—Conversación—

"Los dragones hablan" Hiccan es la única que puede escucharlos hablar, al menos por ahora.

"Pensamientos humanos" (Hiccan puede comunicarse telepáticamente con los dragones)

"Pensamientos de los dragones" Hiccan es la única que puede escuchar sus pensamientos al igual los dragones pueden escuchar los de ella

"Voces de los Druun"

Hiccan despertó con los primeros rayos del sol, a pesar de que había algo de neblina, hizo su guardia y hace unas dos horas que se había quedado dormido, pero no se sentía cansada ya que estaba a costumbrada a develarse y no afrontar sus pesadillas frecuentes.

—Hora de iniciar el día— dio un bostezo y se levanto, observo que todo aun estaban dormidos incluso sus dragones— Creo que iniciare el desayuno— 

Con una gran habilidad comenzó a preparar el desayuno, cocino pescado, huevo y algo de arroz que encontró, además de hacer jugo con la Fruta de Vanaheim. Mientras cocinaba, Hiccan canturreaba una melodía suave, su voz resonando en el bote. Fue cuando los tripulantes del Emporio del Camarón comenzaron a despertarse, oliendo el delicioso aroma del desayuno.

—Buenos días chicos— saludo Hiccan— Prepare el desayuno— aviso mientras colocaba un plato a cada uno

—Se ve delicioso— hablo Sisu al ver la presentación del plato

El desayuno que Hiccan había preparado era un plato tailandés llamado "Jok", un arroz con leche de coco y especias, acompañado de frutas frescas y verduras.

—Para serles sincera es la primera vez que lo preparo— mostro un pergamino— Pero intente seguir los pasos de esta receta—

—¿Espera entiendes nuestros escritos?— pregunto Rayan sorprendido

—Al principió no pero fue fácil después de un rato—

—¿Cuando te volviste experta en lenguaje?— pregunto Rayan divertido

—Anoche— contesto sonriente— Disfruten— luego todos empezaron a comer

—¡Delicioso!— exclamaron Sisu, Chimuelo y Boun extasiados por el sabor

—Nada mal— dijo Hiccan sorprendida por su platillo— ¿Qué les parece..?— se detuvo al ver a los Ongis y la bebe comer como sino hubiera mañana— Lo tomare como un cumplido— se respondió a si misma y luego miro a Rayan quien solo miro fijamente su plato— ¿No te gusto?—

—No, no es eso. Esta delicioso— respondió un poco avergonzado— Solo que mi madre solía prepararlo para mí cuando era niño— admitió— Hace años que no lo pruebo... Gracias—

—Hiccan— llamo Boun— Esto es lo más delicioso que eh probado en mi vida, después de mi Congee— comento e Hiccan no pudo evitar voltear los ojos divertida por su comentario— ¿Qué tal si te contrato?—

—Apreció la oferta— luego comenzó a levantar los platos— Pero no creo poder quedarme, Thor y yo tenemos que irnos tarde o temprano—

—Si cuando termines— hablo Chimuelo con la boca llena

—Cuando termine— recalco y fue a limpiar los platos y todos los utensilios que uso

Rayan no pudo evitar pensar en lo que dijo Hiccan, se había acostumbrado a la presencia de Hiccan que pensar en que ella se fuera lo hacia sentir algo extraño, como un temor a lo que le pasara a ella y no estuviera él allí. 

—Rayan— hablo Hiccan teniendo su atención— ¿Cuánto falta para llegar a Spine?—

—No mucho— contesto mientras sacaba su mapa— El mismo río nos esta llevando cerca del Reino de Spine—

—Esta bien— luego fue a la mesa para continuar su trabajo

Rayan no dejo de observar su mapa, aun conservaban las marcas de cada río que estuvo en busca de Sisu, aun no creía que estuviera cerca de arreglar su error, contaba con tres Gemas del Dragón en su poder y solo esperaba conseguir las ultimas dos, sin importar el costo. Sus pensamientos fueron interrumpidos cuando un trozo de Camarón le goleo la cabeza y caía en su mapa, al mirar hacia un lado, notó que los Ongis y el bebé seguían comiendo todo lo que veían. Parecía que Boun ya estaba harto de que se lo comieran todo, ya que saltó de detrás de la mesa.

—¡Oigan!— les gritó Boun mientras ellos se asustaban y salían corriendo— ¡Dejen de comer todo!— exigió mientras los Ongis en su escape, sin querer tiraron el pato de salsa picante sobre la comida de Tuk Tuk

—Tuk Tuk espera— Rayan intento detenerlo pero Tuk Tuk ya había comido una parte de esa comida, no tardo en sentir esa sensación de picor y rápidamente se acerco al borde del barco para escupir la comida— Lo siento, amigo, yo me encargo de esto— dijo Rayan mientras se levantaba y decidía ayudar a controlar el caos

—¿Acabas de tirarme la cola del camarón?— le pregunta Boun al grupo sin saber quién lo hizo— ¡Eso ni siquiera es comestible!—

—¡Hey! —gritó Rayan suavemente a los niños— ¿Chicos? ¿Queréis jugar a las escondidas?— solo con decir el juego obtuvo su atención, ya que los Ongis y el bebé dejaron de correr— Muy bien. ¿Listos? —preguntó Rayan mientras se tapaba rápidamente los ojos — Uno— de inmediato los Ongis y el bebé salieron corriendo a buscar algún escondite— Dos— continuó dejo de cubrirse los ojos para ver a Boun

—Gracias— Boun suspiró mientras Rayan se alejó

—Dos y medio — continuó Rayan mientras se acercaba a Hiccan— Tres—

Hiccan estaba trabajando con la tela para la aleta de la cola cuando Rayan se acercó y se dejó caer sobre la mesa con un suspiro. Hiccan se rio entre dientes al ver el cansancio que sentía por tener que lidiar con los tres animales y el bebé desde que los recogió.

—Recuérdame que nunca tenga hijos —le pidió Rayan a Hiccan con un suspiro

—Nunca digas nunca— respondió Hiccan con voz cantarina

—Hablo enserio— dijo Rayan

—Solo porque esos cuatro sean un dolor de cabeza no significa que tus hijos sean igual— argumento— Solo que aun no te los imaginas porque aun no tienes a la mujer que amas para tenerlos— continuó 

—¿Y cómo es eso?—

—Bueno... si te gustaba alguien en el pasado o te gustará alguien, pensar en un futuro con ella hará que deseos que no sabías llenen tu mente— explico

Rayan lo tomo en cuenta y no pudo evitar recordar la noche anterior como Hiccan arrullaba a la bebe, aunque ahora no era la misma bebe que pensaba sino su hijo. Rápidamente se sacudió la cabeza para sacar eso de su mente.

—Y-yo lo dudo— balbuceo

—Solo es mi opinión— se encogió de hombros y continuó su trabajo

—¿Cómo vas con eso?—

—Bueno iría mejor si tuviera algo de metal y para terminarlo—

—Y cuando esté hecho... ¿Cuál es el plan?— Rayan cuestiono con preocupación

—Con los Krogan y los demás cazadores de dragones aquí, tengo que irme lo más pronto y lejos posible de ustedes—Hiccup le explica lo que tiene que hacer— Si tenemos suerte ellos irán tras nosotros y los dejaran en paz—

—¿Y luego qué?— continuó Rayan— ¿Simplemente seguras huyendo por cuánto tiempo?— Rayan no estaba convencido por su plan, estaba preocupado, si... apenas la conocía hace días, pero ella arriesgo mucho para ayudarlo, incluso la seguridad de su amigo dragón y ahora ella estaba dispuesta a irse por la seguridad de él y sus nuevos amigos

—Si algo así— Hiccan se encogió de hombros despreocupadamente para consternación de Rayan— Adondequiera que vayamos, seguirán intentando atraparnos. Seguiremos poniendo a otros en peligro. Sólo mira lo que hicimos aquí. Ya tienes suficientes problemas desde mucho antes que nos encontráramos y todo lo que hicimos fue traer nuestros propios problemas aquí—

—¡Hiccan, no puedes correr para siempre! — exclamo Rayan frustrado

—¡No es que nos queden muchas otras opciones !— reclamo Hiccan y suspiro para calmarse— No mientras esos cazadores estén siempre detrás de nosotros. Todo lo que podemos hacer es detenerlos uno a uno— 

—¿Y cuánto tiempo te llevará eso?— pregunto con sarcasmo

—Quién sabe— Hiccan miro el río— Llevo dos años encargándome de ellos desde el momento en que intentaron capturarme por primera vez. Cada vez que destruyo una nave... diez más surgen aparecen de entre as cenizas— explico y miro a Rayan— No te preocupes por mi, tu preocúpate en salvar tu mundo, recuperar a tu padre y a tu pueblo eso es lo más importante para ti— lo tranquilizo y luego continuó midiendo su tela

Rayan se quedo pensando sobre lo que dijo Hiccan, ella lleva años peleando contra un grupo que quizás quieran matarla a ella o a su dragón, mientras él solo paso parte de su vida en busca de Sisu para que resolviera su problema y no va a negar que él tenía un deseo egoísta de que solo ayudara su Reino y nada más, sin embargo Hiccan se preocupaba por todos a pesar de lo que había vivido y estaba dispuesta a ir con tal de que no les pasara nada. Sentía respeto y admiración que solamente sentía por u padre. 

—¿Y si tu también fueras importante para mi?— pregunto e Hiccan se desconcentro e hizo un trazo mal

—¿Qué?—

—Si, bueno me has ayudado más que nadie y confiaste en mi cuando nadie en este lugar esta dispuesto hacer— comenzó a explicar— Muy pocos lo hace y tu te volviste alguien importante para mi... co-como una amiga—

—¿Amiga?—

—Si, eres mi amiga Hiccan— admitió Rayan

—Bueno al parecer tengo el Don de hacer cambiar a la mayoría de las personas— dijo divertida— A precio lo que haces, pero como dije, no hay nada que puedas hacer—

—¿Y si acabáramos con los cazadores desde raíz?— pregunto casi desesperado al no poder convencer a Hiccan— Digo...— se calmo ante su forma de hablar— Los que nos atacaron anoche ellos trabajan para alguien ¿No?—

—Si, pero es difícil sabes quién es el Jefe, Krogan es mi enemigo más antiguó siempre tratando de atraparme desconocía el motivo del cuando descubrí que era por ordenes de su Jefe y luego aparecieron los hermanos Grimborn, antes creía que Viggo y Ryker era los lideres hasta que supe que trabajaban para alguien, la verdad no se si ambos son la misma persona— explico y por su forma de explicarlo se notaba cansada y desesperada por lo que a pasado

—Bueno de igual manera debe de estar escondido para dejar que otro hagan su trabajo— 

—Si, pero sea quién sea no se rendirá fácilmente y por desgracia podría poner a los dragones y las personas que me rodean en peligro—

—¿Cuándo has pensado alguna vez en ti misma?— Rayan ahora tenía curiosidad por saberlo

—Cuando vives en una sociedad que te considera inútil, preocuparse por ti mismo esta sobre valorado y cuando encuentras en un propósito en tu vida no te importará nada más que eso ni siquiera tu propio bienestar—  

—¿Por eso abandonaste tu hogar?—

—En parte— respondió— No era muy querida en mi pueblo y no les gustaba a los dragones. Hui para no revivir eso... y también por él— miro a Chimuelo

—Eres muy noble, Hiccan—

—Gracias— Hiccan se sonrojo un poco— No mucha gente me ha dicho eso—

—Me recuerdas un poco a mi padre. Le habrías agradado— admitió Rayan— Nunca se puso por delante de nadie—

—Bueno, esa es la maldición de todos los gobernantes o futuros gobernantes —suspira Hiccan, recordando todas esas lecciones que tuvo que hacer— Un Jefe protege a los suyos— repitió las palabras de su padre— Aunque pensemos en todos... simplemente no lo entienden— recordó la ultima vez que hablo con su padre

—¿Tan malo era tu?— pregunto e Hiccan se encogió de hombros

—Mientras ustedes luchan contra la desconfianza de los demás Reino, nosotros vivíamos una guerra— dijo Hiccan— Mi pueblo no sabía hacer otra cosa que pelear y hacer daño a los demás, física o mentalmente y se esperaba que todos fueran igual... Así que el cambió era poco bienvenido— comento y Rayan estaba más sorprendido sobre el hogar de Hiccan

—Me sorprende que te fueras—

—¿Más razonable que mi pueblo?— completo divertida al pensar en lo que él iba a decir

—Tu lo dijiste— dijo entre risas

Mientras al otro lado del bote Chimuelo los observaba y sonrió ante esa escena. Muy pocas veces Hiccan convivía con su especie sin que salieran perjudicaos por su causa, pero ahora ese chico no le importaba lo que paso en la aldea anterior y ahora hasta la hizo reír como sino existieran los problemas, con eso le bastaba para estar contento por su hermana. Se dirigió al borde de la pate delantera del barco, donde Sisu estaba sentaba y decidió sentarse con ella.

