Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Hola Wattpad



Hola...

Hace bastante tiempo que no escribía por acá, je.

Tengo un poco de nostalgia, emoción, sentimiento bonito, pero también siento muchas otras cosas que espero que se puedan desglosar en lo que voy a escribir a continuación.

Para las y los que quieran saltarse de lleno esta pequeña (y espero que sea pequeña) catarsis, simplemente diré que estoy de vuelta y con muchas ganas de retomar de lleno mis historias que dejé como hijitos abandonados... PERO voy a retomarlas una a la vez, porque mi proceso artístico es un tanto disociativo, y no; aún no he decidido cuál será la elegida a retomar primero.

Y noup: no hay votaciones jajsjsjs que con mi estado físico y mental, necesito empezar por la que me haga sentir más cómoda de momento, pero pues les quiero agradecer infinito a todas mis lectoras que han seguido aquí sin irse, y a las que han llegado para quedarse. Gracias infinitas por su paciencia...

Aquí comienza la parte de este escrito que tiene mucho más que ver conmigo y mucho menos con las historias, así que las que solo están aquí por las historias pueden saltarse esta parte (y yo lo entiendo, yo no soy mis historias, y yo jamás las he considerado admiradoras de mí, solo de mi trabajo y eso me hace mucho más feliz porque, yo solo existo, pero lo que yo puedo crear es algo que lleva mi tiempo y mi esfuerzo 🫶🏻)

En fin, dicho aquello... comenzaré a platicarles un poquito de mí...

No sé si les dije que tengo anemia, je... Llevo teniendo anemia hace algún tiempo, y he sido un poco irresponsable con mi salud pero me he estado esforzando.

Compré vitaminas, y comencé a hacer algo de ejercicio (muy en contra de mi voluntad), y a comer mejor (aunque sentía que mi estómago se estiraba como un hule viejito 👴🏻)

Y mi salud comenzó a mejorar poquito a poquito...

(Aproximadamente en las mismas fechas en las que yo había retomado aquí, después de mi break largo)

Sin embargo, la vida me soltó una bomba que me rompió por completo todo el esquema: de pies a cabeza y sin aviso. Como un día que comienza normal y hasta tedioso, y luego se tuerce hasta convertirse en una pesadilla.

Me enteré de que mi esposo me había fallado... hace cinco años. Él lo confesó.

Y fue muy duro porque, hace cinco años fue antes de la situación de meternos de lleno a tratar la discapacidad de mi hijo, y hace cinco años mi esposo y yo, éramos completamente diferentes a quienes somos ahora.

Fue como si me hubiera roto el corazón un fantasma.

Fue como si la persona a la que tenía todo que reclamarle, no existiera.

Fue como si la razón por la que lloraba todas las noches, no fuera válida, pero al mismo tiempo si lo era, porque dolía. Y dolía mucho.

Hubo momentos extremadamente oscuros para mí. Momentos en los que salía a la terraza de mi casa, que está rodeada por una cerca eléctrica, que cada cinco segundos hace un sonido para decirte que está funcionando... y estiraba la mano.

Y nunca me atrevía.

Y cerraba los ojos.

Y me enojaba mucho conmigo.

Y al otro día quería ser más valiente para poder hacerlo.

Y mi anemia se agravó... se me cayó la mitad del cabello.

Y comencé a fumar. Cigarros de clavo, porque mi hermana y yo decíamos que sabían muy parecido al té chai, y eran los que fumábamos cuando queríamos platicar y sentirnos interesantes... no sé, no quería hablar de mis problemas porque hablarlos los volvía más reales, pero el saborcito a té chai, me hacía sentirme un poquito más cerca de mi hermana. Y daba la ilusión de que estaba acompañada; de que lloraba acompañada.

Y ya no me sentía tan patética.

Y pues, mi salud empeoró un poco más, a veces me levantaba muy rápido y me mareaba, o veía muchos puntitos de colores, o escuchaba un ruido sordo en mis oídos; como de televisión viejita, cuando pierde la señal.

Y así me sentía.

Luego comenzó a costarme mucho trabajo seguir conversaciones, cualquiera, incluso las más simples. Las que sigues por default, porque ya tienen respuestas automáticas, porque así funcionan las pláticas cordiales, pero a mí se me borraba el cassette.

Y luego creí (de una forma un poco estúpida) que iba a poder sublimar mis sentimientos. Que tal vez solo necesitaba escribir y escribir y escribir, hasta que me dolieran los dedos, los ojos y la muñeca, para que ya no me doliera el corazón.

