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Narra Hipo:

No me lo puedo creer. Simplemente estoy sin palabras. ¡Otro Furia Nocturna! La especie que más he luchado por encontrar y que ya se creía completamente extinta una vez que Chimuelo desapareciera se encuentra a mi lado, dejándome en shock.

Chimuelo y el nuevo Furia Nocturna se miran con una expresión decisiva, y después me miran asegurándose de que me encuentro bien. Yo lo único que puedo hacer es sonreírles levemente en señal de que estoy bien y a salvo y ellos rápidamente se dirigen a un punto más cercano a la Salvajibestia para retarla.

Rápidamente me incorporo del suelo y me acerco a la escena entre los tres dragones. Siento la presencia de mis padres rápidamente detrás mío.

—Hipo, ese es un... -escucho a mi padre decir sorprendido-

—Un Furia Nocturna... -termino su frase, sintiendo como la felicidad me invade completamente el cuerpo- ¡es otro Furia Nocturna! ¡He logrado encontrar otro! -me giro hacia mis padres vitoreando-

—Pero... ¿por qué vino directo hacia ti para ayudarte? -mi padre pregunta confundido-

Es ahí cuando la verdad me golpea fuertemente.

—¿Entonces... esa es...? -me giro hacia los dragones de nuevo-

—¡Hipo! -la voz de Nereida llama mi atención y la veo descender a la aldea sobre un dragón bebé, borrando inmediatamente mi creencia-

—¡Nereida! -corro hacia ella rápidamente y cuando aterriza corre en dirección hacia mí para abrazarme fuertemente en cuanto estamos a centímetros de distancia-

—Gracias a Odín que estás bien -dice con una sonrisa, separándose levemente para dejarme ver su rostro-

—¿Cómo te fue con Gothi?

—¡Oh! Bien, me dio esto -se separa completamente para mostrarme un pequeño tubo de ensayo con un líquido dentro- realmente no me esperaba que ella practicara esta clase de cosas, pero según sus señales esto me ayudará a volver a mi estado original -se encoge de hombros y después su atención se centra detrás mío- un momento... ¡eso es...! -sé que ha notado ya al Furia Nocturna-

—¡Sí, lo sé! -rápidamente la emoción vuelve a mí- ¡aún no me lo creo!

—¡Es un Furia Nocturna! -dice llena de felicidad y emoción y corre hacia donde se encuentran los dragones mientras yo la sigo hasta estar a lado de mis padres otra vez-

—¡Al parecer Chimuelo está retando al Alfa! -digo con sorpresa-

—Para protegerte hijo -dice mi madre con una gran sonrisa-

De repente Chimuelo empieza a disparar bolas de plasma hacia el rostro de la Salvajibestia, seguido por el otro Furia Nocturna. Después se retira hacia nosotros, lanzando un rugido como si fuera el líder. Los dragones arriba del Alfa parecen despertar del control de ésta y comienzan a volar hacia el lado de Chimuelo.

—¡No no no no no no! ¡No! -dice Drago molesto- ¡regresa a pelear! ¡Pelea! ¡Pelea! -cuando menos se da cuenta, todos los dragones ya se han brincado a nuestro lado- ¡¿qué es lo qué pasa contigo?!

Rápidamente, toda la aldea se coloca a nuestro lado, enfrentando a Drago con miradas molestas y frases echándolo de la isla. Me monto en Chimuelo decidido y segundos después veo como el otro Furia Nocturna se acerca a Nereida curioso.

Nereida le ofrece su mano lentamente con una sonrisa emocionada para después recibir la confianza del dragón y darle oportunidad de también montarse sobre él, provocando que se coloque a mi lado, así enfrentándonos a Drago a la vez.

—¿Ahora lo entiendes? -le digo a Drago haciendo un ademán hacia los dragones que ahora se encuentran de nuestro lado- ¡esto es ganarse la lealtad de un dragón! ¡Termina con esto! ¡Ahora! -le exijo-

—¡Jamás! ¡Acábalos! -ordena molesto a la Salvajibestia-

La Salvajibestia enfrenta a Chimuelo con un rugido furioso. Pero Chimuelo parece darle una orden a todos los dragones, para después dispararle una bola de plasma al Alfa. De repente, todos los dragones comienzan a hacer lo mismo, atacando a la Salvajibestia sin piedad.

Momentos después de todos los ataques, la Salvajibestia ruge aún más furiosa. Chimuelo mira al Furia Nocturna de Nereida, ambos decididos y de repente parecen concentrar toda la energía de un disparo en sus bocas, para al final liberarla con una potente fuerza hacia el Alfa.