—Bueno, parece que nuestros humanos se están llevando bien— bromeó Chimuelo mientras se sentaba junto a Sisu— Es agradable— continuó esperando una respuesta de Sisu, ya que no había dicho ni una sola palabra desde lo que paso en Talon— Hiccan muy pocas veces ha hablado con las personas... porque la mayoría a intentado matarla— continuó pero Sisu no reaccionaba— Ok ¿ahora qué pasa contigo?— cuestiono frustrado al ser ignorado

—Ser humano es difícil —respondió finalmente Sisu

—Dímelo a mi— comento Chimuelo aliviado de que al menos lo escuchara, luego miro sus manos y movió cada dedo, después vio sus pies cubiertos con sus botas— No entiendo a los humano sobres poner pieles sobre sus patas y no como pueden andar con dos— dijo moviendo su pie de arriba a bajo— Me gusta caminar en cuatro patas y extraño mis alas—

—No solo eso— continuó Sisu— Tienen cabezas pequeñas, no tienen colas y consiguen lo que quieren mintiendo, como hizo la Jefa de Talon—

—Eso para tu es la naturaleza de los humanos— respondió Chimuelo con sinceridad— Es su manera de sobrevivir en su mundo tanto para con su propia especia como para los dragones—

—No puede ser tan simple como eso— negó Sisu

—Escucha, puede que no te guste, pero así es— continuó un poco molesto— El mundo ya no es el mismo desde que desapareciste. Así que no sabes del terrible que se han vuelto las cosas para nuestra especie, al menos es lo que yo pienso de donde yo vengo— murmuro y viendo hacia atrás Hiccan estaba concentrada continuando el juego con los Ongis y la bebé— Perdí a toda mi familia desde muy joven por culpa de la crueldad de los humanos—

—Oh Dios...— Sisu se sorprendió al escuchar por lo que había pasado Chimuelo.

—Mi padre intentó detenerlos para que nuestra familia pudiera escapar, pero fue muy tarde. Uno a uno iban siendo capturado y asesinado—dijo Chimuelo mientras se secaba algunas lágrimas— Mi madre logro esconderme entre las rocas antes de enfrentarse al hombre de cabello blanco... Nunca olvidare la sonrisa que tuvo cuando acabo con la vida de mi madre... Gracias a ella me dio la oportunidad de huir cuando los cazadores terminaron su trabajo. Desde ese día no volví a confiar en los humanos— escucho la risa de Hiccan cuando encontró a todos— Hasta que alguien me derribo y en vez de matarme me ayudo... se gano mi confianza y no me arrepiento de eso—

—¡Eso es a lo que me refiero!— Sisu lo miro— A pesar lo que viviste, Hiccan y tu son mejores amigos—

—Bueno si somos amigos, pero al inicio teníamos un acuerdo de que nos necesitábamos el uno al otro, de ahí se fortaleció nuestra amistad— corrigió— No fue de la noche a la mañana. Tardo semanas para que tuviéramos una confianza mutua y para dejarla montar en mi espalda— suspiro cansado de repetir esa conversación— Mira Sisu entiendo que tengas buenas intenciones conforme a la confianza pero tu mundo es un claro ejemplo de que no funciona— señalo a Rayan que era rodeado por Ongis— Rayan perdió a su padre y su pueblo por confiar en las creencias de su padre— luego vio a Boun— Ese niño quedo solo por las consecuencias de un mundo que desconfía de otros— y después señalo a Hiccan— Y ella pensó que podía cambiar su mundo igual que yo... y aquí estamos... huyendo de las personas que quieren evitar el cambio...— miro a Sisu de nuevo— No importa cuánto quieras creer lo contrario. Algunas personas nunca cambiarán, no importa cuánto quieras que lo vean— luego se dirigió hacia Boun para pedir un plato de Congee

—Ok ¿Qué tal cinco de Diez?— pregunto Hiccan a los ongis y la bebé, quienes aceptaron— Muy bien Uno... Dos...— cerro los ojos y comenzó a contar para que los "niños" se escondieran, Hiccan los escucho y abrió los ojos— Dos y medio... Entonces... ¿Qué vas a hacer?— le pregunta Rayan continuando su conversación— Tres... Me refiero después de que recuperes la Gema del Dragón y salves el mundo. Cuatro...—

Rayan no puedo evitar reírse al ver que mientras entretenía a los Ongis y la bebé aun quería seguir conversando con él, y después se puso a pensar en su pregunta

—Ah yo pues— Rayan balbuceo al intentar contestar— La verdad no tengo idea...— admitió— Me obsesione con encontrar a Sisu por estos seis años que nunca lo considere— 

