Capítulo 13
Pasaron los días y Daniela seguía en cama por orden médica, pero ella quería terminar de organizar lo del cumpleaños de Manuel y el baby shower de los gemelos, descanso lo más que pudo, las semanas pasaron y ella se sentía mejor. Llego el día del cumpleaños de Manuel, lo felicite y le di su regalo, era una franela que tenía la foto de los bebes en 3D que decía FELIZ CUMPLEAÑOS PAPÁ Manuel se sentó no aguanto y empezó a llorar de la emoción dando pequeñas caricias y besos en mi panza.
Empezaron a llegar los regalos se colocó en el lugar preparado para ello, los invitados empezaron a llegar y comenzamos la celebración, Daniela estaba sentada en el mueble no podía caminar mucho y los bebes estaban más inquietos de lo normal.
Llego la hora de abrir los regalos, cada regalo que abría era una emoción, se cantó cumpleaños feliz a mi amado, mientras yo estaba a su lado, sentía que era feliz, me daba besos en la mejillas susurrándome que me amaba que nos amaba.
A última hora llego un regalo era una caja realmente grande venía con un oso de peluche
— ¿Quién mando el regalo? —pregunte
—Un señor lo trajo hasta la puerta —dijo uno de sus empleados,
—Gracias agradecí aún estando preocupada, los niños no dejaban de moverse estaban inquietos.
Todos querían ver el regalo y clamaban con emoción,
—Ya lo abro —dije con una sonrisa quite el peluche y lo coloque aún lado, mientras abría la caja me encuentro con dos muñecos destrozados y tenían sangre, había una nota que decía.
Tus bebes no nacerán
Me puse pálida no podía hablar, Manuel me quito la caja y me abrazo, —cariño tranquila —dijo de inmediato llamando a seguridad.
Los invitados se asombraron por ese regalo tan extraño, cada uno de los invitados se empezó a retirar quedando solo mis suegros, Manuel y yo.
Manuel me decía háblame yo no paraba de llorar, me llevaron a la habitación y me recostó, dándome un beso en la frente saliendo de la habitación, debía averiguar cómo llego ese regalo a casa.
Hable con mis padres estaba realmente preocupado por Daniela, no quería hablar solo lloraba, llame a la enfermera, para que estuviera pendiente de ella mientras yo debía resolver algo y salí de la casa, Fui hasta la casa de Victoria quería enfrentarla pero su ama de llaves me informo que no se encontraba en el lugar.
—Maldita sea, donde estas Victoria, ¡¡deja a mi familia en paz!! —dije a gritos y salí del lugar directo a un bar necesitaba un trago
Llame a Samuel y le dije que me acompañara al bar necesitaba un trago.
Samuel acepto y dijo— nos vemos en el lugar de siempre,
Okey.—dije
Fin de la llamada.
Llegue al bar y pedí un whisky estaba preocupado Victoria no aparecía y seguía molestando a mi familia en eso llego Samuel y pidió lo mismo que yo
—¿Qué ocurre Manuel?— me pregunto Samuel,
—Victoria sigue queriendo destruir a mi familia Daniela está afectada preocupada que le pueda pasar algo malo a ella o a los bebes —dije con preocupación Samuel me abrazo yo llore no podía más, termine mi vaso y me fui a casa.
Llegando me fui a la ducha y me metí a la cama abrazando a mi Dani pero...estaba pálida y algo fría,— empecé a llamarla Daniela, Daniela cariño— pero no reaccionaba.
Llame a la enfermera ella llega corriendo revisando su pulso que apenas si se sentía, cuando quitan la sabana Daniela estaba toda llena de sangre de inmediato la enfermera
dijo —Hay que llevarla al hospital sino, no,sobrevivirá, se llamó a la ambulancia tardarían 10 minutos en llegar, señor no da chance de esperar la ambulancia hay que irnos ya —dijo la enfermera.
La tome en los brazos y la lleve al auto, sostenía su cabeza mientras el chofer manejaba a toda velocidad, yo le repetía que no me dejara solo, que ya llegaríamos al hospital, llegamos y trajeron una camilla y montaron a Daniela y la llevaron rumbo a Quirófano.
Los bebes debían nacer ya,— dijo la doctora,— preparen a Daniela para una cesaría de emergencia,
No se sabía cómo estaban los bebes así que como eran prematuros 2 equipos de Neonatología estaban listo para atenderlos.
Comenzaron la cesaría unos minutos después salió el primer bebe y luego salió la niña de inmediato el equipo de Neonatología tomaron a los bebes para ser atendidos, en eso los signos vitales de Daniela empezaron a descender.
Rápidamente entubaron a Daniela terminado la operación llevándola a terapia intensiva ya que ella no respiraba por si sola.
La doctora me informo que los bebes estaban bien, por ser prematuros debían permanecer en la incubadora en observación unos días, y Daniela pregunte con desespero, —a ella la tuvimos que entubar dejo de respirar mientras estábamos en la cirugía, —dijo la doctora, ahora depende de ella si despierta o no —dijo y se marchó.
Yo abrace a mis padres llorando.
—Vamos a ver a los bebes— dijo mi madre dándome ánimo,
—Esta bien, vamos— dije, nos fuimos los tres a ver a los bebes primero me mostraron al varón luego a la niña.
—Que bellos— dijeron mis padres emocionados abrazándome me dijeron,— todo va a estar bien hijo —dijo mi padre
—Daniela va a despertar ya veraz anda a verla —dijo mi madre— te esperamos aquí.
Me fui a la habitación vi a Daniela con todos esos aparatos y tubos era muy doloroso verla así.
— Daniela mi amor debes despertar, nuestros hijos ya nacieron son hermosos debes conocerlos recupérate por favor mi amor recuerda que tenemos que casarnos pronto es nuestra promesa— y lágrimas corrieron por mi rostro cayendo en el rostro de Daniela, los signos vitales empezaron a descender rápidamente de inmediato entro la enfermera llamando a la doctora.
— Daniela estaba muriendo,—dije desesperado— hagan algo por favor sálvenla —dije a gritos, la doctora me mando a salir diciéndome que estaban haciendo todo lo posible por Daniela.
Pasaron los días aún Daniela no reaccionaba los bebes estaban cada día mejor así que fueron dados de alta.
—¿Cómo se llamaran? —preguntaron mis padres,
—Mamá aún no lo sé no había pensado en eso, quiero que Daniela este conmigo y decidamos juntos.
2 días después Daniela empezó a reaccionar y dar signos de mejoría le retiraron el tubo y empezó a respirar por si sola.
Llegue con los bebes era hora de conocer a su mamá eran hermosos jugaban con sus manos y eran muy tranquilos Daniela los vio y lloraba de felicidad nuestros hijos estaban bien agradecía al cielo por haberlos protegidos. Unos días más Daniela fue dada de alta y fuimos a casa.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro