Gaster volvió con unos papeles en mano.

- Son estos?

Horror los observó. 

- Si. Lust se siente muy mal?

- Mira, sé que eres su competencia… no debería importarte su vida personal, no?

- No, es verdad pero ella se ha preocupado por mi… no debe creer todo lo que ve en la prensa señor Gaster.

- Es verdad… bueno ella se siente algo mareada. Si no necesitas nada más...

Dijo Gaster indiferente. Horror sonrió de manera falsa.

- Bueno, tengo todo lo que necesito.

- Ah, espera. Aquí tienes mi contrato firmado. Puedes decirle a Nightmare que quedé conforme con nuestro trato.

El timbre sonó y ambos se miraron.

- Parece que todos quieren visitar a mi querida flor hoy, no?

Cuando Gaster abrió la puerta ni llegó a ver quién abría. Un golpe en su cara lo hizo caer en seco. Cuando sosteniendo su nariz que sangraba, intentó reincorporarse, Murder pateó su cara dejándolo inconsciente.

- No tenía idea que sabías defensa personal.

- Me gusta entrenar… - dijo Murder agitado.

- Toma.

Horror le entregó los papeles y fue a buscar a Lust. 

- Qué le pasó?... oh por dios... está desnuda…

- Busca su ropa y llévala al auto, necesito sacarla de aquí antes que despierte Gaster.

Lust señalaba el frasco de perfume con ese nombre raro. Murder lo tomó y salieron de ahí.

Mientras el auto avanzaba, Horror en la parte de atrás vestía a Lust.

- La llevamos a un hospital? Parece que vuela en fiebre…

- No es fiebre lo que tiene… la llevaremos a tu casa.

- QUE!? Nonono ni hablar, estás loco.

- Murder… Gaster sabe donde vivo, en cuanto despierte y sepa que nos llevamos a Lust y sus papeles firmados.

- FIRMÓ LOS PAPELES?

- Si… cuando estaba buscando las carpetas y tú llamaste, al cortar me tuve que esconder para aparecer detrás de él. Al pasar por el living, vi sus cosas y tenía dos pasajes. Estoy seguro que quería llevarse a Lust.

- Pero… y si Lust quería irse con él?

- Sé que no.

Murder guardó silencio, miró por el retrovisor y Horror parecía hablarle dulcemente a Lust.

- Horror… m-me duele mucho…

- Tranquila, aquí estoy… Murder apresúrate…

- Voy lo más rápido que puedo. Además, que crees que pase cuando se entere que tú te la llevaste…

- No lo pensé, solo quería sacarla de ahí. 

- Tendrás que pensar algo… vamos a hacer una denuncia o algo.

- Con qué pruebas! No tenemos nada… aunque, hay algo que todavía puedo hacer…

- Qué?

- …

- Oh, claro está bien… sigue guardandome secretos, total yo no soy nadie. 

Murder estacionó y les abrió la puerta de su departamento.

- Puedo pasar a tu habitación?

- Si.

Horror dejó suavemente a la morada en la cama del mayor y comenzó a aflojarse la corbata. Murder se quedó mirando asombrado.

- Qué estás haciendo?

- Déjame a solas con Lust un momento. - Horror desabrochaba su camisa dejando su torso al descubierto. Lust respiraba muy agitada mientras arqueaba su cuerpo haciendo muecas de dolor.

- Horror acaso vas a…

No pudo terminar aquella frase que el de ojos carmesí se había desvestido para tomar a Lust en brazos y comenzar a darle placer. Ésta correspondía sus caricias y besos, abriendo sus piernas para recibir al mayor con desesperación.

Mientras Horror desprendía la falda de Lust, Murder cerró la puerta rápido sin poder creer aquello. Recordó el frasco de perfume, y decidió tomar una muestra de aquel líquido para poder llevarlo a analizar.

Todo el dolor que Lust sentía se comenzó a transformar en puro placer. Horror también se sentía muy extraño al unirse a la menor. Ambos se sentían desesperados ante la necesidad de estar juntos.

