¿Qué es la mala suerte? Para mí, la mala suerte es encontrarme sentada en el baño de la universidad en la cual estudio, realizándome una prueba de embarazo. Mi periodo tiene 4 semanas de atraso, además de eso he presentado inflamación y dolor en los pechos, me agoto fácilmente y he sentido muchas nauseas. Cuando les conté estos síntomas a mis mejores amigas las dos me convencieron de que podía estar embarazada y entre las tres decidimos comprar una prueba de embarazo. Como no tenía donde hacerla, debido a que en mi casa me podían encontrar la prueba, mi única opción fue realizarla en el baño de la universidad dado que era más práctico, y aquí estoy, sentada sobre el lavamanos tapando mi rostro con mis manos, angustiada y con mi mente plagada de pensamientos negativos, ya que solo tengo 20 años de edad, por lo cual aún soy muy joven para quedar embarazada y eso podría arruinar muchas cosas de mi vida.

-Listo, ya pasaron los 5 minutos –Indica Alexandra sacándome de mis pensamientos.

Me descubro el rostro para observar la prueba con miedo, sintiendo ansiedad y preocupación por el resultado que podría arrojar.

-Mira el resultado –Comenta Laura, ambas están nerviosas, incluso más que yo.

Alargué mi mano para tomar la prueba, pero la retiré debido al temblor de las mismas sintiéndome incapaz de mirar el resultado que decidiría mi futuro.

-No puedo hacerlo, mírenlo ustedes –Junto las manos sobre mi regazo jugando con ellas para intentar distraerme de lo que está sucediendo.

Ambas se miran dudosas, hasta que se atreven a tomar el aparato, luego de mirar el resultado, hubo un momento de silencio.

-¿Podrían hablar? –Les pido al sentir tensión ante ese silencio inquietante.

Alexandra y Laura comparten miradas, como si hablaran por medio de estas.

-Salió positivo –Dicen ambas al unísono, sus miradas de preocupación se dirigen a mí.

Y con solo esa frase, lograron que sienta como mi mundo se derrumba, ¿Qué debo hace ahora? Soy muy joven e inmadura para ser madre, hay muchas cosas que quisiera cumplir y estar embarazada podría dificultar eso. Además ¿Cómo le contare al padre de la criatura? No me siento preparada para ser madre, ni siquiera sé si podría ser una buena madre. Me crie en un ambiente estricto y tengo miedo de ser igual a mi madre.

-No lo puedo creer –Las lágrimas comienzan a resbalar por mis mejillas ante esa noticia- ¿Y si la repito? Seguro es un error...-

-Marie... -Susurra Laura.

- ¡No puedo estar embarazada! -Exclamo pasando mi mano por mi cabello y alborotándolo –Simplemente no puedo, no me creo capaz de criar a un niño.

Alexandra me mira denotando lástima, lo que me hace sentir aún más abrumada. Odio la sensación de dar lástima.

-Podrías repetirla, pero me parece más adecuado que vayas a un doctor.

Laura asiente –Debes realizarte un examen, eso sería más seguro.

Niego repetidamente con mi cabeza mientras continuo llorando.

-No llores, todo estará bien –Dice Laura y ambas me abrazan.

-¿Qué haré ahora? Mi vida quedara arruinada ¿Cómo seré buena madre? No soy lo suficientemente responsable de mi vida ¿Cómo podre ser responsable de la vida de otra persona? –Las lágrimas siguen cayendo por mi rostro y siento como el aire me falta, causando que respire de manera agitada.

-Marie por amor a Dios, tienes excelencia académica, eres un genio, trabajas, estudias, eres tan buena amiga e hija, no bebes, no sales, eres tan bien portada, serás la mejor madre que ese niño quisiera tener –Afirma Alexandra, intentando tranquilizarme- Debes afrontar esto con calma.

–Intenta pensar con calma, no es sano que te estreses de esta manera –Dice Laura– Todo se resolverá –

–Exacto, serás una madre magnifica –Añade Alexandra– Estoy segura de eso.

-Si decides tenerlo... -Concluye Laura.

-¿Crees que debería abortar? –Volteo a mirar a Laura, sé que es legal, Lucktong ya que posee varias clínicas de aborto gratuito, pero no es algo de lo cual estoy segura de que sería capaz de hacer.