El Alfa suelta un rugido en agonia y momentos después de que el humo de los disparos se dispersa, vemos que ambos Furia Nocturna han logrado derribar uno de sus enormes colmillos. La Salvajibestia se tambalea ante el impacto.

Chimuelo suelta un rugido bastante furioso, para después inhalar con molestia, provocando que el Alfa se encoja en señal de rendimiento. Drago nos mira sin poder articular palabra alguna, tambaleándose de igual forma sobre el dragón sin su prótesis del brazo.

—El Alfa... los protege a todos -digo con cierta victoria hacia Drago, pero es más la molestia que tengo contenida-

Momentos después, la Salvajibestia se retira hacia el océano, marcando la victoria de los dragones y vikingos de Berk. Los vitoreos se hacen presentes rápidamente, mientras yo observo el océano verificando que Drago realmente se ha ido.

Al verificar que hemos obtenido la victoria, me acerco hacia la aldea montado en Chimuelo. Me bajo de él y observo como todos los dragones bajan a la aldea, rodeándolo. BrincaNubes se acerca a él y en un gesto de respeto, se postra frente suyo.

Todos los demás dragones hacen lo mismo, y Chimuelo parece disfrutar de su momento con un aire de grandeza y podría decirse presumido. Lanza un rugido dando por hecho que él ahora es el líder y todos los demás dragones le siguen. Me acerco a él con una gran sonrisa y acaricio su cabeza.

—Nunca dejas de sorprenderme amigo... Gracias -junto mi cabeza con la suya en un acto de igualdad, pero él no dura bastante en nuestra posición y rápidamente comienza lamer toda mi cara, haciéndome escuchar las risas de la aldea- ¡Chimuelo, sabes que eso no se quita! -río vivamente mientras me tiro al suelo y me remuevo ante sus lamidas-

Tiempo después, veo como todos los vikingos se reúnen de nuevo con sus dragones, llenos de felicidad. Y cuando menos me doy cuenta, recuerdo a Nereida. La busco con la mirada entre todos los vikingos y finalmente la encuentro a unos metros de distancia.

Veo que corre hacia mí con una gran sonrisa y de repente sus brazos me rodean el cuello con fuerza, haciéndome tambalear y casi perder el equilibrio. Siento su cuerpo temblar y puedo permitirme pensar que se encuentra llorando.

—¡Lo lograste Hipo! -puedo sentir sollozos en sus palabras-

—Ambos lo logramos -le respondo con una sonrisa, rodeando su cintura con mis brazos de igual forma-

Segundos más tarde, nos separamos levemente para vernos a los ojos. Tiene la sonrisa más alegre en sus labios, iluminando su rostro con felicidad. Le sonrío de vuelta, mostrándole una sonrisa que simplemente ya no puede ocultar lo que siento por ella.

No puedo contenerlo más... Debo besarla.

Lentamente comienzo a acercar mi rostro al de ella, dándole a entender que estoy planeando besarla, buscando de alguna forma su permiso para hacerlo. Cierro mis ojos, esperando su aprobación con ansias.

Sin embargo, ella coloca la palma de su mano en mis labios, deteniendo mis actos. Abro mis ojos desilusionado ante su rechazo, buscando alguna respuesta de sus acciones en su mirada. Me sorprende ver que ella me mira con una mirada divertida, para después verse envuelta en una cantidad admirable de humo.

Toso por causa de éste y ondeeo mi mano, buscando quitar el humo de mi vista. Mi sorpresa aumenta la ver que frente mío se encuentra Gothi, quien suelta una risita divertida y pícara. La veo bastante anonado y sin saber exactamente qué decir.

—¿Gothi? -es lo único que me sale-

Ella apunta con su bastón hacia un punto, al cual dirijo mi mirada rápidamente. Veo a Nereida justamente en el lugar en donde nos encontrábamos con los Furia Nocturna enfrentando a la Salvajibestia minutos atrás.

Se encuentra de cara al océano, pero no parece observarlo. El simple acto de ella observando su anatomía, analizándola con curiosidad, me es suficiente para confirmar lo que tiempo atrás teoricé.

Nereida es un Furia Nocturna.

De alguna forma, esa verdad siempre estuvo frente a mis ojos. ¿Cómo no pude darme cuenta antes? Su cabello y vestimenta negros, y sus ojos con un color bastante único y familiar. Un color que durante varios años yo estuve presenciando día a día. ¡Incluso los chicos lo dijeron la primera vez que la conocieron!

"—Tienes los ojos como un...

—Como un Furia Nocturna."

