La semana corría y el asunto con Jimin lo carcomía cada vez más, digamos que sus uñas se habían vuelto víctimas de su ansiedad. Los exámenes se iban acabando y no había ya mucho en lo que su mente pudiera divagar para distraerse.

Si le había costado aceptar la idea de Jimin enamorado de alguien más, ahora se resistía a tener esperanzas, le daba terror seguir aferrándose a su última posibilidad. Porque las opciones eran un todo o nada.

Al menos Jungkook venía a la escuela y podía escuchar sus martirios, o fingir que lo hacía pero a fin de cuentas era mejor que hablar solo y que los demás estudiantes lo miraran raro. El menor seguía sin hablar con Taehyung, pero al menos no peleaban tampoco y todo el grupo lo agradecía cuando tenían la oportunidad de almorzar juntos, como en ese instante.

—... por eso quiero que vayan todos, será genial, ¿Qué dicen? —tal vez Yoongi tuvo que haber prestado atención a lo que Seokjin decía, porque ahora no sabía que responder.

—¿De qué habla? —le susurró a Jungkook a su lado.

—Seokjin hyung termina la escuela el semestre que viene, dice que quiere que vayamos todos a una fiesta que organiza un bar para poder divertirnos una última noche juntos.

Kim Seokjin era recursante, en 2do grado había iniciado devuelta el curso en el mismo salón que Namjoon y fue quien lo integró al grupo, siendo el mayor de todos. A pesar de su situación había conseguido aprobar sus materias pendientes y el colegio lo había dejado volver por medio de un curso avanzado a 3er grado, pero jamás dejó de frecuentar su nuevo grupo de amigos. Ahora, años después, él terminaba el secundario mientras el resto pasaba a último año.

No es como si no volvieran a verse jamás, pero definitivamente tendría que enfocarse en su carrera universitaria y no podría dedicarles el mismo tiempo que antes a sus amigos.

—Cuenta conmigo —decidió responder el peligris, al final todos aceptaron aunque aún faltaban unas semanas para dicho evento.

La campana anunció el final del almuerzo, por lo que el grupo se disolvió para caminar cada uno a su respectiva aula. Yoongi, como siempre, caminaba aletargado junto al castaño; adelante de ambos, unos metros más avanzados, iba Taehyung.

Al peliplata se le encendió el foco— Tal vez deba hablar con Taehyung.

—¿Qué? —Jungkook giró su cuello tan rápido que el contrario juró haber escuchado sus huesos tronar.

—Lo estuve pensando mucho, ¿sabes? Es el mejor amigo de Jimin después de mí, él debe de saber con quién está saliendo.

—Si es que está saliendo con alguien —replicó el menor.

—Jungkook, a este punto ya no creo que sea una mentira —admitió apenado—. Sólo necesito saber quién es.

—¿"Necesitas"? —inquirió— ¿En qué te ayudaría saber eso exactamente?

Yoongi no tenía una respuesta.

—Mira Yoon, mejor sé directo con él y pregúntale.

—Oh, por favor, no me des clases de ser directo señor "no me hablo con Taehyung y no sé si sigue siendo mi novio" —se cruzó de brazos sintiéndose regañado.

—Sé que me admiras Yoongi, pero no necesitas hacer todas las cosas que yo hago —se defendió encogiéndose de hombros—. Haz lo que quieras.

—Claro que lo haré... ¿quieres que le pregunte si...?

—No.

La voz de Jungkook sonó tan tajante que el peligris se sintió mal por él.

—Bueno, te alcanzo después entonces —dijo avanzando hacia Kim—. Taehyung —llamó intentando sonar casual pero no tan alegre, después de todo ellos tampoco hablaban desde hace tiempo.

El mencionado se detuvo y giró curioso ante el llamado del mayor— ¿Sí?

No sonaba enojado, era un punto a su favor.

—Disculpa yo... sé que debería preguntarle a él directamente pero yo soy muy tímido y ya sabes... —Taehyung frunció su ceño sin saber de qué hablaba—. Lo que quiero decir es que sabes que me gusta Jimin, pero soy muy cobarde para preguntarle directamente con quién está saliendo ahora, me estoy volviendo loco —el castaño aflojó su semblante apunto de decir algo pero Yoongi siguió—. ¡Y sé que no te corresponde contarme eso! Pero por favor Tae, sólo quiero saber.

—¡Detente! Yo... no tenía idea de que salía con alguien —habló confundido. El mayor sintió un revoltijo recordando la teoría de Jungkook sobre la supuesta estrategia para hacerlo sentir celos—. La verdad es que peleamos hace una semana y no hablamos.

Y así como llegó, la esperanza de Yoongi se esfumó.

—Oh... ¿pelearon? —de repente se sintió avergonzado de haber dado semejante discurso en vano.

—Sí, mi culpa otra vez —contó haciendo gestos con las manos y su rostro triste, Yoongi realmente percibió la tristeza en sus ojos—. Si algo pasó con alguien no lo sé, estuve pasando los recesos con los demás hyungs, de hecho pensé que él pasaba los recesos contigo —y al mayor le hubiese encantado que así fuera, pero otra vez no era nada cierto.

—Oh... entonces... lamento haberte molestado —dijo retomando el camino al aula junto a él.

—No es molestia —afirmó sonriendo—. Lamento que... ¿salga con alguien? Wow, pensé que tú y él... bueno, él es bastante reservado también, así como tú, pero igual me comentó que se besaron un par de veces fuera de escena, ya sabes, en privado, sin todo el circo escolar viendo.

