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[Capitulo 19.] Somos uno, sólo uno.

Después de mi primer día como camarera en el restaurante junto a Jackson, llegamos a casa y fuimos directos a la habitación. Busqué en mi armario un pijama cómodo con cuadros, mientras que Jack se  desnudaba hasta quedarse en ropa interior y meterse en la cama, esperandome. Cuando me puse por fin mi pijama, me introducí en la cama con él. Jack me rodeó con uno de sus brazos cuando se puso de lado y me observaba con una sonrisa dulce y suave.

- ¿Por qué llamas así a tu padre?

- Oh...no quiero hablar de ese hombre.

Jack me puso ojitos mientras que con sus dedos acaricaba mi cabello con lentitud, haciendo un ligero masaje. Tragué saliva y me incorporé, sentandome y apoyandome sobre el cabecero. Jack hizo lo mismo, agarrando mi mano.

- Le llamo así por que está perdido en la vida. Por que cuando fracasa en sus objetivos, nos culpa a nosotras.

- ¿ A tu madre y a ti?

- Si. A Gisel la tiene manipulada.

Abrió la boca de par en par impresionado por mis palabras. Seguidamente, me rodeó con sus brazos lentamente,por lo que yo correspondí posando mi cabeza en su pecho. Mientras que escuchaba los latidos del corazón de Jack, cerré mis ojos empezando a relajarme. Cada vez que por mi mente se me pasaban escenas en las que mi padre discutía con mi madre por no ejercer su trabajo como padre, la rabia en mi interior aumentaba. Odiaba a ese hombre, y si no llegaba a cambiar, lo odiaría más. Jackson suspiró y alcé la mirada hacia la suya, parpadeando.

-¿Ocurre algo?

- No. Sólo estoy tranquilo y cómodo a tu lado, Juliet.

Me miró sonriendome con la mejor sonrisa que tenía y me enamoraba más y más. Me gustaba mucho este chico y confiaba en él cada día más gracias a su apoyo y cariño. Jackson me agarró del mentón y me besó dulcemente y con lentitud, a lo que yo correspondí encantada y dejándome llevar por sus besos húmedos. El beso aumentó la aceleración de mi respiración, me faltaba el aliento, y aún más cuando Jack se puso encima de mi, cuerpo con cuerpo. A pesar de tener mi pijama puesto, sentí su pecho caliente. Jack no paraba de besarme y mucho menos de hacerlo con los ojos abiertos. Él me miraba y sonreía, a la vez que el beso se hacía más intenso y yo cerraba mis ojos. Seguidamente, coló su mano por debajo de mi pijama, acariciando mi torso con las yemas de los dedos, lo que hizo ponerme la piel de gallina. Jackson me miró a los ojos antes de subirme un poco más la camiseta y quitarmela. Estaba dispuesta a dejarme llevar. Levantó mi pijama y me lo quitó por encima de la cabeza cuidadosamente de que no se enganchara en mi cabello rojizo, tirándolo al suelo. Mis ojos solamente veían a un chico extremadamente guapo y musculoso que empezaba poco a poco a acariciarme cada parte de mi cuerpo de cintura hacia arriba. Deslizó sus dedos por mi torso, por mis costados, haciendo un lento recorrido por mi pecho sin tocarme y después, deslizó sus dedos hacia abajo con la misma lentitud. Me estremecí.
Mi respiración de repente se aceleró cuando Jackson agarraba mi pantalón y empezó a bajarlo, no sin antes mirar mi reacción, si estaba dispuesta o no. Me sentía descontrolada a la vez que entregada y miedo al dolor. Me dejaba llevar por mis sentimientos y en ese momento no quería detenerme ni tampoco quería que nada nos interrumpiera. Cuando Jackson me quitó el pijama por los pies y me quedé en ropa interior, se puso de rodillas a la altura de las mias , mirandome impresionado. Observé abriendo poco a poco mis ojos como se mordía el labio inferior, deseoso. Seguidamente se acercó a mi rostro mientras que volvía a ponerse encima mia, sintiendo el tacto de nuestras pieles. Rozó mis labios con los suyos a la vez que su nariz contra la mia, susurrando despacio y acariciando una de mis mejillas, mientras que con la otra acariciaba mi cintura.

- Te quiero...

Hundió sus dedos en mi cabello cuando deslizó su mano por mi rostro hasta éste. Entreabrí mi boca esperando la suya a la vez que cerré mis ojos escuchandole, pero a los pocos segundos contesté

- Te quiero, Jack...

Noté como esbozó una amplia sonrisa cuando aún estaba rozando sus labios con los mios. Me besó nuevamente y suave, con lentitud aunque intensamente, casi dejandome sin aliento. Se puso entre mis piernas, haciéndose hueco y pegandose a mi. De repente se rozó contra mi, por lo que yo solté un leve jadeo al notar aquella sensación nueva. Bajó sus besos hacia mi pecho, haciendo un despacio recorrido por mi lóbulo y cuello, cubriendolo de besos húmedos. Mi respiración cada vez se agitaba más y más por las nuevas sensaciones que estaba experimentando y me recorrían por todo el cuerpo. Jackson bajó hasta mi cintura, besandome con cariño y despacio hasta que mordió el filo de mi braguita y seguidamente alargó su brazo hasta el primer cajón de la mesita. Empezó a quitarme la ropa interior poco a poco, dejándola a un lado, y cuando estabamos completamente desnudos, Jackson se volvió a poner de rodillas para colocarse bien el preservativo en su miembro. Cuando noté su aliento en mi rostro, abrí los ojos tragando saliva, pero no obstante, volví a cerrarlos por el momento.Volvió a rozarse contra mi despacio, introduciéndo solamente la punta. Mis nervios se apoderaron de mi cuerpo y empecé a temblar levemente. Jackson me miró a los ojos acariciando mi rostro.

