❀✿13: Una Tontería.✿❀
JiMin miró los precios de las verduras en las góndolas del supermercado, miró las patatas, pensó que podían hacer algo con patatas para la cena, así que escogió un par de las mejores.
— Nos has dicho nada desde que llegamos- murmuró por lo bajo, mientras metía las patatas en el canasto de las compras. Aprovechando que salían juntos, decidió ir al supermercado, ya hacían falta un par de cosas para la alacena y el refrigerador de la casa.
— Estoy esperándote a ti- contestó TaeHyung a sus espaldas.
— ¿A mí?
— Que me cuentes lo que quieras contarme...- dijo el muchacho con calma.
Él sólo suspiró y siguió mirando las verduras, recordó comprar repollo así que caminó a paso lento con el canasto colgado de un brazo y TaeHyung siguiéndolo fielmente hasta la góndola donde estaba el repollo.
— ¿Por dónde debería empezar? - preguntó mirando fijamente los repollos verdes, eligiendo cual era mejor.
— Por el principio estaría bien. Cuando me mandaste el mensaje, dijiste que te estabas volviendo loco-, TaeHyung se encogió de hombros. - Ese luce muy bien- murmuró señalando uno, JiMin asintió y lo tomó para meterlo al canasto. -No entendí a qué te referías, hasta hoy.
— Mm... sígueme- ordenó acabando con las verduras, recordando comprar más cereal para KyuHyun. - Uh, cuando escribí eso hablaba en serio. - Suspiró sonoramente - YoonGi y yo estamos en... algo.
— ¿Algo?
— Sí, algo. - se detuvo frente a los cereales, buscando el que le gustaba a KyuHyun, mientras intentaba buscar la manera de explicarle a Tae qué demonios tenía con YoonGi, aunque el problema principal radicaba, en que ni él lo sabía.
— Pero qué, ¿están saliendo o algo así? - TaeHyung sonaba genuinamente curioso mientras lo seguía mirando todas las cajas acomodadas perfectamente una al lado de otra.
— Eso es lo que también me gustaría saber-, suspiró nuevamente - Recuerdas ese "mini-enamoramiento" que tuve por él, ¿verdad?
— Obviamente. En ese entonces era el único que sabía que eras gay- dijo Tae mirándolo con una sonrisa. Se detuvo frente a la marca de cereales que le gustaba a KyuHyun, tomó uno y lo metió al canasto. Y él sonrió apenas recordando como solía darle vergüenza cuando TaeHyung lo acosaba preguntando y comentando cosas como "¿Qué te gusta de él?", "Es gruñón y amargado, no sé qué le viste", "Pero ¿en serio te gusta?". Luego había resuelto que se trataba de más de admiración que de otra cosa; y había costado un mes lograr que TaeHyung lo entendiera, el chico parecía más emocionado por su "enamoramiento" que él mismo.
— Esto es mucho peor- confesó en un susurro algo triste. - Definitivamente, de verdad me gusta, y recién ahora puedo confirmarlo.
— Pero, ustedes están en algo, eso es bueno, ¿verdad? - TaeHyung parecía no parecía comprender el porqué de su expresión triste. Él negó con la cabeza - ¿Entonces qué pasa?
— Es decir, es bueno de alguna manera; puedo tener a YoonGi de una manera que jamás imaginé, pero tiene sus contras, y hay uno que me está carcomiendo la cabeza-, resopló mientras miraban alrededor de las góndolas. - Espérame aquí-, dijo acercándose a un estante con condimentos y frutos secos, también había algas secas. Tomó un paquete de pimienta negra, y dos paquetes de algas secas y volvió a acercarse a Tae.
— ¿Qué es entonces? - preguntó TaeHyung preocupado mientras él se acercaba.
— Es... una tontería- concluyó por sí mismo, pero continuó- No sé qué hay entre nosotros. Sí, nos besamos, hicimos... cosas subidas de tono y nos comportamos cariñosos con el otro pero... no hay un nombre o un algo que defina lo que estamos haciendo- admitió con el rostro ardiendo, ahora que lo decía en voz alta, sonaba un poco más tonto de lo que pensaba. - No puede ser sólo calentura, si fuera por eso ya habríamos tenido sexo y antes de que digas algo, no, no lo hicimos- detuvo a Tae, el chico ya tenía la boca abierta para hablar cuando él levantó su mano. Tae apretó sus labios y levantó las manos fingiendo inocencia. - Como decía, no puede ser sólo calentura porque ya habríamos llegado a algo más, pero tampoco estoy realmente seguro de que él sienta algo parecido a lo que yo siento por él. Y puede sonar muy estúpido, pero para mí esto es importante.
