8
Es jueves y Theo está tirado sobre la hierba alta de la colina, señalando las estrellas como si las pudiera tocar, como si fuera un cuadro de lotería.
"Así que. Estrellas," dice Theo.
"Sí. Estrellas. Espacio. Las fuerzas que mantienen unido el universo, o lo separan," responde Lock y no puede evitar mirar las manos de Theo, sus grandes nudillos y su gracia de luchador.
"Magia."
"¿Qué?"
Theo se encoge de hombros como si hubiera adivinado una respuesta equivocada. "Estás aprendiendo magia."
Lock está sorprendido, "No, yo no lo llamaría-" y Theo se mueve para acomodarlos a ambos, con la cabeza apoyada en la cadera de Lock.
"Sí, lo es," insiste, "entiendo lo básico de las cosas, pero tú estás ahí, mirando a todas esas cosas invisibles. Detras de la cortina. Probablemente hacías muchas preguntas cuando eras niño. O escuchabas demasiado."
"O leía demasiado."
Ahí está esa sonrisa feliz y despreocupada otra vez, Lock no puede apartar la mirada, y es exasperante. Aprieta los puños, agarrando puñados de hierba fría.
"¿Alguna vez pensaste que quieres aprenderlo todo?"
"¿Todo?" No puede sentarse aquí, Theo está haciendo todas estas preguntas, conociéndolo, y es nuevo, pero es lo mismo, ¿qué diablos significa eso? Lock ya no sabe lo que está pasando.
Odia no tener el control. Podría odiar a Theo por eso.
"Todo lo que hay. Cosas. Magia. Lo que sea." Theo se encoge de hombros de nuevo, empujando con el hombro la pierna de Lock desde donde está tirado en la hierba y Lock está tentado a patearlo en las costillas. O ponerle las manos encima. Solo para escuchar los sonidos que puede hacer este luchador.
"No," admite Lock y suelta la hierba aplastada, con manchas en sus uñas.
Theo se mueve para mirarlo. "Creo que lo harás."
Lock respira hondo porque piensa: Siempre has tenido fe en mí y no sé por qué.
"¿Por qué?"
"No lo sé, solo lo sé."
Fe ciega, ciega, ciega.
Lock no dice nada y Theo toca otra estrella.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro