"¡Qué!" Un fuerte grito resonó en la mente de Izuku, eso debía ser una broma, aunque él escuchó un estallido... No, no y no, frente a él no podía encontrarse el protagonista de Boku no hero academia. ¡Es imposible!

—Tú eres Bakugo-kun, tu kosei es explosión, eres estudiante de la academia de héroes U.A, parte de la clase 1A, tus padres son Mitsuki y Masaru Bakugo y eres el portador del One for all —tartamudeó Izuku. 

El chico frente a él frunció profundamente el ceño e hizo una mueca aterradora.

—¿¡Ah!? —Salió de la boca del rubio mientras una de sus manos iba con rapidez hacia la camisa del pecoso, pero este antes de ser agarrado y sacando una habilidad que no poseía se tiró encima de la isla cayendo de bruces al lado del comedor—. ¡Ven aquí maldito cobarde!

Como pudo Izuku se levantó del suelo sintiendo un fuerte dolor en la nariz y corrió hacia la sala con toda la intención de subir las escaleras hacia el segundo piso y esconderse en su habitación, pero fue interceptado por el supuesto Bakugo.

—Ahora me dirás cómo sabes tanto de mí, espero que hables maldito cobarde o te mataré. —Varias explosiones pequeñas salieron amenazantes de las manos del intruso haciendo temblar a Midoriya.

En ese momento el joven fanático se dio cuenta de tres cosas. La primera era que el ritual había sido un éxito, la segunda que Bakugo era muy intimidante en personas y la tercera que no debió soltar toda esa información hacia él sin darle una explicación de lo que pasaba, ahora debe lucir ante sus ojos como un villano, uno algo patético pero un villano de todas formas.

—Tranquilo yo puedo explicarte que sucede —habló Izuku rápido y con la voz muy chillona, todavía bastante asustado—. Este no es tu mundo yo te invoqué anoche y te traje al mío.

Una fuerte explosión estalló demasiado cerca de su rostro haciendo gritar al pecoso. 

—¡Deja de decir basura y dime la verdad pequeña mierda! —El grito de furia del rubio solo hizo que Izuku temblara cuál gelatina.

—Puedo probarlo. —El pecoso pensó rápido en algo que lo hiciera ver qué decía la verdad. Nada que fuera lo suficientemente verídico se le ocurría hasta que miró el televisor y pensó en las noticias, había un canal de noticias de veinticuatro horas, eso debería ser suficiente—. Sígueme.

Rogó porque Bakugo le hiciera caso mientras se dirigía con cautela a la sala caminando hacia atrás sin apartar la mirada de la bomba de relojería en su casa.

Cuando vio que el ojirubí metía sus manos en sus bolsillos se dio el valor para voltear, correr al sofá y tomar el control remoto.

—¿Qué pretendes? —preguntó Bakugo haciéndose a un lado del sofá mientras veía atento como el pecoso encendía el televisor y pasaba los canales—. ¿Cómo vas a contestar mi pregunta viendo televisión? ¿Acaso te estás burlando de mí?

—Mira las noticias —respondió Izuku, mirándolo con cautela.

La mirada rojiza se posó en la pantalla donde estaba hablando una periodista, nada se veía fuera de lo normal, no entendía que quería que viese, solo era un tonto reportaje sobre un robo a un pequeño almacén, aunque después de unos segundos el rubio notó algo fuera de lo normal.

—¿Por qué los héroes no fueron a detener el robo? —preguntó Katsuki mientras fruncía el ceño.

—Porque en mi mundo no existen los superhéroes.

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Una hora estuvo frente al televisor viendo las noticias con suma concentración y después de ese tiempo Bakugo llegó a una conclusión, era verdad, en ningún momento en toda esa hora se mencionó a algún héroe o villano, y eso en su mundo era algo casi imposible.

Un teléfono fue puesto frente a sus ojos. 

—Lee esto —dijo el pecoso mientras el aspirante a héroe tomaba el aparato. 

