*¡Capítulo Final!*

Narra Hipo:

El sonido de la puerta principal de la casa me hace abrir los ojos poco a poco para acoplar mi vista al lugar. Al enfocarla, puedo calcular con la luz natural que entra a la habitación que son alrededor de las 9 de la mañana.

Observo los alrededores, aún un tanto adormilado, y mi vista termina posada en la figura de Nereida abrazada a mí. Veo que aún duerme profundamente, y una pequeña sonrisa se asoma en sus labios. Sonrío ante esa imagen y la envuelvo con uno de mis brazos.

Rápidamente me vienen a la mente imágenes de la noche anterior, haciéndome sentir tanto rojo de la pena como sumamente feliz. Vaya que mi padre tenía razón ante el hecho de: "una vez que el deseo te consuma, no querrás parar". Y me avergüenza admitirlo para su conocimiento, pero en serio no pudimos parar después de la primera.

—¿Hipo? -la voz de mi madre se hace escuchar en la casa, provocando que la sangre se drene de mi rostro al pensar que podría entrar a la habitación y vernos de esta forma-

Con una velocidad máxima, busco la forma de cubrirnos para que no se vea tan obvio lo que sucedió la noche anterior mientras sus pasos comienzan a ascender las escaleras. Al ver que he podido lograrlo en su mayoría, finjo seguir dormido cuando sus golpeteos suenan en la puerta de mi habitación.

—¿Hipo? -la escucho susurrar mientras la puerta se abre- oww... se ven tan lindos juntos -y con esas palabras vuelve a cerrar la puerta-

Vuelvo a abrir mis ojos y decido que será mejor la hora de levantarnos. Sacudo levemente a Nereida para comenzar a despertarla y la veo removerse ante mi movimiento. Sonrío con dulzura al ver su expresión un tanto quejumbrosa por querer seguir durmiendo.

—Nereida... Mi lady, despierta -le susurro con una sonrisa-

—Hmm... no quiero -se queja como niña pequeña, haciéndome reír-

—Vamos... -comienzo a esparcir besos por toda su cara, provocando que ría levemente y abra los ojos con lentitud- buenos días Mi lady

—Buenos días mi chico dragón -dice risueña-

—¿Dormiste bien? -acaricio su cabello con dulzura-

—Más que bien -suspira- ¿tienes algo planeado hoy?

—Bueno... ya has conocido la mayor parte de Berk, y al parecer también has explorado bastantes islas, así que no se me ocurre un plan para el día de hoy -eso la hace reír- ¿tú que tienes en mente?

—Bueno... me gustaría ir de nuevo a ese lugar en donde entablaste amistad con Furia Nocturna -sonríe con dulzura- quisiera pasar ahí un rato antes de comenzar el día

—En ese caso, hay que alistarnos -vuelvo a depositar un beso en sus labios y me incorporo de la cama para ponerme mi armadura-

Después de unos cuantos minutos, ambos bajamos al primer piso en donde encontramos a mis padres desayunando. Ambos giran sus cabezas hacia nosotros y puedo sentir que, al igual que yo, Nereida comienza a tornarse roja de la cara.

—Buenos días chicos, ¿durmieron bien? -mi madre sonríe pícara y Nereida y yo desviamos las miradas rápidamente-

—Amm, ¡sí! Dormimos bien -respondo un tanto nervioso- ejem, iremos a PuntaCuervo un rato, Nereida quiere ver de nuevo el lugar en donde conocí a Chimuelo-

—Lo siento hijo, pero hoy no irán a ningún lado -sonríe mi padre mientras coloca más comida en la mesa- al menos no juntos. Me llevaré a Nereida una gran parte del día, quisiera conversar profundamente con ella

—Oh, pero papá... -intento discutir pero Nereida me interrumpe-

—No te preocupes Hipo, está bien -Nereida me sonríe cálidamente- tú ve con los chicos, ya tiene tiempo que no pasas con ellos un rato de convivencia

—Bueno... está bien -sonrío rendido y decidimos unirnos a desayunar con mis padres-

Narra Nereida:

Después de desayunar con los padres de Hipo, Estoico me invita a pasear por la aldea para conversar un rato mientras que Hipo se retira en busca de los chicos y Valka parece hacer preparativos en secreto para algo especial.