—¿Y qué más te dijo sobre eso? —honestamente debía de haber una razón por la cual Jimin le hubo confiado aquellos sucesos entre ambos.

—Ojalá le hubiese preguntado más, pero estaba muy ocupado pensando en mí mismo que ni me interesé —agachó la mirada—. Pero sinceramente hyung, creo que le gustas, siempre lo pensé, siempre se lo dije y él sólo evade el tema, pero no lo niega, es demasiado obvio, ambos lo son.

Yoongi no dijo nada hasta que ambos se detuvieron en la entrada del salón.

—¿Por qué habría de salir con otra persona si gusta de mí? —porque en ese punto era obvio que lo hacía—. Es contradictorio.

—No lo sé, tampoco lo entiendo del todo. En serio lamento no poder ayudarte más —afirmó mirándolo.

El peligris negó dando a entender que no importaba. Decidió aprovechar el tiempo para continuar con la charla, llevándola en otra dirección.

—¿Sigues enojado con Jungkook? —no había forma de preguntarlo con más cuidado.

—No —contestó para sorpresa de Yoongi—. Perdí ese derecho, me sobrepasé y le dije cosas hirientes que no merecía, él es el que está en posición de enojarse ahora porque no debí llevarlo hasta ese extremo.

—No está enojado Tae —le afirmó—, está triste.

—Eso es aún peor —concluyó.

—¿Y por qué no le hablas? —lo animó.

—¿Bromeas? No creo que quiera hablar conmigo, dejó de buscarme o llamarme cuando le grité y-yo... no es tan fácil, aún tengo mis razones para estar enojado por lo otro, y siento que si tocamos el tema de nuevo sólo volveremos a pelear más y más, no quiero eso.

Yoongi sonrió apenas mientras negaba— Tae, háblale. Es confuso para él también y tampoco le dejaste darte explicaciones, ¿no es así?

—Bueno, sí...

—No conozco tu postura pero sí la de él, estoy seguro de que fue un malentendido, y aunque no me corresponda arreglar esto, realmente te sugiero que le hables, debes ser tú, como dijiste, ya no estás en tu derecho de seguir enojado.

—Supongo que puedo tratar de comenzar por ahí... hyung, gracias.

—No es nada Tae, solo quiero que estén bien ambos, son mis amigos.

—Honestamente pensé que me odiabas también —confesó riendo un poco.

—Hey, primero, no digas "también" como si Jungkook lo hiciera, te quiere mucho y lo sabes. Segundo, es cierto que quise golpearte la cara pero no podría odiarte nunca, eres mi amigo.

Taehyung le regaló una de esas sonrisas cuadradas y Yoongi se alegró porque era genuina, así que compartió también su sonrisa de encías al tiempo que entraban al aula al ver al profesor acercarse.

Min fue a sentarse con Jungkook, pero no fue capaz de contarle su conversación con Taehyung acerca de la posibilidad de que volvieran a hablarse, pues en ese momento sabía mejor que nadie lo que dolía hacerse ilusiones.

—¿Tienes tiempo para ir a tomar helado hoy?

—Tú eres el que tiene pareja, ¿tienes tú tiempo para ir a tomar helado conmigo?

—Yoonie, siempre tengo tiempo para ti, no digas eso —Jimin abultó sus labios.

—Entonces supongo que yo también estoy disponible siempre —contestó sonriendo, el menor aplaudió en su lugar—. ¿Seguro que a tu novio no le molesta que vayas a tomar helado con tu ex?

—Nah, no es ese tipo de persona —comentó riendo.

—¿Bromeas? Todos los novios son celosos, más aún si tienen un chico lindo como tú —oh, él no podía evitar esos comentarios ahora.

Las mejillas de Jimin se pintaron de rojo cuando sonrió— Él no lo es~, lo juro.

—Vaya, parece ser un tipo perfecto entonces, ¿Quién es? —y lanzó la pregunta antes de arrepentirse, porque había llegado a la conclusión de que no podría obtener la respuesta en otro lado.

—No te diré —y quizá tampoco la obtendría de su propia boca.

—¿Qué? ¿Por qué? Soy tu mejor amigo, exijo saberlo —su entrecejo se juntó y sus brazos se cruzaron confundidos.

—Nah~, vas a enojarte —replicó cruzando sus brazos también, ambos caminando hacia la salida del instituto.

Yoongi temió lo peor— Jimin, ¿acaso te metiste con alguien mayor? Dime por favor que no te metiste en algo peligroso —suplicó.

—No, no, nada de eso hyung —río—. Pero te conozco, sé que vas a enojarte si te cuento quién es, pero tienes razón, eres mi mejor amigo...

—¿Entonces...?

—Te lo diré cuando mi relación sea algo estable, algo serio. Tampoco le presentaré a mi mejor amigo alguien que no valga la pena, ¿no? Sería una pérdida de tu tiempo.

—Nada que tenga que ver contigo es una pérdida de tiempo, bobo —suspiró rendido—. Pero está bien, aguardaré paciente.

Pero lo cierto es que su paciencia se estaba acabando, sus planes se agotaban y todos sus métodos para sobrellevar la situación culminaban con la idea de sumirse en una tristeza mutua con Jungkook mientras ambos comían helado y veían películas tristes de los 90.

—Tranquilo Yoonie, yo te avisaré si algún idiota me rompe el corazón para que puedas patearle el trasero —prometió.

—Cool.

—Y deberás comprarme helado para cuando llore —agregó.

Espero alcance para ambos.

Porque así era, Yoongi ya había planificado sus días.

Sus tristes días.