- Mírame.

Abrí lentamente los ojos al escuchar la voz de Jackson suavemente en un susurro.

- Tranquila...

Asentí esbozando una sonrisa algo nerviosa. Intentaba calmar mis nervios, que poco a poco , podría controlar con el paso de unos segundos. Jackson mordió mi lóbulo y lo besó despacio, soltando un jadeo cerca de mi cuello el cual me estremeció e hizo que mis ganas de sentirle aumentaran. Levantó mis rodillas, doblando éstas y apoyando mis pies a cada lado de su cuerpo, abriéndome. Empezó a introducirse en mi interior poco a poco a la vez que observaba mi reacción de vez en cuando. Estaba sintiendo algo nuevo, dolor al principio pero también me hacía sentir poco a poco placer cada vez que lo sentía más y más dentro de mi. Al principio, me quejé por el dolor. Después, empecé a descubrir el placer que me provocaba cuando estaba totalmente dentro de mi. Jackson se quedó quieto en mi interior mientras que me besaba y mordisqueba mi cuello. Acarició mi cabello y empezó a deslizarse hacia atrás y hacia adelante con una velocidad lenta y suave, pero con el paso de algunos minutos la velocidad cambiaba y la intensidad también. Jackson no dejaba de mirarme a la vez que él también disfrutaba del momento sin separase de mi en ningún instante. Todo fue jadeos, gemidos, un placer inexplicable que recorría cada parte de mi cuerpo y, él y yo éramos uno.

***

Cuando la hora en la que Jackson me dió placer y me hizo sentir algo increíblemente nuevo acabó, se tumbó a mi lado abrazándome y arropandome con las sábanas. Me sentía agotada , las piernas me dolían como si hubiese corrido una maratón, mi cuerpo estaba relajado, y yo de repente, tenía mucho sueño. Jackson acariciaba mi cabello con suavidad a la vez que me observaba y posaba besos por todo mi rostro. Me mordí el labio inferior dejando salir una de mis mejores sonrisas ya que me sentía totalmente liberada, por así decir. Miré a Jack atentamente.

- Juliet, eres maravillosa. Dijo con una sonrisa en su rostro.

- Tú eres maravilloso.

- Estoy loco por ti. Desde que te conocí mi mundo cambió.

Me incorporé con las sábanas arropando mi cuerpo, sentandome a su lado y apoyandome en el cabecero, tal y como él estaba a la vez que suspiraba con una sonrisa.

- Quiero que seas mía. Por favor...Te quiero.

Jackson cogió una de mis manos como suplicando que fuese suya. ¿Es qué no parecía que me hubiese entregado a él? Sonreí como una loca enamorada como una está por un chico que la enloquece.

- Me he entregado a ti... Dije con una sonrisa en mi rostro.

- Lo sé, y me alegra saber que tienes confianza depositada en mi.
Pero..quiero que seas oficialmente mía.

- ¿Qué me estás pidiendo?

- Que estés dispuesta a tener algo serio.

¿Algo serio? ¿Novios? Negué con la cabeza a la vez que no podía evitar dejar salir una pequeña risa de mi interior. Dejé la sábana caer sobre mis piernas cuando posé ambas manos en sus suaves mejillas y mirandole a los ojos.

- Pero no quiero sufrir, así que ten cuidado.

Jackson se puso encima de mi mientras que me besuqueba por toda la cara contento y feliz de mi respuesta. Besó mis labios intensamente y suavemente hasta que terminó el beso con un leve mordisco en mi labio inferior. Seguidamente se puso sus boxes en su cadera y me ofreció la mano.

- Vamos a darnos una ducha.

***

Una vez en la ducha, el agua caía sobre nuestros cuerpos, relajándo por completo el mio por lo que mis ojos se cerraron. Jackson, que estaba justo detrás de mi, se acercó posando un beso sobre mi frente cuando terminó de enjabonarse. Sonreí por aquello y disfruté del momento ducha junto a él. Abrí mis ojos mirando hacia mis pies y seguidamente noté como las manos de Jack se deslizaban desde el final de mi espalda hasta la altura del ombligo, abrazandome.

- No te voy a hacer sufrir. Yo te voy a querer y proteger.

Me giré despacio para mirar a Jack a los ojos mientras que notaba el agua sobre mi cuerpo y el sonido me relajaba.

- Me entregué a ti por que confio en ti y te quiero.

Jackson me abrazó con ternura al escucharme. Era increíble sentir lo que estaba sintiendo por este chico, era algo nuevo para mi y solamente esperaba no llevarme una decepción por su parte. Esperaba totalmente sinceridad, cariño, respeto y que confiara en mi. En realidad, me gustaba empezar a tener algo más que amistad con Jackson, pero también temía de que algún día, todo se acabara.

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