Mientras camino con el padre de Hipo por la aldea, me dedico a observarla un rato con una pequeña sonrisa en el rostro. A pesar de la destrucción que Drago causó con la Salvajibestia, el pueblo de Berk supo mantenerse de pie luchando.

Es una aldea bastante fuerte de espíritu... Estoico los ha guiado bien y estoy segura de que Hipo lo hará de igual forma.

—Así que, dime Nereida... -escucho a Estoico intentar entablar conversación y rápidamente enfoco mi atención auditiva en él-

—¿Sí? -pregunto con una sonrisa-

—¿Cómo era tu vida antes de ser humana? -parece preocuparse de intentar no incomodarme con la pregunta, sin embargo, no tiene porqué. Ese dolor del pasado ya se ha desvanecido-

—Bueno... pasaba la mayor parte de mi tiempo volando, surcando los cielos en busca de un nuevo mundo -sonrío al recordar- Furia Nocturna era mi mejor amigo en ese entonces y me acompañaba siempre

—Escuché de Hipo que al parecer eras la hija del jefe de tu nido -me mira- ¿también tenías la responsabilidad de ser la siguiente al mando?

—Sí... Mi padre siempre estuvo enseñándome a ser la líder que el nido necesitaba, y hubiera sido increíble de no ser porque se involucró el problema con Drago -bajo mi mirada algo molesta y triste- poco a poco los dragones empezaron a odiarme por haber sido la causante del problema y ya no me querían como la siguiente líder

—Debió ser bastante difícil -parece empatizar conmigo-

—Lo fue... -de repente mi atención se concentra en una vikinga intentando quitar una enorme masa de hielo de la puerta de su cabaña-

Sin pensarlo dos veces, corro rápidamente hacia ella dejando a Estoico a mitad de conversación para ayudarla a quitar ese gran desastre. Al llegar, comienzo a empujar el enorme hielo hasta hacerlo caer a un lado de la casa y provocar que se rompa en pedazos.

—Oh... ¡Gracias Nereida! -la vikinga me agradece felizmente y yo la miro con una gran sonrisa- eres bastante fuerte

—No hay porqué, me entrené con dragones en fuerza, así que... -río- ya no tendrá problemas para entrar en su hogar -comienzo a caminar lejos mientras me despido con la mano y vuelvo a acercarme a Estoico- ¡hasta luego!

—¡Muchas gracias! -la escucho volver a agradecerme y despedirse con la mano y llego hasta Estoico-

—Disculpa, Estoico -digo apenada mientras retomo la caminata a su lado-

—No te preocupes Nereida -me sonríe- también escuché de Hipo y Valka que tu apellido es Blomgren, ¿es cierto? -retoma la conversación-

—Ah sí, es el apellido de mi padre, el de mi madre jamás lo porté -respondo-

—Valka quería que fueras Haddock también, me dijo que te lo propuso -me mira sonriente-

—Sí, pero no lo acepté. Prefería seguir siendo Nereida Blomgren a secas -sonrío apenada-

—¿Y sigues pensando eso? -me pregunta curioso, pero ahora mi atención se ve centrada en unos vikingos tratando de sacar una red de peces del mar en el muelle, la cual parece que les podría volcar el barco-

De nuevo, vuelvo a dejar a Estoico con la palabra en la boca sin pensarlo y corro en ayuda de los dos vikingos que luchan desesperados por sacar la red. Me coloco a su lado rápidamente y jalo la red con fuerza hasta hacerla caer dentro del barco.

—Wow... ¡Gracias señorita Nereida! -ambos me agradecen estrechando mis manos-

—No hay porqué, tengan más cuidado la próxima vez de llenar demasiado la red -sonrío- siempre llénenla hasta la mitad -comienzo a alejarme mientras de igual forma me despido con la mano y una gran sonrisa- ¡hasta pronto!

—¡Gracias por el consejo señorita Nereida! ¡Hasta luego! -se despiden de mí con grandes sonrisas y vuelvo a llegar con Estoico-

—Perdona Estoico, te estoy dejando con la conversación al aire sin pensarlo -me disculpo enormemente- no lo vuelvo a hacer

—No no no, Nereida -ríe negando con sus manos- no te disculpes por ayudar a los demás, es algo que te agradezco mucho. Puedo confirmar que Hipo supo elegir a la chica correcta -dice lleno de orgullo y siento mi cara enrojecer-

—Gracias... -río algo apenada-

—Supongo que estás consciente de que Hipo será el siguiente al mando en Berk -volvemos a retomar camino-

—Sí... sé que lo hará muy bien -sonrío con orgullo-

—Volviendo a mi pregunta... ¿Sigues pensando en ser solo Nereida Blomgren? -me mira con una sonrisa curiosa-

—Amm, bueno... -desvío mi mirada y una sonrisa tímida se hace presente en mis labios- no sé...