Pero no pude.

Nada fluía.

Estaba atorada, y no entendía ¿por qué?

¿Por qué si yo siempre recurrí a las letras para lamerme las heridas? ¿Por qué esta vez no funciona?

Tal vez, los hobbies también eran una cosa que podía romperse ¿no?

Lo intenté muchas veces y cada intento fue peor que el anterior.

Mis papás incluso me regalaron una computadora bonita, para que fuera más cómodo escribir.

Pero lo único que pasó es que la computadora se iba llenando de polvo, y había que quitárselo con un trapito.

Y decidí dejar de intentar...

Porque caí en cuenta de que soy (o era) una persona muy romántica. Mi biblioteca (mi lugar favorito en casa) está llena de libros de amor, y lo que escribo también está lleno de amor.

El amor siempre había sido uno de los pilares de mi creatividad. Y eso fue muy duro de ver.

Porque, ¿y después de esto? ¿Después de todo? ¿Qué pasaba conmigo y con lo que yo era?

Esa confesión se sintió como un rayo; un rayo que cayó con fuerza y que hizo que mi eje se partiera en dos.

Y también me hizo sentir como si todo este tiempo; como si toda mi vida, yo hubiera estado escribiendo y leyendo sobre una farsa.

Porque si teníamos algo tan especial como yo creía ¿por qué fui tan fácilmente reemplazable?

¿Y cuántas veces lo abracé por las noches después de que él estuviera con ella?

Y entonces vinieron a mí todos esos momentos en los que tuve que maternar en solitario, "porque ese era mi aporte al trabajo de equipo, de pareja", pero ahora esos momentos ya no me llenaban de orgullo, me hacían sentir estúpida, usada, triste.

Y en este proceso, mis emociones, mis ganas, mis ideas, mi inspiración, todo eso quedó como... anestesiado.

Pero a pesar de todo decidí hacer que mi relación funcionara, aunque me costaba mucho conectar emocionalmente con mi esposo. Había días buenos, en los que podía dejar todo lo que había pasado de lado (como si hubiera sido un mal día) y todo se acomodaba, parecía que mi barquito iba avanzando... pero al día siguiente yo volvía a caer en un espiral de agujeros, y entonces más bien parecía como si los momentos buenos fueran burbujas dentro de un mundo mucho más inmenso.

Y la verdad en este punto no sé si ya sabiendo todo lo que sé y habiendo vivido todo lo que viví, hubiera elegido mejor... no saber nada.

Porque el engaño puede ser muchas cosas, pero también es feliz.

Y yo era una persona muy feliz y muy funcional cuando vivía enamorada del amor.

Mi esposo y yo normalmente veíamos series para pasar el rato por las noches... pero mi capacidad cognitiva dejó de poderle dar seguimiento a los argumentos.

Así que juntos buscamos un jueguito en el celular, y comenzamos a jugar... Un juego nos pareció buena idea, porque no requería mucho esfuerzo mental. Solo le picabas a todos los botones para que los monstruos se murieran... o te murieras tú.

El encanto de este juego es que es un juego interactivo, en donde el 90% de las otras cosas que se mueven, son también personas detrás de su celular, buscando matar el rato (y a los monstruos).

El desencanto del juego, es que es un servidor turco (sí, lo podías traducir a tu idioma, pero el 80% de las personas que jugaban ahí eran turcos)

Lo que significaba que te iban a escribir cosas como: dolu büyülu saç aliniīr

Y tú no tenías forma saber si te estaban saludando, o te estaban mentando la madre, o ambas 😅

Mi esposo y yo estuvimos jugando solos un tiempo, pero como el juego es interactivo, eso significa que avanzas más si haces amigos. Pero fomentar una amistad con una barrera de idioma tan grande, está un poco difícil...

Así que creamos un grupo de WhatsApp de hispanohablantes, y cada vez que nos topábamos a un personaje llamado tipo: JuanPedrito123 ...pues le escribíamos y
Lo invitábamos a la secta.

Y el grupo se fue haciendo más y más grande. Y pasar el tiempo con mi esposo de esa forma, me ayudaba también a no pensar (ni a sobrepensar, ni a sobrerecordar, y a no auto-flagelarme por no ver cinco años atrás lo que fue en su momento muy obvio), a convivir, y a estar más preocupada por comprarme una espada que por... sobrevivir en la vida real.

Mí personaje era más fuerte contra otros personajes que contra monstruos, así que a veces pues... mataba al personaje de mi esposo. Y sí, sí me hacía sentir mejor... por un rato.

Luego mi vacío emocional regresaba, y entonces me ponía mejor a hacer misiones o algo, a hacer ruido, a echar escombro sobre todas las cosas en las que no quería pensar.

Y en el grupo de WhatsApp pues, sorpresivamente se me hizo muy fácil interactuar (a pesar de que toda la vida he sentido que yo vibro a una frecuencia mucho más baja que la mayoría de las personas, lo que ha provocado que en una buena parte de todas las reuniones o eventos sociales a los que he asistido, yo me sienta mucho más cómoda en una equinita, autisteando) pero en ese grupo era diferente, porque podía platicar con todos ellos sobre ese hobbie que compartían conmigo, y era fácil, y no se requería demasiada agilidad mental para poder hacerlo... solo era hablar de monstruos, y de espadas, y de niveles... y de cosas en las que mi salud cognitiva no me hacía quedar como una completa idiota. Cosa que últimamente me pasaba todo el tiempo, inclusive cuando intentaba mantener conversaciones conmigo misma.

Además pues, casi todos eran casados o tenían pareja como yo; como nosotros, así que era bonito y se sentía sano.

Y pues, se fue creando una amistad...

Pero luego yo cometí un error muy grave, uno que me hizo poner todas mis redes en privado, por pena, y por culpa, y por todo.

Porque mis emociones que habían estado tanto tiempo bajo un anestésico, fueron poco a poco despertando, y yo no estaba preparada para lidiar con ellas. De hecho creí que el daño había sido tanto, que ya se iban a quedar así... medio insensibles, medio dormidas, medio existiendo.

Pero la cosa es que después de tanto tiempo como un zombie; volví a sentirme interesante, y divertida, y ocurrente, y persona. Muy persona, algo que llevaba muchos meses sin sentir...

Y es creo que obvio, que siempre dentro de un grupo, siempre hay alguien con quien tienes más química.

Alguien con quien hablar es fácil, y desahogarte, y contarle tu vida y que te cuente la suya.

Alguien con quien es fácil conectar emocionalmente.

Alguien que se acomoda muy bien en un huequito que llevabas arrastrando hace tiempo. Un huequito chiquito pero profundo y doloroso. Un huequito en el que una persona de carne y hueso no cabe, porque una persona física, es alguien con quien incluso debes esforzarte para hacer contacto visual, y mantener una cara, y mantener un tono, y también hay un tiempo límite para responder preguntas, porque de lo contrario van a tildarte de maleducado.

Interactuar físicamente con alguien es en resumen: agotador.

Pero con una persona virtual es diferente, los tiempos son diferentes, porque si te preguntan algo, y tu cerebro no da el ancho y comienzas a disociar, no importa mucho, nadie te va a tildar de nada y puedes contestar cuando quieras.

Y pues, me pasó algo que no debió pasarme y de lo que me siento muy pero muy arrepentida.

Porque recordemos que el 90% de las personas dentro de ese grupo tienen pareja, yo incluida.

Mis emociones estuvieron tanto tiempo perdidas, que cuando regresaron a casa, no supe cómo manejar esta nueva conexión emocional que se sentía, y acabé vomitándole cantidad inmensa de sentimientos a esa persona.

Como si a una manguera le hubieran puesto una liga y el agua se hubiera estado acumulando y acumulando... Luego esta liga hipotética revienta... y sucede un desastre.

Platicar con esta persona hacía que mi corazón se sintiera calientito y arropado.

Como un lugar seguro en el celular.

Y esta persona era la amabilidad en persona. Un Sol.

De esas personas que son en realidad buenas con todo el mundo, porque esta es una persona sana, que siento que tiene la maldición de que le gusta resolver los problemas de todo el mundo... y en mí vió muchos 😞

Y yo, que era un desastre emocional de pies a cabeza, sin forma, sin raíces, y con un corazón deshidratado... no supe cómo lidiar con este suero.

Me creí muy lista, y el 90% de nuestra interacción fue algo puro, y bonito, algo respetuoso.

Pero el 10% restante, le dije que desde que había comenzado a hablar con él, me habían regresado las ganas de escribir y de leer, y le agradecí por eso.

Fue una platica que jamás estuvo subida de tono, ni fue de índole sexual, ni romántico; jamás hubo "te quieros" de ninguna parte porque eso estaba en proceso, era una relación de amistad demasiado nueva como para que existiera un "querer"

Jamás hubo un "te extraño" ni tampoco sé sintió, jamás hubo de mi parte algún sentimiento negativo a su pareja, al contrario, vi pocas fotos y me pareció preciosa, y yo sentía muy bonito cuando él subía fotos de ellos juntos.

