Glosario: Se le llama "gatillazo" de forma coloquial a la disfunción eréctil esporádica y puntual en un varón sin antecedentes (más frecuente entre los 40 y los 70 años), puede atormentar la relación de pareja. O sea cuando el hombre tiene problemas repentinos para ponerse erecto, en su mayoría le pasa a los adultos cuando van envejeciendo sin embargo los varones jóvenes pueden sufrirlo también debido a emociones como estrés o nervios. 

Hay que tener este termino en cuenta ya que de eso va la historia. Sin mas que decir, disfruta tu lectura. 

Desde que Wei Wuxian se mudo al  Receso de las Nubes su vida se resumía en cosas muy sencillas: 

Desayunar lo que le hacia Lan Wangji. 

Jugar con los conejos. 

Vigilar y orientar a los juniors.  

Molestar al viejo Lan Qiren. 

Practicar sus inventos, leer libros. 

Y tener sexo. 

Para aquellos quienes eran cercanos al ex patriarca no les era novedoso su vida sexual activa, el mismo Wei Wuxian alardeaba de esta a menudo causando la misma reacción en sus allegados:  nervios y asco. 

Nadie olvidaba como el líder de secta Jiang escupió su té  durante una de sus - frecuentes- visitas a su shixiong, este se puso a darle consejos para sus "noches intimas" con Zewu-Jun.  El pobre Jiang Cheng tuvo muchas ganas de enterrar la cabeza de Wei Wuxian en el prado de los conejos pero: 1) Se suponía que estaban tratando de llevarse bien de nuevo, 2) Su esposo es el honorable Hanguan-Jun y no será muy cortes, 3) NO es su secta y 4) Además de hermanos adoptivos/marciales, SON CUÑADOS. 

Por lo que únicamente huyo al Hanshi donde el otro chico no podía perseguirle fácilmente.

Siendo esa situación, sí, nadie quería estar cerca cuando Wei Wuxian se ponía a alabar las habilidades de cama de Lan Wangji.  Mucho menos estar cerca del Jingshi pasadas las 9 de la noche...

Después de tratar de tener un día productivo en Gusu, Wei Wuxian esperaba paciente en su residencia el regreso de su amado esposo. Veía a Lan Wangji por momentos últimamente ya que Los Recesos de la Nube pronto recibirían de nuevo discípulos de otros clanes, esta vez Lan Xichen le confió a su hermano la tarea de docente y claro, el segundo jade quería cumplir con las expectativas además de probarse a si mismo como profesor. 

Wei Wuxian esperaba con calma a su esposo, ya había puesto las tazas en la mesita del Jingshi, solo faltaba su adorado Hanguan-Jun. 

Unas horas después, Lan Wangji bajo de su espada en medio del jardín del Jingshi cargando una cajita de madera donde los restaurantes empacaban su comida para llevar, lo cual era extraño. Lan Zhan estaba comprometido a vigilar la alimentación de su esposo. Por ello siempre tomaba prestada la cocina para cocinarle a Wei Ying. 

Esta vez, sin embargo, la comida venia claramente de la ciudad de Caiyi.  

- ¿Bajaste la montaña? - pregunto saliendo a recibir a Lan Wangji, depositándole un beso de bienvenida. 

- Mn, se me hizo tarde- explico brevemente y entro en su hogar dejando la caja en medio de la mesa. Se sentó de forma pulcra y elegante, esparciendo la tela de sus ropas alrededor suyo y recogiendo sus mangas para comenzar a servir, de pronto pareció sentir dolor  de cabeza y se apretó las sienes cerrando sus ojos para que estos descansaran unos segundos. 

Al contrario de él, Wei Wuxian se sentó de forma perezosa y su labor fue servir té. 

- Estas trabajando muy duro preparando clases- 

Lan Wangji asintió mostrando una apariencia decidida de pronto. 

- Tío y hermano confían en mi - poco después pareció inseguro de seguir hablando. - quiero probar como maestro. 

Wei Wuxian ya tenia sus palillos sobre los platillos destinados a su consumo, los que tenían mucho picante, claro. Aun así pudo sonreírle a su marido. 

- Eres muy bueno evaluando reportes y exámenes, además te das a explicar muy bien con pocas palabras. Hanguan-Jun será un excelente maestro. 

Una pequeña sonrisa cansada asomo por los labios de Lan Wangji, complacido de que la persona frente a él pudiera leer sus habilidades. Una persona común se burlaría ya que a simple vista, Lan Wangji tiene poca habilidad para comunicarse, siendo así era imposible que lo imaginaran como un maestro, sin embargo cuidaba e instruía a los juniors de Lan, crio a Shizhui solo. Podía ser un buen maestro, si Lan Wangji era sincero; la enseñanza era su sueño de la infancia.  

- Mn. 

Fue todo lo que respondió, pero su esposo podía captar esa mirada de satisfacción. Sin más comenzaron a comer, intercambiando comentarios sobre su día, o mas bien Wei Wuxian hablaba y a veces Lan Wangji también aportaba algo. Era una rutina normal pero, esta noche el ex patriarca podía notar algo diferente en su esposo. 

Lan Wangji parecía sostener los palillos con pereza, apoyaba su mentón sobre su mano y por ratos se frotaba las sienes cambiando su expresión por una de hastio. Wei Wuxian en seguida supo que su esposo estaba cansado. Tal vez su todos los días debería esperar por hoy. 

No quería hacer que el hombre se esforzara más. 

- Hoy....- comenzo Wei Wuxian - vayamos directo a dormir ¿si?

El hombre frente a él lo miro incrédulo, desde que estaban juntos  pocas veces habían tenido que interrumpir sus noches de intimidad. Pero Wei Wuxian no podía hacer ojos ciegos al agotamiento de su marido. ¡¿Que clase de desalmado seria?!

Sin embargo, Lan Wangji parecía no querer dejar de lado sus labores de cama. Dejo de lado sus palillos y limpio de forma elegante sus labios de cualquier resto de salsa de comida. Gateo hasta el lado de Wei Wuxian sosteniendo su mentón y atrayéndolo a un cálido beso.

Naturalmente Lan Wangji se sentiría mal por no cumplir una actividad que ambos disfrutaban, él sabia que su esposo adoraba sus momentos en la cama. Eran esposos ¿Cómo no podían acostarse?, sin embargo no todo era responsabilidad conyugal. Lan Wagji amaba escuchar al desvergonzado de Wei Wuxian rogar por piedad cuando claramente el chico se derretía de piedad entre sus brazos.  Fueron muchos años de abstinencia y numerosos sueños húmedos, tristes y desgarradores. Ahora que lo tenia junto a el no quería desperdiciar ni un solo segundo. 

El chico de Yunmeng no pudo poner resistencia, hace mucho que se había vuelto débil a esos labios cuyo labio inferior era mas grande, dándole una sensación de cosquillas en el estomago cuando lo succionaba de forma juguetona, la lengua del hombre se colaba en su boca lamiendo la suya y torciéndola deseando conocer cada rincón de la cálida boca. Cuando se separaban del beso, Wei Wuxian jadeaba agitado tratando de recuperar el aire. 

De inmediato Lan Wangji lo subió a su regazo y repartió suaves besos por su cuello, enviándole miles de sensaciones agradables y tiernas al mas bajo que terminaban en miles de pequeñas explosiones dentro de su pecho. Se sentía bien ser amado por Lan Wangji. 

- Lan Zhan....¿no quieres descansar?- un ruidito indicando negatividad comunico que su esposo quería hacerlo. Las manos de lan Wangji  comenzaban a explorar su cuerpo, aflojando las túnicas negras en el proceso. 

Pronto su pelvis comenzó a ser controlada por el jade, moviéndola a su antojo, frotándola sobre la suya para crear fricción y encender el deseo del ex- patriarca. 

El juego de roces y caricias continuo escalando, pero algo extraño parecía haber con esta atmosfera. Normalmente las manos de Lan Wangji tenian una manía con manosear sus posaderas y pellizcarlas para que después Wei Wuxian, desesperado se quitara las túnicas y lo presionaba a tomarlo.  

Sin embargo, esta vez, Lan Zhan seguía moliendo y moliendo su trasero contra su pelvis. Tomándose unos segundos para analizar su momento a este punto ya debería estar en la cama....

Pero no han pasado del suelo de la mesita. 

Curioso, llevo su mano a las túnicas del mayor, haciéndolas de lado para sentir la dureza de Lan Wangji, estas de inmediato le cerraron el paso sin motivo, Wei Wuxian sintió que el asunto se ponía más extraño, Lan Zhan no le negaba casi nada ¡Menos en la cama! ¿Qué estaba escondiendo su marido?

- Déjame ver- murmuro robándole feroces besos para derretir la vergüenza de Lan Wangji, quien creía era su extraño enemigo esta noche. - ¡Tch, Lanzhan!

El chico se quejo y alejo las manos de su esposo por la fuerza escuchando un suspiro resignado de su esposo y sintió que las manos que sostenía temblaban un poco.  Asombrado descubrió que no estaba duro. 

El gran pilar de jade estaba flácido a pesar de estos minutos de juegos previos. Wei Wuxian estaba a punto de ponerse a llorar por ello, ¿estaba perdiendo su encanto y ya no podía levantar a su marido?

Al ser descubierto, Lan Wanji huyo de la mirada de su esposo. Las orejas en seguida se le tiñeron de rojo, avergonzado. 

- No puedo - comento el chico, se escuchaba agraviado - no puedo levantarlo...

Wei Wuxian, suspiro aliviado al comprender que no era su culpa. Mas bien era cuestión de Lan Wangji, le dio un abrazo acariciando su espalda para disminuir la inseguridad que comenzaba a invadir al jade.  Sin duda fue mala idea tratar de hacerlo en el estado mental de Lan Wangji. 

- Estas muy estresado...cosas así pueden pasar- le consolo su esposo dando cálidas caricias por su espalda y cabello. 

- ¿Ya no podrá levantarse mas?- cuestiono Lan Wangji obviamente aterrador a la idea de perder el sexo con su marido. Wei Wuxian rio suavemente y nego. 

-¿Como podría el gran Hanguan-Jun quedarse impotente a sus 30? Es solo por estrés Lan Zhan, necesitas terminar tus pendientes y distraer tu mente- respondió el chico, suaves besos de mariposa fueron colocados en las sienes y mejillas de Lan Wangji. 

- La sesión de cariños personalizada con el guapo Patriarca Yiling comienza- bromeo el chico, tirando las solapas de las túnicas blancas del mayor, Lan Wangji entendió y se las quito dejando solo la celeste túnica interior. Wei Wuxian le imito y se quitos sus ropas oscuras dejando solo su blanca túnica con patrones de nubes, un regalo de Lan Qiren en su cumpleaños.

Con un movimiento de su cabeza, le indico a su amado esposo que fueran a su cama. Sin dudarlo se acurrucaron invirtiendo sus papeles. Esta vez era Wei Wuxian quien sostenía el cuerpo de Lan Wangji, dejando que este escondiera su cabeza en el hueco de su cuello y el acariciaba los cabellos negros. 

Lan Wangji realmente estaba conmovido por la persona que lo sostenía en sus brazos sin juzgar su mal momento. Claro que estaba estresado, tenia que planear sus clases y ayudar a su hermano con los deberes de la secta. La mente del segundo jade taladraba en sus clases, en si tendría buen desempeño, en como podía mostrarse mas amable, que hacer si llegaba alguien tan revoltoso como el quinceañero Wei Wuxian. Su mente estos días estaba inmersa en otro asuntos y por ellos su cuerpo le cobro factura con su actividad de noche. 

- Jiang Wanyin esta en Gusu- anuncio el hombre, Wei wuxian hizo un ruidito de que entendía. 

- Le visitare mañana, debe estar con tu hermano. Además ya es toque de queda. 

- Lo lamento...- murmuro el hombre avergonzado por lo que les había pasado. 

- Lan Zhan ¿lo haz olvidado? Entre nosotros cosas como disculpas y dar las gracias sobra. No hay que perdonar. Al menos esta noche tu gege puede sostenerte en sus brazos- le respondió Wei Wuxian quien tenia la sonrisa mas bella de todas. Como de costumbre Lan Wangji se quedo sin palabras ante tan hermosa sonrisa. 

Era la sonrisa que había cautivado su corazón años atrás, aunque el cuerpo de su adorado Wei Ying era diferente, de alguna forma la sonrisa era la misma. Por la sonrisa pura y traviesa de Wei Wuxia, Lan Wangji podía volver a desafiar todos sus principios, por fortuna eso ya no era necesario. 

Sus labios mostraron una suave sonrisa y tomo la cara de su esposo entre sus manos depositando un tierno beso en su frente. 

- Nunca te lo he dicho. Wei Ying, me gusta tu sonrisa. 

Claramente el color se le subió a la cara al aludido, el corazón le dio un salto enorme y suspiro como un bobo enamorado para después quejarse. 

- Lan Zhan de verdad, avísame antes de que digas cosas tan románticas o se me detendrá el corazón. 

Rendido, atrajo a su esposo a un largo y tierno beso, podía morir besando esos labios por la eternidad y estaría agradecido. 

- Mn.