Al parecer me centro bastante en mis pensamientos, ya que cuando salgo de ellos puedo ver que Nereida se encuentra mirando hacia donde me encuentro. Parpadeo varias veces en señal de haber regresado de mi trance y ella comienza a acercarse a mí encogida de hombros tímidamente.

—Así que.... Un Furia Nocturna, ¿ah? -digo con una sonrisa-

—Sorpresa -ríe avergonzada-

—¿Cómo no lo sospeché antes? -me pregunto a mí mismo incrédulo, haciéndola reír más- ¿por qué dijiste que eras un Skrill? ¿Por qué Drago dijo que eras un Skrill? -pregunto bastante confundido-

—La verdad no tengo idea del porqué creyó eso, pero no iba a desmentírselo -dice como si fuera lo más obvio- posiblemente durante el ataque hubo un Skrill que de igual forma destruyó todo a su paso como yo -se encoge de hombros-

—¿Entonces tu historia volvió a ser una mentira? -le pregunto algo decepcionado-

—No. Mi historia sí es toda la verdad, lo único diferente era que realmente soy un Furia Nocturna y no un Skrill -me aclara con una pequeña sonrisa-

—Ay Dioses, eres un caso bastante único, Nereida Blomgren -río rendido mientras revuelvo su cabello con una de mis manos, haciéndola reír por mi acto-

De un momento a otro, siento la presencia de Gothi a nuestro lado y ambos la miramos. Gothi le entrega a Nereida el frasco que me había mostrado tiempo atrás, y Nereida le da un gesto de agradecimiento con una sonrisa un tanto apenada.

—Entonces... ¿dices que esto me regresará a mi verdadera forma para siempre? -le pregunta a Gothi, a lo cual ella asiente con la cabeza y se retira para volver a dejarnos solos-

Nereida mira el frasco con una pequeña sonrisa y una ilusión y esperanza por volver a ser parte de los suyos. Ser un dragón de nuevo. El ver esa expresión en su rostro me rompe en mil pedazos por dentro, pero...

Si ella es feliz, no me involucraré en su decisión de volver a ser parte de los dragones. A pesar de que... Realmente la ame con una intensidad que jamás había sentido dentro de mí. Me guardaré estos sentimientos por ella con tal de verla realmente feliz y sin que sienta presión por el hecho de saber que la amo y que eso afecte sus decisiones.

—Muchas gracias Hipo... -me mira con ojos cristalinos-

—Mereces recuperar todos estos años perdidos como un dragón -siento mi vista borrosa-

No Hipo... no llores frente a ella...

—Nereida... -la voz de mi madre se hace presente detrás mío y Nereida dirige su vista a mis espaldas-

Siento la presencia de mi madre y mi padre, cada uno a mi lado mirando a Nereida con pequeñas sonrisas. Cuando menos me doy cuenta, toda la aldea se nos ha acercado y se ha vuelto una escena de todos los vikingos de Berk observando a Nereida como si fuera la despedida final.

El simple acto de toda la aldea conmueve a Nereida, quien ríe en sollozos y las lágrimas ya comienzan a fluir de sus ojos. Veo que es inevitable para algunos vikingos también soltar lágrimas ante el hecho de que Nereida se va para ya jamás volver.

—Gracias... -Nereida habla para toda la aldea- gracias por darme la esperanza de que el mundo aún puede cambiar y ser un lugar lleno de armonía entre vikingos y dragones. Me llena de felicidad saber que ustedes pueden ser el cambio para el mundo. Gracias por todo su apoyo, por haberme hecho sentir parte de ustedes el primer día que estuve aquí -de repente se acerca a Bocón, como si quisiera hacer despedidas personales-

—Nereida... -Bocón le sonríe con gran cariño-

—Gracias por todo Bocón -él toma su mano en un gesto de apoyo- por haberme mostrado una imagen bastante amistosa el primer día que te conocí y haberme hecho sentir en confianza. Por haber apoyado en la batalla contra Drago en el santuario junto a Gruñón -Nereida mira al dragón con una gran sonrisa y éste se acerca a ella para dejarse acariciar unos momentos- los extrañaré mucho

—Y nosotros a ti, Nereida -Bocón se contiene las ganas de llorar-

—Brutacio, Brutilda... -camina hacia los gemelos- gracias por dejarme ver en la batalla su trabajo como un equipo junto a Barf y Belch, nos dieron bastante apoyo

—Gracias por haber llegado a nosotros, Nereida -dice Brutacio con una pequeña sonrisa-

—Te vamos a extrañar -dice Brutilda dándole un pequeño golpe amistoso en el hombro, haciendo reír a Nereida-