—Eres una chica con un gran corazón, Nereida. Veo que te preocupas por esta gente de la misma forma que yo -volvemos a la aldea y veo que observa a su pueblo con orgullo- estoy seguro de que tú e Hipo verían por este pueblo de la misma forma que lo hice yo con Valka años atrás, tienes un gran espíritu de liderazgo

—Bueno... ésta es mi nueva familia ahora. Y me aseguraré de protegerla a toda costa -digo con enorme seguridad y Estoico palmea mi espalda felizmente-

—Me hace feliz oír eso. Eres libre ahora, gracias por brindarme una parte de tu día para tener una plática -me agradece-

—Gracias a ti, Estoico, me divertí mucho -sonrío enormemente- ¡adiós! -me despido felizmente y corro en busca de Hipo-

El atardecer ha arribado rápidamente a la Isla de Berk, el día se me fue bastante rápido conviviendo con Estoico. Mi primer lugar para buscar a Hipo es en la Academia de Dragones en la cual, en cuanto llego, rápidamente se arma un desastre de explosiones, gritos y gruñidos.

Al esparcirse el humo causado por el fuego, puedo ver a los amigos de Hipo en el suelo, respirando entrecortadamente y enfocándose con enojo en dos personas del grupo. Otra vez Brutacio y Brutilda han hecho algo que ha causado un desastre en el lugar, haciéndome reír y provocando que noten mi presencia.

—¡Nereida! -dicen todos en coro sorprendidos y se incorporan del suelo-

—¿Ahora qué ha sucedido aquí, chicos? -digo entre leves risas mientras me acerco a ellos-

—Brutacio y Brutilda han vuelto a traer a Barf y Belch con resfriados -dice Astrid-

—Les dijimos que no los trajeran en esas condiciones para no afectar los entrenamientos, pero no hicieron caso -dice Patapez molesto-

—No los queríamos dejar en casa -defiende Brutilda molesta-

—Se sienten muy solos cada vez que se quedan allá -defiende Brutacio triste mientras acaricia a los dragones-

—¡Ese no es nuestro problema! ¡Solo entorpecen el entrenamiento entre Colmillo y yo! -se queja Patán-

—Bueno chicos, ya -los detengo de seguir discutiendo- ¿puedo...? -camino hacia Brutacio y Brutilda para examinar a su dragón y ambos me dan su autorización- a ver, Barf y Belch... -examino sus fosas nasales y sus bocas escupe-gas y chispas- con un baño caliente en hojas de menta y manzanilla quedarán libres de ese resfriado y posiblemente no vuelvan a tener uno en un largo tiempo. Tal vez Gothi tenga esas dos clases de plantas -sonrío-

—¡Wow, Nereida! ¿Cómo sabes todo eso? -me pregunta Patapez sorprendido-

—Bueno, recuerden chicos... fui un dragón y conozco muy bien lo que a mi especie le afecta y le ayuda -río colocando una mano en mi nuca-

—Tus conocimientos como dragón pueden ayudar bastante a los dragones de Berk, podrías compartirselos a Gothi para que no tengas que llevar toda esa carga tú sola si se presentaran varios casos de dragones a la vez en la isla -me propone Astrid-

—Sí, tal vez vaya pronto con ella para compartírselo -sonrío- en fin, venia para ver si Hipo estaba aquí con ustedes, pero parece ser que no -río-

—Escuché que fue a PuntaCuervo con Chimuelo -dice Patán con una sonrisa- deberías buscarlo allá

—¡Es cierto! ¡Muchas gracias chicos, hasta luego! -me despido saliendo de la Academia con rapidez-

—¡Nos vemos Nereida! -escucho a los chicos despedirse-

En mi camino hacia PuntaCuervo me topo con Valka, quien va saliendo de su hogar con algo en manos. Al acercarme más a ella puedo ver que es un ramo de flores, seguramente Estoico se lo ha de haber regalado, qué tierno. Ella me ve y me saluda.

—Hola Nereida -sonríe-

—Hola Valka, lindas flores, ¿te las ha dado Estoico? -pregunto sonriente-

—Amm no... -ríe- son tuyas -me las entrega y yo me sorprendo- Hipo me pidió que te las diera

—Owww -el solo pensar en Hipo con este detalle hace que una sonrisa tonta aparezca en mis labios- qué lindo de su parte...

—Junto con esta tarjeta -me entrega una pequeña tarjeta en manos y yo la miro con ilusión mientras la abro- te dejo, tengo unas cosas que hacer en el Gran Salón -se despide de mí con una sonrisa y de igual forma yo lo hago para después proseguir a leer la tarjeta-

"Mi Lady, si estás leyendo esto quiere decir que mi madre te ha entregado el ramo de flores que he preparado para ti. Antes de que vayas en mi búsqueda, primero quiero que hagas unas pequeñas cosas por mí. Entra a la cabaña y ve a mi habitación. Ahí te espera una pequeña sorpresa. Te amo.

Hipo."

Suspiro con tan solo imaginar la voz de Hipo diciendo estas palabras y con emoción me dirijo al interior de la cabaña para ir a la habitación. Al llegar, veo sobre la cama un conjunto de ropa, y junto con él otra tarjeta. La tomo entre manos y la abro para leerla.

"Escogí este atuendo para ti. Estoy seguro de que en él lucirás más hermosa de lo que ya estás, aunque eso pueda parecer imposible ya que eres la chica más hermosa que haya existido en este mundo. Casi a la entrada hacia el bosque te espera otra pequeña sorpresa. Sé que estás impaciente por verme, pero espera un poco más. ¡Te amo!

Hipo."

Río como tonta ante sus palabras y rápidamente me coloco el conjunto que me ha escogido. Al terminar de ponérmelo, salgo de la cabaña camino hacia el bosque. La noche ya se ha hecho presente y el frío comienza a mostrar presencia. Por suerte el conjunto venía con un abrigo bastante acogedor para la noche, así que no tengo problemas para resistir el clima.

Antes de que las luces de la aldea dejen de iluminar el camino, me encuentro con otro obsequio de Hipo sobre una gran roca. Veo otra tarjeta sobre la pequeña caja y decido leerla primero antes de ver el contenido del obsequio.

"Esto ha sido casi lo último, Mi Lady, aún falta una cosa más, pero eso ya será para nuestro encuentro. Me encantaría verte con esta corona de flores sobre tu hermoso cabello negro como la noche, junto con este collar con una esmeralda tan viva como el color de tus ojos. Estoy impaciente por verte esta noche, te tengo algo sumamente especial. Te veo en ese lugar especial que ambos conocemos perfectamente. ¡Te amo!

Hipo."

Mi corazón late con fuerza ante las palabras de la tarjeta y coloco la corona de flores sobre mi cabeza con emoción al igual que el collar alrededor de mi cuello. Comienzo a correr directo hacia ese pequeño lago en donde hace seis años Furia Nocturna e Hipo forjaron su amistad y al estar sobre el lugar puedo ver que hay bastante iluminación.

Mi respiración se corta ante el asombro de ver lo que Hipo ha hecho en el lugar. Linternas de todos los colores decoran todo el alrededor del pequeño lago y en un punto se encuentra una gran manta rodeada de más linternas y un Hipo aún dándole los últimos detalles a la decoración.

Siento mis ojos cristalizarse de la felicidad y comienzo a descender hacia el pequeño lago. Al estar abajo, camino observando todo el lugar con un brillo en los ojos hasta llegar a Hipo. Él parece escuchar mis pasos y se gira para verme con una gran sonrisa. Al estar a un metro de él, soy la primera en decir algo.

—Hipo... -exhalo todavía asombrada por su hermoso detalle-

—La estaba esperando, Mi Lady -se acerca a mí y hace una leve reverencia mientras toma una de mis manos y la besa con dulzura- te ves hermosa

—Esto es... hermoso -suspiro mientras mis ojos vuelven a cristalizarse de felicidad-

—Me alegra mucho que te gustara -toma mis manos entre las suyas- ven -me guía hacia la manta y hace que ambos nos recostemos a ver las estrellas cernirse sobre la hermosa noche-

Nos quedamos unos momentos viendo las estrellas y la luna y yo no puedo sentirme más feliz que estar entre los brazos de Hipo, teniendo la seguridad de que ahora ya nada nos va a separar jamás. Me pregunto... ¿hubiera sido posible... ?

—Hipo... -lo llamo cálidamente-

—¿Sí?

—... ¿Cómo crees que hubiera sido si hace seis años hubiera caído junto con Chimuelo aquí en Berk? ¿Cómo crees que serían nuestras vidas? -pregunto curiosa-

—... Estoy seguro de que hubiera terminado de la misma manera que en estos momentos -responde con seguridad y una gran sonrisa- porque... sea como sea, yo me hubiera enamorado de ti profundamente de la misma forma

Me incorporo levemente para apoyarme en mis antebrazos y verlo a los ojos con una enorme felicidad. Me recargo delicadamente en su pecho y él me sonríe dulcemente. Dirijo una de mis manos a su mejilla y la acaricio suavemente.

—Gracias por curar las heridas que tanto me hicieron daño, Hipo... por sanar esas cicatrices de mi pasado que me atormentaron durante años... por darme amor... Gracias por haber entrenado a mi corazón.

Veo en sus ojos el brillo cristalino de lágrimas conteniéndose por salir.

—Te amo, Hipo...

—Y yo a ti, Nereida...

Y eso es suficiente para que sus labios choquen contra los míos, formando un beso.

Siento a Hipo incorporarse de la manta, quedando sentado y llevándome consigo. Sus manos toman mis mejillas con dulzura mientras las mías se pasean por su suave cabello. Segundos después, Hipo termina el beso y nuestras narices y frentes se quedan juntas mientras tomamos aire.

—Este lugar siempre ha sido especial para mí porque aquí forjé mi amistad con Chimuelo... -dice Hipo-

—Lo sé... -susurro-

—Pero... quiero que sea aún más especial -esas palabras me hacen abrir mis ojos y siento a Hipo separarse levemente mientras que, de un compartimento de su armadura, saca una pequeña cajita-

—Por todos los Dioses... -susurro casi sin voz y las lágrimas comienzan a aparecer en mis ojos-

—Nereida... toda mi vida busqué encontrar mi lugar entre los vikingos de Berk... Busqué convertirme en uno de ellos y ser igual, sentirme parte dé... Busqué quién era realmente durante años y estuve a punto de rendirme ante la búsqueda -sus ojos se cristalizan- sin embargo... ahora me doy cuenta de que todo lo que siempre busqué realmente estaba en una chica de cabello negro como la noche y ojos iguales a los de un Furia Nocturna. Encontré mi lugar a tu lado, y me hiciste ver quién era en realidad -las lágrimas ya comienzan a deslizarse por mis mejillas- me ayudaste a encontrarme a mí mismo y a encontrar mi verdadera felicidad siendo parte de tu vida. Me hiciste ver un mundo completamente diferente, me hiciste sentir la verdadera felicidad y experimentar el verdadero amor... y te prometo, que durante el resto de nuestras vidas, me aseguraré de hacer lo mismo por ti... -y con eso, abre la pequeña cajita dejándome ver un hermoso anillo-

—Hipo... -sollozo con una sonrisa-

—Nereida... ¿Me harías el honor de convertirte en mi esposa?

—... ¡Sí! -sollozo con alegría y lo veo suspirar sumamente feliz-

Toma el anillo de la cajita al igual que mi mano izquierda y lo inserta delicadamente en mi dedo anular. Al hacerlo, vuelve a suspirar con felicidad y yo no puedo evitar lanzarme sobre él con alegría y besarlo.

Momentos después, escucho el sonido de Furia Nocturna en el area e Hipo y yo nos separamos del beso para verlo llegar hacia nosotros con una gran sonrisa en su boca. Hipo y yo reímos y nos incorporamos de la manta para saludarlo.

—Hola amigo, ¡dijo que sí! -celebra Hipo con emoción y Furia Nocturna comienza a dar brincos y vueltas lleno de felicidad junto con Hipo, haciéndome reír fuertemente- ¡wuju! ¡Dijo que sí! -Hipo grita a los cuatro vientos mientras mi risa es imposible de detener- ¡me casaré con Nereida Blomgren!

—¡Y yo me casaré con Hipo Haddock! -me uno a ellos entre los brincos y vueltas llena de felicidad y risas- ¡me casaré con Hipo, Chimuelo! -me dirijo a Furia Nocturna e Hipo me mira sorprendido-

—Lo has llamado Chimuelo... -su sonrisa se ensancha-

—Bueno... después de todo, es su nombre ahora -le sonrío cálidamente y él me abraza con fuerza-

—¡Nos vamos a casar Chimuelo! -decimos Hipo y yo al unísono al separarnos y Chimuelo vuelve a hacer su celebración entre brincos y vueltas mientras nos unimos de nuevo a él-

Después de terminar nuestra pequeña celebración en conjunto, ayudo a Hipo a recoger la decoración y Chimuelo nos lleva de vuelta a la aldea de Berk, justo a la entrada del Gran Salón. Al entrar los tres, el lugar explota en vitoreos y celebración.

—¡Felicidades por su compromiso! -dicen todos los vikingos al unísono, haciéndonos a Hipo y a mí reír y adentrarnos al Gran Salón-

La noche se pasa en felicitaciones, bailes, vitoreos y celebraciones. Se anuncia la ceremonia para volver a Hipo jefe de Berk en el día siguiente y yo no podría sentirme más completa que ahora mismo. Definitivamente, mi nuevo comienzo se ha vuelto en lo mejor que me ha podido pasar en la vida.

Gracias... Hipo. Gracias... gente de Berk. Ustedes se han convertido en la mejor familia que un dragón haya podido desear. Gracias también... a Drago ManoDura. Sin él, definitivamente no hubiera podido conocer al amor de mi vida y pasar el resto de mi vida con él.

Lo que antes consideré como una horrible condena... ahora lo veo como lo mejor que me haya podido pasar en la vida. Y esto, es solo el principio.

Narra Hipo:

La mañana siguiente llega con ansias de parte de todo el pueblo de Berk. Todo el pueblo y los dragones se han reunido en el centro de la isla para llevar a cabo la Ceremonia de Cambio de Jefe. Mis padres me miran con orgullo y ambos toman cada una de mis manos.

—Tu padre y yo estamos tan orgullosos de ti, hijo -dice mi madre con ojos cristalinos-

—Gracias... me alegra que estés aquí madre -le sonrío con calidez-

—Y aquí me quedaré -me asegura mientras abraza a mi padre con afecto. Veo a Astrid acercarse a nosotros y le sonrío-

—¿Ves? Te dije que estaba ahí -señala mi corazón con una sonrisa para después desviar su dedo directo a mi mecanismo planeador y sacarlo a flote-

—¿Qué? -giro mi cabeza para ver lo que ha ocasionado y comienza a reír junto con mis padres- ¡ah! Sigues haciendo eso, sí qué graciosa. Tú, ven aquí -río tomando sus manos para acercarla a mí y después la abrazo fuertemente- gracias, Astrid -siento sus brazos rodearme fuertemente-

—No tienes qué agradecerme. Eres mi mejor amigo y solo quiero que seas feliz -me dice cálidamente-

Unos leves golpeteos en mi espalda me hacen separarme de Astrid y me giro para ver a Gothi con una pequeña sonrisa en sus labios, haciéndome un ademán con su mano para indicarme que la ceremonia ya va a dar comienzo.

Veo a Nereida a su lado también y le sonrío con enorme afecto. Ella me sonríe orgullosa y toma mi mano para después hincarnos los dos frente a Gothi. Gothi toma carboncillo entre sus dedos y nos mira a ambos esperando nuestra aprobación ante el cargo.

Una pequeña sonrisa aparece en mis labios y con la mirada le indico a Gothi que estoy dispuesto a aceptarlo. Ella me sonríe cálidamente para después dibujar en mi frente el símbolo de Jefe Tribal. Después, dibuja en la muñeca derecha de Nereida el símbolo del Tapiz del Destino.

De igual forma dibuja el símbolo de Jefe Tribal en su frente, solo que más pequeño, indicando que el símbolo en su muñeca es más importante y el primero en ser marcado. Ante esto, Gothi hace una leve reverencia hacia nosotros y le indico a Nereida que es hora de incorporarnos.

Nereida observa por unos momentos el símbolo en su muñeca con curiosidad, preguntándose qué es lo que significa.