Y jamás deseé un lugar diferente al que tenía, y estoy segura de que jamás se deseo el lugar de mi pareja. Es una persona que vive tan pero tan lejos que estoy segura de qué nunca nos vamos a conocer, ni tampoco deseamos hacerlo, simplemente compartíamos una ventana de chat que se sentía como un lugar bonito y cómodo (recordemos que estoy todo el tiempo hablando por mí, porque esa persona hablaba con muchas personas del juego a la vez, en un plan bueno, y para él nuestro chat era un chat más y yo soy consciente de eso, y eso me da tranquilidad y un poco de paz mental).

Pero en esa platica que tuve a deshoras, se me hizo fácil hablar de MIS sentimientos, desfogar, fui una persona emocionalmente muy irresponsable y no he dejado de auto-flagelarme por lo que hice.

Porque se me hizo fácil decir lo que sentía:

"Gracias por ser una persona tan bonita"

"Gracias por este trato que me das"

"Gracias por regresarme la inspiración"

"Hoy me dieron muchas ganas de leer uno de esos libros que creí que no iba a querer volver a leer jamás... Gracias"

Ese tipo de cosas, no se le deben decir a una persona que tiene pareja.

Y por cuestiones ajenas a mí, esa conversación llegó a la pareja de esta persona.

Y ahora yo me siento como la persona más horrible del mundo. Porque siento que por mi irresponsabilidad emocional, acabé haciéndole sentir a esta chica un pequeño porcentaje de todo este dolor que traigo arrastrando.

Y eso es algo que me juré a mi misma que jamás haría y me fallé completamente.

Así que decidí cortar absolutamente todo canal de comunicación. Porque me siento muy mal, con mucha pena, sin nada de cara para dar la cara.

Me siento como si me hubiera transformado en mi miedo más grande.

Y eso me hace darme cuenta de que no estoy lista para tener ninguna conexión emocional, no por ahora, no con nadie.

Con respecto a mi vida amorosa, mi esposo y yo nos hemos dado cuenta de que nuestra relación está muy dañada, así que es necesario resetearla, y vamos a regresar al principio, a ser amigos y a tratar de construir algo sano a partir de ahí.

Y yo, es verdad lo que dije, que pude volver a imaginar escenarios ficticios, y que también estoy pudiendo narrar sin perder la idea, aunque no siento que sea algo fluido del todo aun, pero me da gusto poder hacerlo de nuevo :(

Así que estoy de regreso, en muchos pedacitos, y buscando arroparme bajo esta cobija llamada Wattpad.

Estoy de vuelta en casa.

Y estoy llena de sentimientos buenos y malos, pero muy reales, con los que espero poder hacer algo que valga la pena aquí.

Y estoy de vuelta como persona, confesando mis faltas, y reconociéndome imperfecta, y con la necesidad de sacar todo esto en algún lado, sin afectar a nadie.

Y estoy aquí con mucha culpa y mucha tristeza por lo que hice, y por lo que soy, y por lo qué no quería ser y de todas formas fui.

Pero al final la culpa y la tristeza son cosas que no siente un zombie, y son emociones que pretendo abrazar, porque son mías y ellas también hace mucho tiempo que no estaban en casa.

Y no sé por qué hago esto, pero puede que sea un poco la necesidad de que muchas de ustedes dejen de idealizarme como persona solo porque les gusta cómo escribo.

Porque soy súper imperfecta, pero creo que de esas imperfecciones, de sentirlas, de los errores, y de mis vuelos más bajos... es de donde nace mi inspiración.

Esta experiencia me hizo darme cuenta de que es muy fácil lastimar a otros cuando tus sentimientos te agarran con la guardia baja, y es algo que no quiero que me vuelva a pasar.

No quiero que nunca más una mujer vuelva a sentirse triste por mi culpa.

Pero bueno llegados a este punto con esta catarsis de casi 3000 palabras (lo cual me hace sentirme un poquito feliz dentro de todo este caos, porque de alguna forma es un logro y un primer paso)

Quiero agradecerles mucho por haber leído esto, y si ustedes quieren, son libres de platicarme cualquier cosa que gusten, como si nos estuviéramos tomando un café 🫶🏻

Besitos. Marluieth.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro

Tags: #tristeza