-Claro que no, además, tienes que hablarlo con el padre del niño, debe ser una decisión de ambos lo que suceda de ahora en adelante –Comenta Alexandra, mirando mal a Laura- No debes dejarte llevar por la angustia y miedo que sientes en estos momentos, piénsalo con más calma

-Es su decisión, pero hablando de eso ¿Quién es el padre? ¿Y cuándo quedaste embarazada? –Laura me aborda con preguntas las cuales no quisiera responder. Recuerdo que aún no hable con ellas sobre el día que perdí mi virginidad.

-Es su decisión, pero hablando de eso ¿Quién es el padre? ¿Y cuándo quedaste embarazada? –Laura me aborda con preguntas las cuales no quisiera responder. Recuerdo que aún no hable con ellas sobre el día en que perdí mi virginidad.

-Debió ser en la fiesta a la que fuimos donde estaban todos los de la universidad. Laura se había ido con Rod a hacer no sé qué, y tú, Alexandra, te fuiste con alguien que ni conozco, dejándome sola. Por cierto, gracias por eso – Ambas ruedan los ojos ante mi último comentario y decido contarles lo que sucedió, al menos una parte de ello. – Un idiota me ofreció un trago y pensando que era una gaseosa lo tomé, pero resulta que tenía alguna sustancia que me volvió eufórica luego de beberla. Había perdido mi parte racional, de ahí solo recuerdo a Luke salvándome de algo y dejándome en mi casa –Omito la primera pregunta, no puedo decirles quién es el padre.

-Luke es todo un caballero, cuando éramos novios era súper atento, lo único malo en él es su actitud machista –Cuenta Alexandra, ella fue novia de Luke por un tiempo.- Aunque igual no lo recomiendo de novio.

-Entonces ¿Quién es el padre? –Pregunta de nuevo Laura, ignorando a Alexandra.

-No sé, tengo una idea pero hasta no estar segura no les diré nada –Vuelvo a mentirles, no estoy segura de contarles tengo miedo de su reacción, no quiero que se enojen conmigo. Un sonido de notificación me distrae de mis pensamientos, noto que Alexandra recibió un mensaje.

-Ya llegaron a buscarme, más tarde iré a visitarte. Además que hay que agendar una cita para ver si él bebe está bien –Dice rápido para darnos un beso a Laura y a mí en la mejilla y después se marcha. Cuando sale por completo del baño Laura se coloca frente a mí con los brazos cruzados.

-Sabes quién es el padre del bebé, ¿verdad? –Suelta mirándome fijamente.

-No quiero hablar de eso...

-Marie, debes desahogarte y ser honesta, cuéntame todo –Pide de manera amable.

Suspiro derrotada, Laura es muy persistente y no se detendrá hasta que le diga la verdad. –Si te lo digo, ¿Prometes no decirle a nadie? Ni siquiera a Alexandra

-Lo prometo –Levanta la mano en señal de juramento.

-Es Luke –Confieso apenada, ganándome una mirada de impresión de su parte.

-¿Luke? ¿Luke Smith? ¿Nuestro compañero y ex de Alexandra, la cual es tu mejor amiga? ¿Cómo pudiste tener sexo con él? –Hace todas las preguntas de forma rápida.

-Sí, Luke el ex de Alexandra, y no lo sé, solo paso Laura y ahora estoy completamente embarazada –Las lágrimas vuelven a salir pero aun así decido contarle como ocurrió todo.

-¿Dónde están Alexandra y Laura?-Pienso en voz alta buscándolas por toda la casa. Estamos en la fiesta de unos compañeros que ni conozco, acepté venir porque mis amigas me convencieron de que necesitaba salir y distraerme un poco. Mis padres son muy sobreprotectores y apenas me dejan salir.

-Hey Marie, ¿quieres una gaseosa? –Dice un compañero de clase ofreciéndome un vaso.

-Claro –Acepto sin titubear debido a la sed que tengo por buscar a las chicas por toda la casa. Tomo todo el contenido del vaso y sigo buscando a las muchachas. Luego de lo que asumo es media hora la euforia toma el control de mi cuerpo junto con un ligero mareo, comienzo a sentirme más relajada.

