Con el viento a tu favor
La copa que se encontraba en sus manos le traía tantos recuerdos. Esos momentos que su mente había guardado para sí y le impedía que borrara.
Tal vez debería dejar de tratar de eliminarlos y aprender a vivir con ellos, que sean parte de él.
Ese líquido rojizo lo acompañaba en su soledad. Un inhibridor del dolor que su corazón experimentaba. La bruma que cubría sus ojos cada instante se hacía más grande y no sabia a ciencia cierta como hacerla desaparecer.
Gotas saladas cayeron de sus ojos manchando sus mejillas en el proceso. Nadie podría comprender la sensación tan pesada que se alojaba en su pecho desde ese maldito día.
Pero, esto no debería afectarle realmente ¿No?. Ambos debían seguir caminos que los lleven a la felicidad ¿Verdad?.
SeokJin no puede buscar ese camino. Es como si el viento lo llevara nuevamente al punto de inicio. Estaba perdido, y sabía que a él no le importaba realmente
Tomó un sorbo de vino, y le supo tan amargo como siempre. Aunque sabía que ese sabor se debía al sufrimiento de amar y no ser amado.
Estaba completamente atado a los recuerdos de un pasado que no volvería. Esos recuerdos del chico que amaba hasta ahora, después de tantos años.
Cuando se enamoró era un chico de dieciocho, tan joven e inocente. Las mariposas que sentía en su estómago en ese tiempo se habían convertido en navajas que cortaban su delicada carne sin ninguna piedad.
Ahora, a sus cuarenta y cinco años puede decir con certeza que se arrepiente de enamorarse, posiblemente no estaría sufriendo ahí, tirado en ese sillón de cuero. Si no hubiera dejado que su corazón corriera como loco a entregarse completamente a Jeon Jungkook.
-Nunca me amaste como yo a ti ¿Verdad Jeon?
"Claro que si Jin Hyung ¿Por qué dice esas cosas?". Dijo esa hermosa voz, como si estuviera ahí.
Su ceño se frunció y la rabia inundó su sistema. Lanzó la copa a la pared. Esta se rompió en miles de pedazos. Todo el contenido que quedaba en el recipiente de vidrio se esparció en la superficie, chorreando hasta abajo.
Eso lo hizo darse cuenta de la pintura al óleo que estaba colgada ahí.
Siempre creyó que ese retrato en específico era donde mejor había representado la belleza de Jeon.
Sus labios, sus ojos, el sentimiento que transmitía su ser.
Ese día se dio cuenta lo perdido que estaba por él.
Hirió su corazón al no alejarse en ese instante. Acabó con su vida cuando envolvió ese sentimiento fuertemente. Sentenció su alma en el momento que dejó de ver a JungKook como su mejor amigo.
Entre esos erráticos pensamientos se quedó dormido, poco tiempo después el sol decidió salir, quitandole el pequeño momento de calma que su aturdido cerebro tenía.
Tomó una ducha, se vistió con su típico traje, hoy de un color azul marino y preparó un café.
Se disponía a irse a su trabajo. Salió de casa con ese único propósito.
El tráfico esta mañana era muy pesado. El sonido de los claxon de esas personas fastidiosas era tan distante para SeokJin.
Había perdido todo lo que era, ¿Quien es Kim SeokJin ahora? Un cajón vacío.
Posiblemente nadie se daba cuenta de ello, ya que se obligaba a sí mismo a no demostrar su dolor.
Hay un punto en su vida donde simplemente afronta la realidad, nunca podrá superar a JungKook, su único amor. Un hombre felizmente casado, con hijos. Alguien que cada semana lo visita y le lleva pastelillos para alegrarlo. Ese hombre que le acaricia el cabello suavemente, dejándolo recostarse en sus piernas mientras le cuenta su día a día, siendo totalmente ajeno a los sentimientos que su amigo tiene.
No era el culpable, no tenía la culpa de que SeokJin se enamorara.
Simplemente pasó, en contra de la voluntad de ambos.
❝Su voz se grabó en mi mente.
El sonido de esa copa rompiéndose
Obliga a mi ser a dejarse llevar por el viento
Kilómetros recorro en mi auto
Jurando que dejaré ir su recuerdo
Inocentemente sigo cayendo en esa mentira
Nunca podré escapar de este viento que va a tu favor❞
Con el viento a tu favor.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro