Harry había notado que los de Séptimo año se habían vuelto extremadamente risueños en su clase; las cosas más pequeñas los enfadaba, era ridículo. Y su clase de cuarto año de Gryffindor/Hufflepuff fue aún peor. No rieron ni interrumpieron, pero apenas lo miraron a los ojos.

Todavía participaron un poco, pero estaban raros al respecto. No sabía lo que estaba pasando. Le había preguntado a Draco, quien había notado problemas similares con los mismos estudiantes, pero ninguno de ellos pudo llegar a ninguna conclusión.

Después de que transcurriera toda la primera mitad de una lección doble con los de Cuarto Año, y ni un solo estudiante había levantado la mano, Harry finalmente habló. Detuvo su conferencia y se apoyó contra el tablero.

"¿Chicos? ¿Qué pasa? Han pasado como dos semanas y ninguno de ustedes realmente participa más. ¿Son mis clases? ¿Se han vuelto aburridas o algo así? Puedo cambiar las cosas para hacerlas más interesantes si eso ayuda".

Se encontró con más silencio y ojos mirando a todos lados menos a él.

"Vamos, en serio. Siento que no estoy haciendo bien mi trabajo si no participan. No ha habido ni una sola mano levantada hoy. Ninguna de mis otras clases es así, así que ¿hay algo? ¿Hay una disputa entre Gryffindor y Hufflepuff que no conozco? ¿Qué tengo que hacer?"

Una chica en el frente levantó la mano vacilante y todos se volvieron para mirarla, muchos disparando advertencias o miradas preocupadas. Extendió las manos y miró a su alrededor, como si dijera 'no se preocupen' y muchos de los estudiantes se relajaron.

Definitivamente estaba sucediendo algo que todos en la clase sabían.

"¿Sí, Deirdre?"

"No hay nada de malo en tus clases, todavía son muy... hermosas. Es solo que es un poco difícil aplicarnos, porque nos distrae un poco cuando.. está enseñando."

"¿Qué? ¿Qué me pasa? ¿Hice algo?" Harry sonaba un poco herido.

El sabía para un hecho de que Binns no lo hizo la segunda guerra conferencias hasta mayo, así que esto no era una especie de extraña cosa culto al héroe. Lo habían pillado desprevenido el año pasado cuando algunos de los estudiantes habían comenzado a actuar de manera extraña a su alrededor, y se había propuesto vigilar el otro plan de estudios para poder estar preparado.

"Algo más como," murmuro un estudiante en el fondo de la clase.

Harry no pudo distinguir las palabras.

"¿Qué fue eso?"

El estudiante sentado a su lado empujó al que murmullo y respondió por él.

"Nada. No estamos tratando de ofenderte. No hay nada malo contigo como profesor, es solo..." Se desvaneció inútilmente.

"¿Solo qué? ¿Qué puedo hacer?"

"¿Qué no puedes hacer?" murmuró alguien más.

Esta vez, Harry escuchó.

"¿Qué es? Me estoy volviendo loco, ¿qué es lo que estoy haciendo?" Harry preguntó acaloradamente.

Un par de estudiantes soltaron risitas nerviosas, y Harry entró rápidamente a su oficina y cerró la puerta antes de que se perdiera por completo. Pudo haber sentido que se lo merecían en este momento, pero no podía descargar su enojo con los niños.

Cogió el jarrón vacío de su escritorio y lo golpeó tan fuerte como pudo contra el suelo. Allí, eso se sintió un poco mejor.

Rápidamente lo reparó y lo volvió a colocar. Draco no tenía por qué saberlo.

Se sentó y se desplomó sobre el escritorio con la cara entre las manos. Estos niños lo estaban conduciendo absolutamente por la maldita pared. Se preguntó brevemente si todos estaban tomando algún tipo de droga.

Simplemente no sabía qué hacer y ellos se negaron a decírselo.

Al otro lado de la pared, los estudiantes estaban todos muy confundidos al principio cuando su maestro de repente se alejó en medio de una conversación y se encerró en su oficina.

Entonces escucharon cristales rompiéndose ruidosamente y sus ojos se abrieron. Todos se miraron unos a otros con expresiones igualmente culpables de 'oh mierda' .

"Creo que lo hicimos enojar. ¿Crees que volverá para el resto de la lección?" alguien preguntó.

"¿No, en serio?", Respondió otro estudiante con sarcasmo.

"Creo que tenemos que empezar a tratar de actuar normalmente. Parecía como a dos segundos de volverse completamente loco. Solo trata de no pensar en... cosas. Quiero decir que el profesor Longbottom está casado y realmente no pensamos en él".

"Pero es diferente. Los profesores siempre están juntos. Nunca se sabe lo que podrían haber hecho".

Beth resopló y puso los ojos en blanco.

"Voy a ir a hablar con él. Y le voy a decir que intentaremos actuar con normalidad, así que será mejor que empecemos".

"¿Qué, estás enojado? Está realmente enojado, ¡no puedes simplemente irrumpir y comenzar a hablar con él!"

"Se va a volver completamente loco, y cree que es su enseñanza. Alguien tiene que hablar con él". Estaba claro que estaba decidida.

Observaron en silencio mientras se acercaba a la puerta de la oficina y llamaba silenciosamente.

"¿Si?"

"¿Puedo pasar?"

Oyeron un fuerte suspiro, y la puerta se abrió por sí sola y se cerró después de que ella entrara con un gesto de la mano de Harry.

"¿Si?" Él repitió.

"Solo quería decirte que lo sentimos. Vamos a empezar a actuar con normalidad, lo juro. Y no eres tú en el sentido de que eres un mal profesor o algo así, de verdad, eres un profesor increíble, estoy bastante seguro de que eres el favorito de todos".

"¿Favorito? ¿En serio?"

"Bueno, empatado con el profesor Malfoy, probablemente."

"Mierda", maldijo Harry en voz baja.

Beth estaba divertida. ¿Realmente solo...? ¿Tuvieron una competencia o algo así?

"Bueno, gracias Beth. Pero, ¿podrías decirme por qué esto fue un problema en primer lugar?"

Ella hizo una pausa.

"No puedo, lo siento."

"¿Por qué? ¿Es algo ilegal? Ninguno de ustedes estará en problemas si lo es, lo prometo."

"No, no, no lo es, es solo algo que... lo siento".

"Está bien, bueno, ¿estás bien? Nev… quiero decir, el profesor Longbottom no ha dicho nada, pero el profesor Malfoy dijo que todos estaban actuando de manera similar en su clase."

"Estamos bien."

"Está bien. Solo sé que puedes venir a verme con cualquier cosa."

"Realmente no creo que quieras que lo hagamos."

Harry le dio una mirada extraña. "No, de verdad. Lo digo en serio."

Ella suspiró.

"Gracias profesor Potter."

"Puedes decirles a los demás que la clase termina temprano".

***

Harry decidió que también podría enfrentarse a su séptimo año hoy. 'No hay tiempo como el presente' y todo. Y quizás podría preguntarles si sabían algo sobre la clase de cuarto año.

"Hoy, quiero comenzar con algunas preguntas fuera del tema. ¿Alguno de ustedes sabe algo que esté sucediendo con los Gryffindors y Hufflepuffs de cuarto año?"

Hubo algunas risitas y varios estudiantes miraron a Lydia, la hermana mayor de Beth. Ella se encogió de hombros.

"No, no tenemos ni idea", dijo con indiferencia.

"¿Por qué siento que no estás siendo completamente honesto conmigo?"

"No estoy segura, tal vez sea ese instinto especial tuyo. Por ejemplo, cómo los animales no comen rosas debido a sus espinas, o cómo los salmones van río arriba para poner sus huevos".

"Tengo la clara impresión de que me estoy perdiendo algo. Y que ninguno de ustedes me lo va a decir. Todos son adultos, vamos, ¡dame un respiro! Solo, cuéntame algo".

"Oh, por favor, tú no eres la que se pone jodi-" Lydia tapó la boca de su amiga con una mano mientras la mayor parte de la habitación estallaba en risitas.

"Entonces, ¿cómo se sienten todos aquí sobre los tejones?" dijo en voz alta, aparentemente cambiando de tema.

"¡Creo que son muy lindos!" alguien gritó.

"Sí, pero he oído que a veces pueden dar un gran golpe. Pueden causar una devastación paralizante si se lo proponen. Pequeños cabrones astutos", agregó alguien más.

"Espera, ¿esto es algo sobre los Hufflepuff?" Harry preguntó esperanzado.

La clase estalló en risas y él se quitó las gafas y se pasó la mano por la cara con frustración. Respiró hondo y se compuso.

"Está bien, pasando a la lección real, ya que no puedo obtener ninguna respuesta directa de ustedes. Muchos van a aprender a hacer un patronus corpóreo".

Eso llamó su atención. Al menos su enseñanza fue buena, incluso si sus intentos de confrontación fueron un fracaso total.