—No cambien chicos. Si llego a ver algún desastre secundario ocasionado por vikingos, pensaré en ustedes -ríe-

—Ten toda la seguridad de que seremos nosotros -dice Brutacio con orgullo-

—Exacto -le sigue Brutilda con una gran sonrisa-

—Patapez... -camina hacia él y lo veo con una expresión bastante estrujada, dando a entender que no aguantará mucho antes de romper en llanto-

—No, Nereida... -le pide-

—Los extrañaré bastante a ti y a Albóndiga -ríe Nereida con leves sollozos- con tu habilidad y dedicación para reconocer dragones, espero pronto ver un libro redactado por ti hablando de ellos

—Te prometo que la primera de la que hable serás tú -le sonríe, las lágrimas ya fluyen de sus ojos y Nereida lo abraza-

—Me sentiré bastante honrada ante eso -ríe Nereida separándose del abrazo- Patán... -camina hacia él, pero él no la deja siquiera decir una palabra más-

—¡No Nereida! -rápidamente la abraza con fuerza y solloza a mares- ¡no te vayas!

—Oww Patán -ríe Nereida y lo abraza de vuelta-

—¡Quédate con nosotros! -Patán llora-

—... Los extrañaré bastante -solloza Nereida y momentos después Patán se separa de ella con una pequeña sonrisa- Astrid... -se acerca a ella-

—Nereida... -Astrid le sonríe con tristeza-

—A pesar de que en un principio no comenzáramos con buen paso, quiero agradecerte bastante por todo lo que hiciste para apoyar en la batalla -Nereida la toma de las manos con un gran sentimiento de cariño- aunque aún no les perdono a ustedes cinco que se hayan ido directo al escondite de Drago para espiarlo -los mira algo amenazante- pudieron haber muerto ahí, y eso es algo que jamás me hubiera podido perdonar

—No iba a ser tu culpa Nereida -dice Astrid- jamás ha sido tu responsabilidad todo esto que hemos vivido, nosotros hemos sido responsables de nuestras propias decisiones

—Gracias... -Nereida la abraza con fuerza- te voy a extrañar bastante

—Igual yo -Astrid le corresponde el abrazo- y gracias por haber llegado a todas nuestras vidas, en especial a la de Hipo -ambas se separan del abrazo con una gran sonrisa-

—Señor Estoico... -Nereida se coloca frente a mi padre-

—Solo dime Estoico a secas, Nereida -le pide con una pequeña sonrisa-

—Le agradezco bastante todo lo que ha hecho por mi especie, su enorme valentía para enfrentarse a Drago mano a mano durante la batalla -Nereida lo mira con un enorme respeto- y una vez más, usted no tenía que haber querido arriesgar su vida para salvarme del asunto entre la Salvajibestia y Furia Nocturna por causa de Drago -Nereida cierra los ojos y suspira con cierta incredulidad por el acto de mi padre-

—No podía dejar que la chica que mi hijo... -mi padre me mira como si de cierta forma me pidiera permiso para decir que la amaba, pero yo con la mirada le digo que no diga eso- ... aprecia bastante como su amiga muriera por causa de Drago. Además, yo ya tenía cuentas pendientes con él de años -sonríe con diversión, haciendo a Nereida reír- cuídate mucho Nereida

—Igualmente... Estoico -Nereida sonríe con gran afecto y mi padre le da un pequeño abrazo- Valka... -dice al momento en el que se separa de mi padre-

—Oww Nereida -mi madre le sonríe de cierta forma maternal mientras acaricia su mejilla con cariño-

—Simplemente... gracias por todo -susurra Nereida volviendo a sollozar-

—No me importa lo que digas, siempre te consideraré como una hija -mi madre la abraza con fuerza y Nereida solloza en su hombro mientras la rodea fuertemente con sus brazos-

—Y yo a ti como una madre -se separa de ella y la mira con una sonrisa un tanto rota, para después dirigir su mirada hacia mí-

Ay Dioses...

—Hipo... -siento un nudo en la garganta cuando dice mi nombre- gracias por haber sido el primer vikingo que dio el primer paso para este gran cambio. Por demostrarle al mundo que los dragones realmente no son peligrosos, que todo lo que creían de ellos estaba mal -sus lágrimas aumentan con cada palabra- eres el mejor amigo que he podido tener durante mi corta vida como humana -rápidamente se abalanza sobre mí y me abraza con suma fuerza, sollozando en mi hombro-

—Nereida... -la voz me sale ronca por el hecho de retener mis lágrimas-

—Te voy a extrañar demasiado -me susurra al oído y me es suficiente para destrozarme por completo, abrazándola con todas mis fuerzas y escondiendo mi rostro en su cuello- sé que serás un gran jefe para Berk, ten la seguridad en eso

Cuando menos me doy cuenta, ambos nos encontramos arrodillados en el suelo, envueltos en un abrazo mientras sollozamos en el hombro del otro. Es tan doloroso, no puedo dejarla ir. No quiero dejarla ir. No una vez más. Ya no lo soportaré.

