XXXIV (Capítulo Treinta y cuatro)
Dos años pasaron desde que todo había acontecido.
La compañía por fin había terminado aquella campaña. Horror ahora se encontraba en su nueva oficina, relajado mientras Gradient tecleaba a su lado en una laptop.
- Creo que hoy terminaremos temprano, quiero ir a casa.
- Bien jefe, yo terminare con los compradores.
- Bien.
Mientras manejaba aquel auto de regreso, Horror desabrochaba su corbata. A pesar de los años que habían pasado aún le costaba creer todo. Vicepresidente de aquella empresa… si le hubieran dicho que eso pasaría el primer año al trabajar, no lo hubiera creído. Tampoco hubiera creido todo lo que le habia pasado con Lust...
Lust...
Su celular sonaba interrumpiendo sus pensamientos.
- Hola mi amor! Ya saliste?
- Si, ya sali… y te agradeceria que no me digas amor…
- Oh vamos, si tu eres mi horrorcito bonito…
- Murder voy a matarte…
- Jajajaj! Frisk me pidió que te dijera que traigas algo de tomar para la cena.
- De acuerdo.
- Y me dijo que te quiere.
- Dile que yo igual.
- Yo tambien te quiero Horrorcito, sabes?
- Perfecto lo tengo grabado, ya mismo se lo mando a Blue.
Murder se desesperó haciendo sonreír al de ojos carmesí. Corto aquella ridícula llamada, todo marchaba perfecto en su vida.
No había peleas…
No había dramas…
Ninguna morada en su vida que hiciera de sus preciados minutos un infierno.
Estacionó mientras ya sentía a su perro ladrar. Antes de bajar del auto, se quedó pensando en aquello. Sus manos apretaban el volante... Se preguntaba que había sido de ella…
Su vida un infierno? nunca fue un infierno a su lado. Pero era lo que intentaba autoconvencerse… tenía que seguir adelante.
Recuerdos de su sonrisa, o sus ofendidas matutinas venían a su mente como olas que chocaban contra una gran piedra.
Como cuando la besaba y aquella relajaba de a poco su cuerpo para recibir aquellos besos. Su cuello, sus hombros… su suave piel. Sus gemidos al saborear sus pechos...
Aún le dolía pensar… intentó buscarla, siquiera amenazar a su hermano para que le dijera pero nada de ella se sabía. Como si de un fantasma se tratara… Lust había desaparecido.
- Hey estás bien?
Murder abría la puerta del auto mirándolo extrañado.
- Si, lo siento, solo estaba pensando en algunas cosas.
- Vamos vicepresidente, el trabajo terminó.
- Si, claro… como tu mejor amigo es el jefe ahora… tú todo tranquilo, no? siquiera hiciste el trabajo que te pedi para hoy?
Murder sonrió de lado, golpeó su brazo a modo de juego y ambos entraron hablando de trabajo. Frisk sonrió dulcemente al verlo entrar. Tenía puesto un delantal de cocina, y su cabello aún tenía restos de los ingredientes que preparaba.
Corrió a abrazar a Horror.
Éste la hizo reír al levantarla entre sus brazos. Alguien más en aquella sala tosió interrumpiendo aquel saludo.
- No te pases de listo con mi novia…
Papyrus de brazos cruzados, se encontraba sentado en el sillón. Horror sonrió y bajó al suelo a Frisk que ahora fue a sentarse en las piernas de Paps para mimar un poco a aquel ser todo celoso.
- Vamos amor, no pelees, si? Me prometiste una cena tranquila.
- Baja los pies de mi mesita. - le ordenó Horror.
Papyrus no obedeció.
- Papá!!!
Sans corrió a abrazar a Horror. Éste lo elevó en sus brazos mientras Toby ladraba a ambos.
Saber que Sans era su hijo fue todo un shock… pero lo superó pronto. Se sentía muy feliz al saber que Chara ya no estaría en la vida de Frisk y ahora él siendo el padre, aquel menos derecho tenía.
Y Frisk por su parte estaba enamoradisima. Papyrus era un rebelde sin causa pero… al menos con Frisk era completamente dulce y vulnerable. Parecía que solo a ella hacía caso.