Tae le regaló una linda mirada de dulzura, ambos deteniéndose en el pasillo de los dulces. —¿Acaso ustedes no hablan? - preguntó suavemente. Él negó con la cabeza.
— Claro que hablamos, pero no de eso. Es decir, no hay momento; cuando están los niños no podemos hablar de eso y si no están, ocupamos el tiempo en otra cosa, y...- se sonrojó mirando el suelo ante la sonrisa burlona de su mejor amigo -Digamos que soy realmente malo en pensar cuando tengo mi lengua en su boca.
Tae rió suavemente negando con la cabeza. -Ustedes necesitan hablar.
— Yo no sé cómo abordar el tema, ¿sabes?... Algo así como que me da vergüenza.
— Pero Park-, habló TaeHyung seriamente -¿Cómo pretendes entender qué pasa entre ustedes, si te da vergüenza hablar y decir lo que sientes? -dijo Tae comenzando a arrastrarlo al cajero para pagar las cosas. - Escucha, no soy un experto, pero debes aprender a comunicarte, a decir lo que sientes. YoonGi no es un idiota ni nada, no creo que esté haciendo esto por diversión propia o algo así, él entenderá- finalizó encogiéndose de hombros como si no fuera gran cosa.
Hizo una mueca de resignación, Tae tenía razón, pero él no se consideraba tan valiente. Y seguía pensando que era una tontería después de todo.
Después de pagar se encontraron en el estacionamiento con YoonGi, quien los fue a recoger en el auto de HaNeul. Se sintió extraño cuando YoonGi le dedicó una cálida sonrisa, y su interior hormigueó en respuesta, estaba seguro de que más que gustar, había estado enamorado de YoonGi por un buen par de años. Pero ahora su pregunta era, ¿sentía YoonGi lo mismo?
Devolvió la sonrisa de igual manera, y volvieron a casa en un ambiente bastante entretenido con TaeHyung, que pareció decidido a no dejarlo ahogarse en sus propios tontos pensamientos.
Cuando llegaron a la casa, para su gran sorpresa, quien estaba con DaeHyun haciéndola reír a lo loco y manteniéndola entretenida, era JungKook. El castaño estaba muy divertido con la bebé recostada en su regazo, donde cabía perfectamente, y le hacía muecas haciéndola reír a carcajadas.
— Bien, esto... es definitivamente la segunda imagen más impactante de toda mi vida- concluyó JiMin, mirando al maknae con una ceja alzada y una sonrisa.
— ¿Y la primera? — Inquirió YoonGi. Él lo miró fijamente.
— Ese fuiste tú con ella.
YoonGi le sonrió; él devolvió el gesto y se dirigió a la cocina a dejar las cosas mientras TaeHyung se unía al maknae, maravillado con la niña. Pensó que sería realmente tierna la imagen de un Tae con sus propios hijos.
YoonGi le siguió y entre los dos ordenaron las cosas en silencio, un silencio que era demasiado cómodo y estaba volviendo loco a JiMin. Todo, desde que estaban juntos cuidando a los niños, era demasiado familiar y hogareño, justo como a él le gustaba, y eso sólo estaba haciendo que su corazón revoloteara como idiota alrededor, rogando porque algo serio salga de esto, él no quería ser un juguete.
Mientras ordenaba la alacena, se planteó a sí mismo la posibilidad de decirle a YoonGi como se sentía al respecto; pero tenía miedo, y de varias cosas, de descubrir que fue un juego, o de perder lo único realmente bueno que había obtenido de YoonGi. Se sentía estúpido, a veces de verdad creía que sólo estaba pensándolo demasiado, pero era una persona temerosa, no había tenido demasiadas buenas experiencias y recién estaba volviendo a soltarse más incluso con sus propios amigos.
Se giró y miró a YoonGi terminar de guardar un par de refrescos y las verduras en el refrigerador.
— ¿Me das un beso? - pidió casi en susurro. YoonGi se dio la vuelta de inmediato y lo miró dulcemente; luego se acercó a él, tomó su mano y lo guió fuera de la cocina.
Se dejó llevar sin preguntar nada, ignorando a JungKook y TaeHyung que reían con la bebé en la sala, y pronto descubrió que estaba siendo guiado a la habitación.
Una vez allí, YoonGi cerró la puerta envolviendo su cintura a la vez, mientras mantenía la mirada fija en sus ojos. Le sonrió envolviendo sus propios brazos en la cintura del mayor, se acercó hasta rozar sus narices y se mantuvieron mirándose atentamente por unos largos minutos, que hicieron que el corazón de JiMin se apretase en su pecho. Se sentía pequeño pero dichoso ante la mirada dulce que YoonGi le estaba otorgando, no recordaba que lo haya mirado así nunca... de hecho, no recordaba que nadie lo hubiera mirado así.