—¿Ni siquiera lo que hubiera pasado sino la encontrabas?... Siete—

—Ni eso— se encogió de hombros— Quería ser positivo en eso— eso hizo sonreír a Hiccan— Pero ahora cuando termine, recuperare a mi Reino... recuperare a mi Ba...— al recordar a su padre no evitar pensar en lo que él quería— Sin embargo Kumandra nunca existirá y seguirá siendo un simple sueño— por un momento miro a Sisu— Él soñaba con unir nuestros reinos y ser Kumandra, es algo que tenía en común con Sisu y eso me preocupa—

—Te entiendo. Cuando era niña intente ser igual a los de mi tribu, no funciono, luego descubrí la manera de traer la paz y terminar la guerra— se encogió de hombros— De cierta manera funciono y al final no les importo, por eso decidí irme— susurro mientras Rayan pasaba su brazo por sus hombros en forma de abrazo— Pero tu lo has hecho mejor que yo—

—¿Qué quieres decir?—

—Estamos en bote— se alejo de él y reviso entre los las cajas hasta llegar al lado de la cocina de Boun— Bote que pertenece a un niño de Tail confiando en que te llevara a cada destino que pides— continuó con su búsqueda hasta que uno por uno encontró a los Ongis— Dejaste que te ayudaran unos pequeños ladrones de Talon— luego encontró a la bebé y la levanto en brazos— A pesar de lo que te intentaron robarnos— dejo a la bebé con los Ongis cuando Boun sirvió los platos de Congee y luego se acerco a Rayan— Y confiaste en mi... una chica extranjera que te cayo en cima— bromeo con lo ultimo

—Como olvidarlo— comento con burla

—No te cause una buena primera impresión pero no dudaste en bridarme ayuda a pesar de que no confiabas en mi y aquí estamos— lo hizo mirar alrededor— Lo creas o no, Rayan de Heart, confiaste en nosotros y nos uniste a todos. Tal vez no sea el Kumandra que tu padre esperaba, pero es un comienzo y Tu lo estas haciendo— termino y Rayan se quedo pensando, solo acepto conforme la situación que pasaba, pero ahora que Hiccan se lo resaltaba, entendía que sin querer estaba representando el sueño de su padre

—No lo había pensado de esa manera— admitió Rayan y miró a Hiccan— Realmente eres alguien especial Hiccan—

—Ah gra-gracias— balbuceo Hiccan sonrojada, no se esperaba ese comentario— Y tu eres alguien extraordinario— 

Rayan tampoco esperaba que lo elogiara, ni siquiera supo lo que dijo hasta que vio a Hiccan sonrojada con su comentario. Ambos no entendían la extraña atracción por el otro y no sabía como se sentían, pero se sentían bien. Rayan inconscientemente paso su mano para apartar un mecho de cabello de Hiccan y ella no puedo evitar disfrutar el contacto que ni siquiera noto que Rayan se había inclinado para acercarse.

—Oigan chicos, creo que hemos llegado— gritó Boun, haciendo que los dos se detuvieran

Ambos jóvenes reaccionaran y se separaran, estaban avergonzados y muy sonrojados por lo que estuvieron a punto de hacer, Hiccan tomo sus cosas y, teniendo eso de excusa, fue hacia sus amigos dragones, mientras Rayan la vio de reojo sin entender lo que estaba por hacer.

—¿Esto es Spine?— pregunto Chimuelo al ver el gigantesco bosque de Bambú al igual que grandes montañas con forma de espinas cubiertas de nieve— Ahora entiendo el nombre—

"Me lo imaginaba más agradable" comento Smokey al ver lo sombría que se veía

"No se, me siento como en casa" dijo Sharpshot al ver la cantidad de troncos afilados que había en la orilla del río como una barrera

—De cierta forma se parece— admitió Hiccan al sentir el frío cuando se acostumbro al calor del lugar

Sin embargo cuando todos estaban distraídos, Sisu tomo la olla pequeña de la mesa, salto del bote, para luego saltar de tronco en tronco hasta llegar a la orilla y correr hacia el bosque.

—¡Oye, mi congee!— gritó Boun

—¡Sisu! ¡Vuelve aquí! —gritó Chimuelo, pero Sisu no lo escucho— ¡¿Ves?! ¡Lo mismo paso en Talon— le reclamo a Hiccan

—No se muevan de aquí— hablo Rayan tomando su espada, sombrero y su morral— Ahora vuelvo— luego hizo lo mismo que Sisu

—¡Ten cuidado!— grito Hiccan y Rayan se detuvo para mirarla

—Lo tendré— respondió y se adentró en el bosque