La de cabellos pelirrojos se abalanzó a la de cabellos albinos haciéndola reír.
-Yo también te he echado de menos Hilla- sonrió la más baja.
-Nee,Kim es- La de cabellos celestes salió de la cocina y miro a Hillary y ladeo la cabeza -¿Quien es ella?-
-La mejor amiga de Mad- respondió seca y cortante.
Mad noto aquello y suspiro para después mirar a Hillary con una gran sonrisa.
-¿Vamos a mi habitación y te cuento todo?- pregunto la albina -¡Ay! Espera ¿mi habitación es la de antes?- La rubia-castaña asintió -¡Gracias Kim!
-Mhm-
Entonces miro a la pelirroja
-¿Vienes?- pregunto mirando a la ojiverde que negó con la cabeza.
-Lo siento pero tengo que volver a casa, mamá me esta esperando, pero ¡otro día seguro!- Sonrió alegre
-Oh, esta bien-

La albina subió a su habitación una vez se hubo despedido de su pelirroja amiga,se sorprendió al ver su habitación y se tumbó en la cama, ya colocaría bien la ropa en el armario más tarde, estaba agotada.

En cambio la menor de las mellizas estaba ayudando a su torpe pero adorable amiga.
-Elizabeth te lo he explicado ya 7 veces deberías de entenderlo- replicó la menor de las dos
-But the maths are so complicated!- replicó la peliceleste con un tierno puchero.
La rubia-castaña suspiro.
-Esta bien, te lo explicaré una vez más- respondió resignada
-Thank you Kim!I love you!- Dijo abrazando a su mejor amiga
-Ya que- se resigno la más baja.
Mad bajo una hora después de una siesta.
-Nee~ ¿Y mamá?- pregunto tallandose un ojo mirando como la otra cocinaba.
-Trabajando, dentro de media hora vendrá- respondió mirandola de reojo -Date una ducha si gustas de ello- soltó indiferente.
-Hai, hai- soltó resignada al ver que su melliza no cooperará al llevarse bien con ella aunque sea un poco.

Una vez salio del baño, bajo a cenar, al ver a su hermana menor con una hermosa mujer albina y de orbes aguamarina sonrió y se abalanzó a los brazos de la mayor siendo bien recibida por estos.
La cena se basó en charlas y preguntas hacia la mayor de las mellizas que esta respondía de forma enérgica y entusiasta.
Kim se levantó de la mesa una vez hubo limpiado todo, por supuesto pidiendo permiso antes. Se baño y cambio dispuesta a irse a dormir pero una tormenta hizo que sus miedos la dominarán y saliera corriendo hacia la habitación de la albina.

Esta al ver a su hermana se extraño bastante pero esta se abrazó a ella con un gran miedo y temblando.

-Vamos entra- al ver que Kim era incapaz de moverse la cargo delicadamente y la deposito en su cama suavemente para después ir a cerrar la puerta. Se tumbó al lado de su melliza dejando que esta la abrazará mientras ella correspondía el gesto, se embrago del aroma a cerezas que tenia la menor y quedo profundamente dormida junto con esta.

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-Nee~ ¿te gusto el capitulo?- pregunta Mad abrazando a Kim esta suspiro e intento zafarse del agarre.
-No- respondió seca
-Qué cruel~- burló sin dejar de abrazarla.
-Bueno dejemos a esas dos con sus asuntos, espero que les guste el capitulo, voten y comenten, gracias ^o^/