Todoroki termina de beber su refresco. No está de buen humor después del número de Midoriya expresándole amor a su casi novio donde Bakugō estuvo aterrado en gran parte del tiempo hasta que Aizawa le sacó del aula. Simplemente no sabe qué pensar después de aquello.

—Sabes que yo no tengo la culpa.

—Lo sé.

—No regresamos, no le repliqué porque llegó Aizawa y a duras penas nos levantaron el castigo como para que haga una estupidez y me vuelvan a castigar.

—Ya, eso lo entiendo, te vi con cara de terror porque creías que podría matarse cuando agarró su lápiz.

Bakugō desvía la mirada—. Pudo suceder.

Todoroki desvía la mirada sintiéndose tonto.

—Lo siento, ¿por qué ocurrió?

—Hablábamos y salió a tema.

—¿Que regresarían?

—¡No! Mierda, ¿es que Deku nunca te habló de cómo fue nuestro noviazgo?

—Me dijo que el amor de su vida estaba en el mismo salón que nosotros, que estaban planeando regresar porque estaban atravesando un mal momento, eso fue todo.

—O sea, nada.

—Hay cosas que también me dijo y no recuerdo.

—¿Y quieres saber?

—No es como que me haga muy feliz escuchar la historia de amor del chico que me gusta con su ex, pero si es necesario, prefiero saberlo.

—Y estás en todo tu derecho de no querer escucharlo, puedo decirte que no es por ti, es algo que se ha ido arrastrando durante mucho tiempo.

—Lo hablamos hace una semana, lo sé. Estoy trabajando en mis celos, hago bolitas, esas cosas, trato de no hacer estupideces. He visto esto muchas veces con mi familia y cada que aparece un ex, todo se complica, pero trato de que esto no nos afecte. Aún así, suena muy conveniente que se pusiera mal por hablar banalidades.

Ah, otra vez fue un idiota.

—¿Conveniente? ¡Joder, que hablábamos sobre el entrenamiento!

Mierda.

Todoroki lo mira confundido.

—¿Qué entrenamiento?

—Olvídalo.

—¿Entrenan juntos?

Bakugō desvía la mirada.

—Sí.

—Se siguen viendo.

—¡No es lo que crees!

Todoroki aprieta los párpados—. Lo siento, nunca había estado tan celoso. No quiero cagarla, así que habla.

—Eres muy ambivalente.

—Lo sé, es una mierda, ¿me das de tu jugo?

Bakugō se lo pasa, Todoroki se lo acaba de dos sorbos.

—Te lo acabaste.

—Te compraré otro, lo prometo.

—No es necesario.

—Ya estoy más tranquilo.

—Estamos progresando.

—¿Cómo está eso de que entrenan juntos?

—No te puedo contar mucho, pero digamos que lo ayudo para que cumpla su sueño, por así decirlo.

—¿Por qué no me puedes contar?

—Porque no te incumbe, genio. No es nuestro asunto.

—¿Y él no te trata de...? Ya sabes, coquetear y esas cosas.

—Lo hace, pero no me dejo.

—¿Has hablado con él sobre eso?

—Muy poco, temo que se ponga así de nuevo.

—¿Así?

—Como en el salón, no quiero que se ponga mal.

—¿Por qué no puedes dejar morir su relación de una vez? ¿No puedes echarte para atrás?

—Es que ya está muerta, pero no puedo dejar de entrenarlo, es un compromiso.

Todoroki suspira.

—¿Sabes? No vamos a ir a ningún lado si sigues con Midoriya.

—¿De qué hablas?

—De que hablemos con él, será muy amigo mío y muy tu ex, pero ya no estoy dispuesto a dejarle al amor de mi vida porque él se siente triste.

—¿Cómo que ya no?

—Bakugō, no busques pelear.

—Te llevas, pero no te aguantas —pellizca su nariz—, que sepas que si estoy contigo es porque quiero, no porque ustedes me regalan, ni que fuera pinche pelota.

—Es bueno saber que me quieres.

—Digo lo mismo, ya que soy el amor de tu vida.

Bakugō ríe con malicia después de haber dejado el rostro de Todoroki tan colorado.

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Accidentalmente proyecté mi ex relación más reciente jajaja salvo que no tendrán el mismo final

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Post nota; en ese entonces estuve en una relación con vibras eh... similares. Mi más reciente no es así, no lo quiero ofender.