"Cómo invocar a un personaje de ficción" pudo ver en la pantalla, abrió la lectura y empezó a leer todo lo que allí ponía.

—No creí que funcionaría —dijo el chico a su lado con voz suave—. Aunque admitiré que muy en el fondo lo deseaba, te admiro mucho, eres tan genial, tan valiente, tan poderoso, ¡eres increíble!

—¿Soy un personaje de ficción? —preguntó Bakugo sorprendiendo a Izuku—. ¿Soy un maldito personaje de alguna historia de mierda?

—En mi mundo si, en el tuyo no —respondió Midoriya de forma sería.

—¿Cómo lo sabes? ¿¡Cómo putas vas tú a saber eso!? 

El grito hizo retroceder al pecoso quien al instante comenzó a temblar de nuevo, pero tragando fuerte y tomando varias bocanadas de aire se dispuso a explicarle al rubio la conclusión que tuvo después de una hora de pensarlo.

—Mira los comentarios en la historia. —Esperó con paciencia a que el rubio revisara uno por uno los más de cien comentarios que la historia tenía—. Ves que casi todos los que han sido hechos entre ayer y hoy dicen que no había funcionado, o son solo burlas. Ahora mira este.

Tomando el celular buscó uno en concreto y entonces se lo enseñó al rubio. "Está aquí, ¿y ahora qué hago?"

—Muchos lo tomaron como un juego, pero hay algunos más que son similares, yo le mandé un mensaje privado a todos los que comentaron parecido y solo está persona me contestó, a ella también le funcionó.

—Y que tiene que ver toda esta mierda conmigo. —Sus ojos rojos se veían mortificados, la idea de que su existencia fuera una mentira no era menos que aterradora.

—Esta chica y yo tenemos la teoría de que solo funciona la invocación si la persona realmente existe, si fueras solo un personaje de ficción no estarías aquí Bakugo-kun. —Los ojos cafés del chico mostraban determinación y seguridad, creer en la palabra de un estúpido que acababa de conocer era tonto, pero la aceptó, era mejor eso a la alternativa.

—Regrésame a mi mundo —exigió sin más subiendo los pies a la mesita de centro.

—Bueno eso es otra cosa... Yo no sé hacerlo. —Lo último lo dijo con voz muy baja, pero aun así fue escuchado por el rubio quien al instante estalló en ira.

—¿¡Qué tú qué!? 

El grito hizo encoger a Izuku en su sitio más por vergüenza que por miedo. Cómo pudo ser tan estúpido como para no pensar en cómo haría para regresar a Bakugo una vez lo invocará, claro estaba que él creyó que nada pasaría, pero aun así fue irresponsable de su parte no pensar en la posibilidad, y ahora no sabe cómo ayudar al chico a salir del problema en el que él lo metió.

—Lo siento, lo siento, lo siento. —Izuku se disculpaba una y otra vez mientras inclinaba su cuerpo tan profundamente que su frente casi tocaba el suelo.

—¡Te mataré pequeño pedazo de mierda! 

Levantándose de golpe del sofá fue directamente al pecoso quien aún seguía disculpándose, cuando un fuerte, "¡shine!", los dejó a los dos estáticos, uno por la extrañeza y el otro por la vergüenza, el sonido de una notificación era lo que se había oído.

Con manos temblorosas Izuku miró su celular mientras se enderezaba. "Se ha publicado un nuevo capítulo de Como invocar un personaje de ficción", los ojos del castaño se iluminaron debido a la esperanza que empezó a crecer en él mientras abría el nuevo capítulo llenándose de alivio al leer el título, con el rostro sonriente inmediatamente se lo mostró al rubio.

"Como regresar al personaje de ficción que has invocado a su mundo".

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De nuevo yo aquí dejando esto para ustedes, espero les guste, es un gusto hacer esto y espero que lo disfruten.

Gracias por la paciencia, por sus votos y comentarios y por llegar hasta este punto, son los mejores.

Nos leemos en el próximo capítulo o en otra de mis historias, los quiero.