Siento que alguien me toca el hombro y me volteo a ver a un chico, este me sonríe.

-¿Quieres bailar? -Pregunta el chico, reconozco que él me entregó la bebida.

-¡Sí! –Contesto gritando, no está mal que me divierta un poco y baile, además que el chico se veía agradable

Mientras bailábamos me sentía fuera de mí misma, la sala me daba vueltas y una ligera risa se escapaba de mis labios inevitablemente. Luego de bailar por un tiempo sin compartir palabra alguna el chico, del cual desconozco su nombre, se dirige hacia mí.

-Creo que vi subir a tus amigas, vamos –Dice agarrándome de la muñeca para después guiarme por las escaleras.

Subiendo las escaleras me mareo aún más y veo los escalones borrosos, sacudo la cabeza intentando ignorar lo que siento.

-No las veo –Digo revisando el pasillo, el cual estaba vacío.

-Ven, estoy seguro de que tus amigas están aquí – Esta vez el chico me toma por la cintura empujándome hacia una habitación vacía activando mi preocupación.

-¿Qué haces? No quiero estar aquí.

Intento caminar hacia la salida pero una ola de mareos me hace perder el equilibrio y trastabillar, antes de lograr estabilizarme él me sujeta con fuerza y acerca su rostro al mío para intentar besarme pero desvío mi rostro para impedirlo. Suelta un gruñido por mi acción y seguidamente hala mi blusa rompiéndola y dejando al descubierto mis pechos. Intenta tocar mis pechos con sus manos, pero lo empujo antes de que lo haga.

- ¿Te gusta provocarme, gatita? –Me empuja hacia la cama tomando mis muñecas con su mano y sus piernas aprietan las mías bloqueando mi movilidad. En su rostro se dibuja una sonrisa al notar que me tiene aprisionada.

-¡No! ¡Aléjate!, ¡Deja de tocarme! – Grito nuevamente debido a que sus besos se están acercando a mis pechos. – Por favor, ya déjame, no me lastimes.

– ¿Lastimarte? – Su risa retumba en mi pecho haciendo que mis sollozos aumenten. – Te haré gritar tanto de placer que mañana no tendrás voz para agradecerme.

Al escucharlo un escalofrío recorrió mi cuerpo e intenté moverme con todas las fuerzas que me quedaban con la esperanza de liberarme de su agarre, pero nada lograba hacer que me soltase, haciendo que perdiera la esperanza de no ser violada. Cuando estaba a punto de besar mi pecho entra a la habitación Luke, el ex novio de Alexandra de forma brusca.

-¡Aléjate de ella! –Exclama enojado empujando al chico y dándole un golpe seco en el abdomen dejándolo sin aire y haciendo que caiga.

Pero el chico se levanta tambaleándose e intenta darle un puñetazo a Luke pero el con agilidad lo esquiva y lo golpea en el rostro haciendo que el abusador escupa sangre

–¿Quién te crees para arruinar mi diversión? –Dice el chico mientras se acerca nuevamente a Luke e intenta patearlo, pero él le sostiene la pierna y lo hace caer.

Una vez el abusador cae, Luke lo patea en la entrepierna haciendo que se retuerza del dolor.

-Vámonos de aquí –Asiento a lo que dice e intento levantarme de la cama para seguirlo, pero mis piernas me traicionan haciendo que casi caiga de lo mucho que tiemblan por el miedo.

Luke me coloca su chaqueta tapando mis pechos y me carga permitiéndome colocar mi cabeza en su hombro. Salimos de la habitación y algunas personas nos miran mientras atravesamos toda la casa. Cuando llegamos a la calle se dirige a su camioneta y me sube en ella, luego la rodea y se sube él.

-¿Estás bien? –Pregunta preocupado al ver mi estado.

Me miré por el retrovisor y no lo culpo por verme de esa manera. Mi cabello estaba vuelto un desastre, mi blusa rota, tenía marcas en las muñecas por el agarre del chico y la máscara de pestañas se había corrido debido a mis lágrimas dejando un camino de líneas negras que iba desde las mejillas hasta el cuello.

