera, quede con el señor Bourne para aclarar unos asuntos, y recien me entere de que se marcho de viaje, por lo visto olvido su compromiso con migo, tan despistado este hombre...- comenzó mintiendo, intentando convencer a la chica de que lo que decia era cierto, asi conseguiria la direccion de ese hijo de... y podria saber que paso con su hermana.- ... seria usted tan amable de indicarme un celular donde llamarlo?, ¿o algu sitio donde ubicarlo?
- Pues, no lo siento, nadie sabe donde se marchó!, pero lo que si le puedo dar es el numero de celular.
- Se lo agradeceria mucho.
Unas horas mas tarde Lucia se hallaba en la casa preparandose para almorzar, preocupada por que su marido aun no hubiese llegado a casa, pero en fin...
- Rosario!, queria pedirte un favor!.- le pidio lucia a la chica.- ¿Podrias comer hoy con migo?, esque no me gusta comer sola
- ¿Pero señora, y si llega su esposo?
- No te preocupes por eso, no creo que venga todavía.- respondio la chica. Pero se equivocaba porque en ese mismo instante entro por la puerta su esposo seguido de un joven que a la legua se le notaba bastante afeminado.
- Valla, asi que esta es la afortunada de tremendo hombre!.- comento el hombre mirando a lucia
- Lucia, te presento a Luis Fernandez.- dijo su esposo haciendo la presentacion.- Luis, esta es mi esposa
- Encantada chata.- le dijo el tal Luis dandole dos besos con total confianza.
- El se quedara unos dias para ayudarme con unos asuntillos.- volvio a intervenir su esposo aclarando la situación
- Pero no le digas eso a la pobre!.- comento Luis de nuevo.- yo he venido para convertirte en toda una mujer de sociedad, para no despertar sospechas y para lo mas importante para enseñarte como tratar a esa bruja.
- Luis!!!.- le regañó Esteban
- Ven, tenemos tanto de que hablar.- dijo cogiendo a Lucia de la cintura y caminando escaleras arriba hacia las habitaciones.- No le hagas caso, es que como la bruja en cuestion es su madre, pues no quiere que la llame asi pero en fin, cuentame que es de tu vida de casada?.- se intereso el chico cuando ya se hallaban en la habitación de la chica, la cual lo miraba con cara de pocos amigos, puesto que se sentia un poco rara en su habitación con un hombre extraño.
- ¿Y esa cara?, por dios!, ¿no creeras que yo...?.- le dijo el chico poniendo cara de sorprendido.- Yo no quiero nada con tigo, no es que seas guapa, eres guapisima, y me encanta que Esteban por fin haya encontrado a alguien, aunque yo hubiera preferido que se cambiara de hacera y ligarmelo pero en fin...
- ¿Eres gay?.- se esalto lucia alelada por la impresión, puesto que no comprendia como un chico tan guapo podia ser gay.
- Si cariño, soy gay y a mucha honra!
- Entonces creo que nos llevaremos muy bien, ven que te voy a informar de todo.
Mientras tanto en el salón Esteban charlaba alegremente con Rosario...
- Pero señor, yo crei que esperaria un poco mas para proseguir el plan...
- Si, eso pensaba hacer, pero no quiero esperar, tengo miedo de arrepentirme de todo esto, tengo miedo de...- comenzo el hombre recordando todo lo que habia pasado con su esposa, el momento del rio cuando se resbalaron y su esposa estaba desnuda junto a el, el momento en que ella se hallaba desnuda tapandose con unas hojas, el momento del resbalon en la montaña...
- Enamorarse.- intervino Rosario.- tiene miedo a enamorarse de ella.
- ¿Qué?, No!.- dijo en un tono no muy convincente.- ¿Cómo iba yo a enamorarme?, por dios Rosario sabes perfectamente que yo renuncie al derecho de enamorarme desde el momento en que todo paso.
- No se puede renunciar a enamorarse, eso pasa cuando uno menos se lo espera.
- ¿tu te has enamorado alguna vez?.- le pregunto el hombre a su sirvienta
- No, nunca, ¿Por qué lo dice?
- No, por nada.- dijo Esteban ///lo digo por saber que se siente, espero no estar enamorandome de ella, ahora no podria soportarlo. No pue3do enamorarme ahora, y menos de mi mision///.- pensaba mientras subia escaleras arriba.
- ¿Puedo entrar?.- pregunto Esteban llamando a la puerta de su esposa a mas o menos la 5 de la tarde, pero al no hallar respuesta empujo la puerta para entrar, pero la habitación estaba completamente bacía, fue entonces cuando escucho unas risas que provenian de fuera de la casa y al asomarse a la ventana y mirar se quedo alelado al ver tremendo espectáculo: Su esposa se estaba bañando medio desnuda con su amigo Luis en el barreño
- Ehhh!, eso no vale, no vale hechar agua con javon en los ojos!.- grito Lucia levantandose de pronto
- Aih tonta que mas da! Jajajja.- decia Luis hechandole agua
- ¿Se puede saber que esta pasando aquí?.- pregunto una voz justo detrás de ellos, era sin duda Esteban bastante enfadado
- Pues tu que crees?, nos estamos refrecando que hace una calor terrible.- le dijo luis
- ¿Calor?, pero si estamos a temperaturas bajo cero inclusive, ademas Lucia, tu pie como sigue?
- ¿Mi pie?.- pregunto la chica sin saber a que se referia su esposo
- Claro, el que te lastimaste en la montaña
- Ah jeje, ya esta bien gracias!
- ¿Estuvisteis en la montaña los dos juntitos?, woooo que romantico.- añadio Luis en plan picante
- Luis, valla, jamas crei que te comportarias asi, crei que... valla no me lo esperaba!
- Tranquilizate Esteban, no te pongas celoso, que aun sigo en la misma acera que siempre!
- Yo no estoy celoso!.- se enfado el chico dando zancadas hasta la casa
- Cariño, yo que tu iria a consolarlo, no valla a ser que luego no te de sexo!.- añadió Luis en tono de burla
- Voy a ver que le pasa espera aquí!.- dijo Lucia llendo corriendo detrás de su marido
- NO TE PREOCUPES QUE NO TENGO OTRA COSA MEJOR QUE HACER, SI TE PARECE ME VOY A IR A LIGAR AL PUEBLO!, VAMOS CON LA DE PALETOS PUEBLERINOS QUE TIENE QUE HABER, QUE ASCO POR DIOS.- Le grito luis a voz tendidamente alta.
- ¿Se puede saber que te pasa?.- le pregunto Lucia a su esposo cuando estaban en la habitación de este.- no estabamos haciendo nada.
- No me importa lo que estuvieras haciendo o dejando de hacer. Al fin y al cabo estoy casado con tigo solo por un pacto.- le respondio su esposo de malos modos
- Me alegro de que me veas como un proyecto.- dijo la chica con sarcasmo.- Asi que ya sabes no tienes por que ponerte celoso.
- Yo no estaba celoso!.- le recrimino el hombre alterado
- Esta bien lo que tu digas.- dijo dando media vuelta para irse escaleras abajo medio cojeando
- Solo es que no me parece bien que estes haciendo esfuerzos con el pie asi
- ¿Estas seguro que es eso y no es que estas celoso?.- dijo Lucia acercandose a su esposo para ponerlo a prueba
- Lucia, no quiero que te encariñes con migo.
- ¿Qué?, ¿Por qué dice eso?
- Por que, no soy un hombre en el que se pueda confiar, y tu menos que nadie...- dijo dejando a la chica totalmente sola y confundida en la habitación...
CONTINUARÁ...
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