Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 24

La soledad es un reencuentro consigo mismo. Si estás acompañado y te sientes solo, quiere decir que realmente estás mal acompañado.

Los inteligentes disfrutan la soledad, los demás tratan de llenar su vacío con cualquier persona.

—¿Quién eres? —pregunté desconcertada.

—¿Enserio no te acuerdas de mí?

—¿Cómo te llamas?

—Edward Cullen —dijo con seguridad, por lo que que yo reí.

—¿Ese no es el de Crepúsculo? —levanté una ceja y rió.

—Mi nombre es Jolan, Jolan Lourise, ¿ya recuerdas?

<<¿Cómo no pude recordarlo?>> Jolan Lourise, mi crush de la primaria.

"Jolan Lourise, fue mi crush durante cinco largos años. Iba un grado mayor que yo, por lo que no solía verlo mucho.
Un día, cuando tenía diez años, el me rompió el corazón.

Estábamos en los jardines de la escuela, en el receso, sentadas en una banca de piedra color gris.

—¡Jolan es tan guapo! —me deleité con una foto que mi amiga Rose le había tomado con su teléfono. Rose no era una chica muy linda, era rubia y estaba un poco pasada del peso normal, por lo que recibía fuertes abusos por parte de mis compañeros. Usaba lentes y estaba chaparrita. Tomas y yo siempre la tratamos como se lo merecía, era una chica sumamente linda y generosa. <<Bueno, al menos Tomas siempre la trató bien.>>

—No es guapo, es tierno —aseguró.

—¡Es guapo! Sus pecas, su cabello, todo.

—Como digas... —dijo anotando algo en su libreta color marrón.

—¿Por qué no te agrada? —pregunté molesta.

—Porque es un mujeriego, no merece que una persona como tú pueda quererlo.

—Eso es cierto —dijo Tomas interrumpiendo.

Se sentó a un lado de Rose.

—¿Por qué lo sería? Ha tenido dos novias sólamente.

—Seis novias —corrigió Rose.

<<Tal vez para una chica de veinte años, tener seis novios a lo largo de su vida puede parecer normal, pero para un niño de once años, no es nada agradable.>>

—Bueno, no importa, aún así nunca me hará caso —dije con certeza.

—Igual y sí, pero sea lo que sea, debes decirle que no —ordenó Tomas.

—¡Pero él es tu amigo! —intenté defender a Jolan.

—Es precisamente por eso, sé como puede llegar a ser.

—Tomas tiene razón, Jolan no es un chico bueno para alguien como tú.

—Iré a comprar algo, al rato los veo.

Me dirigí a la tienda de la escuela, pero en el transcurso me encontré con aquel chico que solía llamar mi crush.

—Catalina, ¿cierto? —preguntó y mis mejillas de pusieron completamente rojas.

—¡No! Es decir sí, bueno no, pero sí, sí, pero no, olvídalo sí —dije entrecortada.

Estaba nerviosa, me gustaba, y mucho.

—¿Vas en quinto? —preguntó.

—Sí —Dije nerviosa.

—Que raro no haberte visto nunca, eres muy linda —me coqueteó.

<<¡ME DERRITO!>> decía mi mente.

—¡Oh! Gracias —sonreí como boba.

—Soy Jolan Lourise, pero mis amigos me llaman Jo —se presentó.

—Ya sabía, pero gracias —sonreí y de pronto esa sonrisa se había borrado de mi rostro al analizar con detenimiento lo que había ocurrido.

<<Torpe>>

—¿Ya sabías? —alzó una ceja.

Esperaba que no lo hubiera escuchado. Nunca es bueno que el chico que te gusta sepa que te gusta si tú no le gustas. Puede que incluso llegué a aprovecharse.

—No, bueno te había visto, solamente eso —le mentí, pero era obvio que el ya sabía lo mucho que me gustaba.

Pero lo único que quería él era jugar con un juguete nuevo.

—Me alegra que me hayas notado —me guiñó el ojo y me dio un beso en la mejilla—. Te veo mañana.

—Adiós —dije con una sonrisa de lado, y se marchó a pasos cortos.

Me acaricié la mejilla con una mano en la parte en la que Jolan me había besado.

Pues aunque para el no significó nada, para mí significó todo.

—Espera un momento ¿Jolan Lourise te ha dirigido la palabra? —preguntó Rose sorprendida.

Ya habían terminado las clases, así que la invité a mi casa.

—¡Sí! Es sumamente increíble —dije con entusiasmo.

—Si llega a preguntarte algo, ya sabes qué cosa, debes decirle que no —mandó Rose.

—¿Por qué? No tiene nada de malo.

—Pero yo no quiero limpiar tus lágrimas cuando te des cuenta de que fuiste únicamente su nuevo juguete.

—¡Estás celosa! —dije molesta.

—¡Claro que no! Intento proteger a mi amiga.

—¡Estás celosa porque alguien como el jamás se fijaría en alguien como tú! —dije molesta.

<<En ese momento era una chica inmadura e ignorante, pero aquel comentario, le dolió más de lo que esperaba.>>

—Si así lo dices. Bien, adiós, veo que no me necesitas —tomó su mochila y se fue.

—¿A dónde vas? No puedes irte, tus papás aún no vendrán por ti —intenté arreglar las cosas.

—Puedo irme sola —Rose salió de mi casa.

Fue la última vez que la ví, ella no volvió a la escuela desde aquel día, nunca supe si había llegado bien y a salvo a su casa, pues no quedaba muy cerca de la mía. Intenté llamarla a ella y a su mamá, pero el teléfono estaba fuera de línea. Era sumamente extraño.

Las semanas pasaron y me volví más cercana a Jolan, un día se acercó hacia donde me encontraba, me entregó una carta y se fue corriendo. Abrí la carta la cual decía "¿Quieres ser mi novia?" Di pequeños saltos y le conté todo a Tomas. No lo tomó nada bien y me dijo que le dijera que no y que tuviera cuidado, pero le resté importancia a sus comentarios y le dije "Sí".

Una semana, una maldita semana fué, ni más, ni menos, por una semana mi mundo era color de rosa. Las chicas me envidiaban y yo era feliz con mi supuesto "novio". En una semana me llegó una carta de Jolan, supuse que era una carta de amor, así que la abrí entusiasmada. Pero lo que decía, me rompió el corazón. El había terminado conmigo, por una estúpida carta, no tuvo la decencia de decírmelo en la cara. Jolan era un cobarde y un idiota. Y a pesar de que me lo repetían una y otra vez, yo estaba sumamente cegada.

Un mes después, me enteré que había sido sólo una simple apuesta.

Me usaron y yo lo permití."

—¿Y bien? ¿Ya lo recuerdas? —preguntó Jolan.

—Sí, lamentablemente —Rodeé los ojos.

—¿Por qué? Fueron buenos tiempos.

—Para ti tal vez, el hecho de que me usaste no me agrada para nada.

—Sobre eso, era un niño inmaduro, ahora estoy con una muy linda chica, diría que es el amor de mi vida.

—Me alegro, bien por ti —dije secamente.

—Lamento lo que pasó hace diez años.

—No te preocupes, lo superé hace años.

<<Ajá>>

—Espero me perdones, pero creo que al fin encontré el amor, tu llegaste a conocerla.

—¿Quién es? —pregunté intrigada.

—Rose.

<<El mundo sí que es pequeño.>>

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro