Llego el día de mi graduación estaba muy emocionada, seguía con malestar pero no le di importancia.

—Tenemos que irnos cariño—dijo Manuel,

—Si ya estoy lista —le dije,

—Wow estas hermosa —dijo con una sonrisa

—Soy hermosa mi amor por eso me amas tanto ¿verdad?,—pregunto con una sonrisa

 Tienes toda la razón me tienes loco de amor por ti,—recostándome de la pared para hacerme el amor una vez más.

Nos empezamos a besar y acariciar Manuel me besaba con pasión y lujuria bajando por mi cuello él tenía su miembro erecto, mi amor me traes loco, te amo con locura me decía Manuel, nos empezamos a quitar la ropa me subí encima de él tomando el control, esto es nuevo pero me gusta dijo Manuel, continuamos besándonos, luego me senté encima de Manuel dejando que todo su pene entrara por completo dentro de mi él sujeto mi cadera mientras yo gemía de placer continuaba con movimientos de arriba y abajo estaba muy excitada, de inmediato Manuel me giro y me empezó a embestir cada vez más rápido no podía parar de gemir de placer estábamos a punto de llegar al clímax cuando tuvimos un orgasmo placentero, aún con la respiración agitada Manuel me decía que lo volvía loco viéndome con una sonrisa. Nos fuimos a la ducha rápido era tarde así que nos arreglamos y salimos felices rumbo a mi graduación.

—Llegamos —dijo Manuel, baje rápido, en ese momento me maree de nuevo, estaba pálida, espere un poco que se me pasara y Manuel tomo mi mano, entrando al lugar, me fui a sentar donde me correspondía, luego de unos minutos me nombraron Dra. Daniela González, como una de las mejores estudiantes de la facultad, todos me aplaudieron con mucha emoción.

Mientras estaba por bajar uno de los guardaespaldas se percata que hay alguien en la parte de arriba del auditorio dando aviso a su compañero, mientras fue a verificar sonó un disparo, el guardaespaldas se metió en medio para protegerme, ambos caímos al piso recibiendo un golpe en mi cabeza con la mesa ambos perdimos el conocimiento.

Ambos fuimos trasladados al hospital, Manuel pregunto —¿La atraparon los de seguridad? 

Respondieron que no, 

—Son unos incompetentes,—dijo

 —Disculpe sr.—dijo uno de ellos retirándose del lugar.

Manuel pregunto —¿Cómo está Daniela?

—Daniela ya despertó le mande hacer unas pruebas — dijo el doctor—para descartar mis sospechas, tu guardaespaldas estará bien, no fue nada grave gracias a Dios.

1 hora después el doctor entro a la habitación

—Tengo los resultados de las pruebas que le realice y mis sospechas eran ciertas,—dijo el doctor

—¿Qué pasa?—preguntaron 

—Estas embarazada felicidades para ambos —sonrió.

—Embarazada no puede ser—empecé a llorar 

Manuel me abrazaba y me decía— vamos a ser padres gracias por este regalo es el mejor regalo que me has dado, debo decirle a mis padres—dijo Manuel con mucha emoción saliendo de la habitación.

Suspire que vida tenía ni siquiera mi graduación pude disfrutar estaba melancólica, pero un bebe eso cambiaba todo estaba muy feliz, gracias Dios mío por la oportunidad que me vuelves a dar de ser madre, acariciaba mi vientre y empecé a llorar de felicidad.

El doctor dijo que necesitaba hablar con Manuel ambos salieron de la habitación, 

—Dígame doctor,— dijo Manuel, 

—Daniela esta delicada de salud apenas si se recupera del secuestro este es un embarazo de riesgo para ambos, es importante que ella este tranquila por lo menos estos primeros meses, ella debe estar vigilada por una enfermera, puede llegar a tener sangrado y puede perder el embarazo —dijo el doctor.

—Gracias Doctor le prometo que la cuidare —dijo Manuel muy preocupado, 

El doctor continuo diciendo, ella debe quedarse en observación por cualquier cosa mínimo 2 días,

—No hay problema doctor haremos lo que usted diga

luego el doctor se retiró y Manuel entro de nuevo a la habitación, Daniela se había quedado profundamente dormida le di un beso en la frente acariciando su vientre.

Pasaron 2 días vino el doctor para dar las instrucciones a Manuel sobre las vitaminas que debían tomar y que en unos días debían venir para realizar un eco y ver cómo está él bebe le indico a Manuel.

—Gracias Doctor—dijo Manuel estrechando sus manos.

el doctor se retiró y Manuel dijo—ya podíamos irnos, vamos a casa cariño— salimos abrazado, tomándome por la cintura, así salimos del hospital rumbo a casa.

Cuando llegamos encontramos a Juan , Fernanda en la entrada del edificio acompañados por los padres de Manuel traían regalos estaban emocionados por la noticia y querían celebrar que pronto seriamos padres agradecimos por la iniciativa entramos a la casa, yo me disculpe realmente no me sentía bien así que me fui a la cama.

Los chicos estuvieron un rato más, los padres de Manuel entraron a la habitación y estuvieron un rato hablando conmigo y me sugirieron que nos fuéramos a su casa con ellos para más cuidado  

Luisa y Carlos dijeron— tu sabes que nuestro hijo es bastante testarudo y no acepta ayuda pero esto es diferente, quiero que mi nieto o nieta al igual que tu estén bien.

—Vas a tener una enfermera a tu lado siempre y al cabeza dura de mi hijo a tu lado— dijo riendo a carcajada, en eso entro Manuel sentándose a mi lado dejándome un beso en la frente, ya Juan y Fernanda se habían retirado en eso pregunto 

—¿De qué tanto hablan?— pregunto serio, 

—Nada importante —dijo su madre— bueno en realidad del cuidado de Daniela y de mi nieto —dijo seria.

—Madre yo la voy a cuidar con mi vida —dijo abrazándome,

—Yo lo se hijo— dijo su padre,— pero tú sabes que ella necesita cuidados Daniela ha pasado por mucho y no creo que pueda soportar otra perdida— asintió,— en nuestra casa ustedes dos estarán bien, vamos a contratar a una enfermera que este pendiente yo también voy a estar allí —dijo, recuerda que yo quiero a Daniela como una hija.

—Bueno lo vamos a pensar ¿okey?, bueno hijo está bien piénsalo sé que tomaras la mejor decisión —dijo su padre. Es hora de irnos— dijo y salieron de la casa, 

—Nos vemos pronto— dijo Luisa,— por favor cuida de mi nieto— dijo con una sonrisa, claro que si Luisa lo haré, hasta pronto.

Manuel me abrazo y me pregunto sobre vivir con sus padres mientras pasaba el embarazo 

—Mmm... no sé, suena bien así no me siento sola ya que debes regresar a la oficina pronto, —dije haciendo puchero,

—Yo puedo seguir trabajando desde casa mi amor no quiero dejarte sola, no pasara nada mi vida ahora debo estar tranquila por nuestro hijo —dije con una sonrisa.

—La próxima semana iremos al médico y veremos a nuestro hijo pero debes descansar ok, ¿Qué quieres comer cariño?— pregunto Manuel 

—Mmm... no tengo hambre —dije bajando la cabeza, 

—¿Cómo que no tienes hambre? mi amor debes comer y él salió a preparar la cena.