One Short
—Yo sigo creyendo que la nueva canción debería ser sobre el color rosa— Dijo Rose, después de escuchar sin parar las quejas de sus compañeros de banda sobre la temática de todas las canciones.
—¡Las últimas tres canciones fueron sobre el color rosa!— Dijo frustrado Iván mientras levantaba el cielo las manos .
—De hecho la última fue sobre conejos rosa— Comento Juleka indiferente.
Iván simplemente soltó un resoplido y volvió a sentarse junto Juleka visiblemente inconforme.
—Podemos hacerlo sobre calaveras rosa si es lo que quieres...— Sugirió Rose mientras giraba en la silla del escritorio sin poner realmente atención a los demás.
—¿Y si cada quien escribe una canción y usamos las mejores?— Habló por fin Adrien, quien solo se mantenía muy atento a la discusión.
— Me parece bien, adiós— Iván se levanto y sin mirar atrás salió de la habitación tratando de sacudirse el mal humor que le habían provocado los últimos treinta minutos hablando de lo mismo.
Después de unos instantes en silencio, la siguiente en levantarse fue Rose.
—También me voy, ¡adiosito!
Y nada después de que la rubia saliera, Juleka fue tras ella para acompañarla.
— Bueno... Parece que solo quedamos tú y yo— Dijo Luka, hablando por primera vez desde que empezó el tema de las canciones. Se separó de la pared de donde estaba apoyado y se dirigió al sillón que momentos antes estaba ocupado no sin antes tomar su guitarra.
—Sería raro que el siguiente en irse fueras tú... Ya que es tu casa— Adrien mencionó sonriendo mientras que con una mano se rascaba el cabello—¿Y que vas hacer ahora?
—Tal vez comience a escribir la canción— Dijo con un encogimiento de hombros y una pequeña sonrisa, el pelinegro.
—Entonces es mejor que me vaya...
—Puedes quedarte y ayudarme si quieres— Dijo Luka mientras sonreía al menor.
—¿De verdad? ¡Me encantaría!—Casi gritó Adrien de emoción-- Aunque no se mucho de escribir canciones —Completo un poquito avergonzado.
—Si escribes canciones como tocas el teclado, apuesto que sera fácil— Alentó Luka.
—Entonces... ¡Escribamos una canción!— Gritó Adrien, feliz de poder ayudar a su amigo.
Y como buenos niños, se pusieron manos a la obra. Adrien ocupó la silla en la que antes se encontraba Rose en el escritorio, y tomando un lápiz se dispuso a escribir todo lo que Luka le dijera, quien se encontraba sentado directamente en el escritorio mientras acariciaba suavemente las cuerdas de su instrumento.
Luka le dijo que escribiera la fecha, Adrien lo hizo, Luka dijo que escribiera ambos nombres y Adrien lo hizo. Y después de eso los dos chicos se quedaron sin ninguna idea.
—Esto es mas difícil de lo que creí—Soltó el rubio después de diez minutos en silencio y ningún avance.
—¡Lo tengo!— Gritó Luka saltando de su lugar en el escritorio. Para empezar a golpear un costado de su guitarra al ritmo de la melodía que acababa de crear.
—¡Es genial! ¿Qué tal si le sigues con algo así?— Adrien se levanto y mientra hablaba se dirigió al teclado para tratar de acomodar un poquito más la idea de Luka.
—Podría funcionar... Pero no creo que sea la esencia de la canción— Menciono Luka algo apenado.
—¿La esencia? ¿Y cómo es?
—Es como...— Luka movió las manos como tratando construir la respuesta- Es complicado de explicar es más un sentimiento.
—¿Cuál?— Preguntó el rubio algo confundido.
—Es... Ven aquí.
El rubio se separó del teclado y camino hasta Luka que había dejado su guitarra junto al escritorio.
Cuando estuvo lo suficientemente cerca, el pelinegro le ofreció la mano y cuando estaba a punto de tomarla, se sorprendió al ser acorralado contra el escritorio. Y sin pasar aun la sorpresa inicial sintió como era tomado por la cadera para ser subido al mueble y obligado a abrir las piernas para que entre ellas se colocara su amigo.
Las palabras de protesta murieron en su boca, cuando sintió las caricias de unos labios en su cuello.
Luka se encontraba besando el cuello y la clavícula del chico que sostenía firmemente con una de sus manos en la cadera y la otra curioseando por debajo de la chaqueta del ojiverde. El rubio dejo que explorará extasiado, mientras que revolvía el cabello negro con puntas azules de su acompañante.
—¿Qué te parece la esencia de la canción?—Susurro Luka en el cuello de Adrien, quien soltó un delicado suspiro.
Luka sintió como Adrien lo separaba suavemente por los hombros, y cuando levando la vista para ver a su amigo, casi se asusto por lo que vio.
El usualmente calmado y tranquilo Adrien, lo estaba mirando con deseo en sus ojos y una sonrisa casi gatuna.
—Se exactamente como continuarla— Y con un gesto de detonaba confianza. El rubio tomo las mejillas de su compañero y acerco su cara para un beso, que no tenía que ver con los amables toques que disfrutó en su cuerpo.
Las bocas de Adrien y Luka se unían con demasiada ferocidad, y cuando Adrien delineó con su lengua la boca de Luka, el gemido de este fue la escusa perfecta para que sus lenguas por fin se conocieran.
Mientras la guerra continuaba, las manos de Adrien se ocuparon de jugar con su nueva cosa favorita, el pelo de Luka. Y las manos del pelinegro recorrían con gozo todo lo que la estorbosa ropa les permitía.
Sin romper el beso, Luka logro quitarle la chaqueta al rubio y la lanzó al piso descuidadamente.
Cuando Luka esta apunto de meter sus manos bajo la camisa de Adrien, un mordisco lo hizo separarse del rubio.
—¿Te a mordido la lengua el gato?— Soltó con una risita Adrien al ver la cara de estupefacción de su amigo.
—Me mordiste—Fue todo lo que pudo decir Luka, aun sorprendido.
Adrien solo se encogió de hombros y separando a Luka, saltó del escritorio.
—Vamos a escribir o se nos olvidara la canción— Dijo el rubio, mientras le daba la espalda y caminaba hasta su chaqueta caída.
Luka solo pudo observar su caminar, imaginando una cola que se mecía a cada paso del rubio.
Cuando Adrien volvió junto a él, Luka se hecho a reír.
—Me va encantar escribir canciones contigo.
—Lo sé—Respondió Adrien, como gato que mira su presa.
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So... ¿Qué les pareció?
¿Alguien quiere una segunda parte? Solo pidan :D
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