-Sí, yo... Tenía miedo –Apenas confieso eso comienzo a llorar, a lo que él solo pasa su mano por mi espalda acariciándola para tranquilizarme.

-Te llevaré a tu casa, ¿dónde vives? –Pregunta mientras continúa con sus caricias.

-No puedo llegar así, mis padres me matarán. No les gustará encontrarse a su hija en este estado –Digo avergonzada mientras sigo llorando.

-Te llevaré a la mía ¿te parece bien? –Me limito asentir por lo cual Luke comienza a conducir.

El camino fue tranquilo, Luke me miraba de vez en cuando chequeando mi estado, ya había dejado de llorar y estaba más relajada. Llegamos al conjunto de apartamentos donde vive, estaciona el auto y el me ayuda a bajar, juntos caminamos hasta subir al ascensor, salimos de este y caminamos por el pasillo hasta que se detiene frente a una puerta, la cual abre y presiona el interruptor en el interior de la habitación encendiendo las luces del apartamento. Luke atraviesa el umbral y voltea a verme con una ceja arqueada.

-¿Qué haces ahí parada? Entra –Se hace a un lado dándome espacio para entrar.

-Permiso –Digo en voz baja y entro. Luke cierra la puerta atrás de mí y hace un ademán hacia un sillón de la sala.

-Vivo solo, tranquila. Toma asiento. –Indica y se dirige a lo que creo es la cocina.

-Está bien- Digo sentándome en un mueble, analizo el apartamento que está decorado de forma minimalista, hasta verlo acercarse a mí con un vaso de agua.

-Toma –Me entrega el vaso de agua y lo bebo lento, el mareo y la sensación de euforia causada por la bebida se desvanece poco a poco. Él se queda esperando que termine y al hacerlo se lo entrego.

-Ven, dormirás aquí – Luke camina por el pasillo y me levanto para seguirlo acomodando mi blusa para que cubra más mi cuerpo. Luke abre una puerta y pasa indicándome que lo siga, al encender las luces puedo detallar posters de equipos deportivos y caballos adornando las paredes, los muebles son de colores sólidos y oscuros, la cama es grande, donde podrían dormir dos personas sin problema.

-¿Seguro? Puedo dormir en el sofá –Sugiero apenada por invadir su privacidad.

-Claro, no seas tonta. – Antes de poder insistir él se quita la camisa y la coloca de manera descuidada sobre la cama.

-Tú, eh, ¿dormirás conmigo?– Un leve tartamudeo se hace presente al hablar y puedo sentir como el calor sube a mis mejillas gracias a que se encuentra semidesnudo ante mí.

-Sí el sofá es incómodo, por cierto, no puedes dormir con eso. –

Luke me lanza una franela, la cual atrapo antes de que esta golpee mi rostro, y la observo preguntándome por qué la lanzó. Él nota mi confusión así que con su mano señala mi pecho. Bajo la mirada notando que mi blusa se había vuelto a desacomodar dejando a plena vista mi sostén, al percatarme de esto cubro rápidamente con la franela. Luke suelta una risita negando al ver mi acción, lo que ocasiona que mi vergüenza aumente.

-¿Puedes voltearte? –Le pregunto aún ruborizada. Luke asiente y se voltea, permitiendo que me coloque la franela- Listo –Apenas digo eso se acuesta, aun dudosa me acuesto junto a él.

-¿Estás bien? Debes tener más cuidado, casi pierdes tu inocencia – A pesar de que sus palabras sean de preocupación su tono de voz da la sensación que se está burlando de mí.

-No soy una niña, solo acepté un trago a un conocido–Replico enfadada, ya que no creo que sea mi culpa. Yo solo quería refrescarme, no que un idiota me drogara y casi me forzara a estar con él.

-No lo eres, eres una mujer y no puedes aceptar un trago de cualquier persona, ese trago tenia droga, le hicieron lo mismo a otras chicas, si no hubiese llegado, pudo haberte violado –Contesta, sus ojos negros me miran con seriedad.

-Tal vez quería disfrutar un momento de la fiesta –Digo sin poder creer que me trate como una tonta.

-Por amor a Dios, todos sabemos que eres una santa –Ríe ligeramente.