Pero... Debo dejarla ir... ¿No?

—Hasta pronto... Hipo Haddock.

—Hasta pronto... Nereida Blomgren.

Ambos nos separamos del abrazo y nos vemos a los ojos, o al menos eso intentamos ya que yo tengo la vista borrosa y ella seguramente la tiene aún más. Nos incorporamos del suelo y de repente Chimuelo se acerca a nosotros, en especial a ella, dándole empujones en señal de no querer que se vaya.

—Furia Nocturna... -Nereida toma su rostro entre manos- cuida de Berk... de Hipo, por favor -le pide con una pequeña sonrisa- cuida de esta aldea llena de grandes corazones -Chimuelo gruñe con tristeza- te voy a extrañar demasiado amigo -lo abraza y Chimuelo en un intento por abrazo, la envuelve entre su cuello con su cabeza- y por cierto... -Nereida se separa de él y hace una reverencia- bienvenido, nuevo Alfa -le sonríe con gran cariño-

Finalmente, Nereida se dirige de nuevo al punto en el cual se encontraba durante la batalla, mirando hacia el océano como si estuviera lleno de nuevas posibilidades. Mira el frasco entre sus manos y lo envuelve con fuerza en una de ellas.

La estoy viendo alejarse... La estoy viendo irse para siempre... La estoy dejando ir... Está volviendo a separar nuestros caminos...

La veo decidida a saltar desde ese punto, confiada de que uno de los dragones bebé que se encuentra con ella la atrapará para llevarla de vuelta al Santuario. De vuelta a su hogar. De vuelta a ese lugar en el cual ella no está a mi lado. De vuelta a ese momento hace un año.

El enorme dolor que siento en este momento, dándome cuenta de que realmente se va, me hace percatarme de que realmente... No puedo dejarla ir. No puedo. No puedo, no puedo, no puedo. ¡No puedo!

¡Porque yo...!

Se prepara para saltar...

¡No volveré a cometer el mismo error!

—¡Te amo Nereida!

¡Hola chicas! <3<3 disculpen mi mini retraso, justo en el momento en el que iba a subir el capítulo ayer, ¡pum! Me quedo sin megas ;-; </3 estoy batallando bastante últimamente por este problemita del internet, ya que no tengo una red como módem, solo el celular y agh es difícil porque no me agarran bastante bien los megas en Wattpad </3 pero ya lo resolví por brevedad y les traigo al fin otro capítulo :33 <3<3

¿Qué les pareció el capítulo? ¡Se confirma que Nereida es un Furia Nocturna en realidad! <3<3 ¡e Hipo ya le ha dicho finalmente que la ama! ¡Ahhh! <3<3 les aviso que el principio del siguiente capítulo tiene la narración de Nereida ante el momento de la confesión de Hipo y otras cositas :333

¡Tengo que hablarles de un asunto importante!

Ya ven que hace una semana prácticamente les subí lo de la mini encuesta, ya vi que se decidió que será Hipo el que narre (muchas gracias por sus participaciones <3). Para quienes se lo estén preguntando y quieran confirmación: Sí, el siguiente capítulo contendrá escenas subidas de tono en el ámbito sexual (¡ya lo dije! ¡Estoy roja, Odín!) entre Nereida e Hipo.

¡Pero!

Debido a que será prácticamente mi primera vez escribiendo algo como eso, les aviso de anticipo que no escribiré todo. Es decir, no se llegarán a descripciones en el sentido de que prácticamente ya se encuentran haciéndolo (literal). Llegaré hasta cierto punto del momento sexual entre ellos, así que no se me ilusionen de anticipo que leerán el momento en el que Hipo entra en Nereida o llegan al climax y esas cosas, debido a que es mi primera vez redactando este tipo de momentos y no quiero arruinarlo de alguna u otra forma <3<3

En fin, es todo lo que tenía que decirles por hoy, ¡espero que les haya gustado el capítulo! <3<3 y nos vemos posiblemente este domingo para el nuevo capítulo :33 ¡ya saben que las amo con todo mi corazón y mi alma! ¡Nos vemos pronto! Byeee :333 <3<3<3