Pero...

Despierto. No se como, pero despierto. Con un dolor terrible en la clavícula. Al mirar, veo que está vendado. Estoy en un hospital, con unos pitidos constantes y un dolor terrible de cabeza.

Una puerta al abrirse hace que me retumbe mas.

-Buenos días señorita. Me alegra ver que ha despertado.

-¿Que ha pasado?

-Tuvo usted un accidente. Han tenido que operarla para quitarle un trozo de hierro muy cerca del corazón.

-¿Hace cuanto fue eso?

-Una semana. Ha estado en coma una semana. Estuvo muy cerca de la muerte.

-Gracias doctor.

Cuando se va, me vuelvo a dormir.

Despierto en la misma habitación, con un nuevo vendaje y la luz del sol balandome la cara. Ya no me duele la cabeza.

Una enfermera me trae comida y agua.

-Señorita, tiene visita.

-Digale que puede pasar por favor.

Se va y en su lugar, ocupa la estancia Isco.

-Ah, hola. Creí que te había dejado claro que no te quería volver a ver.

-Si. Y fue así.

-Entonces... Que haces aquí.

-Bueno... En cierto modo, fue mi culpa. No quise hacerte daño.

-Pero lo hiciste Isco. Me hiciste daño al dejar que te besase en el campo.

-Thalía, yo no sabia que ibas a ir. Nadie me lo había dicho.

-¿Como? ¿Nadie te había dicho que estaba aquí? Nacho dijo que me esperabas.

-No. No me dijo nada.

-¿Sabes como lo he pasado este mes sin verte? Sin saber nada de ti.

-Te enviaba mensajes todos los días.

-Si, pero no era suficiente. Necesitaba saber que me querías. Llegas aquí y te presentas con tu novia.

-Pero Thalía... Yo tengo vida.

-Y yo. Y formaba parte de la tuya.

-Lo se.

-No lo hagas mas difícil Isco. Nunca me has visto realmente enfadada. Por eso, te pido que te vallas.

-Por favor. Thalía, no te quiero perder.

-Eso ya lo has echo. No vuelvas por Galicia. Por mi parte ya no eres bien recibido.

-Eso no lo decides tu.

-Si lo decido yo. Soy la embajadora de Galicia. Aunque no me gusta alardear de mis títulos.

-No me lo puedes impedir. Y te vuelvo a repetir. No quería hacerte daño.

-Ah, bueno. El daño está echo. Por favor, vete de Galicia con tu novia. No quiero volver a verte después de esto.

-Thalía...

Vuelven las lágrimas.

-Por favor Isco... No me hagas la vida mas difícil.

Sale cabizbajo de la sala.

¿Que me esperaba?Que me dijese que había cortado con ella porque me quería a mi, que me besase y volviese con él. Esta claro que estoy loca. Como si eso fuese a pasar.

Entran Nerea y mi madre con un globo de esos que venden.

-Hola. Como estas.

-Em... Me han operado de la clavícula, mi ex está ahora con otra y le sigo queriendo, acaba de venir a verme... Bien, supongo que la vida me sonríe.

-No has perdido tu sentido del humor.

-Claro que no. Eso nunca.

Mi madre interviene en la conversación.

-En que pensabas. ¿Tu sabes el susto que me has dado?

-¿Tu sabes como me siento?

El médico les echa de la sala diciendo que me tengo que tomar unos medicamentos y entran Emma, Nina, Jane y Manuel.

-¿Que hacéis todos aquí en Galicia?

-Nos tenías muy preocupados. No es justo. Por poco nos da un infarto. ¿En que pensabas? Estas loca.

-Estos son mis amigos... Lo siento. Creo que no pensaba en nada.

-No tranquila. Eso lo has dejado claro.

-¿Y que va a pasar ahora?

-Vuelve a Madrid.

-No.

-Pues quedate en Puentedeume.

-Lo haré.

Me brazan todos y se van.

Los siguientes en entrar, son Maria, Nacho y sus hijos, Manuel y Jane.

-Thalía... No vuelvas a darme estos sustos.-Dice Nacho.

-Estoy bien.

Nos quedamos un rato hablando hasta que se van todos menos Nacho y entran Nina, Emma y Marco.

-Ay chicos... No os podéis imaginar lo que os echaría de menos.

-No. Porque nosotros te echaríamos más de menos.

Entre risas, pasa la tarde hasta que el medico vuelve a entrar con unos informes médicos.

-Bueno, si quieres que se vayan, te digo tu informe.- Dice él medico.

-No. Se pueden quedar.

Me hace un par de chequeos y luego coje su libreta otra vez.

-Bueno, tu estas mejor. Pero, habéis tenido suerte.

-¿Habeis?

-Si. Tu y el bebe. Estas de un mes y medio.

Vale, nuestras caras son todas un poema.

El médico se retira y se lo que toca ahora.

-¿Thalía estas en condiciones?

-Si. Para que.

-¡¡Pero se puede saber que os pasa a vosotros!! No tuvisteis cuidado. Ahora vas a ser madre y ni siquiera sabes quien es el padre.

-Si, se quien es.

-Quien. Dime que es de Madrid o te juro que te encierro en mi casa y no sales hasta que nazca. Y lo juro como que soy Marco Asensio jugador del Madrid.

-Tranquilo Marco. Si que se quien es.

-Pero...

-Dime que tienes seguro el nombre. Y dime que no has tenido más relaciones con ese bebé dentro de ti.

-¡Que no loco! Y si, se quien es el padre. Pero no se lo va a tomar bien.

-Por favor dime que no es Isco.

-Es Isco.

-¡¡¡Thalía!!!

-Aish no me agobies mas.

-¿Cuando se lo vas a decir?

-Nunca. Puede que cuando nazca.

-No puedes privarle a un padre de estar con su hijo. Odiaría que me hiciesen eso a mi.

-Oh... Vas a ser un buen padre.-Dice Emma interviniendo en la conversación.

-No me digas que tu también estas embarazada.-Dice agoviandose aun mas.

-No. Pero puede que algún día...

-Tu también serás una buena madre.

Le da un pequeño beso en la frente y se abrazan.

-Hola... ¿Volvemos a mi problema?

-Em, si.

He de reconocer que he estado un poco mal y me parecía haber engordado.

-Bien, me volveré a Madrid.

-Y vivirás con nosotros.-Dice Emma.

-Si. Vivirás con nosotros-Remata Marco.

-Vale... Viviré con vosotros...-Digo.-Como que vivís juntos. Y Nina que.

-Nina vive sola.-Dice Emma.

-Y tan a gusto que estoy sola.

Me rio. Como les echaba de menos.