Capitulo 5
— Así que tú eres Alicia —hablo el rubio— me gusta tu estilo —halago mirándola de arriba abajo incomodando un poco a la chica.
— Tienes razón —concordó Hoseok— las otras eran muy rositas para nuestro gusto y ya tenemos suficiente con el estilo para nada masculino de JungKook.
— Los colores no tienen género —se quejó el mencionado.
— igual, el rosa sigue siendo de niñas —contesto Jimin con una sonrisa burlona.
— Pero aun así a mí me gusta el color —murmuro el castaño siendo Alice la única que pudo escucharlo puesto que estaba a su lado.
Alice casi muere de ternura al ver al conejo hacer un puchero con esos bonitos labios. Estaba a punto de decirle al conejo que no se sintiera mal respecto a sus gustos, que él podía vestirse con los colores que él quisiera, sin embargo, las palabras se quedaron atascadas en su garganta debido a que fue Yoongi quien decidió hablar primero.
— Muy bien, dejando de lado el tema de afeminado estilo de Kook, vayamos a lo importante —hace una pausa antes de continuar— la caída de la reina de corazones.
Al instante el ambiente se tornó tenso y Alice lo noto al ver las expresiones de todos.
— ¿Por qué...? —La rubia humedeció sus labios para luego seguir— ¿Por qué su caída? ¿Qué ha hecho ella para que todos la odiéis? —pregunto temiendo un poco por cómo podrían reaccionar los demás.
— es una mala persona —fue TaeHyung quien decidió responder a su incógnita con un semblante serio— en un principio, ella junto al rey habían creado una época de paz y prosperidad y todo estaba bien hasta que un día el reino sufrió un ataque teniendo como consecuencia la muerte del rey, desde entonces la reina se ha portado de manera despiadada e injusta con todos.
— Por su culpa todos hemos perdido a seres queridos que han sido condenados a la muerte de forma injusta —continúo Jimin— nadie puede vivir en completa libertad en este lugar.
— cualquiera que intente llevarle la contraria sufrirá las consecuencias "Que le corten la cabeza" es lo que dice cada vez que algo le molesta —dice Hobi recordando todas las veces que la mujer pronunciaba tales palabras.
Nadie mas dijo nada y Alice no se atrevió a seguir indagando en el asunto, Ya tenía bastante claro el tipo de persona que era la reina.
— Continua con el tema, Yoongi, de nada no sirve quedarnos en silencio —el gato asintió a las palabras del castaño.
— Esto es lo haremos...
...
— bien chicos, debido a que Jimin y Hoseok son unos flojos y le da pereza ir a sus propias casas algunos tendrán que compartir habitación y con algunos me refiero a casi todos. Alice, como tú eres la invitada de honor tú eliges con quien dormir, si quieres te quedas conmigo y... —el peliplata no pudo ni terminar de hablar porque el castaño lo había interrumpido con un golpe— auch.
— conozco tus intenciones, Tae —le reprocho JungKook— sé que entre todos tú eres el menos indicado para compartir habitación con una chica.
— ¿Ah sí? Y según tú... ¿Quién es el indicado para dormir con ella? —inquirió Yoongi con diversión causando el sonrojo del mencionado.
— B-bueno... pienso q-que... —tartamudeaba jugando con las mangas de su saco en señal de nervios.
A Alice no le agradaba mucho que los demás siempre estuvieran buscando la forma de molestar o avergonzar al conejo, no le gustaba que lo hiciesen sentir mal.
— Dormiré con Kook —hablo la rubia captando la atención de todos los presentes.
— ¿segura? —Pregunto Jimin— digo, a ninguno nos molestaría compartir habitación contigo.
— A mi si –opino Yoongi y al instante los demás lo miraron mal- ¿Qué? soy una gato, necesito paz y tranquilidad.
— Ignorando a Yoongi —continua Hoseok con la conversación—tú eres la que escoge.
— Ya lo he dicho —se cruza de brazos Alice reflejando la determinación en su mirada— prefiero a Kook ya que con el siento más confianza, además nunca podría dormir sin mi conejito —dice sujetando las mejillas del castaño para luego apretujarlas provocando que Kook se quejara en el proceso.
— ¡Awwww! –chillaron los demás.
— te tengo tanta envidia, Kookie —se quejó el rubio.
Después de unos minutos ya todos se encontraban en sus respectivas habitaciones. Ambos se encontraban sobre la cama, el con una pijama rosa y ella con una de color azul, los dos miraban el techo como si fuese la obra más interesante del mundo entero y ¿Quién sabe? Para ellos tal vez si lo sea porque ¿Cuántas veces no nos hemos perdido en nuestra mente imaginando o pensando cualquier cosa? Normalmente siempre pasa porque nos quedamos mirando al hipnótico techo. Alice se hallaba jugando con algunos mechones de su propio cabello, enrollando y desenrollando con su dedo índice, estaba incomoda, el castaño no le había dirigido la palabra y eso la hacía pensar en la posibilidad de que JungKook podía estar molesto con ella.
Que malagradecido, ella solo quería ayudar.
— o-oye... si no querías compartir habitación conmigo solo tenías que decirlo —murmuro insegura.
— No es eso... no tengo problema con ello, es solo que... —suspira con pesadez— olvidalo, no es nada.
— ¿Qué? ¿Qué es?
— ya te he dicho que lo olvides, Alice...
— Pero yo quiero saber que es —suplico juntando sus manos.
— Bien... —se rindió— pero no te burles ¿vale? —La rubia asintió— es solo que... estoy acostumbrado a que siempre me dieras mimos antes de dormir —susurro lo último desviando la mirada.
— oh... —fue lo todo lo que pudo decir Alice.
Alice no tenía ni la más mínima idea de cómo sentirse al respecto y es comprensible porque no todo los días un chico te pide indirectamente que le des cariño y mucho menos cuando lo llevas conociendo apenas dos días, claro, la rubia no niega que cuando esta con el chico conejo siente cierta familiaridad, confianza y comodidad, como si lo conociera de toda la vida pero aun así no le había sucedido algo así. Alice podía contar con los dedos de una sola mano las veces que estuvo a solas con alguien del sexo masculino y eso era por alguna tarea o porque sus padres se lo pedían, nunca fue desde un punto de vista romántico por lo que no pueden esperar de ella alguna reacción coqueta o algo por el estilo.
Pero aun así, lo hizo.
Con un poco de inseguridad y relamiéndose los labios se acercó al conejo para luego acariciar su cabello junto con sus orejitas causando que Kook se sobresaltase al principio al no esperarse aquello pero después de unos segundos se relajó cerrando sus ojos. Alice mordió su labio inferior antes de bajar su diestra hacia abdomen del chico sintiéndose decepcionada al percatarse de este era plano.
— Es una lástima, en tu otra forma tenías pancita —susurro a lo que JungKook rio.
— soy vegano, Alice, nunca me veras con una pancita —la mencionada hizo un puchero, la pancita era su parte favorita.
Atreviéndose a mas dirigió su mano hacia la tentativa y esponjosa colita rosa que desde que la había visto había querido tocarla, acariciarla y ¿Por qué no? apretujarla un poco y así lo hizo Alice sintiéndose feliz de cometer sus malvadas intenciones teniendo como consecuencia que el castaño soltara un pequeño y casi insonoro quejido asustando a la rubia quien estuvo a punto de retirar su mano siendo detenida por el conejo que sujeto su muñeca impidiendo que la moviese del sitio.
—estoy bien... —murmuro— no tienes por qué detenerte —le calmo y la rubia asintió antes de seguir en su tarea.
Él nunca admitiría que era sensible en esa parte de su cuerpo, se moriría de vergüenza de tan solo pensarlo.
Continuara.
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