YoonGi cortó la poca distancia entre ellos y le besó suavemente, ambos suspirando cuando sus labios se tocaron. Apretó a YoonGi contra sí moviendo sus labios con lentitud, adorando cada instante de aquello y suspiró complacido con el hormigueo cálido que lo recorrió de pies a cabeza. Delineó con ansias el labio inferior del mayor con su lengua, queriendo tener el sabor de YoonGi en su boca, y el mayor gimió con aspereza cuando él invadió su boca, y se dejó explorar sin quejas, recorriendo su espalda de arriba abajo con una de sus grandes manos, mientras la otra reposó caliente en su nuca, masajeando suave la piel sensible de su cuello.
Se sentía como el cielo; JiMin se sentía cálido mientras sostenía a YoonGi cerca y mientras se dejaba sostener por él, se sentía tan natural estar así con el mayor, que por un diminuto instante se asustó de lo rápido que se había acostumbrado a ese tipo de cercanía.
Pero decidido a no dejar que sus pensamientos lo arruinaran, se pegó por completo a YoonGi hasta que ninguna parte de su cuerpo estuvo sin conectar con el del contrario. Se abrazó con fuerza, deseando que ese dulce momento no se acabara nunca.
Gimió con los ojos cerrados, separándose apenas y con el labio inferior del mayor entre sus dientes, y sonrió cuando descubrió a YoonGi mirándolo fijamente.
Un último beso y juntaron sus frentes con la respiración un poco agitada, ambos tenían una sonrisa plantada.
No se resistió al primitivo impulso de besuquear al mayor, empezó alegremente por su mejilla y su mandíbula, bajando lentamente hasta su cuello con cortos y rápidos besitos que provocaron una suave risa ronca en YoonGi.
Por primera vez, su cabeza estaba felizmente vacía mientras YoonGi lo envolvía con sus brazos.
— Alguien volvió mimoso- murmuró el mayor en su oído, enviando un escalofrío por toda su columna, él quería seguir besándolo. Y lo hizo, volvió a sus labios con cortos besos húmedos.
— Tal vez un poquito- susurró con una sonrisilla, atrapando los labios ajenos en los suyos otra vez. - Mm...
YoonGi rió nasalmente, y lo apretó un poquito más esta vez tomando el control, él volvió a gemir bajo dejándose guiar por el mayor, que parecía entusiasmado cuando sus lenguas se tocaron, gimió y apretó sus manos en sus caderas.
Subió una de sus manos hasta la nuca de YoonGi, profundizando el beso, sintiendo como la punta de sus dedos se curvaban de felicidad y placer por estar compartiendo tales besos, se sintió un poquito ansioso, necesitando un poco más, pero antes de poder siquiera decidir qué quería, el llanto de la bebé los hizo suspirar, y reír con burla.
Se besaron un poco más, y caminaron escaleras abajo.
— ¿Crees que la hayan dejado caer? - inquirió YoonGi. Él negó con una sonrisa, sus labios hormigueaban y se sentían un poco hinchados.
— No, cincuenta wons a que están intentando preparar el biberón- apostó.
— Cincuenta a que pelean por quién le cambia el pañal.
Cerraron la apuesta con un apretón de manos y un beso corto en medio de las escaleras, y bajaron para descubrir que no estaban en la sala. Entonces caminaron hasta la cocina.
— ¿Qué hacen?- preguntó cuándo vio a JungKook moviéndose alrededor, SeokJin sostenía a la bebé intentando calmarla y Tae intentaba entretenerla.
— Intento preparar el biberón- dijo JungKook.
— Y yo le digo que hacer- agregó SeokJin rodando los ojos.
Él sólo pudo reír y estiró su mano hacia YoonGi, quien resopló y sacó su billetera con cara de pocos amigos.
— ¿Apostaron? - inquirió Tae, ellos asintieron y YoonGi deposito cincuenta wons en su mano. Él sonrió con suficiencia.
— A todo esto, ¿dónde están NamJoon y HoSeok? - interrogó acercándose a SeokJin.
— Esta mañana salimos los tres a dar un par de vueltas, pero yo volví antes porque tenía hambre.
Rodó los ojos, y de pronto sintió los delgados brazos de YoonGi a su alrededor, mientras todos observaban a JungKook maniobrar para terminar algo tan simple como el biberón.
Sonrió ligeramente, y se dijo a sí mismo que no fuera cobarde, que sus dudas no eran malas y sin sentido, y que querer hablar estaba bien.
Hablaría con YoonGi lo más pronto posible.
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Hola!
Lamento mucho la demora, espero que les guste y que no tenga errores ^^'
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_Editado por Ru 180220_
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