Juliet quedó aún más impactada, no pudiendo evitar que su corazón latiera dolorosamente ante el miedo y los nervios de su próxima noticia. ¿Sería buena o mala?

—Bien...

—Juliet, me caes genial, pero no quiero seguir con esto —soltó Daniel rápidamente a la vez que algo dentro de Juliet se hacía añicos—. Yo no soy el chico con el que escribes en esa mesa.

Juliet se quedó paralizada. ¿Cómo no iba a ser él?, ¿a caso lo decía de alguna especie de forma figurada? No sabía qué pensar. Su mirada se fijó en el chico y, tras parpadear, no pudo evitar que sus ojos se llenaran de lágrimas aún contenidas.

—¿Q-Qué?

—El chico con el que te escribes y yo no somos la misma persona. —Dio un paso atrás como si alejarse unos centímetros le hiciera sentirse menos responsable de las lágrimas que corrían por sus suaves mejillas—. Lo siento, Juliet. No debería haberme metido en esto desde el principio, pero necesitaba el dinero y...

¿El dinero? ¿A qué se refería? ¿Cómo podía ella asimilar todo eso tan de repente? ¿Por qué le había hecho eso?

—Espero que podamos llevarnos bien —dijo él finalmente, a lo que ella asintió limpiándose las lágrimas con el dorso de su mano izquierda.

—Al menos dime quién es, qué te dijo...

Él negó rotundamente.

—No puedo decirte quién es, me ha pagado por ello y, además, es capaz de joderme bastante. Sólo sé que él te dijo que se llamaba Daniel y que iba a último curso. Entonces decidísteis quedar y él se sintió apurado. Se había enterado de que sí que había un tal Daniel en último curso. Ese soy yo. Llegó hasta mí y me ofreció una buena cantidad a cambio de salir contigo y fingir que era tu... tu compañero de pupitre o algo así.

A Juliet la inundaron miles de sentimientos, pero al fin y al cabo todos desembocaban en la rabia, la tristeza, y ese horrible sentimiento de inferioridad y estupidez.

—¿Por qué? —dijo con un hilo de voz entre lágrimas y sollozos.

—No quiere que sepas quién es él. Dijo que le detestarías sin importar lo que hayáis hablado, que es un gilipollas a los ojos de todos y que no quería arruinar vuestra relación.

Juliet estuvo a punto de marcharse, pero Daniel la agarró del brazo y tiró de ella.

—Sé que ahora sí que te parecerá un gilipollas, y no puedo negarte que lo es por lo que te ha hecho... Pero, Juliet, creo que de verdad te quiere y no le gustaría perderte.

Juliet apretó los dientes y se soltó del agarre de Daniel.

—Bueno, eso debería de haberlo pensado antes de mentirme de esta forma. —Y echó a andar, con su teléfono temblando entre sus manos y las lágrimas cubriendo la pantalla.

*CDP*

YA ESTÁ. YA HE TERMINADO LOS EXÁMENES. YA HABÉIS LEÍDO LA VERDAD (aunque falta saber algunas cositas pero bueno).

¿Os lo esperábais? ¿Qué creíais que era la verdad? ¿Por qué creéis que "Él" ocultó su identidad? ¿Qué os parece la situación? NECESITO SABERLO. O.O

Espero subir el siguiente capítulo mañana. Muchas gracias a todos por leer y votar, estoy muy muy feliz de tener tantos leídos, votos y comentarios. Además, la historia no sale del ranking. GRACIAS.

Nos vemos. ;)