—Gothi ha puesto en ti la seguridad de que todo lo que has vivido, todo lo que vives ahora, y todo lo que vivirás en un futuro estará siempre conectado de alguna forma. Le da un significado a "todo pasa por una razón" -le aclaro sus dudas en un susurro y ella sonríe al ver el símbolo-

—Fuera el pasado, presente, o futuro... Mi destino siempre será haberte conocido, Hipo Haddock -me mira con calidez en sus ojos-

Vemos que Bocón se acerca a nosotros con una sonrisa orgullosa y ambos le sonreímos con cierta seguridad, indicando que ésta es nuestra decisión ahora. Ante esto, se gira hacia todo el pueblo de Berk y alza sus brazos al aire.

—¡Los jefes han llegado a casa!

El pueblo estalla en vitoreos y celebración, mientras que yo exhalo intentando calmar mis nervios por ser ahora el Jefe de Berk. Nereida toma mi mano con fuerza mientras la veo observar al pueblo con una sonrisa llena de orgullo y felicidad. Ambos hacemos ademanes con nuestra cabeza en señal de agradecimiento.

—¡Que vivan los jefes! ¡Que vivan los jefes! ¡Que vivan los jefes!

Los dragones en conjunto lanzan fuego hacia el cielo, causando una gran explosión como fuego artificial en celebración. Nereida y yo reímos mientras nos abrazamos y después me dedico a besarla con dulzura.

Fuera el pasado, presente, o futuro... Mi destino siempre será haberme enamorado de ti, Nereida Blomgren.

Esto... es Berk. Algo maltratado y cubierto de hielo, pero es un hogar. Es nuestro hogar.

Quienes nos atacaron son implacables, y están locos. ¡Pero quienes los detuvieron... ! ¡Oh! ¡Son mucho más que eso! Tal vez no seamos demasiados, pero representamos algo más grande, que cualquier cosa que pueda lanzarnos el mundo.

¡Somos la voz de la paz! Y poco a poco, vamos a cambiar este mundo.

Nosotros tenemos algo que ellos no tienen. Sí... Tienen ejércitos... y tienen armadas. Pero nosotros... nosotros tenemos...

¡Nuestros dragones!

¡Hola chicas! ¿Cómo han estado? n-n <3<3<3 ¡Yo estoy sumamente feliz porque finalmente puedo traerles el final de esta increíble historia después de dos meses de haber escrito el capítulo anterior! <3<3<3 disculpen la demora, pero pues... ¡ya he entrado a la universidad! :333

Debo decirles que definitivamente estoy amando la carrera que escogí para estudiar, y estoy amando experimentar un lugar nuevo para vivir. Es una experiencia bastante curiosa e increíble <3<3<3 apenas llevo un mes y medio estudiando en la universidad y hasta ahora estoy amando todo. Por fin me siento en un lugar en el cual no me avergüenza ser yo misma, y debo confesar que es la primera vez que lo experimento y es una sensación increíble :'333 he conseguido compañeros increíbles y finalmente me siento parte de algo <3<3<3

Pensé que no sería capaz de tener el tiempo para seguir escribiendo, y temía dejarlas sin el final de esta historia, pero ahora veo que tendré el tiempo perfecto tanto para mis estudios como para este increíble pasatiempo <3<3<3 así que esperen ahora la continuación de la historia que es la pre-cuela de ésta muy pronto :333 <3<3<3

¡Finalmente nuestros protagonistas se comprometen y ahora son jefes de Berk! ¡Wujuuu! <3<3 creí que éste capítulo estaría corto por el hecho de que ya no me quedaba tanto que agregar salvo el final de la película y el detalle del compromiso, pero se me fueron ocurriendo ideas y finalmente terminó en lo que acaban de leer, espero que les haya gustado :333 <3<3<3

Más tarde en la noche publicaré el epílogo (ya está terminado) y mis créditos y agradecimientos, así que esperen todavía más en la noche <3<3<3 ¡ya saben que las amo con todo mi corazón y mi alma! ¡Gracias por toda su enorme paciencia! Nos vemos en la noche, byeeee :333 <3<3<3

Foto de Multimedia: Hipo con el símbolo de Jefe Tribal en su frente (¡es sumamente hermoso! ¡Lo amo! <3<3<3 aunque el símbolo esté todo tapado por su hermoso cabello xD)