Siempre que lo estaban era especial, pero ahora parecía que aquel perfume producía algo muy extraño en los dos. Horror no podía resistir tanto placer. Los ojos de Lust se habían transformado en lujuria pura. Sus cuerpos necesitaban frotarse con desesperación, no les importaba nada más.  

Por segunda vez Horror llenaba su interior y volvía a estar excitado. Lust continuaba moviendo sus caderas incluso teniendo a éste encima de ella. El de ojos carmesí ahora, llevo las manos de Lust por encima de su cabeza y enlazaron sus manos, moviéndolas al ritmo de las embestidas. Lust comenzó a gemir suavemente mientras también se venía mojando a Horror y palpitando en el miembro del mayor.

Lo hicieron por horas, las piernas de Lust temblaban mientras Horror la besaba suavemente.

- Estás mejor o quieres que siga…

- Estoy mejor.

Horror le daba pequeños y suaves besos por su mejilla, algunas gotitas de sudor se esparcían por el rostro de ambos.

- Me preocupaste…

- Lo siento mi amor.

Lust besó al contrario. Horror se apoyó a un costado para acariciar el cabello de su morada, apartandolo de su cara y cuello.

- Te dije que Gaster no era de fiar. Me quieres contar qué te pasó? Acaso él…

- No me hizo nada… solo me pidió que me desnudara ante él. Estaba muy drogada… como si hubiera perdido las facultad de poder decidir.

- Cómo fue qué te drogo?

- El perfume.

- Voy a matar a ese maldito.

- No. No quiero que te acerques, es muy peligroso.

- Lust… firmó los papeles.

- Qué?

- Tengo que llevarlos a Nightmare aún pero con eso nuestra compañía ya forma parte de la suya. Manejaremos su publicidad y negocios… 

- Y ya no tendré que salir con él! Entonces me salvaste justo a tiempo…

Lust sonriendo iba a besar a Horror y ésta la detuvo.

- Iba a mantenerte drogada… viajar y jamás volver a la empresa.

- Lo sé pero me salvaste…

Horror volvió a apartar a Lust y sentarse en la cama.

- Por qué querría llevarte lejos… no lo entiendo. 

- Acaso importa? volvamos a la parte de los besos…

- Murder!!

Horror se puso su pantalón negro de vestir rápido mientras Murder entraba. Lust rápidamente se cubrió con las sábanas.

- Ya terminaron sus cosas? Porque me gustaría saber que pasa entre ustedes dos...

- Golpéame.

- Qué? Estás loco?

- GOLPÉAME!

Murder obedeció y Horror rodó los ojos.

- Golpéame como un maldito hombre!!

La nariz de Horror comenzó a sangrar por aquel golpe. Lust protestó.

- No lo golpees? qué haces?

- Él me lo pidió!!

- Golpéame otra vez!

- Horror, basta!!

- Lust tiene razón amigo… no voy a golpearte hasta que no te expliques.

- Un robo. Haremos que parezca un robo… 

~ ☆ ~

Dos seres se besaban con desesperación al ingresar a aquella casa. Nightmare arrojo las llaves y tiró su maletín mientras se desprendía su traje. Dejo aquello para volver a besar con desesperación a su acompañante.

- Seguro que no hay nadie en casa?

- Si… tranquilo.

Los besos hacían sonidos en aquel living. Killer retiró la corbata de Nightmare y volvió a besarlo. Sus lenguas se rozaban elevando la temperatura de aquel momento.

- Espera... y Twilight? - dijo jadeando el menor.

- Con su abuela. Estamos solos...

La ropa de Killer era arrancada bruscamente.

Para cuando los minutos pasaron, aquel menor era embestido a ritmo en el magnífico sillón de la sala.

Su cintura se movía de arriba hacía abajo mientras de su boca sólo podían escapar preciosos suspiros seguidos del nombre del mayor. Nightmare como un placentero observador, mordía sus labios al ver cómo aquel joven se desarmaba en sus brazos.

Por fin podía hacer de aquel joven todo lo que quería...

Ambos estaban completamente entregados al placer.