Un fuego me recorre de pies a cabeza al escucharlo. Una cosa era escuchar ese comentario venir de Laura o Alexandra pero el que él lo dijera para burlarse de mí es algo que no aceptaría.

-¿Estás seguro de eso? – En un rápido movimiento me coloco encima de él y lo observo con una sonrisa burlona.

-Bájate, estas ebria y no sabes lo que haces soy hombre y no me controlare –Dice con una voz ronca.

-¿Y qué pasa si quiero hacer esto? – Junto mis labios con los de él sin darle oportunidad de responder a mi pregunta, muevo mis labios de forma inexperta, al principio no me corresponde, pero luego reacciona y sigue mis movimientos, convirtiendo el beso en uno más apasionado. Por falta de aire me separo de su rostro y me reincorporo a mi lado de la cama sacándole la lengua- ¿Viste que no soy tan inocente?

Un silencio se instala en la habitación en el cual solo se percibe nuestras respiraciones agitadas. Cuando creo que todo terminará allí siento la mirada de Luke recorriendo mi cuerpo.

-Retaste a quien no debías –En un ágil movimiento él se coloca encima de mí, une nuestros labios en un beso más apasionado al que le había dado, logrando sonrojarme aún más.

Aún recuerdo (Esto es como lo último que le dice a Laura así que no sé cómo colocarlo) como me quito su franela de una sola halada, de una manera salvaje y sin dejar de besarme, intento no quedarme atrás y ser ágil, así que le quito su camisa, con una de sus manos me arrebata el sostén en un rápido movimiento, lo cual me permite notar que tiene experiencia en esto, intento quitarle su pantalón, pero soy bastante torpe y me cuesta así que él me ayuda, deshaciéndose de él, juega lentamente con mi pantie, tomándola y moviéndola de arriba abajo logrando provocarme hasta que me la quita, el deseo recorre todo mi cuerpo. Por ultimo él se quita su boxer y ahí...

-PARA –Laura interrumpe mi historia- No es necesario entrar en detalles –Hace una mueca de asco.

-Eso fue lo que paso, todo fue culpa de aquella bebida con droga– Concluyo.

-Casi fuiste violada y no sabíamos, además perdiste tu virginidad y ahora estas embarazada. Peor aún, el padre del bebe es el ex novio de tu mejor amiga –Suena impactada y hace que la historia suene más grave de lo que es.

-Sí, esa es mi triste historia –Suspiro cansada.

- ¿Después cómo llegaste a tu casa? –Pregunta curiosa.

-Me fui antes de que se despertara, tome un taxi a mi casa y como era temprano mis padres no estaban despiertos –Le restó importancia a esa parte, encogiéndome de hombros.

-Creo que él tiene derecho a saber que será padre, deberían hablarlo. –Dice seriamente a lo cual solo me limito a asentir.

-Tengo miedo –Admito- Estoy segura de que para él fue algo de una noche, no creo que quiera ser padre.

-No puedes pensar por él, el decidirá si quiere o no, debes darle la oportunidad de decidir –Dice regañándome.

-¡Deja de abrumarme! –Chillo desesperada- Déjame pensar hoy que haré y mañana te digo mi decisión, solo dame tiempo.

Ella asiente sin decir nada. Luego de despedirme de ella salgo del baño y camino hacia la salida de la universidad, preferí caminar a casa para bajar un poco la preocupación que tengo pero no resulta bien la idea. En mi caminada solo pude pensar en todas las decisiones que debo tomar, para saber qué hacer con respecto a mi embarazo. No es algo que deba tomar a la ligera debido a que la decisión que tome hará un cambio en mi vida ¿Le debo decir a Luke que será padre? ¿Cómo les contare a mis padres que estoy embarazada sin decepcionarlos? ¿Debo abortar? ¿Cómo le cuento a mi mejor amiga que tuve relaciones sexuales con su ex y estoy embarazada de él? ¿Si decido tener el niño como lo mantendré? Simplemente no sé qué hacer, no tengo respuesta para esas incógnitas.

NOTA: hola bellezas, como están? Esta  nueva historia mostrara lo difícil que puede ser un embarazo joven, la intentaré hacer super real,  a los nuevos lectores, espero que les guste <3
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Capitulo editado

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Besos
Majo 💗