Dejamos a Noa y a Isquito en casa de Nacho porque a Noa le habia entrado en la cabeza que quería jugar con Alejandra.

Llegamos a casa en silencio. Ninguno de los dos quería hablar.

Subo a la sala de invitados a relajarme un poco después de lo que acaba de pasar. No quiero que las niñas se alteren.

Al rato Isco llama a la puerta y pasa. Se sienta en la cama y suspira.

-Lo siento. Se que te ha molestado.

No le respondo. Sigo con los ojos cerrados tratando de contener las lágrimas.

-Por favor. Ven. Sientate aquí.

No tengo ganas de discutir así que me levanto de la silla y me siento enfrente suyo en la cama.

-No te enfades. Se que te ha molestado.

-¿Has disfrutado?

-Tienes que entender que lo he echo por ti.

-Te he echo una pregunta y no quiero enfadarme mas de lo que estoy.

Me toco la tripa y siento a las niñas. Intento ser comprensiva por ellas.

Tarda un momento en pensarse la respuesta.

-Si. Lo siento. De veras que siento haber disfrutado. Ha sido mi novia. La he querido.

-¿Sabes lo que hacia yo mientras tú te la tirabas aquí en Madrid?

-Por favor... No...

-Mira.-Le vuelvo a enseñar la marca del antebrazo.- Cuidé a Noa. La enseñé a quererte aunque no te conocía en persona. Te quise y me emocioné cuando vinisteis a jugar a Galicia. Y me volviste a romper el corazón. Es duro todo eso. Y hoy ha sido como si eso volviese a revivir.

Juego con el anillo de compromiso que está en mi dedo. Lo giro y doy vueltas pero no soy capaz de decidir que hacer.

-¿Te hubiese sentado bien que me hubiese liado con Marco?

-No es lo mismo. Ella y yo tuvimos una relación. Tú y Marco no.

No respondo. Tiene razón que no fue una relación pero fue algo.

Intento salir de la habitación. Esto está llegando demasiado lejos.

-Dime que no.-Dice.

-Dejame salir. No quieres saberlo.

-Dímelo.

Me vuelvo a sentar en la cama y se pone en frente mio.

-Fue la semana que estuviste en Murcia con Isquito. Fui a casa de Nacho y bebí demasiado. Besé a Marco. Ni siquiera me acuerdo.

-¿Cuantas veces? ¿Han sido más?

-Fueron tres veces y me pesa mucho. No salí con él porque te quería a ti.

-Es mi mejor amigo. ¿Y sabes lo peor?

Se que me mira pero no quiero mirarle.

-Ya lo sabía. Pero confiaba de que me lo contases tú. Hace ya 4 años.

-Fue hace 6. Y no hay nada que me haga sentir peor.

-Siento lo de Sara.

-Y yo lo de Marco. Pero eso no quita que le hayas metido mano. Delante de mi. ¿Hacia falta intensificar el beso?

-¿Estas celosa?

-Si. Digo no. Responde a mi pregunta.

-Se que no. Pero no te habría dado el vestido.

-Me importa una mierda el vestido. Pero si que me importa que mi prometido haya besado a su ex. ¿Lo entiendes?

-¿Como quieres que te lo compense?

-Quiero que me digas que lo sientes. De corazón.

Se acerca a mi y se sienta enfrente de mi. Pone su mano en mi mejilla y me mira.

-Lo siento. Te quiero mucho Thalía Ramil.

-Yo también a ti Isco Alarcón.

Me besa delicadamente. Luego se tumba encima mía sin aplastarme. Me muevo hasta el cabecero de la cama y me sigue besando.

Sin niños, solos en casa, en la habitación, con la puerta cerrada y los móviles apagados.

Bueno. Ya os lo imagináis.

~°~
-

-Ha sido el mejor de mi vida.- Digo yo.

-Lo mismo digo.

Enciendo el móvil y veo tres llamadas perdidas de Marco y diez de Emma.

-Creo que a la parejita le pasa algo.

-A mi también me han llamado.

Isco llama a Marco y él no tarda en cojerlo.

-Hey Bro. ¿Que pasa?-Una pausa.- ¿¡Que ha pasado!? ¿Está bien?-Otra pausa.- Claro. Vamos enseguida.

Cuelga y se levanta de la cama de un golpe. Se empieza a poner la ropa y me lanza la mía.

-Vamos al hospital. Emma y el bebé están en peligro. Se ha desmayado y estaba muy pálida. Marco cree que el embarazo era demasiado para ella y su cuerpo no ha podido soportarlo.

Llegamos al hospital pero no nos envían a la planta de maternidad si no a la de cirujía. Esto no va bien.

Por los pasillos hay muchos médicos de un lado para otro.

Marco nos espera en el pasillo con los ojos rojos y las mejillas mojadas por las lágrimas. Isco le mira mal al principio. Después de contárselo creo que no confía mucho en él. Pero Marco le necesita.

Se abrazan y luego Marco me abraza a mi. Se que Isco nos mira mal y Marco lo nota.

-¿Que pasa?

-Le he contado lo que pasó entre nosotros.

-Isco. Fue hace mucho. Emma y yo vamos a tener un hijo.

-Y yo e Isco pero no quiere terminar de aceptar que fue hace mucho.

Un grupo de doctores entran corriendo en la sala donde está Emma. Pronto se llena todo de médicos y nosotros fuera. Nos dejan entrar entre empujones. Emma está en la cama pero no parece que respire. Marco llora e intenta acercarse a ella.

-Señores, la paciente ha tenido una parada cardíaca, tiene que entrar a quirófano o el niño y ella morirán. Le están haciendo un RCP para reanimarla y seguido entrará a quirófano. Tardarán mas o menos tres horas y luego necesitará reposo absoluto. Pero eso si sale de la operación.

Nos echan fuera de la habitación y nos toca esperar. A los pocos minutos salen varios médicos con la camilla. Marco ya no puede más y está llorando a más no poder. Le abrazo. Emma es mi mejor amiga. No puedo perderla a ella también. No puedo haber perdido a mis dos mejores amigas.

No nos queda otra que esperar. A que Emma salga de quirófano y el niño esté bien. Tenemos muy mala suerte.