Ya era tarde cuando Murder se había ido, Frisk dormía junto a Paps y Horror arropaba a su hijo.
- Papá cuento!!
- Bien, pero solo uno y a dormir, si?
El pequeño asintió. Mientras Horror le contaba un cuento, haciendo muecas y caras, Sans disfrutaba todo aquello hasta quedarse completamente dormido. Acarició la cabeza de su hijo para darle un tierno beso en la frente, apagar la luz e irse.
Toby se encontraba acostado en el sillón. Horror se sentó suspirando por el cansancio.
- Bueno… no puedo quejarme verdad?
Al lado de Toby había un taco… un viejo taco masticado que el mayor tomó en sus manos. No solo le venían flashes de aquel día, pequeños recuerdos de Lust que invadian. Sino que además construía nuevos. Imaginaba soltar a aquella carpeta azul que la morada solicitaba tanto para comenzar a besarla y que ella correspondiera.
Y tal como su deseo latente estaba, llevarla hasta el patio para levantarle la falda, y hacer suyas aquellas piernas…
Besaba sus labios mientras desesperado abria la camisa de aquella morada. Sus manos acariciaban su rostro mientras su lengua invadia su dulce boca, dominando aquel beso por completo.
Ahora con sus dedos, encima de ella, levantaba aquella falda. Ya queria sentir el calor del interior de Lust recorriendo su propio cuerpo.
~ mmh...
Solo podía imaginar a Lust pidiendole más mientras sus manos exploraban todo su cuerpo, mojandose él por igual.
Hacerle el amor en el patio mientras el agua de los aspersores los mojaba.
Porque no lo hizo. Ahora era tarde.
Gradient llamaba a su celular.
- Gradi, no es un poco tarde para…
- Perdimos todo.
- Qué?
- Las cinco empresas que estaban con nosotros cancelaron.
Horror se sentó desesperado frente a su computadora muy asustado.
- Tiene que ser un error, no pueden ser todas.
- No lo es jefe.
Tecleó varias veces hasta ver que lo que Gradient decía efectivamente era así…
- No no no… cómo es posible?
- Empresas Heaven nos quitó todo…
- Empresas Heaven dices? quiero que me mandes toda la información de esa empresa, Esto no puede ser posible!! Nightmare va a estar furioso… la prensa ya lo sabe?
- Aún no.
- Bien, al menos tenemos eso como ventaja.
- Horror qué hago? Nightmare no tardará en llamarme.
- Dile que tenemos todo controlado, te llamaré cuando sepa que hacer, si? No te preocupes.
Colgó la llamada y se puso a trabajar. Las horas pasaban volando mientras Horror buscaba a los jefes de aquella empresa. Aparentemente era una empresa casi igual de poderosa que la suya pero con menos repercusión.
Horror frotó sus ojos de cansancio, y volvió a clickear más páginas. Hasta que una foto llamó su atención.
Parecía el diario de un pueblo local:
"Heaven arrasa en ventas"
Horror clickeo la imagen de aquel pequeño grupo en la foto. Comenzó a reírse escéptico de lo que veía.
Lust estaba en la foto.
Tomó su celular para llamar a Gradi. El de lentes contestó muy dormido.
- H-horror? … que paso.
- Gradi necesito que me busques un par de direcciones, teléfonos y contactos de investigación.
Gradient anotaba intentando mantener sus ojos abiertos. Con su hombro sostenia el teléfono mientras anotaba.
- Y cuando ubiques a los nombres que voy a pasarte, quiero que me consigas redes sociales, fechas de eventos, todo lo que puedas ubicar.
- De acuerdo. Tan grave es esto como para realizar una investigación?
- Muy grave, uno de los integrantes se cambió el nombre y es un ser muy peligroso, ambicioso y totalmente desquiciado… no me extrañaría que quiere nuestras cabezas rodando por el suelo.
- Y qué vas a hacer?
- Comenzar una guerra...
No se podia negociar con una mujer despechada. Esto era personal y Horror lo sabia.
Pero disfrutaria pelear esta guerra, lo deseaba con todo su ser.
Ahora Lust seria su presa...
[Foto representación Negociacion Horror y Lust, no me pertenece.]
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